¿A cuántas de ustedes las señalaron de locas por expresarse de una forma que no les gustó a sus ex parejas o a las personas con las que compartían en ese momento? Tal vez porque actuaron o tuvieron una actitud políticamente incorrecta ante un asunto, o simplemente las hicieron creer que lo que estaban sintiendo o diciendo era exagerado. ¿A qué edad se dieron cuenta que la palabra “loca” no significa más que “estamos invalidando de manera muy sutil cualquier cosa que quiera expresar”? Para de paso seguir manteniendo ese concepto de que el hombre es el único ser racional. Por: Johana Arroyave @JohanaArroyave Y no, no estamos exagerando. Cuando alguien usa la palabra loca para referirse a una mujer se sigue perpetuando en un colectivo la idea de que somos el sexo irracional y que la mayoría de las cosas que hacemos o decimos son solo producto de nuestras emociones, hormonas o inclusive videos mentales que nos armamos sin justificación. Además de ocasionar que continuemos bajo una doctrina creada en el siglo XIX durante la era victoriana en la que se les encerraba en un cuarto aislado a aquellas mujeres que mostraban algún tipo de rebeldía, cansancio, fatiga o comportamiento que vulnerara con la libertad del hombre. Según explica el libro Inconvenient People de Sara Wise, en donde se relata la vida de los victorianos, durante esa época una mujer no podía tener comentarios incontrolables, un estado de ánimo extremo o períodos de confusión, causados por un matrimonio infeliz, una enfermedad o la vejez porque lo más probable es que fuera llevada al psicólogo y luego encerrada tras un diagnostico simple: está loca. Y como los casos de mujeres que terminaban en el psicólogo por alguna acusación de esas se hizo cada vez mayor (la realidad era que eran infelices con sus parejas y con la dictadura en la que vivían) los médicos de la época decidieron investigar qué era lo que estaba pasando y se inventaron, literalmente, una enfermedad llamada histeria, el término vino los griegos (palabra exacta: hystera que significaba útero – matriz). Así las cosas, diagnosticaban a las mujeres como histéricas cuando llegaban al psicólogo con síntomas que incluían desfallecimientos, insomnio, retención de fluidos, pesadez abdominal, espasmos musculares, respiración entrecortada, irritabilidad, fuertes dolores de cabeza y pérdida de apetito. Sin embargo, a principios de los 50 la Asociación americana de psiquiatría declaró que la histeria no era una enfermedad. Ya no son enfermedades: Hablemos de histeria, homosexualidad y transexualidad Pero tranquilas que algo bueno salió de ahí: las pacientes diagnosticadas con histeria femenina debían recibir un tratamiento al que llamaron “masaje pélvico” que en realidad no era más que la estimulación manual de los genitales de la mujer por el doctor hasta lograr que llegara al orgasmo, palabras más sencillas: masturbarlas. Como la práctica se hizo más común y las consultas para el “tratamiento” eran cada vez más frecuentes, en 1870 el doctor británico Joseph Mortimer Granville, cansado de masturbar manualmente a sus pacientes, patentó el primer vibrador electro-mecánico con forma fálica con el que se comprobó que una paciente podía llegar al climax del masaje en menos de diez minutos. Y así nacieron los consoladores. Sin embargo, esta no fue la solución para que la “locura femenina” parara, en la sociedad se implantó la idea de que las mujeres eran mucho más propensas a expresar sus “necesidades” a través de emociones y que en realidad vivían su humor dependiendo de las hormonas del momento. Allí también surgió la falsa creencia de que los hombres no tenían sentimientos y que su cerebro funcionaba de manera netamente racional. De hecho, esa carga que se les dio y en la que los convierten en seres “vulnerables” si se expresan de forma incorrecta (socialmente), ha repercutido en que las cifras de suicidios en hombres sean mayores a las de mujeres. De cada una mujer que se suicida tres hombres deciden quitarse la vida, cifras de la Fundación de Asistencia Nacional para la Ayuda al Enfermo de Depresión (ANAED). Pero por lo menos se hacen pinitos para cambiar esta falacia, Jed Diamond director de Men Alive (institución dedicada a tratar problemas de depresión en hombres) en su libro The Irritable Male habla sobre la forma en las que las hormonas también afectan a los hombres de una manera que se creía exclusiva de las mujeres. Inclusive que pueden sufrir trastornos de depresión, fatiga, irritabilidad, ansiedad y enojo. “Los hombres también son hormonales y no deberían negarlo. Al contrario, aceptarlo y estudiarlo es necesario para mejorar su calidad de vida”. Diamond. Pero a pesar de los estudios, se sigue mantenido la idea de que solo la mujer es capaz de ver todo a su alrededor de una manera emocional y por lo tanto invalida. Hasta en contexto judiciales, Jessica M. Salerno y Liana C. Peter Hagene, investigadoras del Departamento de Ciencias Sociales y del Comportamiento de la Universidad Estatal de Arizona, realizaron un estudio para comprobar cómo afecta el enojo masculino y femenino en una investigación legal. Decidieron enfrentar los veredictos de hombres y mujeres de un jurado en una corte de Estados Unidos, cuando un hombre del jurado se enojaba por no estar de acuerdo con la sentencia de los demás, el resto del equipo reconsideraba su opinión. Pero si era una mujer quien se quejaba no la tomaban en cuenta. ¿Entonces hasta cuándo seguirán invalidando nuestra opinión? Y ojo que esto se ve muchísimo más en relaciones afectivas. Existe un fenómeno conocido como gaslighting que consiste en afirmar que las emociones que expresa la otra persona son exageradas o falsas y por ello no merecen ser escuchadas. Gaslighting es un patrón de abuso emocional en la que la víctima es manipulada para que llegue a dudar de su propia percepción, juicio o memoria. Esto hace que la persona se sienta ansiosa, confundida o incluso depresiva. Así las cosas, frases como "no seas tan sensible”, “era un chiste", “¿estás en tus días?”. Pueden convertirse en un juego de persuasión en el que terminamos creyendo que todo lo que nos hace sentir mal es solo un error de percepción y que además nos obliguemos a ocultar nuestras emociones por miedo a que no nos tomen en serio o por miedo a que nos digan que estamos locas. Y saben, generalmente – salvo en muy pocas situaciones- los hombres que se refieren a su ex como “la loca” no están hablando de una mujer que tenga un trastorno mental diagnosticado, están refiriéndose a una persona que tuvo una actitud con la que no estuvieron de acuerdo o simplemente alguien con emociones que no pudieron entender. ¿Y ya que somos maduros y entendemos que los sentimientos son personales? Qué tal si nos ponemos en la tarea de dejar de menospreciar lo que quieren expresar las mujeres escondiéndolo bajo la fachada de “está loca”.
Vivimos en una sociedad en la que nos ensañaron 24/7 a insultarnos, pelearnos y criticarnos por el simple hecho de ser mujeres. Nos dijeron cuántos kilos tenemos que pesar para ser “lindas”. Para quedar bien socialmente nos “enseñaron” cómo hablar, cómo sentarnos y hasta crearon un manual de urbanidad en el que las mujeres tuvimos mucho protagonismo, cómo debíamos actuar en público, cómo cruzar la pierna y hasta la manera “correcta” de esconder los codos en la mesa a la hora de cenar. Nos jodieron por todo lado. Por Johana Arroyave / @JohanaArroyave *Artículo ganador en la categoría Opinión del Premio nacional de periodismo digital del Festival de los Sentidos & Kienyke 2019 Nos han juzgado de todas las maneras que han querido, nos han acusado de provocar que nos violen y nos han confundido con frases moralistas como “es una perra por acostarse con tantos”, “es una mojigata por no darlo”. Nunca la sociedad ha estado conforme o de acuerdo respecto a nuestras acciones; lo prueban estos 5 documentales para entender cómo jodimos a la mujer. Estamos acabando el 2018, un año en el que por fin mujeres del mundo se atrevieron a denunciar violadores, en el que nos paramos para decir #NiUnaMás, exigimos ser libres con nuestros cuerpos y decisiones y poder abortar legalmente, se crearon campañas por el amor propio y las cirugías plásticas y/o estéticas bajaron en un 5% según la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (Isaps). Al parecer eso de aceptarnos tal como somos estaba dejando de ser una frase de superación personal y metiéndose en el cerebro realmente. Por fin parecía que avanzábamos y no estando solas, no peleando la una contra la otra sino juntas. Como tiene que ser. Y cuando creíamos que ya lo habíamos visto todo, que ya nada nos podía joder, que solo era cuestión de aguantar y seguir en la lucha… tenga. Aparece una “influenciadora” llamada Andrea Marmolejo y una serie de personajes apoyando que usara su voz en un video con pensamientos de “lecciones de vida sobre cómo ser ‘mejor’ mujer”. El nombre original del video en YouTube, Cómo no ser una guisa, contiene seis minutos seguidos de conductas que según ella nos hacen “menos atractivas”, “guisas” (palabra que se usa para menospreciar a otra persona) y con tips de cómo ser una “dama”. No vamos a compartir el video por obvias razones. Pero sí me genera muchas dudas lo de “ser una dama” ¿Qué es ser una dama? ¿Según quién somos una dama? ¿Ante quién? Pero sobre todo, ¿para qué queremos ser una “dama”? ¿Nos sentimos tan poco cómodas con el concepto de mujer como para tener que cambiarlo por una palabra que según la RAE es “noble o distinguida”? Hay mucha gente distinguida por ser ladrones, asesinos y todo lo que está mal en la vida. Entonces no creo que eso sea lo que realmente importe. Por otro lado, ¿en qué parte de la Constitución, la Biblia o la vida metieron como regla básica que saludar de “holi”, comer Bom Bom Bun en una fiesta y tinturarse el pelo de rubio nos hacía menos atractivas? Y vuelve y juega ¿atractivas para quién? ¿No se supone que lo realmente importante es vestirnos, actuar y sentirnos bien con lo que vemos en el espejo? Es decir, ¡ser nosotras mismas! ¿Y saben qué es lo peor? Que estamos más jodidas aún si en vez de cambiar esos pensamientos nos escudamos en el “todos lo piensan, pero por fin alguien se atrevió a decirlo”. No, ya estuvo bien de normalizar este tipo de conductas en las que se tiran insultos entre mujeres, se alaba la superioridad moral y el atrevimiento de decirle a alguien que es menos que otro solo porque actúa, se viste o quiere ser diferente. Acá el punto no es “yo pienso así y vale verga el mundo”. Ya entendimos que es imposible cambiar el pensamiento a quienes creen que esa es la verdad de las cosas, pero sí es posible que ustedes allá en casa reflexionen sobre qué tipo de contenidos están compartiendo y alabando. Y se atrevan a denunciar este tipo de violencias, sí violencias, porque estas cosas se prestan para atacarnos como mujeres en algún momento. Decirle "fea" a otra chica no las hace más bonitas, decirle "gorda" y criticarla no va a hacer que ustedes adelgacen o tonifiquen la panza más rápido y decirle "bruta" no les amplía el coeficiente intelectual. A ver si algún día por fin nos queda claro que no somos nuestras propias enemigas. Y de verdad niñas, dejen de comer cuento de que por un tono de piel se puede definir cuál debería ser su color de pelo. Si quieren tener un arco iris en la cabeza y así se sienten bien, háganlo. Si quieren mostrar el trasero, poner una frase de superación y se sienten bien haciéndolo, es su decisión. Si quieren gritar al mundo entero un saludo de "holi" está bien así. Vivan por ustedes, no por alguien que cree ser superior para “juzgar” una conducta. Y por último y como dato curioso: ese pantalón sin bolsillos que tanto atacan y critican, genera en un mes más dinero de lo que otra prenda pueda hacer en un año, además de que produce en el mundo de la moda la mitad del PIB (producto interno bruto del país). Si quieren leer más información valiosa sobre esta prenda y cómo dejar de estigmatizarla pásense por el blog de Daniela Styling, van a entender muchas cosas. Que de año nuevo todos se pongan como propósito dejar de normalizar conductas que nos atacan y nos violentan.
Luego de asistir a numerosas fiestas electrónicas en el país, un grupo de jóvenes identificó un mismo problema en todas: los espacios para las mujeres eran mínimos. Así nació el colectivo Pez Alado. Luisa Fernanda Uribe, hace parte de él y nos contó cuáles son las dificultades de la escena y cómo están intentando hacer de esta un lugar más feminista. Por Silvia Juliana Suárez // @silviajulianaa ¿Cuáles son los obstáculos con los que se encuentran las mujeres en la escena electrónica? En esta escena no solo hay un desconocimiento del papel de las mujeres en toda la historia de este tipo de música, sino que encima hay una exclusión deliberada. Es decir, a las mujeres se les excluye de los espacios de la fiesta porque llama más un DJ hombre porque tiene una trayectoria más fuerte. Este es un tipo de música que paradójicamente empezó visibilizando mujeres, cuerpos feminizados, comunidad LGBT, y a lo largo de los años se ha consolidado como un espacio super masculino. También hay inconvenientes en la misma producción de los eventos. En estas fiestas, por el consumo de drogas y que son fiestas de 12 horas hay mucha violencia contra las asistentes, hay acoso. Es normal ver en una fiesta que cuando una chica se esta sintiendo incómoda no tiene a quien recurrir, porque a los tipos del staff no les importa, no tienen una perspectiva amable por decir lo mínimo. Los lugares tampoco tienen cuidado por lo menos en la simple organización de los espacios, la ubicación de los baños, las salidas de emergencia, dónde esta la gente de logística. No hay intención de reconocer que las mujeres estamos en una situación de vulnerabilidad en medio de esos espacios de entretenimiento y digamos intentar solucionarlos. ¿Cómo ha trabajado Pez Alado para mejorar los espacios para mujeres en la escena electrónica? Nosotras tenemos una iniciativa que se llama el Radar Feminista, que se trata de escribir sobre los espacios de fiesta a los que vamos y donde podemos identificar este tipo de problemas. La primera experiencia del Radar fue en Medellín, donde nos llevamos la grata sorpresa de que el bar donde era la fiesta, por lo menos, ha intentado solucionar el tema. Las manillas con las que uno entraba decían que se debía respetar a las mujeres en la pista de baile, había mujeres dentro del staff que varias veces nos preguntaron a mis amigas y a mi cómo estábamos. También pudimos hablar con DJs y socios del bar que recibieron muy bien lo que estábamos haciendo. ¿Recuerdas alguna anécdota o algún momento en el que hayas visto que la situación no fue tan buena como esa en Medellín? Yo estaba con unos amigos en una fiesta y vi que una chica estaba sola y estaba como a punto de caerse. Le preguntamos si quería agua y ella dijo que no, obvio desconfiada de que unos desconocidos le hablaran. Entonces pedimos ayuda a la gente del staff del evento. La primera vez se acercó un tipo y le preguntó si estaba bien, ella le dijo que sí y él se fue. Pero nosotros veíamos que ella seguía mal y además estaba sola, le dijimos a la gente de staff y lo que hicieron fue cuatro hombres intentar sacarla a la fuerza porque ella estaba como cayéndose, ella no se dejó. Lo que vimos después fue que ella como que se recompuso y salió sola. Ese momento a mí me hizo pensar mucho en cómo no hay una garantía de absolutamente nada, porque en esos eventos ni siquiera hay una alianza con empresas de transporte. No digo que los organizadores del evento se tengan que hacer responsables de entregarla en la puerta de su casa, pero sí pudieron haber tenido un acercamiento completamente diferente a esa situación. Ese momento me pareció grave. Acá en Bogotá no hay ayudas reales hacia las mujeres en las fiestas. En general, siento que es como una ridiculización cuando una mujer está preocupada y se acerca a alguien de logística. Siempre se asume que es que la mujer está borracha o que consumió alguna droga o que está haciendo show. Eso para mí es una constante. ¿Por qué crees que es importante politizar la fiesta? Porque la fiesta nunca ha sido solo fiesta. En particular la música electrónica en muchos contextos ha tenido una fuerza muy grande, ya que ha tenido espacios en los que las comunidades excluidas han podido reunirse y crear agendas políticas por fuera de lo que se conoce como política institucional. Eso es muy importante retomarlo y hacerlo mucho más fuerte desde la política colombiana. La apuesta de Pez Alado, más que desde la perspectiva de DJs y productoras es una apuesta desde el público, para que nosotras como asistentes tengamos también una voz en los espacios nocturnos. Nosotras no somos sujetos pasivos que no ven lo que está pasando, no ven las dinámicas que se reproducen y no quieren transformarla. Por eso es importante para nosotras politizar la fiesta. Aquí hay una trayectoria bien fuerte en movimientos sociales y en movimientos con enfoque de género, que queremos rescatar. La fiesta no puede ser ir a darse en la cabeza 12 horas y que no importe nada más. También debe bajársele a la elitización de estos espacios en este país, que claramente son de clase media alta y podrían tener una propuesta diferente. ¿Crees que quienes hacen parte de la escena electrónica podrían estar de acuerdo con ustedes? Esta no es la posición de Pez Alado, sino la mía. Yo creo que la gente es muy poco receptiva a este tipo de cosas, porque es lo que suele suceder con las apuestas feministas en cualquier tipo de público: que esto es ganas de joder y ya. Pero al mismo tiempo creo que hay muchas mujeres asistentes a estos espacios que sí se han dado cuenta que esto es algo que está pasando y que si lo hablamos las cosas van a cambiar. Hay gente que asume que como solo hay una mujer en todo el cartel significa que las mujeres no tienen talento para producir este tipo de música. Eso no es así. Sí hay mucho interés de sectores de la fiesta, pero hay otros que son muy reticentes porque esto revela estructuras desiguales y machistas sobre las que se ha construido la escena electrónica en el país. Obviamente hay gente a la que no le conviene que se hable de eso.
A estas alturas del año ya han corrido casi que el 100% de festivales que se realizan durante el año y es bueno que como retroalimentación revisemos los porcentajes de participación de mujeres en ellos en la parte artística, sin contar mujeres en la producción de estos eventos. Por: Jennifer Daniela Chavarro Trujillo* @SoyMiroslawa de Todopoderosa @todopoderosx Si pensamos en movimientos importantes de mujeres, es inevitable reconstruir aquellos años 90 cuando el Riotgrrrl estalló. Activismo y música se entremezclaron para darles a las chicas espacios en los cuales podían hablar y escenarios para cantar. La frase de Bikini Kill, una de las tantas agrupaciones emblemáticas de aquel entonces, “All girls to the front, i’m not kidding” (“todas las chicas al frente, no estoy bromeando”), se convirtió en un grito de denuncia. Pero no todo es tan bueno ni tan bello. No son los 90 y esto no es Estados Unidos. Colombia, en general América Latina, sigue siendo un territorio donde el machismo está muy latente en el pensamiento cultural de las sociedades. Este, no solo se ve reflejado en la violencia sexual o física, sino que se ve extendido en todos los campos donde hay actores sociales. Indiscutiblemente el arte, y en esta ocasión la música es uno de ellos. Los festivales, uno de los puntos donde convergen diferentes géneros, muchas bandas y depende del evento, gran o poco público, también ha sido un reflejo de esta invisibilización del lado “femenino” de la música, a veces incluso de forma inconsciente. Es importante que reivindiquemos y re-evaluemos estos espacios, para que todos, tanto hombres como mujeres y no binarios quepamos en un lugar más que de incluyente, igualitario, porque es un espacio merecido. La música es de todos. Para el 2018, ya han corrido casi que el 100% de festivales que se realizan durante el año y es bueno que como retroalimentación revisemos los porcentajes de participación, solo y únicamente en la parte artística, sin contar las mujeres que trabajan en la producción de estos eventos. Empecemos con la masa grande, los ya consolidados y gratuitos “Al Parque”. Rock al Parque es el más grande de esta camada, sin embargo ha pasado por altos y bajos en su política de igualdad. Recordemos cuando decidieron abrir la tarima de mujeres, cosa que si bien fue un intento por cerrar la brecha de género lo único que logró fue abrirla más, ya que la revictimización, el darle exclusividad al género, tampoco es el punto al que debemos llegar. En el 2018, el tercer día del festival el escenario Eco se convirtió en el Escenario Femenino. Aún así, para ser uno de los festivales más grandes, su porcentaje sigue siendo muy bajo. Este 2018 el promedio estuvo entre el 18 y el 20% de participación femenina, con un punto importante y especial: la inclusión de la primera mujer transgénero a los escenarios, histórico momento que compartieron aquellos que vivieron a Linikier e os Caramelows en vivo. Vea también: 7 conclusiones finales sobre Rock al Parque 2018 Para Hip Hop al Parque el porcentaje también fue muy bajo, solo hubo 16% de participación femenina. Salsa al Parque, por otro lado, cuenta con uno bastante alto, claro está, teniendo en cuenta que las agrupaciones son muy pocas en comparación con los otros eventos, de 16, nueve son de mujeres, un 56%. Jazz al Parque vendría siendo una excepción puntual porque esta edición estuvo dedicada a las mujeres, sin embargo tuvo un porcentaje muy bien balanceado del 55%. En comparación con Rock al Parque tenemos Altavoz que se realiza en Medellín; este se lleva el peor porcentaje en los gratuitos de gran asistencia con un muy bajo 12%, teniendo en todo el festival seis bandas de 50. El Festival Centro, evento distrital que no se atiene a ningún género y que es a diferencia de los Al Parque, pago, aunque no en su totalidad, posee un 35% de participación femenina. Los festivales pagos de gran asistencia están así: Festival Estéreo Picnic alcanza el 20%, el Breakfest 31% como los más altos, y en contraparte el de la Hamburguesería que solo tiene 15% al igual que Día de Rock Colombia y el Cosquín Rock, que es el más bajo, registró con un 7%. Entre los Al Parque tenemos también a Colombia al Parque, pero este al igual que el Festival Petronio Álvarez poseen una característica particular por la cual están separados de los demás: una gran participación femenina con un problema secundario, y es el rol que cumplen estas mujeres dentro de las músicas tradicionales. Vemos cantaoras en la música del Pacífico pero, ¿cuántas de ellas están siendo tamboreras? ¿Cuántas tocando gaita macho? Aquí los porcentajes a cambiar son distintos, no enfocados en la participación sino en la reinterpretación de los papeles que se supone que deben cumplir en el imaginario cultural dentro de estas músicas. Aparte de estos escenarios llenos de bandas que llaman a grandes masas, tenemos aquellos de la “escena independiente” que no tienen el mismo número de asistentes, pero ya poseen un público medianamente consolidado de oyentes curiosos y agrupaciones nuevas. Aquí hay unos porcentajes más alentadores, como el Hermoso Ruido con una participación de 40%, e incluso espacios alternativos donde los festivales están enteramente compuestos por una cuota femenina como el Sonora, el Totona o el Riotgrrrl Fest. Estos porcentajes dan un panorama general e invitan a la reflexión del consumo de la música que escuchan los asistentes. También es una invitación a productoras y personas dedicadas al booking, a que generen espacios donde todos seamos permitidos de la misma manera, dándole más valor y atención a la hora de la programación. Las mujeres no deben estar en los carteles porque son mujeres, sino porque son buenas y merecen estos escenarios. *Jennifer es la fundadora y redactora de Nonserviam Blog, plataforma dedicada a la difusión de música y literatura con enfoque en América Latina y estudios de género específicamente dedicados a las mujeres en la industria del espectáculo. Redactora ocasional en Crónicas del Melómano y La Musique. Miembro del street team de Biche, del Colectivo Feminista 25 de Noviembre y del ecosistema de circulación Todopoderosa.
Y cuando creímos que el mundo no podía ser más estúpido llega una mujer a decir que la ropa interior sexy es un incentivo de violación… Durante un juicio de violación en la ciudad de Cork, una abogada utilizó como defensa el hecho de que una joven de 17 años usara una tanga. La defensora argumentó que la ropa interior de la mujer era demasiado "provocativa” y por esto el hombre no había podido aguantar las ganas sexuales y decidió violarla. Tras el escándalo porque el hombre fue absuelto de su delito, una parlamentaria irlandesa, Ruth Coppinger en pleno debate enseñó una braga para protestar por la culpabilización de las mujeres por su vestimenta en los casos de agresiones sexuales. La protesta de Coppinger se hizo viral en redes sociales, donde cientos de mujeres están colgando fotografías de sus tangas y bragas. "La lencería femenina no debe ser motivo para justificar una violación", es la consigna de muchas mujeres en el mundo.
Algunos medios la han descrito como la "Missy Elliot" sueca y otros como la reina del D.I.Y. Ella es Ana Rab, conocida como Gnucci: rapera, cantante, productora y directora, famosa por su aproximación performática y autogestionada a la música y al espectáculo. Aunque viene de Suecia, nació en la antigua Yugoslavia, y su propuesta refleja esa mezcla social y cultural de su origen. Su sonido es una fusión potente de hip hop, trance y house noventeros, dancehall y pop. Se presenta en Bogotá, como parte de la inauguración de la Feria Odeón, el próximo 25 de octubre. "Mi show será ruidoso, vivo, tierno, raro y femenino y "dale a tu cuerpo alegría". Me gusta mucho la idea de que todo el mundo pase un buen rato junto, pero que sienta que individualmente es parte fundamental de lo que está sucediendo", nos cuenta.
En las películas de terror abundan las mujeres. Chicas virginales que huyen del asesino con cuchillo, vampiresas sensuales, brujas astutas, adolescentes que son torturadas, madres atormentadas por demonios y heroínas tipo Ellen Ripley de Alien. Pero detrás de cámaras -así como en casi todos los géneros del cine- lo que abundan son los manes. Un estudio de Celluloid Ceiling demostró que de las películas gringas que salieron en 2017, solo un 11% fueron dirigidas por mujeres. Por Juliana Abaúnza // @JulianaAbaunza Por eso quiero celebrar estas cuatro películas hechas por cuatro directoras interesantes. Estas no son recomendaciones porque sí; no es que estas películas sean buenas solo porque fueron dirigidas por mujeres. Son buenas porque tienen un punto de vista diferente, una forma de abordar el terror y el suspenso desde ángulos inesperados. Así que si no soportan una Saw o una Actividad Paranormal más, esta es una invitación a asustarse de una forma diferente este Halloween. 1. A Girl Walks Home Alone at Night (2014) Directora: Ana Lily Amirpour Esta película independiente es difícil de clasificar. Filmada en blanco y negro, con muy pocos diálogos, es al mismo tiempo una película de vampiros, un romance y una historia feminista. En A Girl Walks Home Alone At Night, una vampiresa que ama el indie-rock y que monta tabla, acecha las calles de su pueblo en Irán y sus víctimas son hombres que cometen violencia contra las mujeres. La directora inglesa Ana Lily Amirpour describió a su película como una mezcla entre Sergio Leone, David Lynch y Nosferatu. Más que de sustos de esos que les hagan brincar de la silla, esta película es más de tensión y de preguntarse “¿qué carajos está pasando?”. Amirpour usa esta historia de vampiros para explorar temas como la soledad, la falta de emociones y la magia que ocurre cuando te conectas con alguien, por más corto que sea. 2. The Babadook (2014) Directora: Jennifer Kent La directora australiana Jennifer Kent escribió esta historia sobre una madre viuda que tiene dificultades para criar a su bullicioso e insoportable hijo sola (en serio, después de verla van a quedar con dolor de cabeza y con la seguridad de no querer tener hijos). Todo empeora cuando el Babadook, el monstruo de un libro para niños, sale de las páginas para atormentarlos. El director de El exorcista, William Friedkin, dijo que nunca había visto una película más aterradora que The Babadook. Pero esta no es una historia de monstruos común y corriente. En The Babadook no hay chorros de sangre ni gore; en cambio, Kent usa las técnicas del terror para contar una drama familiar sobre la depresión después de la pérdida de un ser querido y sobre miedos muy humanos como el de ser una mala madre. 3. The Invitation Directora: Karyn Kusama Will, el protagonista de The Invitation, acepta la invitación de su ex esposa para ir a cenar en su casa. Se supone que será una reunión normal de amigos, pero Will se pone paranoico y no puede dejar de sentir que su ex y su nuevo esposo están planeando algo muy malo. Y aunque lo que uno más recuerda después de verla es la escena final, el tema central de la película son los efectos de no lidiar con el dolor después de una pérdida de un ser querido. Este thriller psicológico es la tercera película de la directora japonesa-norteamericana Karyn Kusama. Tensionante y con un ritmo más lento que el de películas de asesinos con cuchillos, The Invitation es más por el estilo de Rosemary’s Baby. Por eso tal vez no sea para todo el mundo, pero es perfecta para los fanáticos de la mezcla de suspenso y drama. 4. Raw (2017) Directora: Julia Ducournau Si se estaban preguntando “¿pero acaso ninguna mujer dirige algo violento y sangriento?”, Raw es la respuesta. Esta película les revolvió el estómago a muchas personas en el festival de cine de Toronto, tanto que dos tipos se desmayaron y tuvieron que sacarlos en ambulancia. Justine es una vegetariana rigurosa pero sus preferencias gastronómicas cambian cuando, en su primera semana en la escuela de veterinaria, la obligan a probar carne cruda. De repente, nuestra protagonista se transforma en una caníbal voraz, justo al mismo tiempo en el que se le despierta un apetito sexual imparable. La escritora y directora francesa Julia Ducournau no es la primera persona que entrelaza el despertar sexual con el canibalismo. Ver historias en las que se trata la sexualidad de las mujeres jóvenes como algo más que un “ay, ¿será que él me ama? ¿será que me va a llamar?” es refrescante porque para los seres humanos, del género que sea, la sexualidad es una cosa corporal y en algún momento la mayoría tiene hambre de carne humana, guiño guiño. ---- Si ya vieron estas cuatro y quieren más terror dirigido por mujeres, les recomiendo desde clásicos como Near Dark hasta algunas más nuevas como American Mary, Prevenge, Honeymoon, The Lure o The Love Witch.
Algo está claro y es que Diamante Eléctrico es una de las bandas de rock más importantes de Colombia. Recientemente lanzaron Buitres, un álbum menos erudito y con mucho sexyness, que ha sido bien recibido por críticos, colegas y seguidores. Este álbum va dirigido para todo público, pero en especial para las mujeres. En esta nueva era la banda está dispuesta a conquistar a las chicas para que se contagien un poco del poder del rock y blues colombiano. Andee, Daniel y Juan hicieron la siguiente playlist mostrando cuáles son las mujeres que los han inspirado a crear música para ellas. Estas canciones hacen parte de la lista de canciones favoritas de la banda e incluye tracks de Janelle Monae, Solange, Natalia Lafourcade, Amy Winehouse y Nina Simone, por mencionar a algunas. ¿Lo recuerda? Diamante Eléctrico ganador mejor agrupación rock Premios Shock 2016
Electricity es el más reciente sencillo de la cantante británica Dua Lipa, que sin duda es una de las más importantes del pop actualmente. Para éste unió fuerzas con Silk City, el proyecto colaborativo conformado por los poderosos DJs y productores Diplo y Mark Ronson. El sencillo cuenta con colaboraciones de letra y melodías de Romy Madley-Croft de The XX, y Diana Gordon, quien trabajó con Lemonade de Beyoncé. Con Electricity, Dua Lipa mantiene su línea de house noventero que evoca a bandas como Inner City o Black Box. Dua Lipa también anunció que lanzará una edición de lujo de su primer álbum homónimo con 3 nuevas canciones: Want To, Running y Kiss and Make Up, una colaboración con el grupo de K-Pop BLACKPINK. Esta edición de lujo estará a la venta desde el 19 de octubre. En cerca de 3 años de carrera, Dua Lipa se ha posicionado como una de las artistas pop más importantes del momento. Se presentó recientemente en la final de la Champions y hoy es la artista femenina más escuchada en Spotify.
¿Cuántas veces no ha querido dejar de lado la procastinación y así comprometerse más con usted mismo, a hacer sus proyectos, a sacar adelante sus sueños, a crear, escribir y hasta leer? Pues como sabemos que necesita ese empujoncito para lograr todo eso que quiere, le vamos a contar la historia de Katherin Gil, una activista del Pacífico que ha puesto toda su energía y disposición a trabajar con los jóvenes del Chocó y hoy es la dura de duras en danza, tiene un colectivo que le está dando la vuelta al mundo y cuenta historias de vida que harían llorar a cualquiera, pero que al mismo tiempo dan ganas y fuerza de creer. Katherin Gil es la coordinadora general de la Corporación Jóvenes Creadores de Chocó, una organización social y cultural en la que se tiene claro que el arte es la herramienta para transformar la vida de todos los jóvenes que han sido tocados por el conflicto que se vive en parte del Pacífico colombiano. La idea de este colectivo es que los chicos puedan ver que a través del arte y la cultura se pueden hacer ejercicios de liderazgo, con esto cambiar el entorno en sus comunidades y convertirse en referentes positivos para los otros jóvenes que están a travesando momentos difíciles ¿Por qué cree que a través del arte de sanan vidas? Creo que a pesar de todas las dificultades de que no hay tanto apoyo local o institucional este proceso artístico está lleno de mucha magia, compromiso, creatividad. Tengo claro que gracias al colectivo los chicos están autoformándose y se han dedicado a contar sus experiencias a través de los bailes. Hoy son ellos quienes se han encargado de los montajes artísticos, cada uno con una historia de vida. Ha sido un proceso en el que se han hecho muchos sacrificios, pero todos han valido la pena, pues hoy nos convertimos en un entorno de protección que ha bloqueado situaciones de violencia. ¿Qué situaciones de violencia? El Chocó es una potencia en cultura, pero los jóvenes de aquí no han sabido enfoca bien su talento. En este momento hay muchos chicos que tienen muchas habilidades, pero están dedicados a las bandas delincuenciales porque no han sabido cómo enfocar lo que saben, porque no los apoya nadie. Lo que nosotros hacemos es darle la oportunidad a cada uno, demostrarles que apoyamos, les creemos y que se sientan importantes por su condición de seres humanos. Yo pasé por lo mismo y sí hace mucha falta alguien que esté pendiente de la gente. Por eso decidí que todo mi talento lo iba a enfocar en esos jóvenes para ayudarlos y hacer que se olviden de la calle. También he puesto todos mis conocimientos como abogada al servicio de la comunidad porque he pensado que hoy el pacifico necesita del trabajo colectivo que todos los profesionales. Que se bajen de las corbatas y tacones y se unten de la gente, que vean las realidades de las comunidades y que ayuden a cambiar la historia. Si esto pasará seguro que se generan escenarios importantísimos que ayudarían no solo a los chicos de aquí sino nos voltearía a mirar el resto del país. ¿Podría definir lo que sienten o viven los jóvenes cuando bailan? ¿Por qué para la violencia? Siempre he creído que el arte tiene una magia y es tan poderosa que cuando uno está en el escenario todo se transforma. Todas esas cosas negativas por las que uno está pasando se van y alrededor el mundo empieza a brillar, la gente sonríe, disfruta, la gente se desconecta y hace que todo esté bien. Eso pasa también cuando bailamos, es un cumulo de emociones bonitas, de emociones positivas que nos ayudan a sacar la mejor versión de cada uno de nosotros, por esa misma energía es que hemos logrado coronar espacios internacionales. Además, cada vez que estamos en el escenario estamos contando una historia y estamos demostrando cómo se han trasformado nuestras vidas. Todos eso bloqueos de gente toxica que dicen “no pueden”, “no lo van a lograr”, “del arte no se vive”, se quedan atrás. El arte es motivación y aliento para el alma. 10 frases que use para motivar a los chicos del colectivo, motivarse usted y que le ayuden a las personas a trabajar por sus sueños El bien no es conocido hasta que no es perdido Dios perdona todo menos al ingrato y al desagradecido “El tiempo que se va no vuelve” “Se van a quedar como perro en autopista: mirando para los dos lados” (si no trabajan) “Debo colocar todo mi talento y creatividad al servicio de la gente” “Que se caigan los títulos y posiciones y todos nos untemos de gente, de realidades” “Rendirme no es una opción” “Cada obstáculo y error se deben convertir en una oportunidad” “Siempre hay que creer en los aportes de la gente y en todo lo que pueden dar” “La educación es un arma para ser libres y transformar” “Siempre tiene que haber una excusa perfecta para sonreír, vivir y hacer que todo sea posible” “Siempre transforma un ‘no’ por un ‘sí" “Si lo hablamos lo arreglamos”.
Después de que Yorgos Lanthimos lograra un fenómeno con Poor Things, una película aclamada por los críticos y muy premiada en los Oscar 2024, llega su nueva producción Kinds of Kidness. El largometraje tuvo la premier mundial en el Festival de Cannes. Emma Stone y Willem Dafoe, protagonistas de Poor Things, también hacen parte del elenco de esta nueva película del director griego. Asimismo, actores como Joe Alwyn (La favorita), Margaret Qualley (Había una vez en Hollywood), Hunter Schafer (Euphoria) y Jesse Plemons (Amor y Muerte), entre otros, componen esta historia contemporánea. Yorgos Lanthimos trabajó con el guionista Tony McNamara en Poor Things y La favorita, pero para Kind of Kidness dirigió el guión de Efthimis Filippou, conocido por escribir Lobster y El sacrificio de un ciervo sagrado. Teaser oficial de 'Kinds of Kidness'¿De qué trata 'Kinds of Kidness'?Aunque no se ha publicado el trailer oficial de la película, Yorgos Lanthimos afirmó que: “Es una película contemporánea, ambientada en Estados Unidos: tres historias diferentes, con cuatro o cinco actores que interpretan un papel en cada historia, por lo que todos interpretan tres papeles diferentes. En realidad, fue casi como hacer tres películas”.Después de su estreno en el Festival de Cannes, se ha calificado como una historia de "canibalismo, cultos sexuales y libertinaje". Además, la desnudez es una parte clave de la trama. Las primeras críticas de 'Kinds of Kidness'A pesar de que en el Festival de Cannes la película tuvo una ovación de cuatro minutos, varios medios ya han publicado críticas en las que se demuestran su decepción frente al largometraje. El periodista especializado en cine, Javier Zurro, escribió una reseña en elDiario.es donde afirma que Kinds of Kindness es un elogio a la crueldad. "No lo es [una comedia graciosa] porque Lanthimos está constantemente preocupado por provocar y epatar. Por ser incómodo y retorcido. Tanto que se pasa de vueltas todo el rato. Disfruta torturando a sus personajes hasta los límites más insospechados. Nunca les da una salida ni una oportunidad". Por otro lado, Nicholas Barber escribe en la BBC: "Por más oscura que siempre haya sido la comedia de Lanthimos, hay momentos en que la crueldad se vuelve casi insoportable". Además, afirma: "Ciertamente, aquellos de nosotros que argumentamos que el sexo y la desnudez en Poor Things eran importantes para la historia de liberación y confianza en sí misma de Bella puede resultarnos más difícil defender Kinds of Kindness". Sin embargo, y dejando de lado estas críticas negativas, las primeras votaciones en Rotten Tomatoes le han dado a la película una puntuación del 95%. Tendremos que esperar a que la película se estrene, el 21 de julio del 2024, para tomar una decisión sobre lo que pensamos sobre Kinds of Kindness, la nueva película del director griego. ***Si les gustó Poor Things, les recomendamos leer: Poor Things: el fastidio que nos genera la libertad - Análisis y significado de la película
Nick y Aaron Carter: ídolos caídos es una docuserie en dos partes de Investigation Discovery que explora las vidas de los hermanos Nick y Aaron Carter, el primero conocido por su participación en lso Backstreet Boys. La serie se estrenará en Max con su primera parte el 27 de mayo y la segunda el 28 de mayo. Además, estará disponible en Discovery a partir del 7 de junio a las 22:00 hs (Colombia) en un formato de cuatro episodios de una hora, con el estreno de un capítulo cada semana.¿De qué trata Nick y Aaron Carter: ídolos caídos?Desde su meteórica fama a finales de los años 90 y principios de los 2000 hasta los conflictos que los llevaron a los titulares en años recientes, la docuserie revela la tensa dinámica familiar de los Carter y un lado no tan conocido de su ascenso a la fama. Nick y Aaron Carter: ídolos caídos examina las acusaciones de abuso sexual contra Nick Carter, realizadas por tres mujeres, mientras aborda las luchas de Aaron Carter con la salud mental, el abuso de sustancias y la ruptura entre los hermanos tras el apoyo de Aaron a las denunciantes de Nick.En 2017, Nick Carter fue acusado de abuso sexual por Melissa Schuman, ex miembro del grupo musical femenino DREAM, mientras él y los Backstreet Boys estaban en la cúspide de su fama. En los años siguientes, otras mujeres, Ashley Repp y Shay Ruth, presentaron acusaciones similares. Durante este tiempo, Aaron Carter apoyó a quienes denunicaron a Nick, mientras lidiaba con sus propios problemas de adicción y salud mental, lo que llevó a una disputa pública entre los hermanos antes de la trágica muerte de Aaron en 2022. La serie profundiza en las acusaciones contra Nick y cómo se entrelazaron con la volátil relación entre los hermanos.La serie cuenta con entrevistas exclusivas a Melissa Schuman, Ashley Repp y Shay Ruth, quienes ofrecen perspectivas emotivas e impactantes sobre sus acusaciones contra Nick. Nick y Aaron Carter: ídolos caídos busca ofrecer una comprensión más profunda de las denuncias, y narrar la intensa reacción que las denunciantes han enfrentado desde que decidieron hablar públicamente, y el impacto duradero en sus vidas. La docuserie también incluye testimonios de un miembro de la familia Carter y amigos cercanos, como la ex novia de Nick, Kaya Jones, y la ex prometida de Aaron, Melanie Martin, brindando una mirada íntima a cómo la intensa fama y los conflictos provocaron una ruptura entre los hermanos.
Desde hace años en algunos conciertos en Colombia se vienen implementando los palcos, es decir, espacios delimitados frente al escenario destinados a grupos más grandes, normalmente de 10 personas . Es una modalidad usada principalmente en conciertos de reggaetón o música popular. Recientemente, Nicky Jam se pronunció al respecto. Nicky Jam dio una entrevista al canal de video 'Mario VI TV' y habló sobre la organización de conciertos en el país. Según el puertorriqueño, la forma en que se organiza al público en los escenarios en Colombia. a menudo dificulta la conexión con los artistas. Por eso dijo que "los conciertos de Colombia son los más difíciles", en un fragmento de la entrevista que se viralizó en X (Twitter). "El promotor pone palcos donde están los ricos, mientras que la masa que realmente canta las canciones está en las zonas generales. No sientes al público, porque los que están al frente no gritan ni hacen nada", comentó el cantante.Los palcos suelen tener costos más elevados que la taquilla general: recientemente para el concierto de Karol G, los costos del palco superaban los 24 millones de pesos. Además, Nicky Jam señaló que en algunos conciertos combinan artistas urbanos con intérpretes de vallenato y música popular, lo cual provoca que los fans del reguetón terminen en las zonas generales, mientras que aquellos que prefieren otros géneros ocupan los palcos. El cantante no está de acuerdo con esta forma de organización, ya que considera que el espectáculo debería ser para todos."Yo soy de energía. Si estoy en el escenario y no siento a la gente gritando, me desanimo inmediatamente", complementó el artista. Nicky Jam destacó al estadio Atanasio Girardot en Medellín como un buen escenario: "Me gusta cómo prepararon el Atanasio. Es sin palcos, por eso se siente como un verdadero concierto con el pueblo. Me encanta cantar y estar cerca de la gente, sentir que puedo chocar los cinco con alguien. Pero eso es lo que hacen los promotores de allá, y mis respetos para ellos por seguir contratándome", concluyó.Nicki Jam forma parte del cartel de La Eterna, evento que se celebrará el próximo 3 de agosto, precisamente en el Estadio Atanasio Girardot.
Pimpinela, el dúo argentino compuesto por los hermanos Lucía y Joaquín Galán, fue un éxito a finales de los 80 y principios de los 90, gracias a asus cancioens dramáticas con diálogos cantados. Canciones como A esa, Olvídame y pega la vuelta, Ahora decide y Ese estúpido que llama. En uno de los videos de Pimpinela hay un cameo que aún hoy, más de 30 años después de su estreno, sigue llamado la atención: eld el actor Christopher Reeve, conocido por interpretar a Superman. El video musical de Heroína Solitaria"debutó en 1993 como parte del álbum Pimpinela 92. El vídeo retrataba una fantasía romántica que involucraba a una joven secretaria que trabajaba para un poderoso hombre de negocios. A lo largo del vídeo, la trama se desarrolla con deseos reprimidos entre la "heroína solitaria" y su misterioso jefe, que inteligentemente nunca aparece del cuello para arriba, manteniendo un aire de misterio como el objeto secreto de su afecto.La interacción entre Lucía y Joaquín en la canción refleja una lucha constante entre mantener la profesionalidad y ceder ante los sentimientos. El título se refiere a su gran esfuerzo para mantenerse profesional en una situación que claramente la afecta emocionalmente. Mientras el dúo argentino interpreta su sentida canción ante un público cautivado, la trama se complica cuando el jefe olvida sus billetes de avión para un viaje crucial. En una carrera desesperada por entregarlos, la secretaria lo alcanza y le revela que no es otro que el propio Superman, interpretado por el querido actor Christopher Reeve. Reeve reconoce gentilmente su esfuerzo y queda cautivado por la joven.El video fue filmado justo antes del trágico accidente de Christopher Reeve en 1995, que resultó en una lesión en la médula espinal que lo dejó paralizado. A pesar de sus desafíos posteriores, Reeve, quien inmortalizó al superhéroe Superman, continuó inspirando a muchos hasta su fallecimiento, el 10 de octubre de 2004.
El lunes 6 de mayo del 2024, cuatro mujeres lesbianas sufrieron de un grave ataque homófobo en el hostal donde se estaban quedando. Todo indica que el responsable fue el propietario del lugar, Justo Fernando Barrientos de 67 años. El hombre lanzó una botella llena de líquido inflamable dentro de la habitación en donde se hospedaban las cuatro mujeres. Solo una de ellas logró sobrevivir. Pamela Cobbas, de 52 años, murió unas horas después del ataque y su pareja, Mercedes Roxana (52), murió después de agonizar más de 48 horas debido a que su cuerpo estaba en un 90% lleno de quemaduras. Otra de las mujeres, Andrea Amarante (42) logró sobrevivir un poco más. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos del equipo médico, murió a la semana del asesinato. La pareja de Andrea, Sofía Castro Riglos, de 49 años, es la única que logró sobrevivir. Sigue bajo cuidado médico en el hospital. El presunto responsable fue encontrado por la policía tiempo después de los hechos intentando quitarse la vida con una motosierra. Lo que sucedió según los testigosSegún otros inquilinos que se quedaban en el mismo hostal de las mujeres, los gritos los levantaron después de la medianoche. Al verlas envueltas en llamas intentaron apagarlas con un extintor pero no fue posible. Por esto, las llevaron a la ducha más cercana. El incendio causado por la botella con líquido inflamable fue de tal magnitud que tuvieron que evacuar a unas treinta personas más ya que se extendió por una parte del edificio. Las manifestacionesPara exigirle al gobierno de Javier Milei y a las autoridades de que se haga justicia, el 13 de mayo del 2024 un grupo de 200 personas se reunió en la Plaza Colombia, donde tuvo lugar el asesinato, con pancartas donde se leí que era necesario abordar la violencia homofóbica. Sin embargo, el presidente Milei afirmó que este no era un crimen de odio y pidió mayor investigación.