Curiosamente, en la tierra de las chuzadas del DAS, como en el resto del mundo, la actualización de los términos y condiciones de uso de WhatsApp hizo que se despertara el interés por la privacidad en las aplicaciones para dispositivos móviles. De hecho, muchos usuarios se quieren trastear de servicio de mensajería. Acá les explicamos de qué se trata el cambio y cuáles son las alternativas. Por Juan Camilo Ospina DeazaPor muy paradójico que suene, la noticia de los cambios en los términos y condiciones de WhatsApp nos ha obligado a tomar conciencia frente a la desigualdad de condiciones entre las grandes empresas y los usuarios.La respuesta de las aplicaciones ante cualquier actualización, en últimas, es básicamente siempre la misma: “si no le gusta no la use”. No hay más opciones disponibles si uno quiere continuar. No hay una caja de sugerencias para negociar las condiciones. No hay un número al que pueda marcar para que un experto de WhatsApp me explique sus condiciones de uso. Por lo general, la premura por continuar el uso de un servicio como WhatsApp hace que los usuarios no estudien al detalle reglamentaciones, condiciones de uso y posibles consecuencias del uso de las aplicaciones. Por eso les contamos cuáles son las nuevas condiciones de uso de WhatsApp, sus implicaciones, algunas aplicaciones alternativas y cuáles son los problemas de seguridad informática que ellas representan.¿Cuáles son los cambios en la privacidad de WhatsApp?Los cambios de privacidad de WhatsApp son consecuencia de su compra por parte de Facebook en febrero del 2014. Es decir, ya venían ocurriendo y en últimas no traen muchas novedades. La nueva política, de hecho, cuenta cómo los datos del usuario se ven afectados cuando hay interacción con una empresa en la plataforma y proporciona más detalles sobre la integración con Facebook, empresa matriz de WhatsApp.Pero hay que recordar que el intercambio de datos con Facebook ya se estaba produciendo. Los usuarios de la Unión Europea pueden optar por no compartir datos con Facebook, pero el resto del mundo no tiene la misma opción.WhatsApp comparte la siguiente información con Facebook y sus otras empresas: Información de registro de la cuenta (número de teléfono)Datos de transacciones (WhatsApp ahora tiene pagos en India)Información relacionada con el servicioInformación sobre cómo interactúa con otros (incluidas las empresas)Tipo de dispositivo móvilDirección IP (Y también está recopilando ahora más información a nivel de hardware de dispositivo)En general, WhatsApp no está implementando nada que no hagan las demás redes sociales que ya utilizamos. Como debería ser bien sabido, el negocio de las aplicaciones "gratuitas" radica en que nuestra información es el negocio.Las empresas tienen que buscar tipos de retribuciones por parte de los usuarios. De allí que Instagram, Facebook y Google tengan grandes cantidades de información sobre nosotros. O como dice la periodista Mollye Barrow:Este cambio de WhatsApp preocupa a muchos, más que nada, por los conocidos problemas que ha tenido Facebook. Desde acusaciones por ostentar el monopolio en Estados Unidos de servicios en la red, pasando por el papel que ha tenido en la influencia a campañas electorales (entre ellas la de Trump), hasta malas prácticas en el manejo de la seguridad de los datos.Aunque Facebook ha tenido que pagar grandes sumas de dinero en acuerdos y multas, estos pagos no han cambiado drásticamente ni su funcionamiento ni su manejo de datos. Y WhatsApp también sufrió una violación de la privacidad: algunos grupos de chat privados indexados se encuentran en el motor de búsqueda de Google. En Netflix se pueden encontrar algunos documentales que tratan estos conflictos como Social Dilema y The Great Hack. Estos documentales revelaron, quizás por primera vez para algunos espectadores, cómo las redes sociales usan los algoritmos para hacer que la gente regrese estableciendo una relación de dependencia. También muestran cómo las empresas de tecnología han influido en las elecciones, la violencia étnica y las tasas de depresión y suicidio. Ante estas acusaciones Facebook afirmó que “En lugar de ofrecer una visión matizada de la tecnología, ofrece una visión distorsionada de cómo funcionan las plataformas de redes sociales para crear un chivo expiatorio conveniente para problemas sociales difíciles y complejos”.Cada vez más existe la preocupación sobre cómo regular el tiempo que se pasa en las aplicaciones. Sin embargo, a las compañías les conviene exactamente lo contrario, que cada vez les demos más nuestro tiempo y atención. Para ello usan estrategias que permiten asegurar el flujo de dopamina en el cerebro. ¿Alguna vez se han visto levantando el celular por reflejo, para solo ver la hora o por si algo está pasando? ¿Cuándo fue la última vez que hicieron la fila del banco o espero a alguien sin ver el celular? Al mejor estilo de las ficciones más distópicas, no es difícil encontrar en Google artículos como “Retener usuarios de aplicaciones. Estrategias para mantener tus usuarios de por vida”. Esta insistencia por enganchar a los clientes se debe a que la atención significa tiempo de publicidad, la posibilidad de compra y datos sobre el comportamiento de los individuos.¿Cuáles son las mejores aplicaciones de mensajería instantánea, alternativas a WhatsApp?Aunque WhatsApp es una de las aplicaciones que más utilizamos en la cotidianidad, podemos encontrar otras alternativas, pero a su vez otras condiciones y formas de administración de nuestros datos. Para aquellos que quieran cambiarse y no suministrar sus datos al monopolio de Facebook, existen opciones como Telegram, Signal, Viber, LINE, kakaotalk Messenger, Skype o Wechat. Sin embargo, es difícil encontrar alguna que no tuviera problemas respecto a prácticas de privacidad. TelegramComencemos con la alternativa más popular tras el pánico extendido por la actualización de WhatsApp: Telegram. (Lean también: Telegram registró récord de usuarios. 10 ventajas frente a WhatsApp)Esta aplicación usa cifrado de extremo a extremo, al igual que WhatsApp y Signal. Este tipo de cifrado convierte los mensajes en un código sin la ayuda de un servidor en el medio, lo que hace casi imposible obtener acceso a la comunicación entre dos usuarios sin su consentimiento. Es considerado una de los mas seguras, hasta tal punto que grupos extremistas islámicos la han utilizado por su capacidad de mantener conversaciones secretas en mensajes fuertemente encriptados.Pero proporcionar una plataforma que permita a los usuarios evadir el escrutinio oficial ha traído sus propios problemas. En los últimos años, el Estado Islámico ha utilizado Telegram para organizar complots terroristas, difundir propaganda y responsabilizarse de los ataques. Por el mismo motivo, la policía coreana ha tenido problemas identificando a decenas de víctimas, incluidos menores, vinculados a salas de chat de “pago para ver” operadas en la aplicación. Esto es un problema tan grande que el gobierno ruso y el Chino han hecho esfuerzos por bloquear Telegram. Como podemos ver con este caso, la regulación de estas aplicaciones pone en conflicto la libertad de expresión con la seguridad.WeChatEn el otro lado del espectro está Wechat. Esta aplicación es una de las más populares en China. Esto último es problemático porque, como explica la Oficina de Información del Consejo de Estado Chino: “dentro del territorio chino, Internet está bajo la jurisdicción de la soberanía China”. Esto quiere decir que el Estado Chino participa en una amplia gama de actividades en línea que incluyen, entre otras cosas, requisitos de localización de datos para empresas nacionales y extranjeras. Bajo el argumento de la seguridad nacional se puede socavar la seguridad de la información. Esto ha tenido importantes impactos como censuras, toma de datos de individuos, entre otros.Como explica en un informe Citizen Lab, un centro de investigación que forma parte de la Universidad de Toronto, “los documentos e imágenes compartidos entre cuentas no registradas en China están sujetos a vigilancia de contenido y se utilizan para construir la base de datos que WeChat utiliza para censurar las cuentas registradas en China".¿Vale la pena preocuparse por nuestros datos?Mucho se habla de la educación financiera, de la educación emocional, pero aún así somos felices desconociendo las condiciones del uso del mundo informático. Es importante indagar por las implicaciones que tienen las diferentes aplicaciones y tecnologías que utilizamos en el día a día. Sin embargo, esto no es suficiente. Existe una relación desigual entre las grandes compañías y las posibilidades de los usuarios. En la mayoría de ocasiones los usuarios son también productos, lo que lleva a que existan prácticas difíciles de comprender. Por un lado, hay aplicaciones en las que se viola la seguridad de los datos y son usados para lograr mayores ventas y censuras sin nuestro consentimiento. Por otro lado, hay aplicaciones que logran una gran confiabilidad, pero tienen la consecuencia que no se puede hacer un seguimiento de prácticas ilegales.No existe un lugar donde dar sugerencias o negociar condiciones. Hemos llegado al punto en el que las sanciones que puedan hacer países no son suficientes. Así como tampoco se convierte en una opción para los usuarios el decidir no tener ninguna de estas aplicaciones, ya que de una u otra manera todos dependen de la comunicación virtual para agendar reuniones, estar en contacto con allegados que están en el exterior, programar trabajos en grupo, recibir información para hacer compras en línea, hacer negocios o proyectos con personas que están en espacios geográficamente separados, etc. Por lo tanto, no es tan fácil responder “no acepto sus condiciones”. Tal vez estos debates que nos están inquietando tanto para lo único que nos sirvan es para reflexionar acerca de formas colectivas de gestionar nuestros datos y sobre el lugar de los estados y las organizaciones privadas en nuestra privacidad.
Por estos días, la app de mensajería Telegram registró un récord de 25 millones de usuarios nuevos en las últimas 72 horas. “En la primera semana de enero, Telegram superó los 500 millones de usuarios activos mensuales. Después de eso, siguió creciendo: 25 millones de nuevos usuarios se unieron a Telegram solo en las últimas 72 horas. Estos nuevos usuarios procedían de todo el mundo: el 38% de Asia, el 27% de Europa, el 21% de América Latina y el 8% del Medio Oriente y el norte de África”, explicó Pável Dúrov, fundador de Telegram.Sin duda una de las causas por las que muchos usuarios se volcaron a Telegram fue el cambio en los términos y condiciones de WhatsApp, en los que se anunció que la app de mensajería integrará algunos de los productos de las empresas de Facebook.“La gente ya no quiere cambiar su privacidad por servicios gratuitos. Ya no quieren ser rehenes de los monopolios tecnológicos que parecen pensar que pueden salirse con la suya siempre que sus aplicaciones tengan una masa crítica de usuarios”, dijo Dúrov.Si bien una de las principales desventajas de Telegram es que aún no es tan popular como muchas de sus competidoras, tiene bastantes ventajas que han convencido a muchos. Aquí algunas de ellas.Uso de datos de los usuarios Uno de los elementos más atractivos de Telegram. Mientras para vincular la cuenta, Telegram pide información de contactos, número de teléfono, archivos y datos de identidad, WhatsApp exige también ubicación, correo electrónico, e información de pagos, entre otros. Todos estos datos son los que recopila su compañía madre: Facebook, para luego ofrecerlos a las marcas que hacen publicidad.No tiene copia de seguridadTelegram es una app que almacena en la nube toda la información del usuario. Esto significa que al cambiar de dispositivo no se pierde información de la aplicación, mientras con WhatsApp es necesario tener espacio en el teléfono para que la app realice una copia de seguridad. Si el dispositivo es del mismo sistema operativo, no hay mayor problema, pero, por ejemplo, pasar la información de Ios a Android o viceversa puede ser más complicado.Es multidispositivoA diferencia de WhatsApp que solo permite su uso en un dispositivo, en Telegram es posible tener la sesión iniciada desde varios equipos y responder las conversaciones en todos ellos.Tiene varias opciones de personalizaciónMás allá del modo oscuro, no hay muchas opciones en WhatsApp para la personalización de la interfaz. Mientras tanto, Telegram tiene la posibilidad de cambiar el color de los mensajes hasta el nivel de redondez de las burbujas de chat.Para quienes sienten que con los stickers se expresan mejor, en Telegram también los encuentran: tanto los que son creados por la propia aplicación, como la opción de crear los propios.Permite programar mensajesEn Telegram es posible programar el envío de mensajes, para que el contacto lo reciba a una hora específica. En WhatsApp es posible por medio de otras aplicaciones, pero no es una opción que ofrezca la app.Ocultar número de teléfonoMientras en WhatsApp nuestro número de teléfono siempre está disponible para otros usuarios, en Telegram es posible hacerlo oculto.Edición de mensajesSi cometemos algún error en un mensaje, el Telegram es posible editarlo, una opción que no incluye WhatsApp. El único requisito es que la corrección debe hacerse en las últimas 48 horas luego de enviado el mensaje.Envío de archivos pesadosMientras WhatsApp tiene un límite de 100 MB para enviar un archivo, en Telegram es posible enviar hasta 2GB de información.Mensajes que se autodestruyenUna opción no disponible en WhatsApp. En Telegram es posible programar mensajes para que estén disponibles por unos pocos segundos o hasta por un mes.CanalesTelegram ofrece la opción de crear canales para publicar contenido de forma unidireccional. Los usuarios que se unan pueden ver el contenido, pero no necesariamente responder a él.
WhatsApp es la aplicación de mensajería más popular del mundo. Pero aunque luzca muy inofensiva, la desregularización de sus contenidos y los ‘excesos’ de libertad de expresión pueden ser la razón tras el crecimiento de nuevos discursos de odio y la histeria colectiva más absurda y peligrosa de nuestros tiempos. ¿Qué nos dice esto sobre nuestro uso de la libertad? Y ¿por qué la serie Matarife supo aprovechar muy bien este lenguaje? Por Víctor Solano Urrutia Los rumores siempre han hecho parte de la naturaleza de los aplicativos digitales: que si las empresas pueden comprar mis datos personales; que si los gobiernos vigilan lo que hacemos a través de las redes sociales; que si mi ex puede espiar mis conversaciones a distancia. Y no hay razones para afirmar o para descartar del todo estas preocupaciones. Podemos esperar cualquier cosa luego del escándalo de Cambridge Analytica, en el que se reveló que Facebook filtró las preferencias de millones de usuarios en favor del marketing político, o tras los hallazgos más cruciales de TechCrunch sobre la desprotección de 419 millones de celulares en la web. Las angustiosas cifras sobre vulneración de usuarios han llevado a la migración masiva a otras aplicaciones, estrategia parcialmente ilusa considerando que Mark Zuckerberg, el principal implicado en estos escándalos, es dueño de las 4 apps más descargadas: Facebook, WhatsApp, Instagram y Messenger. Prácticamente nos tiene en la palma de la mano, jugando a lo visible y lo invisible, a lo público y lo privado. Facebook en jaque: los huecos en seguridad que los pueden acabar Porque todos sabemos que las redes sociales tienen diferentes usos, digámoslo así, para diversificar la chicanería. No subimos a Instagram las bobadas que compartimos en Facebook, pero junto con LinkedIn (la “más seria”) y tal vez Tinder, estas redes son nuestras caras más visibles: edifican el ego sobre el cual basamos nuestra identidad online. WhatsApp, por otro lado, es el reino de lo semi-privado. Nadie ni dentro ni fuera de la app puede saber en qué grupos andamos o con quién conversamos, lo que la convierte en la plataforma perfecta para muchas ideologías, movimientos, tendencias y fuerzas (contra) culturales que buscan mover sus hilos con privacidad.Pareciera que los cursos de community manager van a tener que ‘reinventarse’ ante el hecho de que los usuarios se están volcando más hacia la creación de grupos privados con intrincados mecanismos para mantenerse ocultos y herméticos. A ello han contribuido las herramientas de fastcheck y la creación de encuestas para que los administradores se reserven el derecho de admisión, síntoma de que la comunicación está en crisis.Muchos usuarios de Internet parecen no querer que las páginas les digan qué ver o discutir; o que los aterroricen las recomendaciones aleatorias sobre búsquedas en Google, o que aparezca publicidad sobre fetiches privados. La gente pide con desesperación privacidad. Y WhastApp ha sido el palacio y la guarida, como diría Miguel Bosé, porque nos otorga el privilegio de vincularnos a comunidades increíblemente específicas con gente de todo el mundo y a las que les interesan los mismos temas, por retorcidos que sean.Lea también: 9 motores de búsqueda para dejar de depender de Google Surcando aguas internacionales de WhatsApp La principal ventaja que muchos le ven a WhatsApp es que no cuenta con ningún tipo de control estatal o privado de contenidos sobre lo que se comparte. Eso facilita el reenvío masivo de toda clase de cosas, entre las que podríamos incluir desde pornografía hasta audios incriminatorios. ¿Pero qué tan ventajosa es esta política de censura cero? Por supuesto, el exceso de libertad ha sido muy criticado por facilitar la promoción de discursos de odio. Al fin y al cabo, para crear una comunidad virtual no se necesita sino un buen nombre y un número de celular desde el cual mandar las invitaciones. El odio y los resentimientos comunes casi que llegan por añadidura. Ahora bien, ¿es la expansión de los discursos de odio pecado de la plataforma? ¿O solo buscamos culpar al medio antes que aceptar nuestra mala leche? “What’s wrong with WhatsApp?” se pregunta el periódico The Guardian frente a los más recientes fenómenos de histeria colectiva propagados en y desde WhatsApp en el Reino Unido. Gente que se organiza para incendiar antenas 5G que supuestamente lavan el cerebro, o campañas que aseguran que la “imposición” del tapabocas es una violación a los derechos de libertad de expresión. Lo cierto es que las consecuencias del uso privado de las redes puede medirse en impactos sociopolíticos de gran escala: Brexit, Trump, Bolsonaro… ¿sigo con la lista? ¿Hay que temer a las cadenas de Whatsapp? Hablemos de seguridad informática Pero no repitamos lo que ya se ha dicho, que las fakenews, cadenas, piolines anti-aborto y demás material que se mueve de teléfono en teléfono son una estrategia política para adoctrinar. Eso ya lo sabemos. Ahora, de lo que se trata es de entender cómo convivimos con esa incómoda realidad, quizás ignorando el hecho de que los usuarios de WhatsApp que nos jactamos de no caer en esas lógicas igual compartimos de todo y creemos ciegamente solo porque nos movemos en grupos de nuestro interés. Porque cada grupo es una isla, y cada isla tiene sus reglas. Matarife: A Whatsapp Love Story En Colombia tenemos un caso muy particular: ¿qué nos dice la circulación de la serie web de Daniel Mendoza, Matarife, en Whatsapp? Justamente, la apuesta de esta producción fue salirse del formato de entretenimiento tradicional de la televisión y adoptar otras estrategias de difusión que faciliten el alcance a grandes porciones de público, sorteando hábilmente la censura o la posibilidad del sabotaje. ¿Pero por qué justamente recurrir al WhatsApp?Por el alto contenido político explícito de la serie, en la que no sólo se enreda al ‘innombrable’, sino a diferentes personalidades del mundo de la política, la decisión de difundirla por WhatsApp y Telegram (además de YouTube) se tomó ante el miedo de que fuera censurada y dada de baja de plataformas evidentemente controladas. La privacidad y la búsqueda de estas repúblicas sin estado (redes sociales sin una cabeza única) permitieron la expansión viral no sólo de los primeros capítulos, sino de un sinnúmero de grupos que nacen y comparten toda clase de contenido afín a la temática sin ninguna restricción externa. Por supuesto, este es un argumento válido y una salida fácil a las tentativas de sabotaje, entremezclando V de Vendetta y Black Mirror. Me atrevo a decir que si bien WhatsaApp no promueve discursos, sí permite que estos levanten vuelo con mucha más facilidad y rapidez por su modelo semi-anárquico de distribución de la información. De manera que quienes se han visto afectados por la serie no han sabido cómo responder. Al principio la creían muy chichipata por el formato, pero parece que la serie ha incomodado más que cualquier investigación formal. Curioso o no, vemos que los papeles se han invertido. Durante años los grupos más conservadores han usado Whatsapp como instrumento fundamental para ejercer su derecho a la libertad de expresión y a la privacidad recalcitrante. No es desconocido que por allí se han movido los cuentos más inverosímiles y absurdos que rayan con lo cómico, como el “rayo homosexualizador”, la “ideología de género” y, en últimas, toda la agenda cristiano-conservadora con incidencia en las urnas. Si no puedes contra ellos, úneteles Podemos aventurar una tercera razón de por qué la popularidad de Matarife. Además de amagar la censura y de llegarle a un público más extenso (cada vez es menos la gente que ve televisión, mientras nadie puede huirle al WhatsApp), los productores y agentes publicitarios detrás de la serie apuntaron a usar un lenguaje que hasta este momento habían monopolizado los grupos conservadores. De hecho, esta puede ser la razón principal: en lugar de negar el lenguaje del enemigo, copiar su fórmula de éxito hasta la saciedad. Sí, Whatsapp era la gramática por excelencia de los señores sabelotodo y de las tías de ideas anticuadas que replicaban sin un pelo de dudas las cadenas con mensajes políticos a veces ni tan disimulados. Pero ahora que ese medio ha sido contaminado, se han tenido que rebuscar las estrategias: una tutela negada y una contra-serie son ahora las cartas sobre la mesa de quienes se han visto acusados por Matarife. No obstante, parece que el rating de Matarife no va a tener la misma puntuación que en sus primeras semanas. Subversivo y todo, pero a veces la falta de costumbre mata. Copiar la gramática del enemigo pudo ser una jugada maestra no tanto por el alcance en las métricas de públicos (sólo al llegar a la mitad de la temporada sabremos esto), sino por desestabilizar la manera como entendemos WhatsApp: sin dudas, un campo de batalla en aguas internacionales, donde cada grupo es una isla con sus propios manifiestos de odios y simpatías.
WhatsApp, la aplicación de mensajería instantánea más utilizada del mundo, propiedad de Facebook, probablemente seguirá siendo por algunos años más la herramienta de comunicación digital que más medie en nuestras conversaciones virtuales. Los grupos del trabajo, los grupos de amigos, los grupos de clases y las cadenas de memes, información de dudosa procedencia y mensajes religiosos parecen seguir incrementando con los años y no ha pasado nada que indique que los podemos detener. Por eso, y para hacer menos tortuosa nuestra comunicación, elaboramos una guía básica para que incluyan mejorar sus hábitos en WhatsAppNo compartir mensajes políticos o religiosos en el grupo del trabajoLa vieja frase cliché que reza que “es mejor no hablar de política” está mandada a recoger. Hay que conversar, debatir y formar las ideas, confrontarlas y ser capaces de no convertirlo todo en una confrontación personal. Pero para eso hay espacios. Y, a menos que se haya acordado previamente con los miembros del grupo, o que ese sea el tema en el que trabajan, hay que acatar la norma: los grupos de Whatsapp destinados a asuntos prácticos de organización de equipos, muchas veces formados entre gente que apenas se conoce, son la peor opción para difundir las creencias propias. Los contactos de WhatsApp son contactos, no seguidores. Cada que vez que quieran compartir algo recuerden hacer el ejercicio: ¿a mis compañeros de grupo le interesan los salmos del día, la celebración del día del santo patrono, la propaganda política de mi amigo el candidato o que “la luz del señor” se pose sobre todos los miembros del grupo? Aunque se abonan las buenas intenciones, la respuesta, la mayoría de veces, es no. Y tiende a incrementarse entre más gente con diversos intereses participe en el chat. Son las notas de voz, no es un Walkie-talkie El Walkie-takie, una especie de radioteléfono con la misma función que el zapatófono del Superagente 86, fue un juguete muy popular hace unos años. Ahora, desde luego, los celulares opacaron su utilidad, pero los que crecieron entre los 80 y los 90 sabrán que funcionaba oprimiendo un botón mientras se hablaba y lanzando señales para que el otro supiera cuándo responder y cuándo terminaba la conversación: los populares “cambio” y “cambio y fuera”.Puede que sea la nostalgia (o la pereza de escribir), pero desde que WhatsApp incluye notas de voz muchos usuarios han optado por hacer de su celular un Walki-talkie. El resultado: una serie interminable de notas de voz intrascendentes y sin contenido. Si van a hablar única y exclusivamente a través de notas de voz, recuerden primero contar con el tiempo y la disposición del que está al otro lado del teléfono. Recuerden que para alguien que no esté preparado escuchar sus ocurrentes mensajes implica parar la música si está escuchando en el móvil, ubicarse en un espacio sin mucho ruido y, en el caso de la mayoría de lugares en Colombia, verificar que es seguro sacar el celular. Si el mensaje es urgente, desde luego, lo mejor es hacer una llamada.Y, por cierto, tampoco manden mensajes de voz a desconocidos. Corolario: Pensar qué va a decir antes de enviar una nota de vozCasi tan traumático como escuchar notas de voz de un segundo, que solo dicen sí o no, es escuchar mensajes con cavilaciones que duran mucho tiempo y, al final de cuentas, no dicen nada. WhatsApp se trata de conversaciones, no de podcast. Aunque hay historias que lo ameritan. Dejar morir los gemidos Al principio, los audios con gemidos que irrumpían después de una nota de voz y se intensificaban en volumen eran graciosos. Ya no. Ya todos saben cómo suenan. De hecho, ya se conoce hasta el rostro detrás de la mujer de esos gemidos. (Acá se las presentamos)Verificar antes de compartir En Colombia conocimos el miedo que provocan las fake news. Durante las jornadas de protesta en diciembre de 2019, en Bogotá y en Cali, se regó la noticia de que “se estaban metiendo a robar los conjuntos cerrados”. ¿Quién, cuándo, cómo? Nadie nunca supo, pero ejércitos de vecinos salieron a “defender sus cosas”, sin percatarse de que debían defenderse era de las noticias falsas que circularon, en su mayoría, por rumores y cadenas de Whatsapp. Compartir noticias e información de interés es útil y relevante, pero, aunque cada vez es más difícil, hay que aprender a discernir entre la información confiable y la que está diseñada para asustar y crear caos. Respetar los horarios de los demás A pesar de que en Colombia se ha extendido el uso de frases macabras como “estudien, vagos”, “yo sí produzco” o “yo sí trabajo”, hay personas con un mayor grado de sensatez que privilegian, sobre la apariencia de “estar trabajando o produciendo”, las relaciones personales, el ocio, o el tener una vida, tal vez. De hecho, en 2017, en Francia, la ministra del trabajo Myriam El Khomri impulsó una ley para regular la desconexión digital de los trabajadores. La norma entró en vigor el 1 de enero de 2017 y supuso que las empresas debían consensuar con sus empleados un manual de uso de emails, teléfonos móviles o mensajería instantánea para respetar el tiempo de ocio y descanso de los trabajadores. Y aplica también para estudiantes. Por eso, si quieren discutir un informe, poner un trabajo o una tarea, pueden preguntarse: ¿llamaría a esta hora para pedir lo mismo? ¿Puede esperar hasta mañana? Y en el caso de que sea en un grupo: ¿El mensaje le compete a todos los miembros del grupo para que piensen en trabajo a esta hora?No acaparar las gigas del prójimo Uno de los problemas de muchos de los teléfonos móviles es que su capacidad de almacenamiento se agota bastante rápido. En la mayoría de casos, Whatsapp es la tercera o cuarta aplicación que más ocupa espacio en el móvil. Solo después de las carpetas de fotos y videos nativos, las aplicaciones de música y las aplicaciones o archivos de sistema. Y el espacio que ocupa se incremente con cada archivo que se recibe y se envía.Para que WhatsApp no genere problemas de espacio hay varias soluciones. Se puede programar la aplicación para que no guarde los videos recibidos a menos que uno lo elija, se pueden borrar los videos enviados para que no queden duplicados y, ocasionalmente, eliminar las conversaciones viejas. La otra solución es regular la cantidad de videos e imágenes que comparte en sus grupos.
Según lo informó la empresa propiedad de Facebook en un comunicado, una larga lista de teléfonos dejarán de tener disponible la aplicación WhatsApp desde el 1 de febrero. Este fue el mensaje de la compañía: “Ya no desarrollaremos la app para estas plataformas, así que algunas características pueden dejar de funcionar en cualquier momento”. El anuncio cobija tanto a los dispositivos con Android como a los que operan con iOS. En el caso de los Android, los que no servirán más para utilizar WhatsApp serán los que tengan la versión 2.3.7 (o anterior) del sistema operativo. En el caso de los iPhone, los que no servirán más serán los que tengan el sistema operativo iOS 8 y las versiones anteriores. Además, la app de mensajería no podrá ser utilizada en los smartphones que usen Windows Phone con versión menor a la 8.1. 10 razones por las que WhatsApp nos jodió la vida Por lo tanto, los iPhone más antiguos, es decir desde los iPhone 3, iPhone 3GS y iPhone 4 para atrás, que no soportan las más recientes actualizaciones, quedarán inutilies para usar WhatsApp. La lista de dispositivos Android que de ahora en adelante serán incompatibles con la App es, desde luego, mucho más amplia. Pero, por lo general, los teléfonos que tendrán problemas son los lanzados antes del 2010. Esta incompatibilidad abre la puerta a las nuevas actualizaciones en la app. Sus próximas versiones contarán con la opción de decidir si se quiere entrar en un grupo de conversación al que les hayan invitado. También permitirán controlar las llamadas que recibimos a través de la app y nuevos sistemas de seguridad para que nadie pueda leer los mensajes.
La excusa de muchos usuarios para usar Telegram y Snapchat era la opción que daban estas redes sociales para poder enviar mensajes e imágenes que se borran en un tiempo determinado y con las que no queda ningún registro. Pues Whatsapp ya no va a quedarse atrás y es posible que dentro de poco se active una actualización que permitirá a los usuarios poder enviar mensajes invisibles los cuales solo pueden decodificarse con la cámara del celular. Al parecer esto se realizará con una tecnología creada en la Universidad de Columbia llamada FontCode la cual permite esconder mensajes dentro de otro, como la vez que enviaron el punto negro que bloqueaba la pantalla, que en realidad era un mensaje encriptado (El circulo negro de Whatsapp que paraliza su teléfono). Lo que va a pasar al final es que alguien le envíe un mensaje cualquier y hasta que usted no active una aplicación específica no sabrá que existe un mensaje oculto. .
No esté tan seguro del significado que le mete a un emoji en una conversación, hay unos que tienen doble sentido y no precisamente porque sirvan para poner las conversaciones más calientes (Guía básica para tener conversaciones calientes en Whatsapp) Algunas caritas pueden llegar a joder una conversación o demostrar el estado de ánimo de la otra persona. Teniendo en cuenta la variedad de caritas felices que existen debe saber que no todas pueden significar lo mismo y que algunas son solo hipocresía, otras pueden significar felicidad extrema y una que es realmente aterradora de fondo puede traer un mensaje pasivo-agresivo. Sí, una vez más comprobamos que todo no todo lo que brilla es oro, mejor tenga en cuenta nuestra explicación para que luego no se esté quejando si algo falló. No, no es una cara de felicidad. De fondo puede traer una explosión de emociones y la verdad es que no del todo buenas. Haga de cuenta que esa carita es como cuando usted le pregunta a su novia, después de notarla rara: “¿amor te pasa algo?” y le responden “no, nada” … lo mejor es cerrar la conversación y salir corriendo. . No, no es una carita feliz normal. Esto significa que se viene la tercera guerra mundial y que en cualquier momento puede explotar una bomba disfrazada de tratado en su Whatsapp Mire es muy fácil: si en una discusión le echan en cara algo y seguido le mandan esa carita lo más probable es que le estén diciendo muy debajo de letras “si ve, tengo la razón”. Si al final de una conversación en la que se calentaron los humos la otra persona o usted manda este emoji, de por sentado que todo se fue a la mierda. Mire si lo usa muy mal puede solo significar: “me acaba de volar la cabeza”… todo se fue a la mierda Ya qué. ¡que cagada! "No lo estoy tomando en serio, pero todo bien" Si lo que quiere decir es que no entiende es mejor que busque otra opción, las manos así solo pueden significar: "¿y a mi qué me importa?" Muy indicado si lo que quiere decir es: "estoy a esto de perder la paciencia" No, no es un simple adiós... es un gran manotazo y posiblemente una cachetada para que despierte. Si usted no está en embarazo tenga claro que le están diciendo
A propósito de la conmemoración del día del internet, el diario argentino El Clarín realizó un completo informe sobre las desbordadas cifras que quedan a diario por el uso del Internet en el mundo. La realidad supera la ficción y de seguro estos números no los podrá superar ni Despacito de Luis Fonsi. Según el estudio realizado por la agencia Visual Capitalist, cada minuto se reproducen 4,5 millones de videos en YouTube, se envían 188 millones de correos electrónicos en Gmail y se buscan 3,8 millones de cosas en Google Y esto no es nada comparado a los números que dejan las redes sociales: se envían 41.6 millones de mensajes por WhatsApp y por Messenger de Facebook cada minuto, en ese mismo tiempo 87.500 personas tuitean y 347.222 dan likes en Instagram. Es decir que mientras usted leía esta nota se estaban moviendo unas 42 millones de interacciones en internet. Y como ñapa nos soltaron las cifras de Netflix, cada 60 segundos en la plataforma se reproducen 694.444 horas de visualización, mientras que en Google Play y App Store se descargan más de 390.000 aplicaciones de todo tipo.
Hoy nos parece dificil imaginar la vida sin WhatsApp, una aplicación que cambió la mensajería instantánea para siempre. Esta app nos facilitó enormemente la manera de comunicarnos (y de paso nos hizo estar cada vez más conectados al celular). Con motivo de décimo aniversario de su lanzamiento inicial (24 de febrero de 2009), aquí le contamos algunas cosas que tal vez no sabía de WhatsApp y lo importante que es en nuestras vidas. WhatsApp fue fundada por Brian Acton y Jam Koum, 2 antiguos empleados de Yahoo. Enviaron su hoja de vida a Facebook pero fueron rechazados. El usuario promedio pasa en WhatsApp un promedio de 195 minutos semanales. Cada minuto y medio en el mundo se envían 50 millones de mensajes. Un 30 por ciento de las selfies que se comparten en Internet se comparten en WhatsApp. El usuario promedio mira WhatsApp unas 23 veces por día. En WhatsApp trabajan cerca de 55 personas. Inicialmente, WhatsApp era gratuita el primer año, pero el usuario debia pagar después de 365 días. Hoy sigue siendo gratuita, sin importar el tiempo que pase. India es el país con el mayor número de usuarios de WhatsApp. Cada día en el mundo se comparten unos 100 millones de mensajes con video. El usuario promedio envía unos 1000 mensajes al mes.
Pronto Whatsapp lanzará un catálogo con 230 nuevos emojis y como en esta generación se le presta tanta atención a estas imágenes que se envía vía chat, Facebook decidió tomar en cuenta la petición de una ONG australiana en cuanto a normalizar los síntomas pre menstruales y la menstruación en sí y juntos crearon un emoticón que representa esos días del mes. Pero no fue así de fácil, Plan Internacional, la ONG, que lucha por los derechos de las mujeres tuvo que recoger 55 mil firmas de mujeres de todo el mundo bajo el argumento: “esta acción busca que todas las mujeres se sientan cómodas con su período menstrual, así como romper el estigma y el tabú que existe alrededor de una función biológica que es tan natural y normal como respirar”. La sociedad que censura a la menstruación En 2017, la ONG realizó convocatoria en Facebook para que los usuarios votaran entre cinco diseños animados. El que más votos obtuvo fue un calzón manchado con sangre. Sin embargo, Unicode propuso que el emoji fuera solo una gota roja, la cual afirman los usuarios pueden darle cualquier connotación sin perder la fuerza del mensaje. Vea también: Practicar sexo oral durante la menstruación es saludable
La Profeco (Procuraduría Federal del Consumidor de México) y la tiquetera Ticketmaster llegaron a un acuerdo para poner fin a una demanda colectiva que involucra a más de 500 consumidores, con un total de reembolsos que supera los 3.4 millones de pesos mexicanos (cerca de 693 millones de pesos colombianos). Profeco instó a los consumidores afectados por la cancelación unilateral de boletos por parte de Ticketmaster durante todo el año pasado a presentar su documentación para reclamar sus reembolsos pendientes, según reportó El Economista, que calificó la demanda como inédita para el entretenimiento. Se acordó que aquellos que demostraran la cancelación de sus boletos recibirían el reembolso completo, incluidos los cargos por servicio, además de una bonificación del 20% según lo estipula la ley. No es la primera vez que Ticketmaster enfrenta una demanda de consumidores. En 2023, la empresa tuvo que reembolsar a más de 2,155 personas por problemas en los conciertos de Bad Bunny, donde muchos fanáticos no pudieron ingresar debido a fallas en el sistema. En total, Ticketmaster tuvo que devolver más de 18 millones de pesos mexicanos a los seguidores del artista.Antes de iniciar el show de Bad Bunny en diciembre de 2022, el estadio no se veía lleno, pero no era por falta de venta: los conciertos de Bad Bunny en México se agotaron en cinco minutos hace más de 10 meses.Lo que resultó fue que TicketMaster México tuvo fallas en su sistema y contó como falsos o duplicados algunas entradas que fueron adquiridas de forma legal. Los encargados de logística no permitieron la entrada al estadio a nadie que su tiquete no arrojara luz verde. Miles de personas se quedaron sin ver a Bad Bunny a pesar de haber adquirido su boleta de forma directa.La demanda a Ticket Master del Departamento de Justicia de Estados Unidos El Departamento de Justicia de Estados Unidos planea presentar una demanda antimonopolio contra el promotor de conciertos Live Nation, propietaria de la tiquetera Ticketmaster, de acuerdo con un reporte de The Wall Street Journal. Las acusaciones específicas siguen sin estar claras y el momento de presentar una demanda es incierto. El Departamento de Justicia se negó a hacer comentarios,según el medio.¿Por qué las críticas a Live Nation y Ticketmaster?Desde hace varias décadas, varias voces en la industria de la música han considerado que Live Nation ejerce un poder desmesurado en el entretenimiento en vivo.Live Nation y Ticketmaster se fusionaron en 2010 y ahora se anuncia como la "compañía de entretenimiento en vivo más grande del mundo".Las críticas alcanzaron un punto alto en noviembre de 2022 después de que el sitio web de Ticketmaster colapsara debido a una demanda extraordinaria de entradas para la gira Eras de Taylor Swift. En ese momento, el Departamento de Justicia estaba investigando a la empresa.Los legisladores estadounidenses interrogaron a los ejecutivos de Live Nation en una audiencia en enero de 2023 que unió a demócratas y republicanos sobre el dominio de la industria de la compañía que, según los críticos, está perjudicando a rivales, músicos y fanáticos.Posteriormente, los fanáticos de Swift demandaron a Live Nation por “conducta ilegal” en la caótica venta de la gira de la artista, y los demandantes alegaron que el gigante de la venta de entradas violó las leyes antimonopolio, según CNN.
Entre todas las tendencias de redes sociales, por estos días hay una que llama la atención: "Mira entre las letras de tu teclado". La idea es dar algún mensaje dentro de las letras en el rango descrito. Uno d elos ejemplos más frecuentes es el de "mira entre la h y la l en tu teclado" para decir "jk" o "just kidding" (solo bromenado en inglés). De momento, los usuarios señalan letras para las iniciales de nombres de personajes memorables, celebridades o figuras públicas, sin embargo, no ha sido del todo claro para muchos. ¿De dónde viene la tendencia de Mira entre las letras de tu teclado?De acuerdo al sitio Know Your Meme, que rastrea los orígenes de memes y tendencias en Internet, un usuario de la plataforma 4 chan posteó el 11 de mayo del 2021 una imagen con la figura de Yui Hirasawa, protagonista del anime K-On!.Esta imagen solo venía acompañada con un texto que decía “Mira entre la t y la o en tu teclado”. Con eso, se forma Yui, el nombre de un personaje.Sin niguna razón aparente, el post volvió a X (Twitter), en referencia a personajes de My Hero Academia: Izuku (Midoriya) y Uraraka (Ochaco). Entre el 17 y el 19 de abril se ven las primeras publicaciones al respecto.El trend también está Reddit, Twitter y otras plataformas y en distintos idiomas. Sobre K-On!K-On! es una serie de manga que comenzó a serializarse en la revista seinen Manga Time Kirara desde mayo de 2007. Una adaptación a serie de anime de 12 episodios se emitió originalmente entre abril y junio de 2009.La serie narra la historia de 4 jóvenes de colegio que buscan hacer su propia banda. El apellido de Yui está basado en el guitarrista de la banda japonesa de techno-pop P-Model, Susumu Hirasawa.
Para los y las que les gusta leer un libro y después verse la adaptación en película o serie, les tenemos el parche. En Netflix muchas de las producciones más populares han sido inspiradas en libros. Producciones que han llegado a ser número uno, como Secuestro del vuelo 601, nacieron de investigaciones o novelas de grandes autores. De hecho, las adaptaciones de Netflix están impulsando las listas de libros más vendidos y, a mi forma de ver, le han dado vida a historias icónicas como lo veremos este 2024 con Cien años de soledad, la novela más reconocida del autor colombiano Gabriel García Marquez. Así como es cierto que muchas adaptaciones no le son fiel a los libros y decepcionan a sus fanáticos, también es un hecho que Netflix ha logrado reconocimientos muy grandes con estas producciones. Por ejemplo, en los Oscar 2024, La sociedad de la nieve, película basada en el libro que cuenta la historia de los sobrevivientes de los Andes, fue nominada a Mejor Película Extranjera. Amantes de los libros, les digo que se pueden llevar gratas sorpresas con esta ola de adaptaciones que está llegando a la plataforma de Netflix. Acá les dejamos seis opciones que sí o sí tienen que leer y ver. SECUESTRO DEL VUELO 601Esta miniserie colombiana de Netflix ha dado mucho de qué hablar. La historia, protagonizada por Monica Lopera, Angela Cano, Valentín Villafañe y Christian Tappan, está inspirada en el secuestro del avión HK–1274 de la Sociedad Aeronáutica de Medellín en mayo de 1973. En cada episodio se deja claro que, aunque la serie está basada en hechos y personajes reales, por efectos de la dramatizaciones, algunos personajes, incidentes, lugares y diálogos son ficticios. Lo que pocos saben es que la serie se inspiró y basó específicamente en Los Condenados del Aire, el libro del periodista italiano Massimo Di Ricco. En este trabajo, Di Ricco reconstruye el fenómeno de aeropiratas que actuaron en Latinoamérica. La historia del secuestro del vuelo 601 no fue única y tampoco está aislada. Como explica el periodista en su libro, entre 1967 y 1973 hubo alrededor de 90 secuestros de aviones en Latinoamérica y cerca de 30 de ellos ocurrieron en Colombia.LA SOCIEDAD DE LA NIEVEA principios del 2024, la película de Netflix La sociedad de la nieve dejó sin palabras a más de uno. Esta es una excelente producción en la que, durante dos horas y veinticuatro minutos, se retrata la experiencia de los 16 sobrevivientes del equipo de rugby que se extravió en los Andes después de un accidente de avión. Los sucesos reales son crudos y desoladores y la película, sin irse por el lado del morbo usando descripciones demasiado gráficas, es fiel al infierno que tuvieron que pasar los sobrevivientes. Esto, además de lograrse gracias a la producción en sí, fue también gracias a Pablo Vierci (escritor, periodista y guionista uruguayo) el autor del libro homónimo publicado en el 2008. Para serle fiel a los hechos, Vierci viajó con un grupo de sobrevivientes a la montaña y escuchó como cada uno recordaba los setenta y dos días que estuvieron a la deriva en la cordillera. La sociedad de la nieve se empezó a escribir desde 1973 y se publicó muchos años después. Un libro que recoge muy bien, no solo los hechos y las batallas que tuvieron que afrontar los uruguayos, sino los sentimientos de cada uno en el limbo. La película fue nominada a Mejor Película Extranjera en los Oscar 2024. LA LUZ QUE NO PUEDES VEREsta historia está ambientada en Francia durante la Segunda Guerra Mundial. La luz que no puedes ver narra en paralelo dos experiencias. Por un lado, la de una joven francesa ciega que, junto a su padre, huyeron de París cuando los Nazis invadieron la ciudad. Por el otro, la vida de un joven alemán reclutado por el ejército para rastrear emisiones de radio ilegales y así derrocar a la Resistencia Francesa. La producción se basó en novela homónima, escrita por Anthony Doerr, ganadora de un Premio Pulitzer en el 2015. Un libro muy alabado por los jurados del premio ya que, en sus palabras, "“es una novela imaginativa e intrincada sobre los horrores de la Segunda Guerra Mundial, escrita en capítulos breves y elegantes que exploran la naturaleza humana y el poder contradictorio de la tecnología". La adaptación para Netflix de este libro estuvo en manos de Shawn Levy, director, productor y guionista canadiense detrás de producciones como Stranger Things. ORANGE IS THE NEW BLACK Muy pocos saben que serie que revolucionó al público, entre el 2013 y el 2019, con la historia de Piper Chapman, una joven que debe pagar tiempo en prisión por los delitos de su ex novia, Alex Vause, está inspirada en un libro. La trama, que sigue la vida de todas las reclusas en la prisión de Litchfield, Nueva York, explora la violencia, el arrepentimiento, el amor y la importancia de las relaciones. Aunque Chapman y Vause son las protagonistas de la serie, cada capítulo cuenta la historia de una de las reclusas evidenciando como, muchas veces, una vida dura e injusta lleva a malas decisiones. El libro que inspiró la serie es Orange Is the New Black: Crónica de mi año en una prisión federal de mujeres, una crónica en donde Piper Kerman cuenta su propia experiencia con el narcotráfico, el lavado de dinero y, como consecuencia, su condena en una prisión federal de mujeres. Una crónica fiel de la reclusión: los retos que se deben enfrentar a diario y la transformación que conlleva estar privada de la libertad. LA MUJER EN LA VENTANAAnna Fox es una psicóloga infantil que sufre de agorafobia (un trastorno de ansiedad) por una experiencia traumática. Ese pánico la hace vivir sola, en su apartamento en Nueva York, desde donde le toma fotos a sus vecinos y espía sus vidas. Todo cambia cuando escucha un grito que viene desde la casa de los Russell. Anna presencia un aterrador acto de violencia que la hará preguntarse si lo que vio realmente sucedió. Si son amantes de los libros, este seguro lo vieron en los estantes principales de las librerías. La mujer de la ventana fue la primera novela de A.J. Finn que no tardó mucho en convertirse en un best seller. Se publicó en más de cuarenta idiomas y se adaptó a la pantalla con la actuación de Amy Adams, Julianne Moore y Gary Oldman. THE SINNEREsta es una de las mejores series que he visto en Netflix y es muy poco conocida. Cada temporada es un caso de misterio bien bizarro que el detective Harry Ambrose debe resolver. Cada historia es un cuestionamiento que, aunque se exagera por función a la dramatización, nos lleva a pensar en los humanos, las sociedades, las culturas y, sobre todo, los extremos a los que hemos llegado. Petra Hammesfahr escribió la novela homónima de thriller psicológico, que se convirtió en un bestseller internacional, en la que se basó la serie. En una tarde de verano, Cora Bender mata a puñaladas a un completo desconocido en la playa. ¿Por qué lo hizo? Aunque la joven se declara culpable, el policía Harry Ambrose sabe que hay algo detrás de este crimen sin motivo aparente. Por eso, se niega a cerrar la investigación hasta entender por qué Cora mató a alguien enfrente a su familia. Una historia que termina revelando la psique de Cora y su traumático pasado. ***Les recomendamos: Las 30 mejores series para ver en Netflix en 2024
La creadora de contenido mexicana Wendy Guevara compartió escenario con Madonna durante el show en México de la reina del pop.Guevara fue la invitada principal en la pasarela de Madonna donde interpretó su emblemática Vogue, uno de los hits más importantes de Madonna. ¿Quién es Wendy Guevara?Wendy Guevara es la ganadora de La casa de los famosos México. Es la primera mujer trans en ganar este reality, y de hecho, cualquier reality mexicano en televisión abierta.Desde los primeros episodios, Wendy cautivó al público con su carisma y espontaneidad. Fue una de las participantes favoritas a lo largo del programa, que otorga un premio de cuatro millones de pesos mexicanos, cerca de 235.000 dólaresSu triunfo ha sido celebrado como un hito para la representación trans mexicana y latinoamericana.Wendy Guevara es una creadora de contenido mexicana. Se dio a conocer por un video que llegó a las redes sociales en 2017, cuando ella y su amiga Paola Suárez piden ayuda tras ser “abandonadas” en un cerro en León, Guanajuato. De ahí surgió un audio que decía “estamos perdidas, perdidas, perdidas”, y se hizo viral.Más tarde, se unió a ellas Kimberly Irene, y juntas formaron un grupo conocido como “Las Perdidas”.También se hizo conocida por un meme que ganó fuerza en 2022. La foto nació por un video que ella misma publicó en su canal de YouTube, donde está hablando a la cámara mientras su amiga toma un baño. Su gesto de desagrado se conviritó en uno de los memes más populares de 2022.Nació en agosto de 1993, y desde chiquita, una de las novelas que más le gustaban era Amigas y Rivales, fue el personaje que interpretaba Angélica Vale, el cual se llamaba Wendy Nayeli.“Yo crecí con todos esos programas, con las novelas de Amigas y rivales y todo eso. Es bien linda la Michelle Vieth. Yo me sentía Michelle Vieth en la novela, yo decía que yo era ella, y yo estaba chiquilla”, comenzó. “Pero me pusieron ‘Wendy Nayeli’ por el personaje de Angélica Vale que hacía de sirvienta. Yo le barría a una amiga su estética, y se me quedó Wendy Nayeli, por la culpa de Angélica Vale, te lo juro. Todos me decían ‘Wendy’”.En un episodio de La casa de los famosos, Wendy también narró que fue víctima de abuso sexual cuando era menor de edad."Cuando me violaron sí fue distinto, fue un muchacho ya mayor de edad wey (...) Cuando me llevó la policía fue lo peor, yo temblaba del miedo". También contó que fue revictimizada durante la revisión médica.¿Por qué Vogue fue tan importante para el pop? Esta canción llevó al “mainstream” el vogueing, un estilo de baile que se originó en los salones de baile (“ball rooms”) en Nueva York que nacieron desde los 60. En estos espacios alternativos, afros y latinos podían expresar libremente su orientación sexual o identidad de género, sin temor a ser discriminados o estigmatizados.El vogueing consiste en imitar los movimientos de las modelos posando como en la revista Vogue. Junto al documental Paris is Burning, Vogue de Madonna visibilizaron una de las manifestaciones culturales más representativas del movimiento LGBTI, que aquel momento luchaba por un anhelado y necesario reconocimiento en la sociedad.Además de Vogue, sus declaraciones a favor de la lucha contra el SIDA, cuando nadie más lo estaba haciendo, hicieron de Madonna un icono gay, y así se mantiene hoy. Pero Madonna no se limitó a copiar los pasos del vogueing ni mucho menos a apropíarselo. Para las coreografías de la gira, la reina del pop recurrió a Luis Camacho y José Gutierrez (conocidos como José y Luis Xtravaganza), 2 figuras prominentes de la escena “ball room”.
Con motivo de los 25 años del estreno de Star Wars: Episodio I -La Amenaza Fantasma, la película regresará a las salas de cine, según lo confirmó Cine Colombia en su cuenta de Instagram. De momento se sabe que la película estará disponible a partir del 2 de mayo, aunque no se conoce en qué salas. La película se estrenó originalmente en cines colombianos en junio de 1999. Star Wars: Episodio I -La Amenaza Fantasma es la cuarta película de la serie de películas de Star Wars, la primera película de la trilogía precuela y el primer capítulo cronológico de la Saga Skywalker. Ambientada 32 años antes de la trilogía original (13 años antes de la formación del Imperio Galáctico), durante la era de la República Galáctica, la trama sigue al Maestro Jedi Qui-Gon Jinn y su aprendiz Obi-Wan Kenobi mientras intentan proteger a la Reina Padmé Amidala de Naboo con la esperanza de asegurar un final pacífico a una disputa comercial interplanetaria. Junto con Anakin Skywalker, un joven esclavo con poderes naturales inusualmente fuertes de la Fuerza, simultáneamente se enfrentan al misterioso regreso de los Sith.El legado de Star Wars: Episodio I -La Amenaza FantasmaEpisodio 1 fue un éxito de taquilla. Con un presupuesto de 115 millones de dólares recaudó más de 1000 millones en todo el mundo y fue la más exitosa en su año de estreno. Sin embargo, muchos de los más fieles fans no quedaron del todo satisfechos. En su momento, la película fue elogiada por sus efectos especiales, pero, como recuerda Luke Holland en The Guardian, los meses posteriores al estreno de la película, la opinión cambió. Pero, como agrega Holland, "La amenaza fantasma, sin embargo, no está nada mal. Liam Neeson y Ewan McGregor son excelentes. Cuenta una historia satisfactoria y cerrada. Su acción se maneja con rapidez y estilo. Y, desde la muerte de Qui-Gon hasta que la madre de Anakin lo abandonó, ocasionalmente incluso logra tocar la fibra sensible del viejo corazón. A pesar de los Gungans, es una película de Star Wars muy sólida".