En el concierto de Slash, muchos esperaban oír todos los hits de Guns and Roses. Y aunque no hubo muchos clásicos (solo Nightrain, para los más nostálgicos), los fans salieron con una gran sonrisa en sus rostros. Habían sido testigos de una descarga absoluta de rock and roll.
A Slash lo acompañó la banda Myles Kennedy and the Conspirators. El guitarrista de Guns N' Roses demostró por qué es considerado uno de los mejores guitarristas de la música hoy. Sus solos contundentes de varios minutos de duración dejaron al público boquiabierto y ratificaron su talento y destreza.No cualquiera se le mediría a ser frontman con un guitarrista como Slash. Pero Myles Kennedy estuvo a la altura y se ganó al público a pulso. El bajista, Todd Kern, también fue fuertemente ovacionado.
El concierto arrancó con The Call of The Wild, de su más reciente disco Living The Dream. Fueron en total 21 las canciones que interpretó la banda en un show extenso cercano a las 2 horas, en las que los asistentes no pararon de cabecear, saltar, bailar y cantar.
Myles reconoció a las 2 baldas teloneras que estuvieron antes que ellos: los colombianos de Oh’ La Ville, y Blackberry Smoke, de Atlanta (Georgia), una banda que con su sonido rock-folk hizo la apertura perfecta para el épico show que estábamos a punto de ver.
Un show inolvidable no solo para los fans de rock clásico, sino para los admiradores de la fuerza y la destreza de los buenos músicos.
Fotos: Katherine Fresneda // @ktfresneda
