Curiosamente, en la tierra de las chuzadas del DAS, como en el resto del mundo, la actualización de los términos y condiciones de uso de WhatsApp hizo que se despertara el interés por la privacidad en las aplicaciones para dispositivos móviles. De hecho, muchos usuarios se quieren trastear de servicio de mensajería. Acá les explicamos de qué se trata el cambio y cuáles son las alternativas. Por Juan Camilo Ospina DeazaPor muy paradójico que suene, la noticia de los cambios en los términos y condiciones de WhatsApp nos ha obligado a tomar conciencia frente a la desigualdad de condiciones entre las grandes empresas y los usuarios.La respuesta de las aplicaciones ante cualquier actualización, en últimas, es básicamente siempre la misma: “si no le gusta no la use”. No hay más opciones disponibles si uno quiere continuar. No hay una caja de sugerencias para negociar las condiciones. No hay un número al que pueda marcar para que un experto de WhatsApp me explique sus condiciones de uso. Por lo general, la premura por continuar el uso de un servicio como WhatsApp hace que los usuarios no estudien al detalle reglamentaciones, condiciones de uso y posibles consecuencias del uso de las aplicaciones. Por eso les contamos cuáles son las nuevas condiciones de uso de WhatsApp, sus implicaciones, algunas aplicaciones alternativas y cuáles son los problemas de seguridad informática que ellas representan.¿Cuáles son los cambios en la privacidad de WhatsApp?Los cambios de privacidad de WhatsApp son consecuencia de su compra por parte de Facebook en febrero del 2014. Es decir, ya venían ocurriendo y en últimas no traen muchas novedades. La nueva política, de hecho, cuenta cómo los datos del usuario se ven afectados cuando hay interacción con una empresa en la plataforma y proporciona más detalles sobre la integración con Facebook, empresa matriz de WhatsApp.Pero hay que recordar que el intercambio de datos con Facebook ya se estaba produciendo. Los usuarios de la Unión Europea pueden optar por no compartir datos con Facebook, pero el resto del mundo no tiene la misma opción.WhatsApp comparte la siguiente información con Facebook y sus otras empresas: Información de registro de la cuenta (número de teléfono)Datos de transacciones (WhatsApp ahora tiene pagos en India)Información relacionada con el servicioInformación sobre cómo interactúa con otros (incluidas las empresas)Tipo de dispositivo móvilDirección IP (Y también está recopilando ahora más información a nivel de hardware de dispositivo)En general, WhatsApp no está implementando nada que no hagan las demás redes sociales que ya utilizamos. Como debería ser bien sabido, el negocio de las aplicaciones "gratuitas" radica en que nuestra información es el negocio.Las empresas tienen que buscar tipos de retribuciones por parte de los usuarios. De allí que Instagram, Facebook y Google tengan grandes cantidades de información sobre nosotros. O como dice la periodista Mollye Barrow:Este cambio de WhatsApp preocupa a muchos, más que nada, por los conocidos problemas que ha tenido Facebook. Desde acusaciones por ostentar el monopolio en Estados Unidos de servicios en la red, pasando por el papel que ha tenido en la influencia a campañas electorales (entre ellas la de Trump), hasta malas prácticas en el manejo de la seguridad de los datos.Aunque Facebook ha tenido que pagar grandes sumas de dinero en acuerdos y multas, estos pagos no han cambiado drásticamente ni su funcionamiento ni su manejo de datos. Y WhatsApp también sufrió una violación de la privacidad: algunos grupos de chat privados indexados se encuentran en el motor de búsqueda de Google. En Netflix se pueden encontrar algunos documentales que tratan estos conflictos como Social Dilema y The Great Hack. Estos documentales revelaron, quizás por primera vez para algunos espectadores, cómo las redes sociales usan los algoritmos para hacer que la gente regrese estableciendo una relación de dependencia. También muestran cómo las empresas de tecnología han influido en las elecciones, la violencia étnica y las tasas de depresión y suicidio. Ante estas acusaciones Facebook afirmó que “En lugar de ofrecer una visión matizada de la tecnología, ofrece una visión distorsionada de cómo funcionan las plataformas de redes sociales para crear un chivo expiatorio conveniente para problemas sociales difíciles y complejos”.Cada vez más existe la preocupación sobre cómo regular el tiempo que se pasa en las aplicaciones. Sin embargo, a las compañías les conviene exactamente lo contrario, que cada vez les demos más nuestro tiempo y atención. Para ello usan estrategias que permiten asegurar el flujo de dopamina en el cerebro. ¿Alguna vez se han visto levantando el celular por reflejo, para solo ver la hora o por si algo está pasando? ¿Cuándo fue la última vez que hicieron la fila del banco o espero a alguien sin ver el celular? Al mejor estilo de las ficciones más distópicas, no es difícil encontrar en Google artículos como “Retener usuarios de aplicaciones. Estrategias para mantener tus usuarios de por vida”. Esta insistencia por enganchar a los clientes se debe a que la atención significa tiempo de publicidad, la posibilidad de compra y datos sobre el comportamiento de los individuos.¿Cuáles son las mejores aplicaciones de mensajería instantánea, alternativas a WhatsApp?Aunque WhatsApp es una de las aplicaciones que más utilizamos en la cotidianidad, podemos encontrar otras alternativas, pero a su vez otras condiciones y formas de administración de nuestros datos. Para aquellos que quieran cambiarse y no suministrar sus datos al monopolio de Facebook, existen opciones como Telegram, Signal, Viber, LINE, kakaotalk Messenger, Skype o Wechat. Sin embargo, es difícil encontrar alguna que no tuviera problemas respecto a prácticas de privacidad. TelegramComencemos con la alternativa más popular tras el pánico extendido por la actualización de WhatsApp: Telegram. (Lean también: Telegram registró récord de usuarios. 10 ventajas frente a WhatsApp)Esta aplicación usa cifrado de extremo a extremo, al igual que WhatsApp y Signal. Este tipo de cifrado convierte los mensajes en un código sin la ayuda de un servidor en el medio, lo que hace casi imposible obtener acceso a la comunicación entre dos usuarios sin su consentimiento. Es considerado una de los mas seguras, hasta tal punto que grupos extremistas islámicos la han utilizado por su capacidad de mantener conversaciones secretas en mensajes fuertemente encriptados.Pero proporcionar una plataforma que permita a los usuarios evadir el escrutinio oficial ha traído sus propios problemas. En los últimos años, el Estado Islámico ha utilizado Telegram para organizar complots terroristas, difundir propaganda y responsabilizarse de los ataques. Por el mismo motivo, la policía coreana ha tenido problemas identificando a decenas de víctimas, incluidos menores, vinculados a salas de chat de “pago para ver” operadas en la aplicación. Esto es un problema tan grande que el gobierno ruso y el Chino han hecho esfuerzos por bloquear Telegram. Como podemos ver con este caso, la regulación de estas aplicaciones pone en conflicto la libertad de expresión con la seguridad.WeChatEn el otro lado del espectro está Wechat. Esta aplicación es una de las más populares en China. Esto último es problemático porque, como explica la Oficina de Información del Consejo de Estado Chino: “dentro del territorio chino, Internet está bajo la jurisdicción de la soberanía China”. Esto quiere decir que el Estado Chino participa en una amplia gama de actividades en línea que incluyen, entre otras cosas, requisitos de localización de datos para empresas nacionales y extranjeras. Bajo el argumento de la seguridad nacional se puede socavar la seguridad de la información. Esto ha tenido importantes impactos como censuras, toma de datos de individuos, entre otros.Como explica en un informe Citizen Lab, un centro de investigación que forma parte de la Universidad de Toronto, “los documentos e imágenes compartidos entre cuentas no registradas en China están sujetos a vigilancia de contenido y se utilizan para construir la base de datos que WeChat utiliza para censurar las cuentas registradas en China".¿Vale la pena preocuparse por nuestros datos?Mucho se habla de la educación financiera, de la educación emocional, pero aún así somos felices desconociendo las condiciones del uso del mundo informático. Es importante indagar por las implicaciones que tienen las diferentes aplicaciones y tecnologías que utilizamos en el día a día. Sin embargo, esto no es suficiente. Existe una relación desigual entre las grandes compañías y las posibilidades de los usuarios. En la mayoría de ocasiones los usuarios son también productos, lo que lleva a que existan prácticas difíciles de comprender. Por un lado, hay aplicaciones en las que se viola la seguridad de los datos y son usados para lograr mayores ventas y censuras sin nuestro consentimiento. Por otro lado, hay aplicaciones que logran una gran confiabilidad, pero tienen la consecuencia que no se puede hacer un seguimiento de prácticas ilegales.No existe un lugar donde dar sugerencias o negociar condiciones. Hemos llegado al punto en el que las sanciones que puedan hacer países no son suficientes. Así como tampoco se convierte en una opción para los usuarios el decidir no tener ninguna de estas aplicaciones, ya que de una u otra manera todos dependen de la comunicación virtual para agendar reuniones, estar en contacto con allegados que están en el exterior, programar trabajos en grupo, recibir información para hacer compras en línea, hacer negocios o proyectos con personas que están en espacios geográficamente separados, etc. Por lo tanto, no es tan fácil responder “no acepto sus condiciones”. Tal vez estos debates que nos están inquietando tanto para lo único que nos sirvan es para reflexionar acerca de formas colectivas de gestionar nuestros datos y sobre el lugar de los estados y las organizaciones privadas en nuestra privacidad.
Por estos días, la app de mensajería Telegram registró un récord de 25 millones de usuarios nuevos en las últimas 72 horas. “En la primera semana de enero, Telegram superó los 500 millones de usuarios activos mensuales. Después de eso, siguió creciendo: 25 millones de nuevos usuarios se unieron a Telegram solo en las últimas 72 horas. Estos nuevos usuarios procedían de todo el mundo: el 38% de Asia, el 27% de Europa, el 21% de América Latina y el 8% del Medio Oriente y el norte de África”, explicó Pável Dúrov, fundador de Telegram.Sin duda una de las causas por las que muchos usuarios se volcaron a Telegram fue el cambio en los términos y condiciones de WhatsApp, en los que se anunció que la app de mensajería integrará algunos de los productos de las empresas de Facebook.“La gente ya no quiere cambiar su privacidad por servicios gratuitos. Ya no quieren ser rehenes de los monopolios tecnológicos que parecen pensar que pueden salirse con la suya siempre que sus aplicaciones tengan una masa crítica de usuarios”, dijo Dúrov.Si bien una de las principales desventajas de Telegram es que aún no es tan popular como muchas de sus competidoras, tiene bastantes ventajas que han convencido a muchos. Aquí algunas de ellas.Uso de datos de los usuarios Uno de los elementos más atractivos de Telegram. Mientras para vincular la cuenta, Telegram pide información de contactos, número de teléfono, archivos y datos de identidad, WhatsApp exige también ubicación, correo electrónico, e información de pagos, entre otros. Todos estos datos son los que recopila su compañía madre: Facebook, para luego ofrecerlos a las marcas que hacen publicidad.No tiene copia de seguridadTelegram es una app que almacena en la nube toda la información del usuario. Esto significa que al cambiar de dispositivo no se pierde información de la aplicación, mientras con WhatsApp es necesario tener espacio en el teléfono para que la app realice una copia de seguridad. Si el dispositivo es del mismo sistema operativo, no hay mayor problema, pero, por ejemplo, pasar la información de Ios a Android o viceversa puede ser más complicado.Es multidispositivoA diferencia de WhatsApp que solo permite su uso en un dispositivo, en Telegram es posible tener la sesión iniciada desde varios equipos y responder las conversaciones en todos ellos.Tiene varias opciones de personalizaciónMás allá del modo oscuro, no hay muchas opciones en WhatsApp para la personalización de la interfaz. Mientras tanto, Telegram tiene la posibilidad de cambiar el color de los mensajes hasta el nivel de redondez de las burbujas de chat.Para quienes sienten que con los stickers se expresan mejor, en Telegram también los encuentran: tanto los que son creados por la propia aplicación, como la opción de crear los propios.Permite programar mensajesEn Telegram es posible programar el envío de mensajes, para que el contacto lo reciba a una hora específica. En WhatsApp es posible por medio de otras aplicaciones, pero no es una opción que ofrezca la app.Ocultar número de teléfonoMientras en WhatsApp nuestro número de teléfono siempre está disponible para otros usuarios, en Telegram es posible hacerlo oculto.Edición de mensajesSi cometemos algún error en un mensaje, el Telegram es posible editarlo, una opción que no incluye WhatsApp. El único requisito es que la corrección debe hacerse en las últimas 48 horas luego de enviado el mensaje.Envío de archivos pesadosMientras WhatsApp tiene un límite de 100 MB para enviar un archivo, en Telegram es posible enviar hasta 2GB de información.Mensajes que se autodestruyenUna opción no disponible en WhatsApp. En Telegram es posible programar mensajes para que estén disponibles por unos pocos segundos o hasta por un mes.CanalesTelegram ofrece la opción de crear canales para publicar contenido de forma unidireccional. Los usuarios que se unan pueden ver el contenido, pero no necesariamente responder a él.
WhatsApp es la aplicación de mensajería más popular del mundo. Pero aunque luzca muy inofensiva, la desregularización de sus contenidos y los ‘excesos’ de libertad de expresión pueden ser la razón tras el crecimiento de nuevos discursos de odio y la histeria colectiva más absurda y peligrosa de nuestros tiempos. ¿Qué nos dice esto sobre nuestro uso de la libertad? Y ¿por qué la serie Matarife supo aprovechar muy bien este lenguaje? Por Víctor Solano Urrutia Los rumores siempre han hecho parte de la naturaleza de los aplicativos digitales: que si las empresas pueden comprar mis datos personales; que si los gobiernos vigilan lo que hacemos a través de las redes sociales; que si mi ex puede espiar mis conversaciones a distancia. Y no hay razones para afirmar o para descartar del todo estas preocupaciones. Podemos esperar cualquier cosa luego del escándalo de Cambridge Analytica, en el que se reveló que Facebook filtró las preferencias de millones de usuarios en favor del marketing político, o tras los hallazgos más cruciales de TechCrunch sobre la desprotección de 419 millones de celulares en la web. Las angustiosas cifras sobre vulneración de usuarios han llevado a la migración masiva a otras aplicaciones, estrategia parcialmente ilusa considerando que Mark Zuckerberg, el principal implicado en estos escándalos, es dueño de las 4 apps más descargadas: Facebook, WhatsApp, Instagram y Messenger. Prácticamente nos tiene en la palma de la mano, jugando a lo visible y lo invisible, a lo público y lo privado. Facebook en jaque: los huecos en seguridad que los pueden acabar Porque todos sabemos que las redes sociales tienen diferentes usos, digámoslo así, para diversificar la chicanería. No subimos a Instagram las bobadas que compartimos en Facebook, pero junto con LinkedIn (la “más seria”) y tal vez Tinder, estas redes son nuestras caras más visibles: edifican el ego sobre el cual basamos nuestra identidad online. WhatsApp, por otro lado, es el reino de lo semi-privado. Nadie ni dentro ni fuera de la app puede saber en qué grupos andamos o con quién conversamos, lo que la convierte en la plataforma perfecta para muchas ideologías, movimientos, tendencias y fuerzas (contra) culturales que buscan mover sus hilos con privacidad.Pareciera que los cursos de community manager van a tener que ‘reinventarse’ ante el hecho de que los usuarios se están volcando más hacia la creación de grupos privados con intrincados mecanismos para mantenerse ocultos y herméticos. A ello han contribuido las herramientas de fastcheck y la creación de encuestas para que los administradores se reserven el derecho de admisión, síntoma de que la comunicación está en crisis.Muchos usuarios de Internet parecen no querer que las páginas les digan qué ver o discutir; o que los aterroricen las recomendaciones aleatorias sobre búsquedas en Google, o que aparezca publicidad sobre fetiches privados. La gente pide con desesperación privacidad. Y WhastApp ha sido el palacio y la guarida, como diría Miguel Bosé, porque nos otorga el privilegio de vincularnos a comunidades increíblemente específicas con gente de todo el mundo y a las que les interesan los mismos temas, por retorcidos que sean.Lea también: 9 motores de búsqueda para dejar de depender de Google Surcando aguas internacionales de WhatsApp La principal ventaja que muchos le ven a WhatsApp es que no cuenta con ningún tipo de control estatal o privado de contenidos sobre lo que se comparte. Eso facilita el reenvío masivo de toda clase de cosas, entre las que podríamos incluir desde pornografía hasta audios incriminatorios. ¿Pero qué tan ventajosa es esta política de censura cero? Por supuesto, el exceso de libertad ha sido muy criticado por facilitar la promoción de discursos de odio. Al fin y al cabo, para crear una comunidad virtual no se necesita sino un buen nombre y un número de celular desde el cual mandar las invitaciones. El odio y los resentimientos comunes casi que llegan por añadidura. Ahora bien, ¿es la expansión de los discursos de odio pecado de la plataforma? ¿O solo buscamos culpar al medio antes que aceptar nuestra mala leche? “What’s wrong with WhatsApp?” se pregunta el periódico The Guardian frente a los más recientes fenómenos de histeria colectiva propagados en y desde WhatsApp en el Reino Unido. Gente que se organiza para incendiar antenas 5G que supuestamente lavan el cerebro, o campañas que aseguran que la “imposición” del tapabocas es una violación a los derechos de libertad de expresión. Lo cierto es que las consecuencias del uso privado de las redes puede medirse en impactos sociopolíticos de gran escala: Brexit, Trump, Bolsonaro… ¿sigo con la lista? ¿Hay que temer a las cadenas de Whatsapp? Hablemos de seguridad informática Pero no repitamos lo que ya se ha dicho, que las fakenews, cadenas, piolines anti-aborto y demás material que se mueve de teléfono en teléfono son una estrategia política para adoctrinar. Eso ya lo sabemos. Ahora, de lo que se trata es de entender cómo convivimos con esa incómoda realidad, quizás ignorando el hecho de que los usuarios de WhatsApp que nos jactamos de no caer en esas lógicas igual compartimos de todo y creemos ciegamente solo porque nos movemos en grupos de nuestro interés. Porque cada grupo es una isla, y cada isla tiene sus reglas. Matarife: A Whatsapp Love Story En Colombia tenemos un caso muy particular: ¿qué nos dice la circulación de la serie web de Daniel Mendoza, Matarife, en Whatsapp? Justamente, la apuesta de esta producción fue salirse del formato de entretenimiento tradicional de la televisión y adoptar otras estrategias de difusión que faciliten el alcance a grandes porciones de público, sorteando hábilmente la censura o la posibilidad del sabotaje. ¿Pero por qué justamente recurrir al WhatsApp?Por el alto contenido político explícito de la serie, en la que no sólo se enreda al ‘innombrable’, sino a diferentes personalidades del mundo de la política, la decisión de difundirla por WhatsApp y Telegram (además de YouTube) se tomó ante el miedo de que fuera censurada y dada de baja de plataformas evidentemente controladas. La privacidad y la búsqueda de estas repúblicas sin estado (redes sociales sin una cabeza única) permitieron la expansión viral no sólo de los primeros capítulos, sino de un sinnúmero de grupos que nacen y comparten toda clase de contenido afín a la temática sin ninguna restricción externa. Por supuesto, este es un argumento válido y una salida fácil a las tentativas de sabotaje, entremezclando V de Vendetta y Black Mirror. Me atrevo a decir que si bien WhatsaApp no promueve discursos, sí permite que estos levanten vuelo con mucha más facilidad y rapidez por su modelo semi-anárquico de distribución de la información. De manera que quienes se han visto afectados por la serie no han sabido cómo responder. Al principio la creían muy chichipata por el formato, pero parece que la serie ha incomodado más que cualquier investigación formal. Curioso o no, vemos que los papeles se han invertido. Durante años los grupos más conservadores han usado Whatsapp como instrumento fundamental para ejercer su derecho a la libertad de expresión y a la privacidad recalcitrante. No es desconocido que por allí se han movido los cuentos más inverosímiles y absurdos que rayan con lo cómico, como el “rayo homosexualizador”, la “ideología de género” y, en últimas, toda la agenda cristiano-conservadora con incidencia en las urnas. Si no puedes contra ellos, úneteles Podemos aventurar una tercera razón de por qué la popularidad de Matarife. Además de amagar la censura y de llegarle a un público más extenso (cada vez es menos la gente que ve televisión, mientras nadie puede huirle al WhatsApp), los productores y agentes publicitarios detrás de la serie apuntaron a usar un lenguaje que hasta este momento habían monopolizado los grupos conservadores. De hecho, esta puede ser la razón principal: en lugar de negar el lenguaje del enemigo, copiar su fórmula de éxito hasta la saciedad. Sí, Whatsapp era la gramática por excelencia de los señores sabelotodo y de las tías de ideas anticuadas que replicaban sin un pelo de dudas las cadenas con mensajes políticos a veces ni tan disimulados. Pero ahora que ese medio ha sido contaminado, se han tenido que rebuscar las estrategias: una tutela negada y una contra-serie son ahora las cartas sobre la mesa de quienes se han visto acusados por Matarife. No obstante, parece que el rating de Matarife no va a tener la misma puntuación que en sus primeras semanas. Subversivo y todo, pero a veces la falta de costumbre mata. Copiar la gramática del enemigo pudo ser una jugada maestra no tanto por el alcance en las métricas de públicos (sólo al llegar a la mitad de la temporada sabremos esto), sino por desestabilizar la manera como entendemos WhatsApp: sin dudas, un campo de batalla en aguas internacionales, donde cada grupo es una isla con sus propios manifiestos de odios y simpatías.
WhatsApp, la aplicación de mensajería instantánea más utilizada del mundo, propiedad de Facebook, probablemente seguirá siendo por algunos años más la herramienta de comunicación digital que más medie en nuestras conversaciones virtuales. Los grupos del trabajo, los grupos de amigos, los grupos de clases y las cadenas de memes, información de dudosa procedencia y mensajes religiosos parecen seguir incrementando con los años y no ha pasado nada que indique que los podemos detener. Por eso, y para hacer menos tortuosa nuestra comunicación, elaboramos una guía básica para que incluyan mejorar sus hábitos en WhatsAppNo compartir mensajes políticos o religiosos en el grupo del trabajoLa vieja frase cliché que reza que “es mejor no hablar de política” está mandada a recoger. Hay que conversar, debatir y formar las ideas, confrontarlas y ser capaces de no convertirlo todo en una confrontación personal. Pero para eso hay espacios. Y, a menos que se haya acordado previamente con los miembros del grupo, o que ese sea el tema en el que trabajan, hay que acatar la norma: los grupos de Whatsapp destinados a asuntos prácticos de organización de equipos, muchas veces formados entre gente que apenas se conoce, son la peor opción para difundir las creencias propias. Los contactos de WhatsApp son contactos, no seguidores. Cada que vez que quieran compartir algo recuerden hacer el ejercicio: ¿a mis compañeros de grupo le interesan los salmos del día, la celebración del día del santo patrono, la propaganda política de mi amigo el candidato o que “la luz del señor” se pose sobre todos los miembros del grupo? Aunque se abonan las buenas intenciones, la respuesta, la mayoría de veces, es no. Y tiende a incrementarse entre más gente con diversos intereses participe en el chat. Son las notas de voz, no es un Walkie-talkie El Walkie-takie, una especie de radioteléfono con la misma función que el zapatófono del Superagente 86, fue un juguete muy popular hace unos años. Ahora, desde luego, los celulares opacaron su utilidad, pero los que crecieron entre los 80 y los 90 sabrán que funcionaba oprimiendo un botón mientras se hablaba y lanzando señales para que el otro supiera cuándo responder y cuándo terminaba la conversación: los populares “cambio” y “cambio y fuera”.Puede que sea la nostalgia (o la pereza de escribir), pero desde que WhatsApp incluye notas de voz muchos usuarios han optado por hacer de su celular un Walki-talkie. El resultado: una serie interminable de notas de voz intrascendentes y sin contenido. Si van a hablar única y exclusivamente a través de notas de voz, recuerden primero contar con el tiempo y la disposición del que está al otro lado del teléfono. Recuerden que para alguien que no esté preparado escuchar sus ocurrentes mensajes implica parar la música si está escuchando en el móvil, ubicarse en un espacio sin mucho ruido y, en el caso de la mayoría de lugares en Colombia, verificar que es seguro sacar el celular. Si el mensaje es urgente, desde luego, lo mejor es hacer una llamada.Y, por cierto, tampoco manden mensajes de voz a desconocidos. Corolario: Pensar qué va a decir antes de enviar una nota de vozCasi tan traumático como escuchar notas de voz de un segundo, que solo dicen sí o no, es escuchar mensajes con cavilaciones que duran mucho tiempo y, al final de cuentas, no dicen nada. WhatsApp se trata de conversaciones, no de podcast. Aunque hay historias que lo ameritan. Dejar morir los gemidos Al principio, los audios con gemidos que irrumpían después de una nota de voz y se intensificaban en volumen eran graciosos. Ya no. Ya todos saben cómo suenan. De hecho, ya se conoce hasta el rostro detrás de la mujer de esos gemidos. (Acá se las presentamos)Verificar antes de compartir En Colombia conocimos el miedo que provocan las fake news. Durante las jornadas de protesta en diciembre de 2019, en Bogotá y en Cali, se regó la noticia de que “se estaban metiendo a robar los conjuntos cerrados”. ¿Quién, cuándo, cómo? Nadie nunca supo, pero ejércitos de vecinos salieron a “defender sus cosas”, sin percatarse de que debían defenderse era de las noticias falsas que circularon, en su mayoría, por rumores y cadenas de Whatsapp. Compartir noticias e información de interés es útil y relevante, pero, aunque cada vez es más difícil, hay que aprender a discernir entre la información confiable y la que está diseñada para asustar y crear caos. Respetar los horarios de los demás A pesar de que en Colombia se ha extendido el uso de frases macabras como “estudien, vagos”, “yo sí produzco” o “yo sí trabajo”, hay personas con un mayor grado de sensatez que privilegian, sobre la apariencia de “estar trabajando o produciendo”, las relaciones personales, el ocio, o el tener una vida, tal vez. De hecho, en 2017, en Francia, la ministra del trabajo Myriam El Khomri impulsó una ley para regular la desconexión digital de los trabajadores. La norma entró en vigor el 1 de enero de 2017 y supuso que las empresas debían consensuar con sus empleados un manual de uso de emails, teléfonos móviles o mensajería instantánea para respetar el tiempo de ocio y descanso de los trabajadores. Y aplica también para estudiantes. Por eso, si quieren discutir un informe, poner un trabajo o una tarea, pueden preguntarse: ¿llamaría a esta hora para pedir lo mismo? ¿Puede esperar hasta mañana? Y en el caso de que sea en un grupo: ¿El mensaje le compete a todos los miembros del grupo para que piensen en trabajo a esta hora?No acaparar las gigas del prójimo Uno de los problemas de muchos de los teléfonos móviles es que su capacidad de almacenamiento se agota bastante rápido. En la mayoría de casos, Whatsapp es la tercera o cuarta aplicación que más ocupa espacio en el móvil. Solo después de las carpetas de fotos y videos nativos, las aplicaciones de música y las aplicaciones o archivos de sistema. Y el espacio que ocupa se incremente con cada archivo que se recibe y se envía.Para que WhatsApp no genere problemas de espacio hay varias soluciones. Se puede programar la aplicación para que no guarde los videos recibidos a menos que uno lo elija, se pueden borrar los videos enviados para que no queden duplicados y, ocasionalmente, eliminar las conversaciones viejas. La otra solución es regular la cantidad de videos e imágenes que comparte en sus grupos.
Según lo informó la empresa propiedad de Facebook en un comunicado, una larga lista de teléfonos dejarán de tener disponible la aplicación WhatsApp desde el 1 de febrero. Este fue el mensaje de la compañía: “Ya no desarrollaremos la app para estas plataformas, así que algunas características pueden dejar de funcionar en cualquier momento”. El anuncio cobija tanto a los dispositivos con Android como a los que operan con iOS. En el caso de los Android, los que no servirán más para utilizar WhatsApp serán los que tengan la versión 2.3.7 (o anterior) del sistema operativo. En el caso de los iPhone, los que no servirán más serán los que tengan el sistema operativo iOS 8 y las versiones anteriores. Además, la app de mensajería no podrá ser utilizada en los smartphones que usen Windows Phone con versión menor a la 8.1. 10 razones por las que WhatsApp nos jodió la vida Por lo tanto, los iPhone más antiguos, es decir desde los iPhone 3, iPhone 3GS y iPhone 4 para atrás, que no soportan las más recientes actualizaciones, quedarán inutilies para usar WhatsApp. La lista de dispositivos Android que de ahora en adelante serán incompatibles con la App es, desde luego, mucho más amplia. Pero, por lo general, los teléfonos que tendrán problemas son los lanzados antes del 2010. Esta incompatibilidad abre la puerta a las nuevas actualizaciones en la app. Sus próximas versiones contarán con la opción de decidir si se quiere entrar en un grupo de conversación al que les hayan invitado. También permitirán controlar las llamadas que recibimos a través de la app y nuevos sistemas de seguridad para que nadie pueda leer los mensajes.
La excusa de muchos usuarios para usar Telegram y Snapchat era la opción que daban estas redes sociales para poder enviar mensajes e imágenes que se borran en un tiempo determinado y con las que no queda ningún registro. Pues Whatsapp ya no va a quedarse atrás y es posible que dentro de poco se active una actualización que permitirá a los usuarios poder enviar mensajes invisibles los cuales solo pueden decodificarse con la cámara del celular. Al parecer esto se realizará con una tecnología creada en la Universidad de Columbia llamada FontCode la cual permite esconder mensajes dentro de otro, como la vez que enviaron el punto negro que bloqueaba la pantalla, que en realidad era un mensaje encriptado (El circulo negro de Whatsapp que paraliza su teléfono). Lo que va a pasar al final es que alguien le envíe un mensaje cualquier y hasta que usted no active una aplicación específica no sabrá que existe un mensaje oculto. .
No esté tan seguro del significado que le mete a un emoji en una conversación, hay unos que tienen doble sentido y no precisamente porque sirvan para poner las conversaciones más calientes (Guía básica para tener conversaciones calientes en Whatsapp) Algunas caritas pueden llegar a joder una conversación o demostrar el estado de ánimo de la otra persona. Teniendo en cuenta la variedad de caritas felices que existen debe saber que no todas pueden significar lo mismo y que algunas son solo hipocresía, otras pueden significar felicidad extrema y una que es realmente aterradora de fondo puede traer un mensaje pasivo-agresivo. Sí, una vez más comprobamos que todo no todo lo que brilla es oro, mejor tenga en cuenta nuestra explicación para que luego no se esté quejando si algo falló. No, no es una cara de felicidad. De fondo puede traer una explosión de emociones y la verdad es que no del todo buenas. Haga de cuenta que esa carita es como cuando usted le pregunta a su novia, después de notarla rara: “¿amor te pasa algo?” y le responden “no, nada” … lo mejor es cerrar la conversación y salir corriendo. . No, no es una carita feliz normal. Esto significa que se viene la tercera guerra mundial y que en cualquier momento puede explotar una bomba disfrazada de tratado en su Whatsapp Mire es muy fácil: si en una discusión le echan en cara algo y seguido le mandan esa carita lo más probable es que le estén diciendo muy debajo de letras “si ve, tengo la razón”. Si al final de una conversación en la que se calentaron los humos la otra persona o usted manda este emoji, de por sentado que todo se fue a la mierda. Mire si lo usa muy mal puede solo significar: “me acaba de volar la cabeza”… todo se fue a la mierda Ya qué. ¡que cagada! "No lo estoy tomando en serio, pero todo bien" Si lo que quiere decir es que no entiende es mejor que busque otra opción, las manos así solo pueden significar: "¿y a mi qué me importa?" Muy indicado si lo que quiere decir es: "estoy a esto de perder la paciencia" No, no es un simple adiós... es un gran manotazo y posiblemente una cachetada para que despierte. Si usted no está en embarazo tenga claro que le están diciendo
A propósito de la conmemoración del día del internet, el diario argentino El Clarín realizó un completo informe sobre las desbordadas cifras que quedan a diario por el uso del Internet en el mundo. La realidad supera la ficción y de seguro estos números no los podrá superar ni Despacito de Luis Fonsi. Según el estudio realizado por la agencia Visual Capitalist, cada minuto se reproducen 4,5 millones de videos en YouTube, se envían 188 millones de correos electrónicos en Gmail y se buscan 3,8 millones de cosas en Google Y esto no es nada comparado a los números que dejan las redes sociales: se envían 41.6 millones de mensajes por WhatsApp y por Messenger de Facebook cada minuto, en ese mismo tiempo 87.500 personas tuitean y 347.222 dan likes en Instagram. Es decir que mientras usted leía esta nota se estaban moviendo unas 42 millones de interacciones en internet. Y como ñapa nos soltaron las cifras de Netflix, cada 60 segundos en la plataforma se reproducen 694.444 horas de visualización, mientras que en Google Play y App Store se descargan más de 390.000 aplicaciones de todo tipo.
Hoy nos parece dificil imaginar la vida sin WhatsApp, una aplicación que cambió la mensajería instantánea para siempre. Esta app nos facilitó enormemente la manera de comunicarnos (y de paso nos hizo estar cada vez más conectados al celular). Con motivo de décimo aniversario de su lanzamiento inicial (24 de febrero de 2009), aquí le contamos algunas cosas que tal vez no sabía de WhatsApp y lo importante que es en nuestras vidas. WhatsApp fue fundada por Brian Acton y Jam Koum, 2 antiguos empleados de Yahoo. Enviaron su hoja de vida a Facebook pero fueron rechazados. El usuario promedio pasa en WhatsApp un promedio de 195 minutos semanales. Cada minuto y medio en el mundo se envían 50 millones de mensajes. Un 30 por ciento de las selfies que se comparten en Internet se comparten en WhatsApp. El usuario promedio mira WhatsApp unas 23 veces por día. En WhatsApp trabajan cerca de 55 personas. Inicialmente, WhatsApp era gratuita el primer año, pero el usuario debia pagar después de 365 días. Hoy sigue siendo gratuita, sin importar el tiempo que pase. India es el país con el mayor número de usuarios de WhatsApp. Cada día en el mundo se comparten unos 100 millones de mensajes con video. El usuario promedio envía unos 1000 mensajes al mes.
Pronto Whatsapp lanzará un catálogo con 230 nuevos emojis y como en esta generación se le presta tanta atención a estas imágenes que se envía vía chat, Facebook decidió tomar en cuenta la petición de una ONG australiana en cuanto a normalizar los síntomas pre menstruales y la menstruación en sí y juntos crearon un emoticón que representa esos días del mes. Pero no fue así de fácil, Plan Internacional, la ONG, que lucha por los derechos de las mujeres tuvo que recoger 55 mil firmas de mujeres de todo el mundo bajo el argumento: “esta acción busca que todas las mujeres se sientan cómodas con su período menstrual, así como romper el estigma y el tabú que existe alrededor de una función biológica que es tan natural y normal como respirar”. La sociedad que censura a la menstruación En 2017, la ONG realizó convocatoria en Facebook para que los usuarios votaran entre cinco diseños animados. El que más votos obtuvo fue un calzón manchado con sangre. Sin embargo, Unicode propuso que el emoji fuera solo una gota roja, la cual afirman los usuarios pueden darle cualquier connotación sin perder la fuerza del mensaje. Vea también: Practicar sexo oral durante la menstruación es saludable
En la tarde de este jueves, el entrenador Néstor Lorenzo dio a conocer la lista de convocados que tendrá para la fecha 9 y 10 de las Eliminatorias Sudamericanas, donde enfrentarán a Bolivia, en El Alto; y Chile, en Barranquilla. Dentro del listado de 29 hombres, hay varias sorpresas presentes en la Selección Colombia.Nelson Deossa – C.F. Pachuca (MÉX)Su gran actuación con el Pachuca de México, lo llevó a ganarse un espacio dentro de la nómina de Néstor Lorenzo para la doble fecha de octubre. Cuenta con un factor importante y es que Pachuca se encuentra ubicada a 2.400 metros sobre el nivel del mar y podría ser una ficha clave para el juego contra Bolivia, en El Alto.Ha jugado 10 partidos en la actual temporada y ha anotado dos tantos, siendo una de las figuras de los ‘Tuzos’, que no está pasando por un buen presente en el fútbol mexicano.Jorge Carrascal – F.C. Dinamo Moscú (RUS)Luego de su ausencia en la doble fecha de septiembre frente a Perú y Argentina, el cartagenero está de regreso a la convocatoria de la Selección Colombia. Con el Dinamo de Moscú ha tenido continuidad y el 15 de septiembre anotó su único gol de la temporada frente a Akhmat Grozny.Roger Martínez – Racing Club (ARG)Sus goles y presente brillante con el Racing, de Gustavo Costas, lo llevaron a regresar a una convocatoria de la Selección. El cartagenero tiene un antecedente que pone como una de las cartas para estar presentes el próximo 10 de octubre, contra Bolivia. En el camino a Qatar 2022, Martínez anotó el tanto colombiano en el empate 1-1, en La Paz.Ahora, a más de 4.000 sobre el nivel del mar, el exjugador de América de México podría ser una variante en el frente de ataque, en busca de los tres puntos como visitantes.Willer Ditta – C.F. Cruz Azul (MÉX)Otro de los hombres con experiencia en la altura. En la actual temporada, el hombre de Ibirico ha sido uno de los fijos en el once titular del Cruz Azul, jugando los 900 minutos que van corridos de la Liga MX.Registra cuatro minutos vestido de ‘tricolor’ en el camino a Estados Unidos, Canadá y México 2026. El único partido que disputó fue frente a Ecuador, en Quito, partido que terminó empatado 0-0.Entre las novedades respecto al último llamado en las Eliminatorias Sudamericanas, también resalta el regreso de Dávinson Sánchez y Mateus Uribe. Mientras que llama la atención la continuidad de Juan Camilo Portilla, quien fue llamado de emergencia ante la lesión de Jéfferson Lerma frente a Perú y Argentina.
El japonés Ai Ogura (Boscoscuro) seguro que buscará ser profeta en su tierra para ganar el Gran Premio de Japón de Moto2 en el circuito 'Twin Ring Motegi', en el que el colombiano de origen español David Alonso (CFMoto) podría proclamarse matemáticamente campeón del mundo de Moto3.Ogura es cada vez más líder de Moto2 merced al 'bajón deportivo' de quien hasta ahora era su rival más directo y peligroso, su propio compañero de equipo, el español Sergio García Dols, que en las cinco últimas carreras apenas ha sumado seis puntos frente a los 66 de su oponente.Tras los dos ceros consecutivos de García Dols en Emilia Romaña e Indonesia, seguro que el español buscará resarcirse con un buen resultado, aunque el circuito japonés no sea el mejor escenario posible para conseguirlo, pues por tradición los pilotos japoneses suelen ser muy efectivos y hasta 'agresivos' en su pilotaje en la carrera 'de casa'.Muy distinta es la situación en Moto3, en donde David Alonso podría proclamarse matemáticamente campeón del mundo y, para ello, sólo necesita que el español Daniel Holgado (Gas Gas) no sume tres puntos más que él, mientras él consigue cinco puntos más que el español Iván Ortolá (KTM) y siete más que el neerlandés Collin Veijer (Husqvarna).En resumen, a David Alonso le bastaría con conseguir su décima victoria de la temporada para proclamarse campeón del mundo, independientemente del resultado que consigan sus rivales, salvo si Veijer es segundo, en cuyo caso le faltarían dos puntos para ser campeón matemático de la categoría.Bien es cierto que en Moto3, las nueve victorias que acumula el colombiano dicen mucho de su rendimiento deportivo, pero con opciones de victoria también se encuentran pilotos como los españoles Iván Ortolá, Daniel Holgado, David Muñoz (KTM), Adrián Fernández (Honda), Ángel Piqueras (Honda), o José Antonio Rueda (KTM).Además de ellos, Collin Veijer seguro que buscará algún triunfo más en la categoría antes de dar el salto a Moto2, sin olvidarnos de los japoneses Taiyo Furusato (Honda), Ryusei Yamanaka (KTM) o Tatsuki Suzuki (Husqvarna), que por el hecho de 'jugar en casa', seguro que intentarán dar la sorpresa e imponerse a todos sus rivales de turno.En esas mismas 'cábalas', por lo visto en anteriores grandes premios, habría que incluir a los australianos Joel Kelso (KTM) y Jacob Roulstone (Gas Gas), o a los italianos Luca Lunetta (Honda), Stefano Nepa (KTM) o Matteo Bertelle (Honda).
La tenista estadounidense Coco Gauff, cuarta cabeza de serie del Abierto de China, venció este viernes a la ucraniana Yuliia Starodubtseva (n.115) por 2-6, 6-2 y 6-2, con lo que avanza a las semifinales del torneo, donde se enfrentará a la española Paula Badosa.Starodubtseva comenzó el encuentro con fuerza, sorprendiendo a Gauff con su efectividad al servicio y aprovechando los múltiples errores de la estadounidense.La ucraniana consiguió romper el servicio de Gauff en tres ocasiones y selló el primer set por 6-2, manteniendo el control con un alto porcentaje de primeros servicios y un sólido juego de fondo.Gauff, sin embargo, cambió el rumbo del partido en el segundo parcial.Ajustó su servicio con dos 'aces' y fue más agresiva al resto, rompiendo en dos ocasiones el saque de Starodubtseva, lo que le permitió igualar el marcador tras llevarse la segunda manga por 6-2.En la manga definitiva, Gauff se mostró implacable al romper el servicio de la ucraniana temprano para adelantarse 2-0 y consolidar su ventaja con otro 'break' en el cuarto juego.A pesar de cometer dos dobles faltas, Gauff mantuvo el control, cerrando el partido con un contundente 6-2, asegurando su pase a la siguiente ronda en una hora y 51 minutos.En las semifinales, la estadounidense se verá las caras con Badosa (n.19), raqueta contra la que se ha enfrentado en cinco ocasiones, con un balance favorable a la española, que se impuso en tres de los duelos.Otras cabezas de serie, como la bielorrusa Aryna Sabalenka y la china Zheng Qinwen, oro olímpico en París, disputarán este viernes sus duelos de cuartos de final para alcanzar la penúltima ronda.La vigente campeona y número uno del mundo, la polaca Iga Swiatek, no participa en la edición de este año del torneo.
Shakira, lanzó “Soltera”, una canción popera con influencias de afrobeats.La canción generó, desde antes de su lanzamiento, gran expectativa en las redes sociales tras la grabación del video en LIV en Miami, con cameos de Winnie Harlow, Anitta, Danna Paola y Lele Pons. El nuevo sencillo llegó poco después de las 3 nominaciones de Shakira a los Latin GRAMMY de la semana pasada, en las categorías de Álbum del Año por Las Mujeres Ya No Lloran, Canción del Año por "Entre Paréntesis", y Mejor Interpretación de Música Electrónica Latina por “Bzrp Music Sessions, Vol. 53 (Remix de Tiësto)..En noviembre Shakira iniciará su gira norteamericana "Las Mujeres Ya No Lloran World Tour", cuyas entradas ya están agotadas.La primera etapa de la gira comenzará el 2 de noviembre en Palm Desert, CA, e incluirá paradas en Los Ángeles, Miami, Toronto, Brooklyn, Chicago, entre otras. Su más reciente álbum, Las Mujeres Ya No Lloran, recibió debutó en el puesto #1 en las listas de Latin Album y Latin Pop Album de Billboard, y fue certificado 7x platino en las primeras 24 horas de su lanzamiento, con más de 10 mil millones de streams en todas las plataformas de audio y video, convirtiéndose en el álbum más reproducido del año. ¿Quiénes son las mujeres que aparecen en el video de Shakira?Winnie Harlow: Es una modelo canadiense-jamaiquina que ha revolucionado la industria de la moda. Su nombre real es Chantelle Brown-Young, y se hizo famosa por su condición de vitíligo, una enfermedad de la piel que causa la despigmentación en ciertas áreas del cuerpo.Annita: Su nombre real es Larissa de Macedo Machado, es una cantante, compositora, actriz, bailarina y productora brasileña. Ha colaborado con artistas como Maluma, J Balvin, Becky G, Cardi B, Natti Natasha, etc.Danna Paola: Danna Paola Rivera Munguía, conocida simplemente como Danna Paola, es una cantante, compositora y actriz mexicana.Desde muy pequeña demostró su pasión por el mundo del espectáculo, iniciando su carrera en la actuación y luego incursionando en la música.Lele Pons: Eleanor Pons Maronese, es una influencer, cantante, actriz y personalidad de las redes sociales venezolana-estadounidense. Se hizo famosa a través de la plataforma Vine, donde compartía videos cortos de comedia y sincronización de labios.**Lean acá: La historia detrás de la canción ‘Día de enero’ de Shakira
Dos días después de publicar un video que muestra una gran frustración por la reacción del público ante su renuencia a respaldar a un candidato presidencial, Chappell Roan canceló su aparición en el festival All Things Go este fin de semana, en Nueva York el sábado y en Washington, DC el domingo."Pido disculpas a las personas que han estado esperando verme en Nueva York y DC este fin de semana en All Things Go, pero no puedo actuar", escribió en una publicación en redes sociales. "Las cosas se han vuelto abrumadoras en las últimas semanas y realmente lo estoy sintiendo", agregó. “Siento presión para priorizar muchas cosas en este momento y necesito unos días para priorizar mi salud. Quiero estar presente cuando actúo y dar los mejores espectáculos posibles. Gracias por entender. Vuelvo pronto xox.”Roan ha hablado a menudo de las dificultades para afrontar la fama a medida que su fama ha aumentado drásticamente en los últimos meses, particularmente en lo que respecta a los acosadores y las demandas de los fans. "Necesito que respondas preguntan, solo responde mis preguntas por un segundo: si vieras a una mujer al azar en la calle, ¿le gritarías desde la ventanilla de tu auto? ¿La acosarías en público? ¿Te acercarías a una dama al azar y le dirías: '¿Puedo tomarme una foto contigo?' y ella dice: 'No, ¿qué carajo?' y luego te enojarías con esta dama al azar?", dijo la cantante. "¿Te ofenderías si ella te dijera que no a tu tiempo porque tiene su propio tiempo? ¿Acosarías a su familia? ¿La seguirías? ¿Intentarías analizar su vida e intimidarla en línea? Esta es una persona que no conoces y ella no te conoce en absoluto. ¿Asumirías que ella es una buena persona, asumirías que es una mala persona? ¿Asumirías que todo lo que lees en línea sobre ella es cierto? Soy una perra al azar, eres una perra al azar. Piensa en eso por un segundo, ¿de acuerdo?", finalizó.Las presiones crecieron con su álbum debut, “The Rise and Fall of a Midwest Princess”, que fue lanzado hace casi un año, su presentación VMAs y su nominación a los Grammys como 'Mejor Nueva Artista'Sin embargo, las presiones de una fama tan repentina han sido abrumadoras para la artista. En el mismo video agregó: “Cuando estoy en el escenario, cuando estoy actuando, cuando estoy vestida de mujer, cuando estoy en un evento de trabajo, cuando estoy haciendo prensa… estoy en el trabajo. Cualquier otra circunstancia, no estoy en modo trabajo. Estoy fichado. No estoy de acuerdo con la idea de que debo un intercambio mutuo de energía, tiempo o atención a personas que no conozco, en las que no confío o que me asustan, sólo porque expresan admiración”.