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El día que Foo Fighters nos cambió la vida en fotos

Fotos por: Alejandra Mar 

A pocos, muy pocos artistas hemos tenido el placer de ver en un escenario tan poderoso como lo es el Estadio Nemésio Camacho El Campín. One direction fue la última agrupación que tuvo el privilegio, antes Lady Gaga y Justin Bieber habían hecho de las suyas. Sin contar a Sir Paul McCartney, el estadio no era testigo de una descarga tan poderosa de rock como la que se vivió hoy en la capital. A las 7 en punto, ni un minuto más, ni un minuto menos, se escuchó la primera tronada proveniente del telonero: El Diamante eléctrico.

En otros países por donde pasó el tour de la banda de Dave Ghrol, los encargados de meterle candela a la cosa antes del estallido de los foo fue Kaiser Chief; a Colombia no vinieron. Y con todo el pesar de no ver a los británicos en nuestras tierras, debemos decir que la cuota colombiana fue justo y necesario lo que el público necesitaba; el power trío bogotano conformado por Juan Galeano, Daniel Álvarez y Andy Zeta y esta vez con la compañía de Felipe Bravo de Superlitio en los teclados, lo dejó todo allá arriba y nos hizo pensar ¿Para que una de afuera, si acá tenemos poder de sobra?

Casi media hora después apareció Dave Grohl, mientras una lluvia de bombas amarillas, azules y rojas cubrieron el estadio y dio clases de como se da un buen concierto. The Pretender, My Hero, Time Like These, Best of You, Everlong y hasta Another One Bite The Dust” y Under Pressure de Queen fueron solo algunas de las canciones de un repertorio armado con lo mejor de la banda.

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Ni siquiera un repentino apagón en la primera mitad del concierto logró aguar la fiesta, el público siguió coreando la canción y Grohl prometió que el concierto seguiría. Muestras apoteósicas de rock and roll, el Campín retumbando con los coros de uno de los mejores públicos que ha visto Dave en su gira por Latinoamérica (y aunque es un cliché de las bandas decir esa frase sonaba bastante convencido), aviones de papel sobrevolando el estadio, el innegable poder de un front man como Grohl, los impresionantes músicos que desboradron calidad en las casi tres horas y la sorpresa de un cambio de set en la segunda mitad del concierto hacen que desde ya este se proclame como uno de los mejores conciertos del 2015. 

 

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