Mala Bengala: new wave criollo sumergido en un universo de pop alternativo

Daniel Montes ha tenido la oportunidad de subirse a tarimas como la de Rock Al Parque, Estéreo Picnic y el Festival South By South West en Austin, Texas, espacios deseadas por muchos artistas alternativos en Colombia. Luego de que la banda a la que pertenecía se desintegrara, empezó a crear un nuevo proyecto con las canciones que ya había compuesto a lo largo de su vida. Fue así como en 2016 nació Mala Bengala, contando con el apoyo de otros músicos, pero que en este momento está integrada por cuatro artistas que están comprometidos con consolidar el proyecto y meterlo en ese grupo de agrupaciones que fortalecen la escena musical del país. En 2020 participaron en Unión Festival Digital, con un set hecho a distancia en el que muestran el power de su propuesta.

Mala Bengala está integrada por Daniel Montes, Daniel Nassar, Pablo Escallón y Jefferson León. Hablamos con ellos.

¿Cuáles son los sonidos que definen Mala Bengala?

Creo que principalmente Mala Bengala se basa un poco en esa nostalgia de los 80 y los 90, esos sonidos muy producidos, pero con algo de new wave tipo New Order y si venimos a Latinoamérica toda esa onda de Soda Estéreo o Caifanes. La idea es combinar esos sonidos de antes y meterle sonoridades con muchos efectos, más contemporáneas, neo psicodelia tipo Tame Impala.

¿De dónde viene el nombre del proyecto?

Yo quería un nombre compuesto, empecé a pensar y en medio de una conversación con mi hermano salió la idea. Me gustó mucho Mala Bengala porque más que tener un significado es un nombre que tiene mucha sonoridad. También tiene una definición espiritual porque Mala puede sonar como algo negativo, pero en la India es un instrumento que se usa para rezar, lugares donde no se fijan tanto en lo material sino más en lo espiritual.

¿Cómo ha sido consolidarse y hacerse más visibles?

Como banda ha sido más fácil participar en espacios como Boogaloop o El Chamán, pero siento que a veces llegar ahí es muy difícil. En métricas de plataformas digitales vemos que nos consumen mucho en Chile o México, pero en Colombia ha sido raro no tener ese público. Este 2020 hemos querido llegar mucho más a la gente de acá y, para bien o para mal, la cuarentena nos ha ayudado a hacernos más visibles en la escena nacional. El público colombiano es bastante difícil de convencer, a veces copian porque tal banda ha salido en medios o se ha presentado en festivales grandes. Ahí sí, cuando ven todo ese movimiento mediático, les dan la oportunidad a los nuevos proyectos. Poco a poco hemos ido labrando ese camino.

¿Cómo ha sido el trabajo en medio de la pandemia?

Se cayeron varios planes y toques, pero por fortuna tenemos material listo para lanzar a lo largo del año. Es raro trabajar a distancia, pero es chévere que cada uno desde su casa sume un granito de arena a la construcción del sonido de la banda.

¿Cómo fue la experiencia de participar en Unión Festival Digital?

Llegó un correo del Unión Festival en el que buscaban bandas emergentes y por esos días estábamos cuadrando que cada uno grabara desde sus casas para hacer un video. Lo grabamos, produjimos y terminamos, leímos la información de la convocatoria, vimos que teníamos todo lo que pedían y decidimos aplicar. Fue una sorpresa que nos contactaron para decirnos que habíamos sido elegidos para tocar en el festival y recibir un reconocimiento económico. Es gratificante que ese trabajo que hicimos haya gustado.

En 2020 Mala Bengala ha estrenado los sencillos Sin Velocidad y Raíz, pero a lo largo del segundo semestre del año estarán lanzando nuevos temas que posiblemente terminen en una larga duración. La banda también está pensando la forma para experimentar y seguir conectando al público por medio de la música en vivo porque creen que aún está lejano el regreso a las tarimas.

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