La serie animada Madhouse fue la ganadora del Premio Shock a Mejor Proyecto en Desarrollo de Serie Web en el Festival Bogoshorts 2019. Es el resultado de un trabajo conjunto de La Tina Sonido (casa productora), la productora ejecutiva Catalina Figueroa, el guionista Javier Pinzón, la directora Silvia Prietov, fundadora de Lucy Animation Studio, que nació de las experiencias profesionales de Silvia una bogotana que, ante la ausencia de la carrera en Colombia, estudió Medios Audiovisuales en la Pontificia Universidad Javeriana y luego la Maestría en Artes Plásticas y Visuales de la Universidad Nacional, donde sentó las bases para poder especializarse en animación clásica, la técnica tradicional cuya base son los dibujos cuadro a cuadro, gracias a una beca completa que ganó en la Escuela de Cine de Vancouver en Canadá (Vancouver Film School), una de las tres escuelas más prestigiosas de animación en el mundo, estudio que le abrió las puertas a la industria mundial de este arte.
Madhouse nos muestra lo que estar, literalmente, dentro de la cabeza de un psicópata. Eso es lo que hacen los doctores Madeus Hauser y Bósforo para ganarse la vida. Houser es el creador del Casco de Mesmer, un dispositivo por el cual los científicos se transportan a los paisajes soñadores y mentes surrealistas de los criminales condenados para rehabilitarlos. Esta es la única manera en la que pueden pagar la deuda que el Sanatorio Madhouse tiene con el gobierno. Cada mente psicótica pinta su propio mundo onírico en el que Bósforo y Madeus lucharán contra el mal que cada uno de estos locos criminales tienen dentro.
Más allá del humor y la irreverencia que caracteriza a la serie, también hay una crítica a ciertas prácticas del ser humano occidental, en este caso, la ciencia y, como lo explica Silvia, creadora de la serie, “al paradigma de la ciencia que prioriza el dinero y no le importa el bienestar del ser humano”.
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Entre las inspiraciones para Madhouse, se encuentran series y películas como Ren & Stimpy, Psicosis, Atrapado sin salida, Mullholand Drive, entre otros contenidos sobre la locura y la mente humana.
“La idea me surgió en 2013, gracias a una obsesión que siempre he tenido con la mente humana, el psicoanálisis y la locura. Es un tema que me ha impactado mucho y me ha generado mucha curiosidad. En una época en la que empecé a investigar mucho sobre psicoanálisis, me di cuenta de que la mente humana es como un universo singular”, nos cuenta Silvia.
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“Siempre hay un apocalipsis en Madhouse”, nos cuenta Silvia, quien también aclara que la ciudad está muy inspirada en Bogotá. Esa mezcla de caos y realismo mágico también es determinante dentro de la serie.
Sin duda Madhouse es una muestra de que sí hay talento y buena historias de animación en Colombia. Pendientes de nuestras redes en las que pronto les contaremos más al respecto.
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