¿Exceso de Photoshop o pretensión de un ideal de belleza perfecto?

90 -60 – 90, esas fueron las medidas que durante años se creyeron eran las perfectas para el género femenino. Sin embargo, en la actualidad las mujeres se muestran más reales, más naturales y más humanas.

Para una mujer lucir siempre agradable, con una sonrisa, alcanzar el éxito laboral, ser inteligente, ser mamá, ser independiente sin dejar de ser romántica, pero, sobre todo, verse y lucir bella se han convertido en algunas de las características de la sociedad contemporánea.

Pero, ¿será que en realidad la vida de una mujer depende de su apariencia? Para nadie es un secreto que la última década del siglo XX se impuso a una mujer de extrema delgadez como una figura importante en portadas de revistas, propagandas de televisión y películas, con medidas casi perfectas. Sin embargo, el concepto ha cambiado y el canon femenino se rige ahora con mayor fuerza a través de la naturalidad que recobra fuerza en portadas donde quedan por fuera los retoques, las modificaciones y el exceso de Photoshop.

Traemos el tema a la mesa porque hace unas semanas la actriz Amy Shumer se fastidió al ver en redes sociales que a un usuario se le dio la gana o, tal vez, le pareció muy chistosos pasar una foto por Photoshop para adelgazar su cuerpo.

Amy no ha sido la única, Lady Gaga, Zendaya, Kate Winslet, Julia Roberts, Demi Lovato, Beyonce, entre otras mujeres también han sido víctimas de esos pequeños “retoques” que les han realizado en importantes revistas y con los que han estado en desacuerdo.

Y es que parecen muñecas, piel tersa, cero imperfecciones, facciones perfectas, cabello sedoso y brillante y una figura de reloj de arena que en realidad las hacen ver tan diferentes. Ellas no se han callado y han dicho que odian que su cuerpo sea modificado por este tipo de herramientas porque defienden a capa y espada la naturalidad y las imperfecciones que las hace sentir más reales.

Estas han sido las historias de mujeres que simplemente desaprueban el Photoshop:

Amy Shumer:

Aunque no fue culpa de una gigante portada de revista, la actriz le cantó la tabla a un usuario que editó una fotografía suya.  "Creo que Amy ya se ve increíble, pero en mi opinión se ve mejor en la segunda foto", comentó el usuario en la imagen, pero ¿con qué necesidad lo hizo?

Seguramente lo mismo se preguntó la actriz al verse tan diferente, con más curvas y con el abdomen más plano. “Este es mi cuerpo. Amo mi cuerpo por ser fuerte, sano y sexy”, escribió la actriz en sus redes sociales dando su punto de vista sobre la edición.  

Lady Gaga:

La artista se pronunció en contra de las portadas que hacen a alusión a ideales de belleza que están fuera de la realidad. Todo sucedió a finales del 2013 cuando la cantante fue protagonista de la.

"Sentí que mi piel se veía demasiado perfecta. Sentí que mi pelo parecía demasiado suave. No lo veo así cuando me despierto por la mañana", expresó Lady durante una premiación de Mujeres del Año.

Zendaya:

Theo Wargo/Child 13/Getty Images

Foto: GettyImages / Theo Wargo /Child 13

En el año 2014 la cantante dio a conocer su inconformidad con la revista Modeliste por alterar una sesión fotográfica. “Me he sorprendido con la fotografía donde aparezco, a mis 19 años de edad, con mis caderas y mi torso han sido bastante manipulados. Estas son las cosas que hacen que las mujeres se sientan inseguras de sí mismas, crean ideales irreales de belleza", aseguró la joven.

Kate Winslet:

La protagonista de ‘Titanic’ ha declarado en varias ocasiones que prefiere verse natural en las portadas de revistas porque detesta el uso del Photoshop. Durante la edición británica de la revista GQ, la actriz aseguró que “no tengo ese aspecto, ni quiero tenerlo”, haciendo alusión a la imagen en la que apareció con unos kilos menos.

Julia Roberts:

Es una de las actrices de Hollywood más comprometidas en contra del uso excesivo del Photoshop. Para la actriz la naturalidad de un rostro siempre revela una historia que “no debe ser modificada “ni con la visita a un doctor ni con la acción de un ordenador”, la actriz pretende que sus hijas la reconozcan cuando la vean en alguna portada.

Demi Lovato:

La cantante puso la condición a la revista Vanity Fair de que sus imágenes no fuesen retocadas ni alteradas por el Photoshop. En la sensual sesión fotográfica, la artista posó completamente desnuda, sin maquillaje ni iluminación y rompió con esos excesos habituales de hacer retoques.

Beyonce:

La cantante se enfadó en el año 2013 con la publicación de la firma H&H en la que protagonizó una campaña veraniega. La estadounidense quería que dichas imágenes fueran naturales y al verlas editadas con tanto Photoshop, la artista se negó a darle el visto bueno porque no parecía ella.

El mensaje detrás de todo esto es que las mujeres no necesitan la aprobación de nadie para lucir como se le da la gana. Dejemos los estereotipos a un lado y simplemente aceptemos las desigualdades que nos hacen ser tan únicos en el mundo.