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Almax día 2: leyendas vs. la nueva generación. ¿Quién ganó?

Resumen del día de las presentaciones de los Cadillacs, Aterciopelados, Carajo, Catupecu Machu, Monsieur Periné, Esteman y La Derecha, entre otros.

La segunda jornada de este nuevo festival estuvo dedicada a la riqueza musical del continente con presentaciones de artistas de Argentina, Colombia, Chile y México. Fue un punto de equilibrio entre lo emergente, lo independiente y lo reconocido.

Texto:José “Pepe” Plata // Fotos: Alejandro Gómez y Santiago Acosta

Bajo la premisa de ser un festival de cultura pop, Almax se dio a la tarea de ofrecer agrupaciones como The Chamanas, quienes se presentaban por primera vez en el país y los consagrados Fabulosos Cadillacs, que además de venir reforzados con los hijos de Flavio y Vicentico fueron uno de los grandes espectáculos de la noche.

Este segundo día tuvo de nuevo un retraso de dos horas en el primer escenario (situación que algunos dicen tiene que ver con desajustes en las pruebas de sonido o en desajustes logísticos), hecho que generó incomodidades entre los asistentes. Existiendo ya una experiencia en el llamado ecosistema musical en asuntos de producción y sonido, esta situación ha de ser revisada para evitar futuras frustraciones.

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Aún ante la espera que puede incomodar a público y artistas, los dos escenarios se vieron llenos de público ávido de cantear y corear las canciones de los artistas que bien esperaron.

La tripleta de talento colombiano compuesta por Monsieur Periné, Pedrina y Río y Esteman mostró la avideza y oportunidad de reconocer que estos talentos en casa son respaldados por la misma generación que creció escuchándolos crecer y triunfar en poco más de tres años. Estos son los artistas que recogen la bandera del sonido pop nacional y que tienen camino por muchos años más.

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Si esto era la consolidación de este nuevo talento, cuando se pudo ver el poder de 1280 Almas y La Derecha en la tarima, el ejercicio de reconocer canciones y repertorios que inclusive vienen desde los años noventa, deja en claro que hay un pasado reciente, vigente y digno de ser disfrutado. Canciones que pudieron haber sido escritas la semana pasada, pero que no, que no lo fueron. Y son canciones que se han heredado.

Si se mira además el final de este escenario con Catupecu Machu y Carajo, dos veteranas y longevas bandas argentinas, se juntan las historias de Buenos Aires que se han escuchado a través de los años por el continente. Cabe además destacar el “palomazo” como dicen en México o la invitación que tuvo Catupecu con Carajo, para invitarlos a tocar en una de sus canciones.

La chilena Anita Tijoux, por su parte, recorrió su gran repertorio sonoro; el mismo que llevó a que Thom Yorke de Radiohead le siguiera la pista en varias ocasiones. Hubo tiempo también para que tocara canciones de su proyecto previo: Makiza.

Cuando la noche ya daba cuentas del cierre de la jornada, dos pesos pesados se apoderaron del público: Aterciopelados y Los Fabulosos Cadillacs. Nuestra banda jugaba tanto de local como de invitada. Tuvo uno de los públicos más entregados y devotos de la noche, quienes corearon a todo pulmón sus canciones. Y cuando la noche cerró con los Cadillacs, se vio a una banda que maneja a su público con la misma energía de sus inicios. Pero estos son Cadillacs en modo disruptivo. No está Sergio Rotman y los hijos de Flavio y Vicentico están acoplándose a una institución con la cual crecieron.

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Pero el escuchar canciones de su repertorio clásico junto a las de su nuevo disco nos hace pensar que hemos llegado ya al punto de tener artistas locales y latinoamericanos que además de compartir una misma lengua, han creado ya suficientes historias musicales y generacionales que no se pueden desconocer. Quien no haya gozado al menos a cuatro o cinco de los artistas que allí se presentaron el viernes 2 de diciembre, simplemente no ha estado atento a la producción musical nacional o del continente de los últimos, cinco, diez, quince, veinte y hasta treinta años.

La gran duda que sigue dejando el Almax en su segundo día es sobre el escenario dedicado a la música electrónica con dj y productores colombianos y extranjeros, pero que no ha sido difundido como escenario parte del festival.

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Que la música suene es lo que nos importa, pero si está todo bien aceitado y afinado, sonará mejor.

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