Como Robert Johnson, Charlie Patton y tantos otros hombres leyenda del blues, el extraño mundo de este Jack es una dicotomía entre la consistencia de su obra artística y la bruma en la que está envuelta su vida personal. Es difícil no conocer cada detalle de alguien en estos tiempos de Google, pero John Anthony Gillis, el pequeño de los 10 hijos de un matrimonio católico de Michigan, ha estado en el mapa haciendo más que bien su trabajo.
Jack White es el personaje mitad autobiográfico mitad ficción que Gills creó para catalizar su trabajo y engendrar su propia mitología. El apellido lo adoptó de Meg, su primera esposa y mitad del dúo que lo hizo grande bajo el nombre de The White Stripes. Con esa banda minimalista montada en batería, guitarra, voz y nada más, bitonal –siempre vistiendo de rojo y blanco– y ruidosa –en la gran tradición granjera de Detroit– lograría generar una contracorriente al sonido alternativo de principios del nuevo milenio y darle un himno inmortal al folclore norte americano titulado ‘Seven Nation Army’.
Luego, el hombre formaría bandas como The Dead Weather y The Ranconteurs, hasta empezar su tramo en solitario con el álbum Blunderbuss de 2012. Habiendo fundado su sello disquero independiente Third Man Records, White publicó Lazaretto este año, tal vez la mejor grabación de rock del año y sin duda uno de los vinilos más especiales y vendidos de la historia. Sin más qué decir, Estéreo Picnic recibirá a un artista inmaculado de esta generación en uno de los cruces de caminos más importantes de su carrera.
Track recomendado: Lazaretto
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Dónde Stalkearlo:www.jackwhiteiii.com
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