Lo mejor y lo peor de 'Alien Covenant' ¿Bodrio o películón?

"Te destruí maldita" son las últimas palabras que dice la teniente Ripley antes de descubrir que no se había librado del Xenoformo en Alien, el octavo pasajero. ¿Qué diría ahora si supiera que la han intentando reemplazar sin éxito con  personajes como Elizabeth Shaw en Prometheus o Daniels en Alien Covenant?

Es que esa vieja hace muchísima falta. Yo sé que la mataron en la tercera parte y que estas dos últimas película son temporalmente 'precuelas', pero siempre los guionistas pueden resuscitar a cualquiera o simplemente dejar de hacer 'precuelas' (como parecía estar haciéndolo Neill Blomkamp en el proyecto de Alien que estaba en curso),  tal y como la clonaron en la cuarta película con bebé alien a bordo.

Pero ante su ausencia Alien Covenant le da el mayor protagonismo al que tenía que ser: al humanoide sintético, aquel ser de sangre babosa que en El Octavo Pasajero era un traicionero y cabrón, en la segunda (Alien, el regreso), en la tercera (lo que quedó de él) y la cuarta (Alien: Resurrection) los mejores aliados, y en Prometheus y Covenant unos completos Judas, a pesar de ya no tener intenciones corporativas, sino más bien existenciales, propias de los dioses.

Porque aunque siempre el miedo había sido que estas criaturas alienígenas llegaran a La Tierra, desde Prometheus descubrimos que el mayor peligro no eran los xenomorfos, sino nuestros creadores: "los superhumanos", la raza del legendario "Space Jockie".

En Alient Covenant volveremos a la idea de que la vida es un eterno retorno y descubriremos que la verdadera amenaza son nuestras creaciones, una extensión de nosotros mismos: el maldito humanoide, como en la primera película.

Lo mejor:

1. El humanoide como protagonista, y a falta de uno, en combo de hermanos gemelos.

2. La venganza del humanoide contra los creadores, increíble, apocalíptica, cruda.

3. La evolución del contagio o fecundación, como quieran llamarlo, de los Alien.

4. El que todo vuelva a comenzar a partir de un elemento clásico como la colonización.

5. La muertes horrendas, la destrucción de las parejas (porque el que se compromete o tiene sexo muere de primero).

6. Y por supuesto, el giro que tiene la saga desde Prometheus hacia el encuentro del sentido de la existencia humana, nuestros orígines y nuestro embolatado destino.

Lo malo

1. Un final predecible. Traducción: un guión con decisiones argumentales tibias.

2. Esa atmósfera claustrofóbica esencial se ha perdido a pesar de los intentos.

3. Hace falta Ripley

4. El descubrir que los xenomorfos son algo así como un arma biológica de los superhumanos que se salió de control y no una especie animal brutal y extraterrestre independiente. 

5. El cambio en la historia que mejora el drama va en detrimento de la acción y el terror.