TIMØ la banda de pop colombiano integrada por los músicos Felipe Galat, Alejandro Ochoa y Andrés Vásquez regresa a los escenarios presenciales por todo lo alto con un concierto especial en el Teatro ABC de Bogotá. Contenido recomendado | Black Eyed Peas visitará Colombia como nuevo headliner del Jamming Festival 2022Este será el primer encuentro de los creadores de Espejito, Espejito, Adiós, Adiós, Juernes y Algo Diferente con sus fans luego de un año en el que solo se pudo ofrecer conciertos virtuales.TIMØ fue uno de los pocos proyectos que se presentó en vivo durante la pandemia en el Movistar Arena de Bogotá, concierto con el que anunciaron la publicación de su primer EP de seis canciones.El evento iniciará a las 5:00 de la tarde en el Teatro ABC de Bogotá, la edad mínima de ingreso es 9 años y tendrá un aforo de aproximadamente 500 personas. Las boletas están disponibles en la página web de TuBoleta.com y se espera que haya un acto de apertura que se confirmará días antes del concierto.En video | Las mejores excusas para decirle ‘adiós, adiós’ a alguien, por TIMØ - Shock¡La música nos une!
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial completo con reseñas de discos colombianos (álbumes de estudio y EP) para que conozcan y se empapen de la diversidad musical del país. También pueden echarle un ojo a los mejores temas y álbumes nacionales del 2020 en este especial. En esta oportunidad les presentamos Espejito, Espejito de TIMØ.Espejito, Espejito - TIMØ¿Quién está detrás? Alejandro Ochoa, Andrés Vásquez y Felipe Galat se conocieron en los salones de la Universidad Javeriana mientras estudiaban la carrera de música. Luego de unas clases empezaron a hacer canciones que compartían por WhatsApp y empezaron a viralizarse por el voz a voz en varios sectores de Bogotá. Se pusieron las pilas, le invirtieron al proyecto, grabaron videos, estrenaron sencillos y se volvieron un fenómeno. Universal Music se dio cuenta de su talento, los firmó y este es su segundo lanzamiento con ellos.¿De qué trata? Espejito, Espejito es una expresión muy Disney, usada en el famoso cuento de Blancanieves. En este caso la banda se inspiró en una ‘película ideal’ donde se proponen diferentes escenarios haciendo que el cuento se desdibuje y se ponga más divertido. De alguna forma, convirtieron una historia clásica en una historia moderna y real.¿Sobre el video qué? El video tiene lugar en un almacén donde TIMO da una épica actuación, y que tiene un toque industrial que combina muy bien con el ambiente de la canción. Esta canción es poderosa y enérgica, tiene un ambiente de banda moderno. Transmite con elementos orgánicos como, guitarras acústicas, guitarras eléctricas y sonidos de multitudes. Todo el tiempo exudando un sonido de banda clásico moderno urbano.¿A qué suena? Fue co-producida por los TIMO; Andrés Torres, Mauricio Rengifo y Sebastián Viles. Una fusión interesante de pop latino con elementos de reggaetón y algo de electro music.¿Cuándo escucharla? Apelando a la cursilería, es propia para dedicar a esos amores que sueñan con amor de cuento de hadas.En video | Las mejores excusas para decirle ‘adiós, adiós’ a alguien, por TIMØ¡La música nos une!
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial completo con reseñas de discos colombianos (álbumes de estudio y EP) para que conozcan y se empapen de la diversidad musical del país. También pueden echarle un ojo a los mejores temas y álbumes nacionales del 2020 en este especial. En esta oportunidad les presentamos Cinco a Cero de TIMØ. Cinco a Cero - TIMØ¿Quién está detrás? Alejandro Ochoa, Andrés Vásquez y Felipe Galat se conocieron en los salones de la Universidad Javeriana mientras estudiaban la carrera de música. Luego de unas clases empezaron a hacer canciones que compartían por WhatsApp y empezaron a viralizarse por el voz a voz en varios sectores de Bogotá. Se pusieron las pilas, le invirtieron al proyecto, grabaron videos, estrenaron sencillos y se volvieron un fenómeno. Universal Music se dio cuenta de su talento, los firmó y Cinco a Cero es el primer tema que conocemos de esta nueva era para el trío de pop.Para leer | ‘Algo diferente’, el EP de TIMØ para cerrar un año de trabajo maratónico¿A qué suena? TIMØ empezó como un proyecto que homenajeaba el tropipop, pero ha evolucionado en su sonido y encontrado nuevos elementos musicales que son la fusión de muchos géneros. Esta canción dista mucho de sus hits fiesteros Se escaló, Juernes o Bebamos, pero en la evolución está la clave del éxito.El toque reggaetonero de este tema, que los pone a sonar mucho más internacional y menos local, es producto del trabajo de TIMØ con los productores Andrés Torres y Mauricio Rengifo quienes han estado detrás del éxito de canciones como Despacito, Ruanway o A dónde vamos, entre otras.¿De qué trata? Cinco a Cero es un término futbolero que representa una goleada poderosa. En el tema se habla de las ganas que tiene una persona de lograr una relación en serio con alguien sabiendo que tiene muchas oportunidades de triunfar, a pesar de que el objetivo “está con otro man”.¿Sobre el video qué? Sobre el clip la banda cuenta que “para nosotros era importante mostrar la esencia musical de esta banda, siempre nos imaginamos el video con nuestros instrumentos para que la gente sepa lo que puede vivir en uno de nuestros conciertos”. Fue dirigido por JASZ, quien ha trabajado en videos musicales de Dylan Fuentes y Mau & Ricky.¿Cuándo escucharla? La canción tiene vibras ideales para una tardeada de sábado. Hay que estar atento a los próximos lanzamientos para entender (y disfrutar) de esta nueva era musical de TIMØ.En video | Morat se le mide a nuestro reto ‘¿Quién es quién?’¡La música nos une!
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial con reseñas de discos colombianos (álbumes de estudio y EP) para que se empapen de la diversidad musical del país. También pueden echarle un ojo a los mejores temas y álbumes nacionales en este especial con lo mejor del 2020 . En esta oportunidad les presentamos Aunque sea mentira de Wamba.AUNQUE SEA MENTIRA - WAMBA¿Quién está detrás? Wamba es insignia del tropipop. Aparecieron por primera vez en la Revista Shock de 2006, su música empezó a sonar con fuerza en la radio nacional y luego llenaron todos los venues del país. Compadre, Por ti, Canción del mes y Compadre son sus canciones insignias e himnos del género que marcó a una generación. La composición de este nuevo sencillo es de Aníbal de Los Reyes, Efraín Ardila y José Baquero.¿De qué trata? El baterista del quinteto, José Baquero, cuenta que este tema “habla de una tusa, del dolor que causa ser reemplazado y de cómo uno, como método de supervivencia, trata de borrarlo todo”. La canción mantiene la esencia de ese Wamba de principios de 2010 y el ADN de esta canción recuerda mucho a temas como Condenado.¿A qué suena? La canción tiene el sello único e inconfundible de la voz de Salo, sobre una base de pop rock fusionada con elementos tropicales como la percusión de Migue, que siempre ha estado vigente en las canciones de Wamba. El coro tiene todos los elementos para ser un himno de bares y de amigos.¿Sobre el video qué? Es una producción de Zapata Fonnegra, la productora audiovisual del bajista de Wamba. Al inicio del clip se lee que el clip es dedicado a Migue que tuvo un accidente cuando iba de camino al rodaje. En él se ve a la banda tocando con pasión sus instrumentos de la misma forma que lo hace cuando están en tarima conectando con el público. Sobre el accidente de Migue, Jose cuenta que él ya se encuentra bien y que está en proceso de recuperación, “fue un momento muy duro para nosotros porque hace mucho no estábamos todos juntos y además con una canción que nos tiene muy emocionados”, agrega Baquero.¿Cuándo escucharla? Esperamos que pronto podamos ver la versión en vivo, pero por ahora la idea es quemar la canción. Adueñarse de ella, de su historia y de la interpretación que Wamba nos regala.Para ver | Jorge Oñate: El vallenato tradicional contra las fusiones¡La música nos une!
Para muchos 2020 ha sido un año en el que los planes que tenían se fueron al carajo, pero para otros ha sido una época llena de trabajo donde se consolidaron muchos sueños. Ese es el caso de Alejandro, Andrés y Felipe, los integrantes de TIMØ quienes han tenido unos meses bastante intensos, pero que los han dejado con una satisfacción gigante. Para empezar a cerrar el año la banda lanza Algo Diferente, su primer EP y el resultado de lo que ellos llamaron ‘Maratón de canciones’, un proyecto de tres meses en los que cada quince días estrenaron canciones con videoclips, retos de TikTok y estrategias para llegarle a más gente. Por: SebasNews - @SebasNews Si aún no saben qué es TIMØ los invitamos a ver el perfil que les hicimos a inicio de 2020 cuando fueron anunciados como una de las Apuestas Shock del año. En ese momento los mostramos como un trío de amigos que representaban la nueva escuela del Tropipop, pero a lo largo de estos meses nos han demostrado que son mucho más que eso. Antes de que llegara el coronavirus a Colombia estrenaron el sencillo Adiós, Adiós, después se encerraron en un apartamento no habitado del Norte de Bogotá para aprovechar el aislamiento, no contagiarse de COVID-19 y crear mucha música. Fue así como lanzaron Me Gustas, una creación musical de cuarentena. Luego de que cada uno se fue para su casa, empezaron a reunirse a distancia y a cranear en equipo las acciones para hacer crecer el proyecto. Fue así como pusieron sobre la mesa la idea de hacer una maratón de TIMO en la que estrenarían cada 15 días las canciones que forman su primer EP. El anuncio de este primer proyecto discográfico fue por todo lo alto con un concierto sin público en el imponente Movistar Arena. Fueron el primer acto musical en ofrecer un show virtual desde ese Coliseo, considerado el mejor escenario para conciertos en Bogotá. Para TIMØ fue “una experiencia maravillosa, una locura inimaginable” y sueñan con que pronto puedan repetir esa presentación, pero con púbico. Este EP viene con la mano de dos jugadores conocidos en la industria de la música en español: los productores Nabález y Mango (Juanes, Aitana, Morat). “Para nosotros fue increíble poder trabajar y aprender de ellos, juntarsnos con ambos es gratificante y tenerlos en este EP aportó bastante a nivel artístico”, añade Felipe. ALGO DIFERENTE El EP debut de la agrupación muestra dos personalidades de TIMØ: la fiestera y la sentimental. La primera contiene temas para hacerlos himnos de rumba, temas para saltar eufórico y cantar a todo pulmón. La segunda es un poco más personal, romántica e intima para dedicar e ilusionar. TRACK BY TRACK - PASE LO QUE PASE Un himno a la amistad que habla sobre el paso del tiempo y la importancia de brindar por la vida de esas personas que nos acompañan a crear historias. Es el primer video de la maratón y muestra el inicio de un viaje por carretera donde el protagonista es un carro que fue intervenido ‘artísticamente’ por la banda. - DESPIERTO Tres enfermos de amor que no pueden dormir por estar pensando en alguien. La canción perfecta para dedicar en esa etapa de coqueteo de la relación. Una balada para no cortarse las venas, sino para soñar con los ojos abiertos e ilusionarse. - BAILA SOLA Tercera para del viaje y donde aparece un cuarto personaje: una chica que le baila a la luna. Una pieza que recuerda mucho clásicos de tropipop como La Mona de Bonka, Compadre de Wamba o Usted me encanta de Majua. - DEJA VU Una de las pistas más destacadas del EP y que tiene pinta para sonar en series juveniles. Una canción de amor que muestra la faceta más romántica del trío. - SE ESCALÓ Vuelve el homenaje a la fiesta. Una pista para esas fiestas que terminan siendo algo ‘cero tranqui’. Un clip divertido que muestra cuatro manes divirtiéndose y gozándose la juventud. - ALGO DIFERENTE Con este track termina una etapa de arduo trabajo. Esta canción refleja el avance de TIMO y la consolidación del proyecto en la escena musical colombiana. El concepto de la canción habla de salir de la rutina, experimentar y ser diferentes. Para ver | Las mejores excusas para decirle ‘adiós, adiós’ a alguien, por TIMØ #LaMúsicaNosUne
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial completo con reseñas de discos colombianos (albumes de estudio y EP) para que conozcan y se empapen de la diversidad musical del país. También puede echarle un ojo a los mejores temas y álbumes nacionales del 2019 en este especial. No estoy listo - Wamba ¿Quién está detrás? Wamba es insignia del tropipop. Aparecieron en Revista Shock, su música empezó a sonar en radio y luego llenaron todos los venues del país. Compadre, Por ti, Canción del mes y Compadre son parte de las canciones que los identifican. La composición de No Estoy Listo es de Jose Baquero y Efraín Ardila, bajo la producción de Sergio Orejuela y María Elisa Ayerbe. ¿De qué trata? Para Jose Baquero, baterista de la banda, esta “es una canción que invita a valorar a los que amamos en vida, a honrar el recuerdo de quienes se fueron y a entender que nuestro tiempo tiene una fecha y una hora; es una canción que nos invita a pedir perdón si hemos fallado, a no dejar un te quiero guardado y de valorar cada minuto que tengamos con los que amamos”. ¿A qué suena? Es una balada de pop-rock poderosa donde la interpretación nostálgica es protagonista absoluta. Viene acompañada de unos coros que logran erizar la piel y seguramente a algunos los llevará hasta las lágrimas. ¿Sobre el video qué? Es un clip bellísimo en el que la banda desnuda su alma y donde se proyectan imágenes de sus familias y amigos. “La canción fue concebida de manera tan real y sin ninguna pretensión, que creemos que el video tenía que honrar eso. Es un video donde cada uno reacciona a la canción en frente de la cámara mientras se proyectan imágenes de nuestra vida”, añade Jose. El video fue dirigido por Camilo Zapata, integrante de Wamba ¿Cuándo escucharla? Es una canción que tiene como bandera el amor por aquellos que conforman nuestra vida. Sabemos que la pandemia se ha llevado muchas vidas y seguramente esta canción servirá para refugiar la tristeza y recordar con amor a aquellos que ya no están. Para ver | Un canto x Colombia vuelve a unirse contra las masacres #LaMúsicaNosUne
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial completo con reseñas de discos colombianos (albumes de estudio y EP) para que conozcan y se empapen de la diversidad musical del país. También pueden echarle un ojo a los mejores temas y álbumes nacionales del 2019 en este especial. Pedacito E' Mar - Marenka ¿Quién está detrás? Marenka es la unión de las palabras “mar, arena y vodka”, pero también es el proyecto musical de cinco estudiantes universitarios de Bogotá. Oficialmente debutaron en 2019 con canciones originales y, de la mano de agrupaciones como TIMO, están escribiendo una nueva página en la historia del tropipop rolo. Lea también: El tropipop y la importancia del fenómeno musical colombiano de la decada del 2000 ¿De qué trata? La composición de Juan Cadena, Daniel Villegas y Sergio González habla de esos momentos de soltería, despecho e introspección en los que uno quisiera estar acompañado por un amor, ya sea fugaz o eterno para sacarse de la mente a un amor que terminó. ¿Sobre el video qué? La idea de Mateo Caldas, Daniel Villegas, Santiago Palma, Pedro Vásquez y Sebastián Caldas era grabar este video en un pedazo de mar de las playas de Barú, Cartagena, pero la pandemia frustró los planes de rodaje, pero en medio de una reunión decidieron que iban a llevar esos deseos de costa caribe a sus casas en Bogotá. El divertido muestra a los integrantes en sus casas celebrando planes cancelados. ¿Cuándo escucharla? Ojalá pueda escucharla en medio de una pool party o en una fiesta de playa, pero si no la logra lleve todas esas ganas de bailar y cantar a la sala de su hogar. Recomendado: Las mejores excusas para decirle ‘adiós, adiós’ a alguien, por TIMØ #LaMúsicaNosUne
En la década del 2000 hubo un boom de agrupaciones colombianas que fusionaban el pop y el rock con ritmos caribeños. Todo ese movimiento dio paso a la creación de un género musical netamente colombiano que marcó a una generación de amantes de la música que empezaban a enamorarse más del producto nacional y dejando a los proyectos internacionales en segundo plano de importancia. Una de las bandas que lideró el boom del tropipop en Bogotá fue Wamba, un proyecto que nació cuando sus integrantes eran estudiantes de colegio y que los llevó a recorrer gran parte del territorio nacional con su música y proyectos sociales. Para celebrar el decimoquinto aniversario de su creación, la banda decidió hacer público un documental en el que recopilan los momentos más importantes de su historia musical. Este proyecto audiovisual tiene una duración de 26 minutos y en esa casi media hora los integrantes de Wamba cuentan lo que significa la banda para ellos y cómo ha evolucionado el proyecto. En este documental Wamba recuerda cuando fueron ganadores del Premio Shock a Mejor Agrupación de Pop en 2010, un galardón que los ingresó a los libros de la historia musical colombiana. En el video también se resalta la labor social que la banda ha tenido con proyectos infantiles y sociales. Luego de separarse en 2015, la banda anunció un regreso en el marco de la campaña Tropipop Is Back. Desde ese momento han lanzado sencillos por el simple gusto de hacer música sin la presión de ser #1 en la radio o en plataformas digitales. En medio del aislamiento obligatorio para evitar el contagio del coronavirus, Wamba lanzó la versión en casa de Canción del Mes, uno de los temas favoritos de los integrantes de la banda. #LaMúsicaNosUne
En octubre de 2018, apelando a la nostalgia y recordando temas que marcaron la infancia de una generación, hicimos un listado de canciones que deben sonar sí o sí en una rumba casera de fin de semana. El artículo, que incluía varios de los títulos de tropipop que más sonaron en su momento, circuló durante un buen tiempo en Internet a punta de recompartidos y agitó varias fibras emocionales en los usuarios: unos comentaron con demasiada pasión recordando el género y otros le hicieron fuertes críticas. Sin duda, el tropipop fue y sigue siendo un asunto de amores y odios. Meses después, en radio, prensa, redes sociales y hasta en las vallas publicitarias que se alzan sobre las maltrechas calles de Bogotá, vimos el nacimiento de la campaña Tropipop Is Back, apoyada por artistas del género y financiada por Sony Music Colombia y Carlos Vives. Todos tenían el propósito de revivir un género que, aparentemente, estaba en el olvido. ¿Finalmente podemos decir que regresó el tropipop? Foto: Javier Quintana Hablamos con gente involucrada en el mundo del tropipop para tratar de responder si, a fin de cuentas, la campaña tuvo éxito temprano y el tropipop volvió en 2019, o si su impacto se vislumbra para el 2020. Para entrar en contexto: ¿Por qué murió (y ahora resucita) el tropipop? Para Alejandro Jiménez, presidente de Sony Music Colombia, el balance que puede hacer del “regreso del tropipop” es positivo. Según cuenta, se volvió a abrir una conversación en el país sobre la música nacional más allá del reggaetón, que ha sido el rey desde el 2010: “Muchos artistas que habían estado quietos vieron en la campaña una plataforma para mostrar de nuevo su música. La audiencia de Alejandro Gonzalez, artista de la disquera, se triplicó; logró lanzar nuevas canciones y tener colaboraciones importantes para su carrera como Hasta Viejitos con Carlos Vives”. Jiménez cree también que el regreso del tropipop ayudó a que Carlos Vives decidiera relanzar su sello discográfico GML, Gaira Música Local, que tiene como misión firmar artistas nacionales que representen lo que el artista samario considera “el nuevo sonido de Colombia”. Tras su relanzamiento, GML, que cuenta con el apoyo de Sony Music y The Orchard, firmó en 2019 tres nuevos artistas: la banda de Rock Distrito Especial, el dúo Pacific Brother y al cartagenero Esteban Nieto, este último es una fusión entre el pop urbano y el tropipop. En su canción Me Muero Por Tenerte está presente el acordeón, la caja vallenata, la guacharaca, también hay una fuerte presencia del estilo de Carlos Vives, quien fue compositor y productor de la canción. El plan de GML es firmar más proyectos de este estilo en los próximos meses y promocionarlos en todo el territorio nacional por medio de la radio y las plataformas digitales, agrega Alejandro. Pero más allá de los planes de los sellos discográficos, los artistas que hicieron parte del primer boom del tropipop lanzaron música nueva sin pretensiones radiales, para mostrarle al público que los conocen que siguen haciendo música y, de paso, para engordar su catálogo en streaming: Salo abrió una nueva etapa con Wamba y lanzó las canciones Fue por tu amor y Segunda Parte; Mauricio y Palodeagua estrenó un par de sencillos; Tejeiro (exintegrante de Majua) mostró su proyecto en solitario y dio a conocer los temas Si la vieran y Volver a Enamorarte y Gusi, que ha sido de los pocos constantes con la nueva música, estrenó varias pistas que serán incluidas en su próximo álbum de estudio, que verá la luz en el 2020. Samper, Sebastian Yepes, Salo, Mauricio Palodeagua, Gusi y Tejeiero, quienes frenteaban la campaña Tropipop Is Back, se montaron en tarimas multitudinarias como la del Festival de la Leyenda Vallenata en Valledupar y acompañaron a Carlos Vives en los 5 conciertos consecutivos que este ofreció en el Movistar Arena en Bogotá. ¿Qué tiene de bueno o malo tanto tropipop en el Festival Vallenato? En paralelo a ese movimiento, que venía acompañado de una fuerte campaña publicitaria, nombres como Jerau, José Matera de Los de Adentro, Donny Caballero, Quarto Aparte y Tinto, de la mano de la empresa Villalón Entretenimiento, formaron Caribbean Tropipop. Un colectivo integrado por artistas que aparecieron en el marco del auge del género, pero que no tienen sus raíces musicales en Bogotá. Juan Arbeláez, mánager del proyecto en representación de Villalón, afirma que “el tropipop nunca se fue porque los artistas siguieron con sus carreras y su vida musical. Perdió relevancia, porque el reggaetón llegó a opacar todo en la música, pero el género no es una moda, es una expresión de lo que vivimos y sentimos. En este año, 2019, se reafirmó la importancia de esa fusión y ahora cobra vigencia por una cantidad de esfuerzos de varios artistas, aprendiendo que las colaboraciones y el trabajo en equipo puede dar muchos frutos”. Christian Pachón, label manager de la empresa de la distribución digital Believe, cree que el tropipop clásico fue rentable porque sus artistas ofrecieron por cuenta propia muchos conciertos en diferentes ciudades del país y en algunos casos lograron boletería agotada, pero analiza que la música nueva de los artistas no ha tenido un impacto importante entre los consumidores de canciones: “el tropipop tiene muy difícil volver como una tendencia musical porque no están ofreciendo algo fresco, sino que se queda enfrascado en lo que hicieron hace más de diez años”. Precisamente, Believe, es la agregadora que gestiona la música en streaming de TIMØ, una nueva banda de tres estudiantes de música de la Universidad Javeriana que se perfila como la nueva sangre del tropipop y que, en el primer año de su historia musical, ha logrado captar la atención de un público importante, principalmente bogotano. La agrupación es conformada por dos rolos y un cartagenero; todos cantan y todos tocan instrumentos. Además, componen sobre los temas que siempre identificaron al género: la parranda, el despecho con aguardiente y los amores juveniles. “Hace mucho no aparecía en el mapa musical una banda emergente con ese tipo de sonidos y, en cierto modo, estamos refrescando un poco lo que es el tropipop con las canciones que hacemos y con las que vamos a mostrar en el futuro”, agrega Andrés Vásquez, bajista de TIMØ. Este trio ha logrado reconocimiento por la fusión de tropipop con elementos urbanos; es una especie de agrupación masculina similar a Morat, que mezcla pop, rock, vallenato y algo de reggaetón, y que además tiene como gran aliado las redes sociales y la conexión directa con sus seguidores virtuales. A la defensa del tropipop Hay varias cosas que son innegables. El tropipop hizo ruido en 2019 porque tuvo un respaldo gigante de una disquera y de Carlos Vives, que trabajaron de la mano con los artistas que se habían apagado durante un tiempo. En la era del streaming, los intérpretes del género seguirán beneficiándose, sobre todo, de la nostalgia y sus esfuerzos, por ahora, tocaron al público que cultivaron hace casi 15 años; conseguir nuevas audiencias con un sonido que ya tuvo su momento, que consume en masa otro tipo de música y a una velocidad diferente, es otro cuento. El tropipop, de alguna u otra forma, siempre estuvo presente. Pero los nuevos artistas (como TIMØ en Juernes o Nabález en El Viajero) están explorando con nuevos sonidos que lo alejan del ritmo clásico del paru-paparu-paru y lo acercan más a la fiesta moderna, con beats cercanos al reggaetón; algo que podría definirse como tropipop urbano, que viene siendo el híbrido del híbrido y que, a fin de cuentas, ante la emergencia de nuevas formas en el pop, todavía busca campo en una nueva categoría menos amplia y difusa que la de la “fusión de lo tropical con el pop”. Muchos individuos de la industria musical colombiana han hecho un esfuerzo grande para que la gente se reapropie del tropipop y, al parecer, en términos económicos, los resultados son positivos. Pero es casi seguro que el éxito del género no va a volver a repetirse; o por lo menos no con la misma lógica que hace 12 años. No se tratará de una gran camada, sino de ciertos proyectos. Los tropipoperos nostálgicos lo entienden, reconocen que ya no son un fenómeno masivo y que su música ahora va dirigida a un público más específico. Todos los nombres mencionados hasta acá fueron parte de la industria musical por un largo tiempo, han visto cómo esta ha evolucionado y, ahora, casi todos mayores de 30 años, con una mirada más industrial de la música, reconocen que no hay que ser un fenómeno gigantesco para poder encontrar en su trabajo artístico rentabilidad y sostenimiento. Para muchos de ellos la misión del tropipop ahora es poder lanzar sencillos y ofrecer recitales sin la pretensión de ser #1 en los listados, sonar en radio cada media hora o tener multitudinarios conciertos agotados. #LaMúsicaNosUne
Aquí estamos, como de costumbre, con nuevos temitas, pero queremos recordarles que tenemos un especial completo con reseñas de discos colombianos (albumes de estudio y EP) para que conozcan y se empapen de la diversidad musical del país. Quiero saber - TIMØ ¿Quién está detrás? TIMØ es una agrupación colombiana integrada por dos rolos y un costeño que se conocieron en la universidad mientras estudiaban música. Los tres componen, producen e interpretan sus canciones que vienen enmarcadas en el tropipop, un género netamente colombiano que tuvo su furor en la primera década del 2000 y que está buscando volver a meterse en el corazón de las personas en el país. El trio se creó en 2019 y en su primer año han logrado compartir tarima con Carlos Vives y abrir un concierto de Mau y Ricky. ¿A qué suena? Tropipop moderno. Las canciones de TIMØ y, sobre todo, Quiero saber suenan a tropipop, no el mismo de hace 15 años sino uno fresco, con elementos más electrónicos, pero manteniendo la esencia de la fusión del pop, rock y la música tropical. ¿De qué trata? Quiero saber le canta a esos amores que son obvios y evidentes, pero que son difíciles de aceptar. Una canción más romántica y menos parrandera que las anteriores que ha lanzado la agrupación. ¿Sobre el video qué? El clip oficial del nuevo track de TIMØ muestra cómo los tres integrantes de la banda intentan lograr la atención de una chica en un hotel. Además de eso, logra transmitir la buena onda de los chicos, los muestra cómicos, queridos y sencillos. ¿Cuándo escucharla? Añádala a su playlist de tropipop. Es perfecta para escucharla antes de La Mona de Bonka y después de Barman de Sanalejo. Recomendado: Tropipop, la importancia del fenómeno musical colombiano de la decada del 2000 #LaMúsicaNosUne
Drake era uno de los artistas más esperados en el día 2 de Estéreo Picnic 2023 y su presentación dividió. Si bien para algunos fue satisfactorio escuchar algunos de sus mayores hits, que no son pocos, otros consideraron que el tiempo no fue suficiente, una crítica que también hicieron de su participación en Lollapalooza Chile y Argentina. “What am I doing? What am I doing?”, se preguntó Drake en “Over”, de su primer álbum Thank Me Later, publicado en 2010, el mismo año que debutó el Festival Estéreo Picnic en Colombia.Hace trece años, el rapero y el festival soñaban con llegar a donde están hoy. Y cuando el canadiense cantó estas líneas al inicio de su presentación como el acto principal del segundo día del Picnic en Briceño, se sintió como la satisfacción de una promesa cumplida.Sin embargo, esa misma pregunta fue la que me hice durante toda su presentación, que incluyó ese y otros momentos que definieron el rap y el pop de los tiempos recientes: ¿Qué estaba haciendo Drake?A Estéreo Picnic no le han faltado estrellas de todos los géneros y todas las generaciones durante sus trece ediciones. Pero, si le hacemos caso a Billboard, Drake fue EL artista de la década pasada, una máquina bien aceitada de himnos, lamentos y captions de Instagram que todavía surfea una de las olas de éxito más largas de la historia del rap.Por eso su presentación ante miles de personas que lo recibieron con pequeños saltos y tarareos al ritmo de “SICKO MODE” tuvo ese peso simbólico, el de ser la estrella pop definitiva de la misma época en la que el festival nació, creció y se consolidó como uno de los más importantes de América Latina.Aun así, ni en los rapeos —por momentos ahogados, luego incompletos— ni en el espectáculo —el fuego no bastó para suplir su media marcha— demostró su poder total.Desde la tarima, Drake hiló un popurrí de sus principales canciones. La energía triunfal de “Started From The Bottom” y “Energy” le dio paso a “God’s Plan”, con esas línea/meme sobre su amor por su cama que el público cantó de vuelta, e “In My Feelings”. “Hold On, We’re Going Home” demostró su talento en el R&B y con “MIA”, “Controlla” y “One Dance” amplió su rango hacia el reggaetón y otros ritmos caribeños. Iba rápido, como si desde Bogotá le hubiera llegado el espíritu de afán: cortaba las canciones a la mitad y pasaba a la siguiente, sin dejarnos conectar con ninguna imagen.La mejor fue “Knife Talk”, su despliegue de talento más claro de la noche, que no alcanzó a compensar un concierto lánguido, más parecido a un entrenamiento que a un partido oficial. Supongo que por más que sea una estrella global y hecha a partir de lo global, sigue viendo a América Latina como una segunda división del circuito musical, como lo supieron días antes en Chile y Argentina. Ni la bandera, ni su brindis pudieron compensarlo.Con discos como Views (2016), More Life (2017) y Honestly, Nevermind (2022), Drake ha redefinido el diálogo entre el rap y el pop a partir de préstamos —sus detractores tal vez lo acusarían de apropiación cultural— de otras culturas, reflejando así el crisol de Toronto, su ciudad, la raíz que representó la noche del viernes.En distintas ocasiones ha mirado hacia Atlanta y Londres, por ejemplo, para adaptar esas tendencias (¡y hasta los acentos!) a su mundo; así se ha mantenido en la cima, siempre capaz de tirarte un trap, un dembow, un afrobeats o lo que necesites sin sudar mucho.Más sobre el día 2 de Estéreo Picnic aquí.
Todo está carísimo y los conciertos y festivales no son la excepción. Además de la entrada, el transporte, la comida y las bebidas pueden hacer que la cantidad de dinero que gastamos en un evento como Estéreo Picnic 2023 se muchísimo más de lo que quisiéramos. ¿Cuánta plata llevan diaria los asistentes al festival? Esto nos dijeron algunos de ellos. Si bien no hay una cantidad exacta para gastar, la mayoría de los asistentes coincidió en que comida y bebidas son en lo que más solemos gastar en este tipo de eventos, así que la recomendación si no hay mucha plata es, como dijo uno de los entrevistados "llegar comido de la casa". Dentro del festival, las comidas tienen un precio promedio de 40.000, valor que, por supuesto, se puede incrementar, según el restaurante y la especialidad de la comida. En cuanto a los precios de las bebidas, el de la cerveza arranca desde 14.000, así como el de los cocteles sin alcohol. Bebidas como whisky o ron pueden llegar a los 35.000. La botella de agua tiene un costo de 10.000, aunque se pueden traer termos para llenarse dentro del festival. El transporte público tiene un costo de alrededor de 10.000 y el transporte del festival cuesta unos $30.000 con la posibilidad de quedarse en algúuno de los putnos dispuestos en la ciudad.
Actualización: Kali Uchis ratificó que sí se presentará en Estéreo Picnic 2023. Luego de anunciar en una historia de Instagram que no se presentaría, la pereirana ratificó en una nueva publicación su show del 26 de marzo. Kali Uchis anunció que cancela su presentación en el Festival Estéreo Picnic. La pereirana estaba prevista para presentarse el domingo 26 de marzo a las 7:45 en el Escenario Adidas. "Necesito disculparme con mis fans en Colombia que querían verme el día de mañana en el FEP. No me siento bien para realizar mi show. En este momento para mí es muy importante enfocarme en mi salud mental y física. Espero puedan seguir disfrutando del festival con las demás presentaciones además de no poder estar ahí. Los amo y mil gracias de todo corazón por respetar y entender que necesito volver a mi lugar seguro", escribió la artista en una publicación de su cuenta de Instagram. Karly Marina Loaiza, su nombre real, recientemente presentó su álbum titulado Red Moon in Venus. Kali Uchis es una artista criada en Virginia, Estados Unidos y Pereira, Colombia. Su música mezcla el jazz, el funk, el trap, el R&B y reggaetón.Kali thabía anunciado que ofrecerá una gira de 20 fechas por Estados Unidos con el apoyo de RAYE como acto de apertura. Kali Uchis coloreó el gueto. Ella sola, sin inversionistas, ni asesores de imagen, ni un equipo de producción de diez personas de los que se usan ahora para escribir un coro, se alzó como una de las figuras más preciadas por el mainstream y como icono del estilo.Desde que publicó su primer EP en 2015, Por vida, Kali ha llamado la atención por donde pasa. Mucho se ha dicho ya de sus colaboraciones con otras figuras de renombre como Snoop Dogg, Gorillaz, Drake, Major Lazer, Jorja Smith, Tyler, The Creator o Kaytranada.Su primer álbum en español fue Sin Miedo, un disco que empezó muy suave en el mercado, pero que después se volvió uno de los más importantes de los últimos años gracias al boom del sencillo Telepatía.
“What am I doing? What am I doing?”, se preguntó Drake en “Over”, de su primer álbum Thank Me Later, publicado en 2010, el mismo año que debutó el Festival Estéreo Picnic en Colombia. Hace trece años, el rapero y el festival soñaban con llegar a donde están hoy. Y cuando el canadiense cantó estas líneas al inicio de su presentación como el acto principal del segundo día del Picnic en Briceño, se sintió como la satisfacción de una promesa cumplida. Sin embargo, esa misma pregunta fue la que me hice durante toda su presentación, que incluyó ese y otros momentos que definieron el rap y el pop de los tiempos recientes: ¿Qué estaba haciendo Drake?A Estéreo Picnic no le han faltado estrellas de todos los géneros y todas las generaciones durante sus trece ediciones. Pero, si le hacemos caso a Billboard, Drake fue EL artista de la década pasada, una máquina bien aceitada de himnos, lamentos y captions de Instagram que todavía surfea una de las olas de éxito más largas de la historia del rap. Por eso su presentación ante miles de personas que lo recibieron con pequeños saltos y tarareos al ritmo de “SICKO MODE” tuvo ese peso simbólico, el de ser la estrella pop definitiva de la misma época en la que el festival nació, creció y se consolidó como uno de los más importantes de América Latina. Aun así, ni en los rapeos —por momentos ahogados, luego incompletos— ni en el espectáculo —el fuego no bastó para suplir su media marcha— demostró su poder total.Desde la tarima, Drake hiló un popurrí de sus principales canciones. La energía triunfal de “Started From The Bottom” y “Energy” le dio paso a “God’s Plan”, con esas línea/meme sobre su amor por su cama que el público cantó de vuelta, e “In My Feelings”. “Hold On, We’re Going Home” demostró su talento en el R&B y con “MIA”, “Controlla” y “One Dance” amplió su rango hacia el reggaetón y otros ritmos caribeños. Iba rápido, como si desde Bogotá le hubiera llegado el espíritu de afán: cortaba las canciones a la mitad y pasaba a la siguiente, sin dejarnos conectar con ninguna imagen. La mejor fue “Knife Talk”, su despliegue de talento más claro de la noche, que no alcanzó a compensar un concierto lánguido, más parecido a un entrenamiento que a un partido oficial. Supongo que por más que sea una estrella global y hecha a partir de lo global, sigue viendo a América Latina como una segunda división del circuito musical, como lo supieron días antes en Chile y Argentina. Ni la bandera, ni su brindis pudieron compensarlo.Con discos como Views (2016), More Life (2017) y Honestly, Nevermind (2022), Drake ha redefinido el diálogo entre el rap y el pop a partir de préstamos —sus detractores tal vez lo acusarían de apropiación cultural— de otras culturas, reflejando así el crisol de Toronto, su ciudad, la raíz que representó la noche del viernes. En distintas ocasiones ha mirado hacia Atlanta y Londres, por ejemplo, para adaptar esas tendencias (¡y hasta los acentos!) a su mundo; así se ha mantenido en la cima, siempre capaz de tirarte un trap, un dembow, un afrobeats o lo que necesites sin sudar mucho. Si le preguntáramos a Rosalía, que antecedió su concierto y que también ha sido acusada de apropiación cultural, intuyo que admitiría a Drake como una de sus influencias a la hora de navegar estilos y colores para edificar un universo propio. Lo llamó su hermano y su amigo, y recomendó que fuéramos a verlo, su único descache en toda la noche. De resto, el de ella fue un concierto perfecto, una amalgama que demostró lo infinito de la música.La cantante catalana, en el día que lanzó RR con su amor Raw Alejandro, dio el disparo de salida con las texturas metálicas de MOTOMAMI a través de cortes de reggaetón de vanguardia como “SAOKO” y “BIZCOCHITO” y la bachata de “LA FAMA”, para luego abrirle espacio a El Mal Querer, su ópera flamenca de 2018, con “DE AQUÍ NO SALES”. Desde ahí exhibió los golpes más contundentes de una carrera profunda, aunque corta: creó un ambiente íntimo con “HENTAI” al piano, sembró nostalgia en Briceño con “PIENSO EN TU MIRÁ” y rememoró sus primeros pasos en el perreo con “Con Altura”. El aura cyberpunk de MOTOMAMI determinó la estética del espectáculo: las cámaras se desplazaban vertiginosamente y lo virtual se fundió con lo real. Tan real como que estábamos todos ahí, algo mojados y con los pies embarrados, apreciando a una gran artista y disfrutando de cómo ella, con su concentración y dedicación, nos apreciaba de vuelta.El final de “CUUUUuuuuuute” fue contundente en todo su caos y fulgor, en su concepto y ejecución. Este fue un concierto lleno de ideas, con una línea editorial definida. La presentación de Rosalía, con su experimentación policromática que funde la tradición, el presente y el porvenir, me recordó a la de C Tangana, la mejor del año pasado por su visión. Casualmente, el de Drake me pareció un calco del de J Balvin. Qué importantes estas cuatro exhibiciones para recordarnos todo lo que cabe en la idea de un concierto, para subir la vara de lo que las principales estrellas de la música presentan en vivo, así como para desnudar la pereza de algunas de esas estrellas a la hora de encabezar un festival.Finalmente, pienso en Rosalía, en la misma línea que propuso C Tangana el año pasado, una reimaginación de qué es ser una estrella pop con música en español. El idioma nos acerca y su conversación con lo latino, curiosa y atrevida, nos acerca aún más. Y si esta música, de contrabando de influencias y culturas, se corresponde con una puesta en escena diez de diez, solo queda aplaudir y observar con atención. Los tiempos están cambiando y, en dos ediciones consecutivas de Estéreo Picnic, lo tuvimos al frente.Lean también | Estéreo Picnic 2023 Día 1: lecciones para sobrellevar la ausencia
El Festival Estéreo Picnic 2023 continúa y para el día 3 el cartel incluye a nombres que van desde The Chemical Brothers a Alci Acosta, pasando por Wu-Tang Clan, Armin Van Buren, Moderat, entre otros. Desde las 2:15 de la tarde empezará a sonar la música en las seis distintas tarimas ubicadas alrededor del Campo de golf de Briceño el día sábado 25 de marzo. Escenario principal3:00PM: Semblanzas del río Guapi4:30: Elkin Robinson 6:15PM L' Impératrice8:30 PM Bizarrap11:15PM The Chemical Brothers Escenario Adidas2:15PM Flor de Jamaica3:45PM La Perla5:15PM Alci Acosta 7:15PM Trueno9:15PM Wu-Tang Clan01:00AM Armin Van BurenEscenario del Banco2:15PM Mugre Sur3:45PM Junior Zamora5:45PM Dawer X Damper7:30 PM Alex Ferreira 9:45PM Gorgon City02:00AM ModeratEscenario Flaming Hot3:00PM Felipe Orjuela4:30PM Santiago Navas6:15PM No Rules Clan20:45 Frente cumbiero01:00 Ryan CastroRecuerden que hay dos lugares de música más: el Club donde hay pura música electrónica, el Templo con reggaetón al piso y el show especial de Fuerza Bruta que se presenta cuatro veces al día.Preparen sus rutas de baile, guarden esta información y lleguen temprano para vivir algo imposible de olvidar.Toda la información de horarios, tarimas y ubicación la pueden encontrar en Shock.co o en los canales oficiales de Estéreo Picnic.¿Quién es Wu-Tang Clan?Wu-Tang Clan, el colectivo de Staten Island, Nueva York, cambió el rap con su debut en 1993. Su huella se extiende hasta hoy y es una de las agrupaciones más importantes del hip hop. ¿Quiénes son The Chemical Brothers?El dúo presenta una una experiencia que busca trascender los sentidos haciendo uso de un performance, algo que The Chemical Brothers sabe muy bien cómo hacer.De ahí que sea tan emocionante su live act después del show que trajeron al país en 2015. Esa noche, en Corferias, vimos una puesta en escena que iba más allá de los juegos visuales. La experiencia fue sensorial e hipnótica.