¿El Papa Francisco sí es el 'rockstar' que nos han querido vender?

Un 13 de marzo, pero del 2013, el mundo estaba a la espera del famoso humo blanco en El Vaticano, que es la forma en que la Iglesia Católica anuncia la elección de su nuevo jefe, para conocer la noticia de quién sería el reemplazo del alemán Joseph Aloisius Ratzinger.

El elegido, un argentino clonado del gran septón de Game of Thrones llamado Jorge Mario Bergoglio, ha dedicado el 80% de su vida a Dios. Sin embargo, desde que fue elegido como Papa Francisco se ha acercado más a la gente como si se tratara de un político colombiano en campaña. El argentino ha ganado el apoyo y la euforía del público al mismo nivel de estrellas de rock como Mick Jagger, Steven Tyler o Bono. Sabe la importancia de su trabajo y ha aprovechado su forma de ser para expandir su mensaje en una generación que ha diversificado su espiritualidad y cada vez le come menos al tradicional mensaje del catolicismo. Por eso es que en medio de un terreno estéril para lo religioso es muy meritorio que un Papa, en pleno siglo XXI, en plena era donde lo pop es la ley, siga siendo objeto de deseo para selfies y protagonizando portadas de medios de todo el mundo. Acá no cabe la profecía de Shakira cuando decía "pobre de Dios que no sale en revistas, no es modelo ni artista, ni de familia real". 

Pero bueno, entremos en materia y veamos los hechos que han hecho tan popular a este religioso a tal punto de que muchos lo consideran ícono de la cultura pop y/o rockstar. 

1. Es futbolero

Como buen argentino, el Papa Francisco es enfermo por el fútbol, hincha y socio activo del Club Atlético San Lorenzo de Almagro y constantemente relaciona la vida de Jesús con un campeonato de fútbol. En algún sermón soltó la frase: “Cuando se suda la camiseta tratando de vivir como cristianos experimentamos a lo grande”. En el Vaticano ha armado su propio Panini en carne y hueso, recibiendo a estrellas como Messi, Maradona, Iván Ramiro Córdoba, entre otros. Francisco ha tenido también el honor de levantar la Copa Libertadores que San Lorenzo ganó en 2014.

2. Se ha encargado de romper el protocolo que existe en El Vaticano

El Papa sabe que es el patrón de la Iglesia y por eso la última palabra siempre la da él. En sus giras ha violado los protocolos de seguridad bajando del papamóvil para tener contacto con su gente. Durante años se ha mantenido un fuerte esquema de escoltas a los papas. pero Francisco ha transmitido de forma magistral que su trabajo se debe en servir y ser parte de la comunidad.

3. Conquistó hasta a una excomulgada de la Iglesia, como Madonna

La reina del pop siempre ha tenido críticas hacia la religión católica, desde las referencias que hace en sus videos y giras hasta sus declaraciones públicas en contra de la entidad. Sin embargo, durante un concierto de la reciente gira Rebel Heart la cantante aseguró que “las reglas son para los tontos y por eso me gusta el nuevo Papa. Parece ser muy tolerante”.

4. El Papa twittero que le ha sacado el jugo a las redes sociales.

Antes de la llegada de Francisco, la Iglesia tenía una presencia mínima en internet. Actualmente la cuenta de Twitter @Pontifex, que se alimenta con los pensamientos y frases del Papa es la segunda más influyente de internet, sólo superando a Barack Obama. Cada uno de sus trinos tiene miles de RT y Favs como el que vemos a continuación.

5. Es harlysta

El argentino recibió el año pasado un regalo especial de parte de un ex diseñador de Harley Davidson; se trataba de una moto de 1600 centímetros cúbicos que fue fabricada exclusivamente para el pontífice y que llevaba escrito "Francesco" en el tanque. La moto fue subastada y el dinero se donó a personas en condición de vulnerabilidad. Durante sus años de seminario, Jorge Mario Bergoglio se transportaba por todo Buenos Aires en motocicleta, por ello varios usuarios de este transporte se encomiendan al man para no sufrir accidentes en carretera.

6. Su influencia llegó a revistas de moda, música y política

Durante los 5 años que lleva siendo el boss de la Iglesia ha tenido más influencia y poder mediático que cualquiera de los anteriores lideres religiosos. Por eso publicaciones de moda, música o cultura pop como Vanity Fair y Rolling Stones lo han elegido para protagonizar la página principal de sus versiones impresas, donde destacan a este latino como un religioso fuera de lo común. 

Algunas de sus frases más memorables son estas: 
 

7. Gay friendly

La Iglesia Católica siempre ha tenido una postura fuerte con respecto a la comunidad LGTBI, sin embargo, el sumo pontífice se ha mostrado respetuoso y tolerante con aquellos gais que buscan refugio y comprensión en Dios. Una de las frases más famosas de Francisco respecto al tema es esta: “Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?"

Sin embargo, no todo ha sido color de rosa. Al Papa le han criticado muchas veces el evitar reunirse con presos políticos de varios países o de sentar una opinión fuerte respecto a temas en los que todos los jefes de Estado "meten la mano", como, por ejemplo, la crisis que está viviendo Venezuela.

8. Mr. Selfie

El Papa es un icono tan pop que, como si fuera un ídolo futbolero o una estrella de Hollywood, es un personaje al que la gente le pide selfies.

TODO ES RISAS Y ALEGRÍA HASTA QUE...

Sin embargo el Papa no es intocable y una de las grandes críticas que ha recibido es la tibieza con la que ha tratado la pederastia por parte de sacerdotes. Recordemos que en un momento defendió al polémico obispo chileno Juan Barros, señalado por haber encubierto violaciones sexuales dentro de la iglesia. Este tema fue criticado por uno de los asesores de Francisco en materia de abuso clerical, quien agregó que la postura del Papa fue “fuente de gran dolor para los sobrevivientes de acoso y violación”.

¿Por qué el Papa no va a su país?

Según declaraciones, Francisco ha dejado claro que no lo hará hasta que su viaje no sea polémico. Él no quiere estar involucrado con la política del país sudamericano ni pretende generar división.
 

Como todo personaje público el Papa es un hombre que despierta amores y odios, lo que es indudable, es su poder de convocatoria y su facultad para atraer jóvenes a la Iglesia Católica que, en el tiempo de Benedicto XVI, perdió miles de seguidores.