Nos metimos de cabeza en The Bogotá Department

Letras extremadamente anchas, una dosis de teoría del color y un paquete cargado de consejos sobre tipografía, fotografía, luz y serigrafía. Así fue el último día en The Bogotá Detpartment para conmemorar más de tres décadas de innovación de Nike con las Air Max.

Esta vez decidimos experimentar lo que es ser parte de los talleres de The Bogotá Department. De las cuatro opciones: material, fotografía, tipografía y serigrafía, nos inclinamos por la tipografía (por poco fue serigrafía), a cargo de los capos de Bastarda Type, un estudio de diseño enfocado específicamente en la producción tipográfica para la identidad visual. ¿Su objetivo? Mejorar la imagen a través de una exquisita muestra de líneas perfectamente acomodadas.

(Ver támbien: Las Air Max 720 aterrizan con nuevo engalle y una poderosa tecnología)

Con laptop en mano y Adobe Illustrator listo para ser explorado de esquina a esquina, empezó la parte teórica: un tremendo repaso de historia para inspirarse en referentes y contextualizar al cerebro creativamente antes de realizar algo “novedoso”. El foco de toda esta actividad y a propósito del lanzamiento de las Air Max 720, era el poder de innovación de Nike con su cámara de aire y su revolución en la industria de la moda con esta aplicación. En cada frase explicada por los tutores se entendía un punto clave: ir más allá de lo obvio, pensar en GRANDE y hacer posible lo imposible.

(Ver también: Air Max Day: innovación y creatividad en The Bogotá Department)

En este espacio, las únicas reglas eran las de los números y el poder de la imaginación era la herramienta más importante, de esa forma las mil personas que asistieron a este último día de The Bogotá Department entenderían cómo Nike llegó a este punto de innovación. Los otros tres talleres eran igual de únicos en su campo, todos llevando la creatividad al límite utilizando los colores, las texturas, las formas y la luz.

Llegó la hora de poner en práctica lo aprendido: mediante la tipografía modular había que crear una nueva fuente tipográfica creada por todos los que asistimos, una fuente única en su clase. Después de esto, había que crear una frase de impacto, una que resumiera la evolución de Nike y el bombazo que le entregó al mundo con su cámara de aire, algo que era de ensueño en los años 80. El reto era duro, pero no imposible. “El que no arriesga, no gana”, una de las lecciones más importantes del día.

Entre tintas y papeles llegó la hora de entregar el resultado final de los cuatro talleres, es increíble como 100 personas pueden crear algo totalmente diferente, unir toda esa creatividad en un solo producto es el ejemplo perfecto de lo que hace el equipo de ingeniería y conceptual de Nike día tras día. Después de un breve debate sobre los productos finales, llegó la exhibición final, una que pasó por letras, fotos, telares, burbujas y pinturas exponiendo el poder creativo de 200 manos en un solo lugar. Así fue el último día en The Bogotá Department.