Do It Yourself: el manifiesto revolucionario de una generación transformadora

Nos cansamos. Nos cansamos de ver sistemas corruptos. Nos cansamos de esperar que otros resolvieran los problemas que nos surgían. Nos cansamos de ver cómo otros se tiraban el mundo que nos habían entregado. Nos cansamos de ver que las cosas se movían por roscas y palancas. Nos cansamos de que nos dijeran “no se puede” o “dime cuánto tienes y hablamos”. Nos cansamos de que le dijeran “no” a nuestros sueños.

Nos cansamos de gobiernos corruptos, corporaciones ambiciosas, leyes inhumanas, distribución desigual de la riqueza y sistemas sin oportunidades.  

Este hartazgo generacional no es nuevo. Los hippies lo sintieron. Los beatniks lo sintieron. Los punks lo sintieron. Los hijos del grunge lo sintieron. Cada década ha traído su inconformismo. Pero este inconformismo que nos tocó es especial y diferente. Vivimos en una era de masificación tecnológica que nos dio todas las herramientas, digitales y análogas, para cambiar el curso de las cosas y nos botó un mensaje en la cara:

DO IT YOURSELF / HÁGALO USTED MISMO

Quéjese pero actúe. Proteste pero proponga. Critique pero construya. Ya pasaron los días de una rebeldía sin sentido, de una desobediencia sin fundamento. Estamos viendo la revolución en todo lugar y en todas las escalas: jóvenes que desde su cuarto, con tan solo una cámara y un computador, están creando poderosos canales de comunicación; bandas que dominaron el mundo sin la necesidad de una disquera ni payolear para sonar en radio; cineastas que no tuvieron que esperar a que un estudio comprara su guion para hacer un largometraje sino que la hicieron con una cámara de fotos o hasta con un celular; programadores que regalan sus códigos y plataformas para que otros creen software libre para sus comunidades; diseñadores que han inventado muebles que cualquier persona puede armar, con el mínimo de materiales, en cualquier parte del mundo y con sus propias manos.

YouTubers, blogueros, creadores de start-ups, son los iconos de esta generación: personas que ya no buscan trabajos en empresas sino que son las empresas las que los necesitan para crecer. Pero no son los únicos. Los creyentes en un consumo responsable de lo que comen, visten y usan diariamente, también hacen parte de esta revolución del nuevo milenio. Consumidores que se dieron cuenta que en sus elecciones diarias también está el cambio.

La Primavera Árabe, #occupyWallStreet, Wikileaks, el poder reformador de las redes sociales, son prueba del cambio en el mundo. Este especial de la Red Shock es un homenaje a todas esas causas que desde distintos ámbitos están respondiendo al espíritu del “hágalo usted mismo”. Una mirada a las ideas, proyectos y personajes colombianos que están liderando el cambio desde casa. Sígalos, anótelos y súmese al movimiento.

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Foto apertura: Getty