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¿Buscando destino vacacional que lo tenga todo? ¿Ya probaron con Costa Rica?

Guía para tragarse la joya centroamericana del ecoturismo.

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Los Sueños Marriot Ocean & Golf Resort

Costa Rica siempre estará en la memoria de la cultura popular porque fue el país donde InGen instaló los laboratorios en los que incubaron los tiranosaurios rex, brontosaurios y velociraptors que llenaron Jurassic Park y que, eventualmente, terminaron devorándose a media isla. Muchos lo recordarán también por ser uno de los pocos países en el mundo que no tienen ejército –lo abolieron en 1949–, o por ser el equipo sensación del Mundial de Fútbol de Brasil 2014.

Pero además de dinosaurios, paz y fútbol, Costa Rica también es célebre por su biodiversidad que lo convierte en uno de los paraísos del ecoturismo. Por eso es que apenas uno pisa suelo tico ve tanto gringo, europeo y australiano –los turistas más frecuentes en cualquier parte del mundo– arrancando desde San José, la capital, hacia cualquiera de los destinos más importantes del país.

Están por ejemplo las célebres playas de Guanacaste para hacer surf donde se realizan torneos internacionales y que, como gran ventaja, tiene espacios para practicantes novatos, intermedios o experimentados. También está la zona cafetera de Turrialba, que tiene uno de los sitios mejor calificados para hacer rafting en Centroamérica: el Río Reventazón. Por su parte, reservas naturales como el Parque Nacional Volcán Arenal, el Centro de Rescate Jaguar, el Parque Nacional Tortuguero o el Parque Nacional Corcovado son de esos lugares que ayudan a entender por qué Costa Rica es uno de los países más biodiversos del mundo, por qué la gente los escoge tanto para planes de caminatas, senderismo y camping.

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Volcán Arenal (Foto: Getty)

Empecemos por el comienzo. Costa Rica tiene dos aeropuertos internacionales, siendo el Aeropuerto Juan Santamaría en Alajuela, a las afueras de la capital San José, el más grande y frecuente de los dos. Si no va a comenzar inmediatamente su travesía por playas, selvas y parques naturales y le va a dar un recorrido a la ciudad, una muy buena opción para quedarse un par de noches es el imponente Costa Rica Marriott Hotel San José. Construido sobre los predios de una antigua hacienda cafetera, es un hotel de 4 estrellas elegido por Condé Nast como uno de los mejores de Centroamérica, y no es exageración: su delicada y cuidadosa decoración incluye antiguos azulejos nicaragüenses y antigüedades guatemaltecas y mexicanas, mientras que su patio interior fue diseñado inspirado en la Casa del Gobernador en La Habana, Cuba. En él todo huele, sabe y está inspirado en el café. Hasta su Kuo Spa, otro de los lujos que hay que aprovechar si se queda, ofrece tratamientos que usan café que viene de la plantación adyacente y que están inspirado en saberes y rituales de los indígenas de la zona.

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Si no quiere o no tiene tiempo para recorrer todo el país, el pueblo playero Jacó –ubicado en la costa pacífica– es un preciado destino que queda a un par de horas por carretera desde San José. Como buen destino surfista, está atestado de “gringos” lo cual cambia por completo el panorama, el paisaje y hasta el idioma de los letreros de tiendas y restaurantes. Si el lema de los ticos para expresar su suprema relajación y buena onda ante todas las cosas que pasan es el “pura vida”, Jacó tiene todo lo que necesita para entender de dónde viene esta frase.

Mientras que Jacó está lleno de hostales y pequeños hoteles, a diez minutos está la capital de la pesca deportiva en Costa Rica: Playa Herradura. Una de las joyas de este sector es Los Sueños Marriott Ocean & Golf Resort. Este hotel de 1.100 hectáreas frente al mar, vecino de un imponente muelle lleno de yates pesqueros y de recreo, es un culto a la vida marina. Si usted quiere puede llevar su pesca fresca para prepararla en las cocinas del complejo. El muelle también es un deleite para “vitrinear” y ver yates de todos los estilos y tamaños, y la playa es un buen lugar para que principiantes en surf se lancen a sus primeras olas. Pero si lo suyo no es el mar, igual puede seguir enganchado con actividades ecológicas de reforestación zonas adyacentes, u observación de iguanas, tucanes o monos al lado de un imponente campo de golf, o deportivas como cabalgatas, caminatas, kayak o senderismo.

Luego de esas paradas de lujo, queda un gran país por descubrir. Aliste carpa y botas, mapas y cámara, que el camino es ancho.

 

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