Desde el miércoles 13 de abril, Bogotá cuenta con un nuevo Venue. El GLM Auditorio, el proyecto musical más ambicioso de los hermanos Carlos Vives y Guillo Vives crearon para que los artistas más grandes que tiene Colombia, y próximamente internacionales, tengan un espacio acorde a sus shows.
La inauguración comenzó con la agrupación Poligamia que dejó el alma en el GML; por dos horas hicieron un recorrido por esos temas celebres como: Mi Generación, Te regalo una canción, Desvanecer y mucho otros más; éxitos que en los 90s los amantes del rock en español convirtieron en himnos.
Luego la noche de este jueves los homenajes al festival vallenato comenzaron con el concierto del maestro Poncho Zuleta y el rey vallenato El Cocha Molina; ellos se apoderaron del GML como nadie, e hicieron retumbar el lugar con los acordes del acordeón interpretando un sin número de hits que por 3 horas hicieron la velada.
Varios fueron los momentos emotivos, el primero fue cuando el hijo de Pocho, Kbeto Zuleta recibió el micrófono por parte de su padre, para cantar a duo Mi Hermano y Yo. Luego invitaron a subir al músico Alfredo de la fe, quien al mejor estilo de la piqueria tuvo su duelo musical, él en el violín y el Cocha Molina en el acordeón.
Pero sin duda Pocho Zuleta no podía dejar pasar que en su noche, Carlos Vives no cantará con él, fue así como lo llamó al escenario, le paso el micrófono y entre los dos cantaron La Gota Fría y La Celosa.
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