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Los Incorregibles cazando infractores en la cicloruta

Gente atravesada, vías mal planeadas, ciclistas que hablan por teléfono y se saltan las normas. En la cicloruta se refleja nuestra ciudad.

No basta con que la cicloruta esté incompetentemente diseñada, puesta serpenteando sobre avenidas o en diminutos andenes donde apenas caben los transeúntes, sino que a diario hay que esquivar gente caminando, motociclistas, bicicletas eléctricas (que NO deberían transitar por ahí), vendedores ambulantes y ciclistas sin casco o que van hablando por teléfono o por fuera de la vía que les corresponde.

Santiago Rivas vuelve en representación de Los Incorregibles para prestarle un servicio a la comunidad. Un servicio momentáneo, pero del que todos deberíamos apropiarnos y del que nos queda una buena reflexión.

La gente se la pasa predicando que quienes andan en bici tienen un estilo de vida más saludable, que no hacen tanto daño, pero no siempre es tan bueno como parece; las ciclorutas son espacios mal diseñado y llenos de gente que porque creen que van en bicicleta tienen derecho a pasarse las normas por la faja. En suma, es el reflejo de una ciudad de gente que compite entre sí, de gente atravesada en todos los aspectos de su vida. Si no creen, vean este capítulo de Los Incorregibles.

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