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¿En serio un show de Guns N’ Roses vale 3 millones de dólares?

Se habló de que eso cobraría Guns N’ Roses por los shows de su regreso en estadios y grandes festivales. ¿Pero realmente los vale?

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Se habló de que eso cobraría Guns N’ Roses por los shows de su regreso en estadios y grandes festivales. ¿Pero realmente los vale? La banda de Axl Rose, que parece una caricatura de sí misma (como lo pintó un compilado colombiano de los 90) encabeza el cartel del famoso Coachella.

Por: @chuckygarcia

Lo primero que se me vino a la cabeza apenas vi a Axl Rose en los videos de su reciente show en el escenario Troubadour de West Hollywood fueron las portadas de “Los Hits Gordos”. Para quienes no lo recuerdan o nunca les tocó, “Los Hits Gordos” era una serie de compilados que el sello Universal lanzó en Colombia a comienzos de los años 90 y cuyas portadas eran como Boteros de los iconos de la salsa, el vallenato  o el rock. Muy a pesar de que no incluía una sola canción de Guns N’ Roses, “Los Hits Gordos del Rock” traían en su portada el dibujo de un Axl Rose gordo y dando uno de sus habituales alaridos (los mismos que por aquel entonces lo habían puesto en la cima del mundo); pero en el dibujo la expresión de la cara del cantante no daba la sensación de que lo disfrutaba sino de que le ocasionaba un gran esfuerzo, posiblemente a raíz de lo que en aquel entonces era impensable: que Rose terminara siendo una caricatura con sobrepeso de sí mismo.

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Viendo las fotos del concierto en el Troubadour que marcó el comienzo anticipado del anunciado regreso de Guns N’ Roses y que su guitarrista Slash subió a Instagram, nota uno que la expresión de Axl Rose es justamente la misma que en aquel dibujo de portada. Y que esa portada, dicho de otro modo, fue profética, y que adicionalmente quien hizo la ilustración debe estar feliz porque 15 años después la imagen de ese Rose rechoncho y con dificultad para cantar cobró vida. Y no solo cobró vida sino que según se especula vendió por 3 millones de dólares algunos de los shows que este año darán en grandes festivales y estadios.

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De momento, lo que Guns N’ Roses en cabeza de Axl Rose y Slash han mostrado es que más allá del riguroso paso de los años que hace mella por igual en humanos o dioses del rock es que no queda rastro de esa banda que cuando pasaba por un escenario acababa hasta con el nido del perro. Y no porque hacían orgías con modelos, destruían los hoteles o dejaban los camerinos hechos un lodazal, sino porque musicalmente eran como un camión sin frenos bajando por la carretera del Cañón del Chicamocha. Así a algunos su música les parecía glam de mariquitas y a otros música rock de avanzada, lo que no se discutía es que eran uno de los mejores shows que uno podía ver en una época en donde las bandas se hacían notar realmente y no por un video viral en redes.

Ahora que el emblemático bicicletero de Axl Rose es una faja (lo que igual es anecdótico, pues todos envejecemos y engordamos, como ya se dijo), en todo caso cabe la pregunta de si haciendo de cuenta de que lo de los 3 millones de verdes es cierto lo que hasta ahora ha mostrado Guns N’ Roses realmente lo vale o solo está hecho a la medida y talla de una nostalgia exacerbada?

"...15 años después la imagen de ese Rose rechoncho y con dificultad para cantar cobró vida. Y no solo cobró vida sino que según se especula vendió por 3 millones de dólares algunos de los shows que este año darán en grandes festivales y estadios".

La nostalgia, ese mercado bursátil y negocio especulativo del cual todos hemos hecho parte o haremos parte en algún momento, en todo caso, sin duda tiene que ver. Pero aún así, ¿lo vale este refrito fofo y sin sustancia? Estando el nivel musical del grupo incluso por debajo de la banda de soporte que Axl Rose armó hace unos pocos años para presentar su egomaníaco álbum “Chinese Democracy, ¿no es una caricatura mala de algo que por más que se hubiera salido de control (como sucedió con los Guns N’ Roses de comienzos de los 90), por lo menos no era un mamarracho sino una de esas bandas que había que ver sí o sí antes de morirse?

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Casi 25 años habían pasado desde que Axl Rose, Slash y Duff McKagan (el bajista de su tour en 1993 y de su aún celebrado doble disco “Use Your Illusion”) habían actuado juntos por última vez, y uno se pregunta, finalmente, si incluso era mejor que las cosas quedaran así y si eso de que sean cabeza de cartel del famoso festival Coachella (tanto el 16 como el 23 de abril) saldrá tan bien como se espera ó, si por el contrario, Axl Rose (quien ya se fracturó un pie) no acabará por romperse algo más antes de que pueda terminar de cantar “Paradise City”, “Sweet Child O' Mine”, “Welcome to the Jungle” o “Knockin’ on Heaven’s Door”. Algunas puertas es mejor no abrirlas, y el dinero no siempre justifica hacerlo porque todo puede terminar siendo un desastre. Ya lo demostró Homero J. Simpson, cuando decidió subir de peso arbitrariamente para quedarse trabajando en casa y por poco causa un desastre nuclear. 

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