Su nombre es Federico, pero desde que practicaba capoeira le decían Maréh y así se quedó. Su amor por la música viene desde niño, de un enamoramiento profundo con los ecos de los tambores que lo llevaron a sumergirse no sólo en el sonido, sino en la investigación de las músicas afrocolombianas.
De ahí saltó a la antropología, más que nada como una excusa para seguir acercándose a la música desde otros ángulos. En ese momento no sabía que ese camino lo llevaría a gestar su proyecto solista de pop, pero un día se enamoró y en la composición, las canciones y la guitarra encontró la mejor forma de expresar todo lo que sentía.
No tuvo otra opción que meterse de lleno en el cuento y este año le dio vida a Amuleto, su primer álbum y la perfecta muestra de sus poderes musicales. Vicente García, Monsieur Periné, Billy Francis Bowie, de la agrupación K-yo; Hugo Candelario y Elkin Robinson acompañan este disco producido por el músico cubano Julio Ramírez y grabado entre Cali, su ciudad natal, Bogotá, Miami, la isla de Providencia y Cuba.
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