Esta semana la prensa mundial incluyó en su agenda el conflicto Israel-Palestina con un elemento diferenciador: vimos, a través de redes sociales, el ataque del grupo armado Hamas a un festival de música en Israel.
En un tablero de guerra en apariencia lejano, ver las imágenes de los jóvenes asistentes al festival Supernova corriendo para proteger su vida parece acercarnos al conflicto. Es un escenario conocido para nosotros.
Pero para analizar el significado de esas imágenes hay que tener en cuenta varios elementos.
Primero, el ataque impactó el circuito de festivales dejando víctimas en varios países; entre ellos, Colombia.
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“El conflicto tocó a Colombia cuando supimos de la muerte de Ivonne Rubio”.
Así comienza el reportaje que hace Noticias Caracol sobre las víctimas colombianas que estaban en el festival.
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El reportaje cuenta tres historias con los tres posibles resultados del ataque. Ivonne Rubio asesinada, el esposo de Rebeca González secuestrado y Laura Malo a salvo tras escapar.
Son testimonios de caras y acentos cotidianos que interpelan nuestra visión de ese conflicto a través de un espacio común: el festival de música.
Éxodo: el contexto del festival
El festival Supernova tuvo lugar los días 6 y 7 de octubre en Re'im, una zona boscosa ubicada a 6 kilómetros de la franja de Gaza.
La gira mundial que enmarca el evento se llama "Universo Paralello" y está enfocada en la música psytrance.
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Incluía DJs de varias partes del mundo occidental, dos escenarios, una zona de arte y descanso, y coordinación con el ejército israelí en cuestiones de seguridad.
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Las fechas en las que se llevó a cabo el evento se corresponden con el final del Sukkot, una festividad judía que dura 7 días y recuerda los 40 años de éxodo del pueblo de Moisés por el desierto.
Durante este período se realizan varios rituales, como es tradición en la cultura judía. Después del Sukkot, se celebra el Shemini Atzeret, una festividad que marca el final de Sukkot y que incluye fiestas y una vigilia nocturna.
Al día siguiente, comienza Simjat Torá, un evento en el que se concluye la lectura del libro judío y se inicia de nuevo, marcando el comienzo de un nuevo ciclo.
El festival se llevó a cabo en el contexto de estas festividades, entrelazando las tradiciones judías y la cultura rave.
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¿Cómo fue el ataque al festival Supernova?
A las 6:30 de la madrugada del sábado 7 de octubre el grupo Hamas inició la operación "Diluvio Al'qasad", una ofensiva sin precedentes en todo el territorio ocupado por Israel.
El ataque al festival estaba minuciosamente planeado y burló la inteligencia militar Israeí. Al parecer, usaron técnicas de comunicación análoga para coordinar el operativo.
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Cabe destacar que era una fecha significativa, pues, hace 50 años, en esta misma fecha, se desencadenó la Guerra de Yom Kipur.
¿Por qué había un rave a 6km de un “campo de concentración”?
Los raves son eventos de proyección futurista. Son escenarios en los que se plantean utopías y se difuminan las fronteras.
La libertad es un lema predominante en la cultura rave, y existe una atracción por celebrar fiestas en lugares marcados por tensiones políticas.
El festival Supernova se realizó a 6 km de un sector que tiene todas las características de un campo de concentración.
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Un escenario de privación de libertad con condiciones sumamente inhumanas recibió un acercamiento de un escenario de “libertad”, materializado en un festival.
Pero este despliegue de la libertad occidental en la frontera de la franja de Gaza desconoce la realidad que enfrenta un pueblo históricamente asediado.
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Esta puesta en escena del rave en una zona de guerra se debe, en mi opinión, a la falta de conciencia de clase que atraviesa el movimiento neohippie en su búsqueda por valores románticos sin pensar en las condiciones materiales propias ni ajenas.
Tal como lo dice el nombre de la gira: estaban en un Universo Paralello.
La responsabilidad de la cultura rave
La cultura rave debe asumir la responsabilidad de comprender las implicaciones políticas y territoriales de sus eventos.
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En este caso, algo básico: saber qué es la franja de gaza y qué implicaciones tiene llevar un escenario de despliegue de “libertad” individual a 6 km de un territorio en disputa en el que reina el sometimiento.
Entre los múltiples crímenes de guerra cometidos en este conflicto, este sobresale por las imágenes de una cotidianidad que conocemos. En hechos igualmente repudiables atacaron a gente que podríamos encontrar en un concierto, una fiesta o un festival. Curiosamente, los crímenes de guerra contra la gente del medio oriente, en contextos festivos lejanos para nosotros, pasan desapercibidos para la agenda periodística. No son noticia.
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