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La Chica Final: de Halloween a Scream, este es el cliché más repetido en el cine de terror

¿Por qué al final de la mayoría de películas de terror, sobrevive la mujer rara? Hay muchos clichés en el terror, y haciendo ciclo de películas en Halloween se hacen más notorios. Cuando se trata de los personajes femeninos, hay un cliché tan viejo como el terror: La Chica Final.

Jaime Lee Curtis en Halloween
Jaime Lee Curtis en Halloween<br/>

La Chica Final es un personaje femenino, típicamente joven, que debe enfrentarse sola al antagonista al final del thriller. A pesar de haber comenzado relativamente acompañada, sea por una pareja, sus hijos o un grupo de amigos, la Chica Final lo pierde todo en el camino y debe darle cara al monstruo sola.

El fenómeno no es nuevo: de hecho, el término lo acuñó la profesora de cine americano Carol J. Clover en 1987, y en su análisis encontró que la mayoría de Chicas Finales estaban en el género de Ocultismo y el género Slasher. Viernes 13 tiene una Chica Final en cada una de sus películas, sin falta.

Adrienne King en Viernes 13
Adrienne King en Viernes 13

Su análisis feminista en el libro Hombres, Mujeres y Motosierras concluye que la Chica Final busca lograr que el espectador se ponga de parte de la mujer en su travesía de destruir a su opresor. Esto lo logra muy bien Anastasia, una película animada que nos muestra a una Chica Final, la última de los Romanov, derrotando al hombre que le arruinó la vida.

Anastasia (1997)

Feminista o no, la Chica Final tiene unas características arquetípicas que tienen la intención de alejarla de la mirada masculina: es una mujer “rara”, a veces descrita como “machorra”, y se la presenta asexual o abstemia, lejos de la sexualización a la que se somete a su mejor amiga, normalmente muy atractiva y que muere como consecuencia de haber tenido sexo (a este otro cliché se le conoce como Muerte por Sexo, típico en el terror).

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La primera Chica Final con todo lo que el cliché implica es Laurie Strode de Halloween. De hecho, fue ese papel el que mantuvo a Jaime Lee Curtis atascada en el rol de Chica Final por muchos años (como en Tren del Terror y Noche de Graduación). Por otro lado, una  Chica Final más temprana podría ser Caperucita Roja: una chiquilla extraña, pero atenta, que logra derrotar a su enemigo. Al ser una niñita las reglas cambian un poco, pero la idea es la misma.

La película Perdidos en la Oscuridad le hace un guiño a las Chicas Finales clásicas con los nombres de sus protagonistas, cada una nombrada a partir de una Chica Final del horror: Marilyn, Heather, Jamie y Adrienne.

Jessica Biel en Masacre en Texas (2003)

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Una de las razones por las que la Chica Final logra escapar es porque piensa con cabeza fría. A diferencia de los demás personajes, ella se mantiene sobria, curiosa, atenta, calmada y racional. A esto Clover llama la “Mirada Vigilante”: la Chica Final suele ser la primera en darse cuenta de que algo anda mal, y siempre es quien advierte al resto del peligro que les acecha. Es esa cualidad de liderazgo que la hace tan querida por el espectador, y tan fácil de escribir.

Desde Masacre en Texas hasta Scream, la Chica Final nos ha dado incontables películas clásicas del horror. Atenta, inteligente, heróica y fuerte; la Chica Final no abandonará la gran pantalla, pues no deja de ser material perfecto para una historia emocionante.

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