Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Cómo coronar un polvo en las alturas

Si tirar en un avión en pleno vuelo era lo que le hacía falta por chulear, y no se había atrevido a hacerlo, puede que no se tenga que quedar con las ganas

574676_plane.jpg
plane.jpg

Antes, para ser miembro del selecto Mile High Club hacía falta: tener un avión privado o ser muy osado para llevarse a su pareja al baño en pleno vuelo comercial. La segunda es la más arriesgada, aunque la mejor y única opción viable para nosotros los pobres mortales. Únicamente realizable en un vuelo largo y con pocos pasajeros. Y que en últimas, a menos que estén viajando en una aerolínea china o coreana, lo máximo que les puede traer problemas, además del oso, es tener que pagar una buena multa.

Claro está que ahora hay mentes emprendedoras que saben que el fetiche oculto de muchos no compagina con las billeteras hiperabultadas o con el miedo a pasar el oso de que una azafata lo interrumpa en pleno acto frente a los demás pasajeros.

Existe Flamingo Airlanes, la que sea tal vez la primera en funcionar como aerolinea/motel. Para ingresar al club solo hay que bajarse de un poco menos de 500 dólares para tener una cita en un avión con vuelo y happy ending incluido.

Lo que ofrece Flamingo va más allá de ser solo un motel aéreo, dice el dueño de la empresa, quien habla más de una cita romantica.

Publicidad

Entre los múltiples paquetes de turismo que ofrece la empresa está el “Romantic Adventure”, una opción que incluye champagne, chocolates y 60 minutos de vuelo privado. No necesariamente se involucra el sexo en la oferta, pero Flamingo es de las únicas empresas que lo permite. 

  • Publicidad