¿A cuántas de ustedes las señalaron de locas por expresarse de una forma que no les gustó a sus ex parejas o a las personas con las que compartían en ese momento? Tal vez porque actuaron o tuvieron una actitud políticamente incorrecta ante un asunto, o simplemente las hicieron creer que lo que estaban sintiendo o diciendo era exagerado. ¿A qué edad se dieron cuenta que la palabra “loca” no significa más que “estamos invalidando de manera muy sutil cualquier cosa que quiera expresar”? Para de paso seguir manteniendo ese concepto de que el hombre es el único ser racional. Por: Johana Arroyave @JohanaArroyave Y no, no estamos exagerando. Cuando alguien usa la palabra loca para referirse a una mujer se sigue perpetuando en un colectivo la idea de que somos el sexo irracional y que la mayoría de las cosas que hacemos o decimos son solo producto de nuestras emociones, hormonas o inclusive videos mentales que nos armamos sin justificación. Además de ocasionar que continuemos bajo una doctrina creada en el siglo XIX durante la era victoriana en la que se les encerraba en un cuarto aislado a aquellas mujeres que mostraban algún tipo de rebeldía, cansancio, fatiga o comportamiento que vulnerara con la libertad del hombre. Según explica el libro Inconvenient People de Sara Wise, en donde se relata la vida de los victorianos, durante esa época una mujer no podía tener comentarios incontrolables, un estado de ánimo extremo o períodos de confusión, causados por un matrimonio infeliz, una enfermedad o la vejez porque lo más probable es que fuera llevada al psicólogo y luego encerrada tras un diagnostico simple: está loca. Y como los casos de mujeres que terminaban en el psicólogo por alguna acusación de esas se hizo cada vez mayor (la realidad era que eran infelices con sus parejas y con la dictadura en la que vivían) los médicos de la época decidieron investigar qué era lo que estaba pasando y se inventaron, literalmente, una enfermedad llamada histeria, el término vino los griegos (palabra exacta: hystera que significaba útero – matriz). Así las cosas, diagnosticaban a las mujeres como histéricas cuando llegaban al psicólogo con síntomas que incluían desfallecimientos, insomnio, retención de fluidos, pesadez abdominal, espasmos musculares, respiración entrecortada, irritabilidad, fuertes dolores de cabeza y pérdida de apetito. Sin embargo, a principios de los 50 la Asociación americana de psiquiatría declaró que la histeria no era una enfermedad. Ya no son enfermedades: Hablemos de histeria, homosexualidad y transexualidad Pero tranquilas que algo bueno salió de ahí: las pacientes diagnosticadas con histeria femenina debían recibir un tratamiento al que llamaron “masaje pélvico” que en realidad no era más que la estimulación manual de los genitales de la mujer por el doctor hasta lograr que llegara al orgasmo, palabras más sencillas: masturbarlas. Como la práctica se hizo más común y las consultas para el “tratamiento” eran cada vez más frecuentes, en 1870 el doctor británico Joseph Mortimer Granville, cansado de masturbar manualmente a sus pacientes, patentó el primer vibrador electro-mecánico con forma fálica con el que se comprobó que una paciente podía llegar al climax del masaje en menos de diez minutos. Y así nacieron los consoladores. Sin embargo, esta no fue la solución para que la “locura femenina” parara, en la sociedad se implantó la idea de que las mujeres eran mucho más propensas a expresar sus “necesidades” a través de emociones y que en realidad vivían su humor dependiendo de las hormonas del momento. Allí también surgió la falsa creencia de que los hombres no tenían sentimientos y que su cerebro funcionaba de manera netamente racional. De hecho, esa carga que se les dio y en la que los convierten en seres “vulnerables” si se expresan de forma incorrecta (socialmente), ha repercutido en que las cifras de suicidios en hombres sean mayores a las de mujeres. De cada una mujer que se suicida tres hombres deciden quitarse la vida, cifras de la Fundación de Asistencia Nacional para la Ayuda al Enfermo de Depresión (ANAED). Pero por lo menos se hacen pinitos para cambiar esta falacia, Jed Diamond director de Men Alive (institución dedicada a tratar problemas de depresión en hombres) en su libro The Irritable Male habla sobre la forma en las que las hormonas también afectan a los hombres de una manera que se creía exclusiva de las mujeres. Inclusive que pueden sufrir trastornos de depresión, fatiga, irritabilidad, ansiedad y enojo. “Los hombres también son hormonales y no deberían negarlo. Al contrario, aceptarlo y estudiarlo es necesario para mejorar su calidad de vida”. Diamond. Pero a pesar de los estudios, se sigue mantenido la idea de que solo la mujer es capaz de ver todo a su alrededor de una manera emocional y por lo tanto invalida. Hasta en contexto judiciales, Jessica M. Salerno y Liana C. Peter Hagene, investigadoras del Departamento de Ciencias Sociales y del Comportamiento de la Universidad Estatal de Arizona, realizaron un estudio para comprobar cómo afecta el enojo masculino y femenino en una investigación legal. Decidieron enfrentar los veredictos de hombres y mujeres de un jurado en una corte de Estados Unidos, cuando un hombre del jurado se enojaba por no estar de acuerdo con la sentencia de los demás, el resto del equipo reconsideraba su opinión. Pero si era una mujer quien se quejaba no la tomaban en cuenta. ¿Entonces hasta cuándo seguirán invalidando nuestra opinión? Y ojo que esto se ve muchísimo más en relaciones afectivas. Existe un fenómeno conocido como gaslighting que consiste en afirmar que las emociones que expresa la otra persona son exageradas o falsas y por ello no merecen ser escuchadas. Gaslighting es un patrón de abuso emocional en la que la víctima es manipulada para que llegue a dudar de su propia percepción, juicio o memoria. Esto hace que la persona se sienta ansiosa, confundida o incluso depresiva. Así las cosas, frases como "no seas tan sensible”, “era un chiste", “¿estás en tus días?”. Pueden convertirse en un juego de persuasión en el que terminamos creyendo que todo lo que nos hace sentir mal es solo un error de percepción y que además nos obliguemos a ocultar nuestras emociones por miedo a que no nos tomen en serio o por miedo a que nos digan que estamos locas. Y saben, generalmente – salvo en muy pocas situaciones- los hombres que se refieren a su ex como “la loca” no están hablando de una mujer que tenga un trastorno mental diagnosticado, están refiriéndose a una persona que tuvo una actitud con la que no estuvieron de acuerdo o simplemente alguien con emociones que no pudieron entender. ¿Y ya que somos maduros y entendemos que los sentimientos son personales? Qué tal si nos ponemos en la tarea de dejar de menospreciar lo que quieren expresar las mujeres escondiéndolo bajo la fachada de “está loca”.
En Colombia, las cifras de feminicidio van en aumento. Según la Fundación Feminicidios Colombia, en lo que va del 2019 han muerto 22 mujeres y en 2018 fueron 297 las víctimas de éste. Por Silvia Suárez // @silviajulianaa A pesar de la existencia de la ley 1761 de 2015, también conocida como Ley Rosa Elvira Cely, en la que se explica qué es feminicidio, cuáles son las circunstancias de este y se aplican penas más fuertes a los victimarios, las mujeres siguen muriendo por razones de género. Aunque encontrar la ley en internet es sencillo (solo basta con una búsqueda en Google), he visto con preocupación como hombres y mujeres comparten en redes sociales memes que desinforman acerca de este fenómeno. A continuación puede ver cinco memes y la explicación que le ayudará a no seguirle el juego a los machistas: El meme clasista Según el autor de este meme, las agresiones verbales contra una mujer dependen del tipo de carro que conduzca el abusador. Y bueno, que si no tiene ningún tipo de medio de transporte simplemente es un feminicida. Esta imagen es ofensiva no solo porque insinúa que las mujeres evalúan los abusos de los hombres según su poder adquisitivo, sino que asegura que un feminicidio solo es causado por hombres de clases bajas. Según la ley colombiana, no hay distingo de clase en los feminicidas. El caso de Rafael Uribe Noguera es un ejemplo perfecto, definitivamente lo que él hizo no fue un halago. Además, ¿qué carajos es una violación telepática? El meme ‘del mismo modo en el sentido contrario’ Aunque los asesinatos entre parejas por el móvil “celos” hacen parte del patriarcado y cómo nos han enseñado que la pareja es de nuestra propiedad, no todos son feminicidios. Los hombres no son víctimas de feminicidio. Por otro lado, la Ley Rosa Elvira Cely no especifica el género del victimario, es decir que sí es feminicidio si una mujer u hombre celoso/a mata a su novia. Este tipo de feminicidio es conocido como feminicidio íntimo. El meme ‘son los datos y hay que darlos’ Este es mi favorito porque demuestra la total ignorancia acerca del tema. Primero, este meme reduce el lugar de la mujer a la cocina, un clásico de los insultos machistas. Además, supone que los feminicidios no suceden dentro de la casa. Sin embargo, la realidad es otra. Según el Instituto de Medicina Legal, en 2017 fueron asesinadas 369 mujeres dentro de su vivienda y 10.788 mujeres que realizan el trabajo doméstico de su propio hogar fueron víctimas de violencia de pareja. Así que no, la cocina no es nuestro lugar y no estamos seguras allí tampoco. El meme orientación sexual Sí, si una mujer homosexual es asesinada es feminicidio. Igual que si una mujer transgénero es asesinada también es feminicidio. Las mujeres a las que les gustan otras mujeres no son hombres. Según cifras de Colombia Diversa, entre 2017 y 2018, fueron asesinadas 5 lesbianas y 35 mujeres trans. Estos casos deberían ser investigados como feminicidios ya que según la Ley este se puede entender como “quien causare la muerte a una mujer, por su condición de ser mujer o por motivos de su identidad de género”. El meme "victim blaming" Culpar a la víctima es otra de las estrategias usadas para desacreditar violencia de género, sexual o feminicidio. Frases como “algo habrá hecho para que le pegaran”, “para qué andaba sola por la calle” o “es que tenía una falda muy corta” le dejan la responsabilidad de las agresiones recibidas a la víctima. Esto mismo pasa con este meme, las mujeres no merecemos morir por ir de fiesta el fin de semana, no somos responsables de lo que haga un hombre si nos ve borrachas, y el reguetón definitivamente no tiene la culpa de que nos maten.
Vivimos en una sociedad en la que nos ensañaron 24/7 a insultarnos, pelearnos y criticarnos por el simple hecho de ser mujeres. Nos dijeron cuántos kilos tenemos que pesar para ser “lindas”. Para quedar bien socialmente nos “enseñaron” cómo hablar, cómo sentarnos y hasta crearon un manual de urbanidad en el que las mujeres tuvimos mucho protagonismo, cómo debíamos actuar en público, cómo cruzar la pierna y hasta la manera “correcta” de esconder los codos en la mesa a la hora de cenar. Nos jodieron por todo lado. Por Johana Arroyave / @JohanaArroyave *Artículo ganador en la categoría Opinión del Premio nacional de periodismo digital del Festival de los Sentidos & Kienyke 2019 Nos han juzgado de todas las maneras que han querido, nos han acusado de provocar que nos violen y nos han confundido con frases moralistas como “es una perra por acostarse con tantos”, “es una mojigata por no darlo”. Nunca la sociedad ha estado conforme o de acuerdo respecto a nuestras acciones; lo prueban estos 5 documentales para entender cómo jodimos a la mujer. Estamos acabando el 2018, un año en el que por fin mujeres del mundo se atrevieron a denunciar violadores, en el que nos paramos para decir #NiUnaMás, exigimos ser libres con nuestros cuerpos y decisiones y poder abortar legalmente, se crearon campañas por el amor propio y las cirugías plásticas y/o estéticas bajaron en un 5% según la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (Isaps). Al parecer eso de aceptarnos tal como somos estaba dejando de ser una frase de superación personal y metiéndose en el cerebro realmente. Por fin parecía que avanzábamos y no estando solas, no peleando la una contra la otra sino juntas. Como tiene que ser. Y cuando creíamos que ya lo habíamos visto todo, que ya nada nos podía joder, que solo era cuestión de aguantar y seguir en la lucha… tenga. Aparece una “influenciadora” llamada Andrea Marmolejo y una serie de personajes apoyando que usara su voz en un video con pensamientos de “lecciones de vida sobre cómo ser ‘mejor’ mujer”. El nombre original del video en YouTube, Cómo no ser una guisa, contiene seis minutos seguidos de conductas que según ella nos hacen “menos atractivas”, “guisas” (palabra que se usa para menospreciar a otra persona) y con tips de cómo ser una “dama”. No vamos a compartir el video por obvias razones. Pero sí me genera muchas dudas lo de “ser una dama” ¿Qué es ser una dama? ¿Según quién somos una dama? ¿Ante quién? Pero sobre todo, ¿para qué queremos ser una “dama”? ¿Nos sentimos tan poco cómodas con el concepto de mujer como para tener que cambiarlo por una palabra que según la RAE es “noble o distinguida”? Hay mucha gente distinguida por ser ladrones, asesinos y todo lo que está mal en la vida. Entonces no creo que eso sea lo que realmente importe. Por otro lado, ¿en qué parte de la Constitución, la Biblia o la vida metieron como regla básica que saludar de “holi”, comer Bom Bom Bun en una fiesta y tinturarse el pelo de rubio nos hacía menos atractivas? Y vuelve y juega ¿atractivas para quién? ¿No se supone que lo realmente importante es vestirnos, actuar y sentirnos bien con lo que vemos en el espejo? Es decir, ¡ser nosotras mismas! ¿Y saben qué es lo peor? Que estamos más jodidas aún si en vez de cambiar esos pensamientos nos escudamos en el “todos lo piensan, pero por fin alguien se atrevió a decirlo”. No, ya estuvo bien de normalizar este tipo de conductas en las que se tiran insultos entre mujeres, se alaba la superioridad moral y el atrevimiento de decirle a alguien que es menos que otro solo porque actúa, se viste o quiere ser diferente. Acá el punto no es “yo pienso así y vale verga el mundo”. Ya entendimos que es imposible cambiar el pensamiento a quienes creen que esa es la verdad de las cosas, pero sí es posible que ustedes allá en casa reflexionen sobre qué tipo de contenidos están compartiendo y alabando. Y se atrevan a denunciar este tipo de violencias, sí violencias, porque estas cosas se prestan para atacarnos como mujeres en algún momento. Decirle "fea" a otra chica no las hace más bonitas, decirle "gorda" y criticarla no va a hacer que ustedes adelgacen o tonifiquen la panza más rápido y decirle "bruta" no les amplía el coeficiente intelectual. A ver si algún día por fin nos queda claro que no somos nuestras propias enemigas. Y de verdad niñas, dejen de comer cuento de que por un tono de piel se puede definir cuál debería ser su color de pelo. Si quieren tener un arco iris en la cabeza y así se sienten bien, háganlo. Si quieren mostrar el trasero, poner una frase de superación y se sienten bien haciéndolo, es su decisión. Si quieren gritar al mundo entero un saludo de "holi" está bien así. Vivan por ustedes, no por alguien que cree ser superior para “juzgar” una conducta. Y por último y como dato curioso: ese pantalón sin bolsillos que tanto atacan y critican, genera en un mes más dinero de lo que otra prenda pueda hacer en un año, además de que produce en el mundo de la moda la mitad del PIB (producto interno bruto del país). Si quieren leer más información valiosa sobre esta prenda y cómo dejar de estigmatizarla pásense por el blog de Daniela Styling, van a entender muchas cosas. Que de año nuevo todos se pongan como propósito dejar de normalizar conductas que nos atacan y nos violentan.
Para subir la autoestima de las mujeres se puede empezar con tareas muy sencillas en el pelo. Sí, detalles tan simples ayudan a que la mentalidad cambie, a que se sientan más lindas y sobretodo a que expresen felicidad. Y aunque esto parece muy fácil no lo es; todas las chicas tienen un cabello distinto y cuidarlo con tratamientos genéricos a veces puede causar reacciones que lo pueden dañar, en especial para quienes tienen el cabello rizado. Esto lo entendió la limeña Karen García cuando creó Ondas de Marzo: un espacio en el que se dictan talleres a mujeres y se les da tips para poder mejorar su pelo. Pero sobre todo un espacio para que entiendan que caer en los alisados permanentes no es la única solución para verse peinadas siempre. Hablamos con ella para conocer más a fondo su trabajo, lo que ha logrado con esta iniciativa y cómo ha ayudado a mujeres de su país. Y que además nos diera técnicas para aprender a cuidarlo. ¿Cuál es el error de las personas cuando hablan de su pelo? El peor error es decir que es un castigo o que les molesta cómo es (liso, rizado, con ondas…), porque abiertamente son manifestaciones de que no te gusta tu apariencia en totalidad y eso es peligroso mentalmente. También hay otro error y es hablar del pelo solamente de manera estética pues significa mucho más que eso. ¿Qué es lo más importante que debe tener claro alguien antes de empezar un proceso en el pelo? Que su vida entera va a cambiar, va a tener un nuevo estilo de vida, se va a ver diferente y tiene que abrazar el cambio. Un cambio en el pelo es un proceso y no todo va ser hermoso, es aprender a ser paciente y tolerante con uno mismo. Tips para tener un pelo sano y peinado Hay muchos, los voy a resumir en estos principales: El agua: Mantente hidratad@ por dentro y no uses agua caliente. Amabilidad: Ten en cuenta al pelo como un ser externo que siente, aunque realmente no lo haga, deja de lastimarlo con planchas o secadoras con calor. Cuida tu pelo mientras duermes, usa satín o seda para tu almohada: Y la más importante, Sígueme en redes sociales, me esfuerzo por crear contenido para que tengas tips y peinados para todas nuestras texturas. Mitos que deberían morir y que creemos fielmente del pelo -Secarlo con una toalla, es casi el mayor mito que deberíamos parar. Genera casi todo el frizz que no quieres. -Peinarlo en seco debería ser un crimen. -Y el peor, lavarlo todos los días. ¿Para los hombres también funcionan estas técnicas? ¡Claro que sí! El pelo no tiene género. Cómo hacer una mascarilla para el pelo, ingredientes, cómo aplicarla y qué resultados se reflejan Primero es conocer muy bien tu pelo, saber qué es lo que más necesita y así elegir las frutas o ingredientes que te pueden ayudar a hidratarlo. Conocer tu porosidad, el grosor y la textura ayudan mucho y los ingredientes orgánicos siempre serán los mejores. Siempre aplicar mascarillas en el cabello limpio sin acondicionador, ni cremas. Los resultados siempre varían, pero lo primero que vas a sentir es que tu textura es mucho más suave y la forma está más definida.
Cada 25 de noviembre, día Internacional de la lucha por la eliminación de todas las formas de violencia contra la mujer, las mujeres celebramos estar vivas y recordamos públicamente a las que no corrieron con la misma suerte. Decir que las mujeres cada día sobreviven a un feminicidio puede parecer tontería u obviedad, pero las cifras y la sistematicidad con la que dichos casos ocurren en Colombia evidencian que es un riesgo latente al que las mujeres le hacemos el quite con dificultad. Por Carmenza Zá @Zacarmenza Así lo refleja el especial “Sobrevivientes” de Datasketch, un impecable informe multimedia sobre el feminicidio en Colombia que, ante la falta de información precisa con la que cuenta el Estado al respecto de este tema, cruza múltiples fuentes –institucionales y ciudadanas- para presentar una radiografía del estado actual de la violencia contra las mujeres en el país. El panorama institucional es lamentable. Los datos recolectados por Datasketch cuentan 150 casos de feminicidios solo en 2017 pero, con un claro subregistro, la Fiscalía General de la Nación da cuenta de 413 casos, incluyendo las tentativas, desde 2014. La cuenta inicia en el momento en el que se sanciona la Ley Rosa Elvira Cely que tipifica el delito y, a la fecha de publicación de Sobrevivientes, Datasketch registraba apenas 32 investigaciones y condenas por tentativas de feminicidio. Los expertos consultados por el equipo de Datasketch afirman que el feminicidio no es un acontecimiento aislado o espontáneo, sino que está precedido por múltiples violencias (manoteos, gritos, humillaciones) que a la víctima le cuesta identificar y detener, y a las que las instituciones son incapaces de detener y/o prevenir. Las mujeres víctimas de violencias no son una minoría. Una encuesta diligenciada por más de 1000 mujeres, cuyos resultados hacen parte de Sobrevivientes, señala que un 87% ha sido víctima de un piropo ofensivo, a un 56,09% un desconocido les mostró imprevistamente sus genitales en un espacio público, 86% fueron víctimas de que desconocidos tocaran o rozaran su cuerpo sin consentimiento y, pese a que es un asunto que afecta a un porcentaje mayoritario de la población, el 88% nunca ha realizado la denuncia policial de alguno de estos acontecimientos. El 21,56% afirma haber sido violada POR LO MENOS una vez en su vida. La contundencia de las cifras es poca si se desconoce la cotidianidad de los hechos. La violencia machista, como retrata Sobrevivientes, está “incrustada en el ADN social” pues existe una cultura que la normaliza, justifica y promueve y una institucionalidad que la perpetúa. Las mujeres que comparten su historia en este especial, todas sobrevivientes a intentos de feminicidio, afirman haber sido re victimizadas cuando intentaron buscar justicia o pedir reparación. El informe concluye que “una política pública para la atención a la mujer agredida se vuelve clave a la hora de salvar vidas” recordando la responsabilidad que tiene el Estado de priorizar la lucha contra la violencia de género, máxime en un escenario de posconflicto en el que suele aumentar la violencia en el hogar. La Ley Rosa Elvira Cely, pese a la poca capacidad de interpretación de varios funcionarios del sistema judicial, entiende el feminicidio como resultado del machismo estructural que debe ser atacado en sus múltiples formas. Sobrevivientes cuenta con una línea del tiempo que recopila las medidas legislativas y de protección que se han puesto en marcha para atender las violencias que sufren las mujeres antes de ser asesinadas por el simple hecho de serlo. Con casos y caracterizaciones, Datasketch no solo relata la construcción del feminicidio como delito, concepto y problemática social, sino que alerta sobre una comunidad que no repudia lo suficiente la violencia contra la mujer y un Estado que no sanciona con contundencia el riesgo permanente en el que vive la mitad de su población. Consulte y explore el especial “Sobrevivientes” Aquí
Llegó diciembre con su alegría, mes de regalos y de dejar de una vez por todas los estereotipos que nos tienen jodidos y de paso esos pensamientos pendejos (perdón me exalté) en los que las niñas desde pequeñas tienen en la frente “profesión ama de casa”, “profesión mamá”, “lugar favorito: cocina”… seamos sinceros, a quién le interesan juguetes como "la lavadora"¿a quién en su sano juicio cuando crece le gusta lavar ropa? No, pues el plan: "amigos voy a lavar ropa, que chimba, mirenme", o "el lavavajillas" ¿en serio?... Por: Johana Arroyave @JohanaArroyave A ver, todos cogidos de las manos que al mejor estilo católico vamos a confesarnos, repita cada uno después de mí: Yo confieso, ante algún ser supremo (póngale el nombre que quiera) y ante ustedes amigos míos, que he pecado mucho, de pensamiento, palabra obra y omisión, he creído que el color azul es único y exclusivo para los recién nacidos bajo el sexo masculino, he comprado en alguna tienda algún juguete y preguntado dos veces antes, si es válido para una niña, he decidido escoger un vestido de flores rosadas y cursis para regalar en el baby shower de la amiga de la oficina antes que un pantalón, me he emocionado con las películas de “fast and furious” y las pistas de carros y aun así, he dejado que mis sobrinitas, hermanitas o niñas pequeñas de la familia, sigan jugando a las barbies o pidiendo osos de peluche y en algún momento de la vida, he dicho la siguiente frase o una similar “No hagas eso, es para niños”. Ahora, ponga su mano en la frente, golpéese fuerte en la cabeza y continúe: Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa, por eso ruego a (mencione los nombres que quiera), que intercedan por mi ante mi conciencia, que ojalá no haya acabado con la infancia de alguna de ellas y que mis hijas, nietas o alguna nueva niña que venga a la familia, no escuche de mí, ni de ningún otro, alguna frase similar. (Ya puede bajar la mano). Amén En esta época “decembrina” debería aprovechar para meter esta oración en la novena y repetirla después de la de San José o antes de los villancicos, para que junto con su familia pidan que en esta navidad sean menos las cocinitas que empaquen debajo del árbol. Y aprovechemos la fantabulosa época de navidad para que hablemos de los regalos. ¿Ustedes no se sienten saturados por los comerciales de juguetes en Diciembre? Yo sí. Creo que estoy agotada de ver que pasan los años y las historias no cambian, aunque se modernizan en cuanto al HD y los modelos que aparecen en ellos cada vez son más guapos, la imaginación de los creadores de los “artefactos de diversión” se quedó atrapada en alguna máquina del tiempo y siguieron la misma línea machista y básica de la primera mitad del siglo XX cuando a alguien se le ocurrió crear una regla que decía que los niños son los únicos que pueden jugar a los carros, que las niñas, si acaso, pueden tener una muñeca vieja de trapo y tomar el té. Entonces el protocolo de las grandes empresas productoras de juguetes, se quedó en exigirle a los empleados que se levantaran cada mañana, bajaran a la cocina de la mamá y empezaran a mirar en la vajilla qué era lo más fácil para producir a pequeña escala y así fue como empezaron a disminuir el tamaño de los sartenes, pintar los platicos de rosado, meterlos en una caja con el título “La cocinita, juego didáctico” … ¿didáctico? perdón señores creadores de este invento tan lúcido, pero quien conozca al que se le ocurrió esta grandísima idea, haga el favor de presentármelo, necesito que me explique qué de divertido tiene jugar a la cocinita, coger 4 platos de plástico, ponerlos en el piso e imaginarse que hay grandes manjares servidos, para dárselos de comer al primer adulto que pase por ahí. Muy bien, ahora preséntenme el que se inventó el juego de la “mamá” ¿a quién carajos se le ocurrió que cambiar un pañal, así sea de mentiras, era divertido? Desde que tengo uso de razón mi mamá siempre se ha “paniquiado” con el hecho de que no quiere que tenga hijos tan temprano. En el colegio, lo primero que enseñan son los métodos anticonceptivos y aparecen una mano de campañas sociales para que las adolescentes se dediquen a abrir libros y no las piernas. Entonces, sigo sin entender en qué momento se puso de moda jugar a la mamá con un bebé de mentiras. Hace poco vi un comercial en el que una niña como de 10 años gritaba emocionadísima “Y hace popó”. A los 10 años no sabemos ni siquiera limpiarnos bien el propio, como para que nos regalen un muñeco al que hay que alimentar, sacar gases, y esperar a que se le dé la gana de botar lo que se le dio en el tetero. Los machistas después de ese último párrafo dirán, “pa´que aprendan lo que es bueno”, pero no, señores estereotipados y retrógrados, al muy estilo Ordoñez, no es bueno que desde que nacemos, nos pongan un sello en la frente de “nació pa´reproducirse” y que desde que tenemos uso de razón o hasta ahora estemos rondando los 4 años, nos empiecen a presionar con la frase “tiene que aprender a cocinar”. No, a menos que una mujer quiera ser chef profesional o de verdad le guste la cocina, no debería ser una obligación estar metidas en ella. Sí, es bueno saber al menos cocinar un huevo por superviviencia, o apoyarse con algún tutorial, para una cena romántica, pero no para ser la mujer, o la empleada de nadie. Aproveche que para este 24 se va a gastar la plata que no tiene, se va a endeudar comprando regalos y piense en la mejor forma de dejar de lado esos estereotipos vacíos que por años han definido la esencia de una mujer y por favor, enséñele a las niñas desde pequeñas que pueden jugar al doctor, que cuando grandes pueden ser una excelentes profesionales y no obligatoriamente la mamá cocinera y ama de casa que vive del sueldo del marido.
Bastante se ha hablado ya sobre la imposición del ejercicio de la maternidad a la mujer. Ante un embarazo adolescente pocos preguntan por quién eyacula adentro de la jovencita y en cambio, en algo que ha evolucionado incluso al meme y el chiste fácil, los juicios sobre la que “abrió las piernas” llueven a cántaros. Por Carmenza Zá // @Zacarmenza. Ilustración Raúl Orozco // @raeioul A algunos incluso les parece sensato preguntar “¿dónde estaba la mamá -no el papá- de esa niña?” como si para meterlo y venirse no bastaran un par de minutos apenas o como si fuera necesaria la autorización firmada de los padres de familia. A las madres solteras se les estigmatiza, señala e hipersexualiza: “Mujer con hijo, polvo fijo” se repite como mantra en el argot popular. No existen chistes o refranes que ridiculicen al abandonador porque ni siquiera se considera reprochable que nunca vea por el hijo engendrado. (Eso sí, aplaudimos como si fueran héroes a los padres que medianamente responden por sus obligaciones) Cuando una mujer decide abortar aparecen los defensores del no nacido a preguntar que por qué no se cuidó y a señalar que quién la manda. Hay posibilidad de ser flexibles con el discurso “pro vida” en los casos de violación para demostrar que lo que se castiga siempre es la libertad sexual de la mujer; no es cierto que les importe el feto, lo urgente es recordarle a la embarazada que, salvo ella, todos tienen derecho a decidir sobre su vida. Llamamos revolución sexual a la posibilidad de que las mujeres nos embriagáramos con hormonas para poder tirar con la mitad de la tranquilidad mental con la que - libres de útero y con el permiso de abandonar- tiran ellos. Hormonas que tienen costos altísimos sobre la salud de las mujeres y que, además, hacen parte de una industria farmacéutica que comercializa con los cuerpos femeninos como con ningún otro. El embarazo, la maternidad y la crianza se perpetúan sobre la vida de las mujeres como un destino tan violentado como inevitable y, sin embargo, parece haber una amnesia colectiva sobre el hecho de que un polvo heterosexual es el único camino para hacer efectivo ese destino. Parece entonces que, pese a que la función reproductiva compete a hombres y mujeres, el único ámbito en el que es imprescindible la participación masculina es, bueno, en la parte divertida: el sexo. Ya sabemos que después de venirse, ellos tienen toda la licencia para irse. Gabrielle Blair publicó un brillante texto sobre cómo el 100% de los embarazos no deseados son culpa de los hombres. Blair afirma que son ellos los que son fértiles 365 días al año y los que, aun así, deciden poner en riesgo a las mujeres (quitándose el condón, por ejemplo) a cambio de algunos minutos de un poquito más de placer sexual. No hay que olvidar que todo embarazo -deseado o no- fue primero un orgasmo masculino. Mientras tanto, según Blair, “el orgasmo de una mujer no tiene nada que ver con embarazos o fertilidad -su clítoris existe únicamente para el placer, no para crear nuevos humanos. Sin importar cuántos orgasmos tenga ella, ninguno puede embarazarla” Tal vez si las mujeres renunciáramos a (o al menos disminuyéramos la participación de) los hombres en la actividad sexual, tal como ellos han renunciado a las actividades de cuidado y paternidad, podamos de verdad preguntarnos por todo aquello que evita que las mujeres vivamos nuestra sexualidad como algo verdaderamente recíproco y placentero. Con seguridad, ante la amenaza de no tener sexo con hombres hasta que la maternidad y la crianza dejen de ser un asunto que nada más compete a la mujer, ellos decidan ponerse un condón, hacerse la vasectomía o asumir la paternidad con responsabilidad. O, tal vez, incursionar en el sexo lésbico sea mucho mejor que todo lo que conocemos hasta entonces y el embarazo deje por fin de ser una preocupación para todas nosotras... mientras somos felices teniendo muchos orgasmos que no embarazan a nadie. No sé, habrá que probarlo.
Seamos sinceros, no todas las letras de otros géneros musicales que no son rock son las que se encargan de denigrar a la mujer, no solo videos de reggaetón o vallenato, cosifican a la mujer. En las letras de algunas canciones de rock podemos ver como se ofende directamente a las chicas, en la industria, tal parece, que la situación no cambia, dicen que las bandas femeninas no son tan buenas y que cuando canta una mujer la voz gutural nunca es digna de un headbang. Intentamos salir a desmitificar estas cosas con el público de Rock Al Parque y saber además otras cosas del género, qué tan seguros se sienten en un parche rockero, cómo viven con los estereotipos y qué les dicen sus familiares por vestirse siempre tan darks. El Turner fue el encargado de darle todo el sabor a este cuestionario y concluir muy sutilmente cuál sería la solución a todos los problemas. . .
El 6 de julio de 1907 nació Frida Kahlo, sin duda una de las artistas más importantes del siglo XX. En su trabajo logró plasmar sus estados de ánimo con una mirada auténtica de su querido México. Muchos la consideran pionera del surrealismo, aunque ella no conocía mucho del tema. Simplemente se dedicó a plasmar lo que mejor conocía: ella misma. Además de ser una artista con un legado impresionante, también se ha convertido en un fenómeno pop, con su imagen en camisetas, cojines, pines, muñecas cuadros y todo tipo de objetos. También ha sido la inspiración de varios diseñadores de moda como Jean Paul Gaultier y Ricardo Tisci (Givency) y artistas como Lana del Rey o Gwen Stefani han replicado su estilo. Con motivo del aniversario de su nacimiento, las redes sociales siempre se llenan de sus mejores frases y fotos, como "Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas para volar?", o “Quise ahogar mis penas en licor, pero las condenadas aprendieron a nadar”. Frida es también considerada un icono del feminismo al cuestionar los estereotipos de género. Varias veces se visitó de hombre y es ampliamente conocido que tuvo relaciones amorosas con hombres y mujeres, dos decisiones sumamente transgresoras en la época. Pero su unión tóxica con el también artista mexicano Diego Rivera es un aspecto que hay que tener en cuenta sobre su legado. Frida y Diego se casaron en 1929, luego se separaron, y luego estuvieron en una relación abierta en la que salían con personas distintas. Pero varias cartas escritas por la misma Frida demuestran que lo hacía más por miedo a perderlo que por decisión propia. Frida perdonó su maltrato psicológico y sus múltiples infidelidades, incluso con su hermana, pues prefería cualquier tipo de sufrimiento a estar sin él. Así lo manifestó en una de sus cartas publicada en el libro Nunca te olvidaré, Frida Kahlo. Un estudio psicológico de Diego Rivera realizado por la Asociación Regiomontana de Psicoanálisis (ARP) concluyó que el muralista mostraba "una intención sádica muy primitiva que hacía sufrir a la mujer"."Todas las que fueron sus amantes pasaron por esa etapa de sadismo. Entre más amaba a una mujer más quería lastimarla. Frida (Kahlo) sólo fue la víctima más evidente de esa repugnante característica", concluye el análisis. En momentos en los que hablamos de feminismo y feminicidio (muchos de estos crímenes son causados por las parejas de las mujeres), no podemos seguir glorificando una relación codependiente y obsesiva. Es por eso que la figura de Frida se ha replanteado últimamente y muchas feministas han usado la frase “abandona a tu Diego Rivera” como una consigna que invita a dejar de romantizar uniones nocivas. Admiraremos por siempre a Frida por su talento para representar sus emociones y reinvindicar sus raíces. Sin embargo, nunca celebraremos su dificultad para diferenciar el amor del dolor o su dependencia a un hombre misógino que le causó tanto sufrimiento. Frida fue víctima de una relación abusiva y quisiéramos que hubiera hecho lo que todas las mujeres en su situación deberían hacer: pedir ayuda y abandonar a su Diego Rivera.
Las Parceras, un colectivo de mujeres colombianas está convirtiéndose en el hombro de apoyo, en la compañía, en el soporte de cientos de mujeres que deben recurrir al aborto. ¿Cómo es su batalla para lograr que el aborto se convierta en algo más libre y humano? Por: ZaCarmenza // @ZaCarmenza El pasado 10 de mayo se cumplieron 12 años de la sentencia C-355 del 2006 que despenalizó la interrupción del embarazo en 3 causales: cuando la vida o salud de la mujer gestante se encuentra en riesgo, cuando el feto presenta una malformación que hace inviable su vida y en los casos en los que el embarazo es resultado de violación, inseminación no consentida o incesto. Hasta ese momento, cualquier mujer que abortara, sin importar los motivos o condiciones en que lo hiciera, podía pagar entre 1 y 3 años de cárcel. La misma sanción se extendía a quien, aún con el consentimiento de la mujer, efectuara el procedimiento. Mónica Roa, la demandante, argumentó que estas sanciones -contenidas en el Código Penal, Ley 599 de 2000- no solo violaban el derecho a la dignidad, la autonomía reproductiva, el libre desarrollo de la personalidad o la igualdad sino que, además, vulneraban el mismo derecho a la vida, la salud y la integridad de las mujeres. Roa aseguró que la Corte Constitucional había privilegiado una “concepción moral de vida”, sobre la dignidad, la libertad y la autonomía de la mujer gestante. Sin embargo, si bien la sentencia consigue que en las 3 causales mencionadas el aborto no termine con una mujer en la cárcel, tampoco es un reconocimiento del derecho de toda mujer a decidir sobre su cuerpo. En el año 2017, Profamilia hizo público un comunicado en el que afirmaba que en Colombia aún persistían las “barreras de acceso” al aborto. El desconocimiento de la sentencia y, con ella, de información suficiente y veraz para acceder al procedimiento, la violencia psicológica a la que se enfrentan las mujeres gestantes, las mentiras sobre el aborto y sus consecuencias, la discriminación, la intimidación, la violación a su privacidad, entre otros, fueron señaladas por la entidad como los principales obstáculos a los que se enfrentan las mujeres interesadas en interrumpir un embarazo. Pareciera que, más de una década después de la aparición de la sentencia, el Estado colombiano se hubiese quedado estático en la promulgación de la norma, sin preocuparse por avanzar en la integralidad del derecho al aborto y en las totales garantías para acceder a él. “EL ABORTO ATRAVIESA A TODAS LAS MUJERES” Quienes nunca se han quedado quietas han sido las integrantes del movimiento feminista y de las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres. Entender la urgencia de una reglamentación que brinde condiciones dignas para quienes quieran y/o necesitan interrumpir un embarazo no excluye reconocer que, pese a la inoperancia institucional, las mujeres han abortado históricamente y no van a dejar de hacerlo. “El aborto nos atraviesa la vida a las mujeres. Así una mujer no haya abortado, conoce la historia de alguien: su mamá abortó, su amiga abortó, su hermana abortó. Todas conocemos una mujer que haya pasado por esa situación. Es un tema que nos llama a todas”: eso dice Eliana, integrante de Las Parceras, la primera Línea y Red Feminista de Acompañamiento en Aborto que existe en Colombia. “Como Parceras reconocemos los aportes que entrega la sentencia a las mujeres, que no es la Corte Constitucional la que la ha hecho, sino el trabajo de más de 20 años de muchas organizaciones por los derechos de las mujeres pero, lo cierto, es que el aborto sigue siendo un delito según el código penal”. El Instituto Guttmacher de Nueva York calculó que en el año 2008, solo dos años después de promulgada la sentencia C-355 del 2006, se hicieron 400.000 abortos en Colombia de los cuales solo 322, es decir el 0,08%, fueron reportados como procedimientos legales. ¿Y el resto? María Vivas, co-líder del Grupo Médico por el Derecho a Decidir, afirmó a La Silla Vacía que en 2016 todavía no se tenían cifras ni contexto claro del estado de los abortos en el país. LAS PARCERAS: LÍNEA DE ACOMPAÑAMIENTO Un encuentro internacional de ciberfeminismo y ciberseguridad que tuvo lugar en Quito llamó la atención a las participantes colombianas: Colombia pertenecía a los pocos países que no contaban con una red o línea de acompañamiento al aborto con medicamentos. Las Comadres, oriundas del país anfitrión del encuentro y primera red de acompañamiento al aborto en Latinoamérica, afirman que su labor está enfocada en tres acciones: “INFORMAR a las mujeres sobre aborto seguro con pastillas y estrategias para evitar la criminalización. FACILITAR a las mujeres el contacto con organizaciones internacionales que trabajan por el acceso a los medicamentos. ACOMPAÑAR a las mujeres durante todo el proceso de aborto: antes, durante y después; como una estrategia de despenalización social y prevención de la criminalización de mujeres que abortan”. Pero, en Colombia, con una sentencia como la C-355 del 2006: ¿sí es necesario un ejercicio similar? Varias mujeres feministas consideraron que sí, escucharon el llamado que les hicieron en Ecuador y regresaron a Colombia con la misión de conformar una red de acompañamiento. Así nacieron Las Parceras, un grupo de mujeres heterogéneas, con posiciones políticas diferentes y que actúan desde diferentes frentes: el arte, la cultura, la pedagogía, pero con una bandera común: un aborto libre y seguro para todas las que quieran y necesiten acceder a él. “Existen muchos motivos por los que, aún las mujeres que están dentro de las causales, no pueden acceder a un aborto: La clase y el territorio son algunos de ellos. Las Parceras brindamos toda la información a las mujeres, queremos decirles que hay una manera de abortar con medicamentos de manera segura, así se trate de un procedimiento invalidado y deslegitimado por muchos” afirma Eliana. Llegar a los barrios periféricos, a las regiones aisladas en las que no solo se desconoce la sentencia sino en la que los círculos de pobreza aumentan y se alimentan de la maternidad adolescente, el madresolterismo y los embarazos no deseados es prioridad de Las Parceras. Por ello iniciaron la campaña #365DíasPorLaAutonomíaDeLasMujeres, en la que buscan “visibilizar las distintas formas en que las mujeres hemos defendido el derecho a abortar como acto legitimo y ancestral”, y convocaron a mujeres de todo tipo a escribir canciones que defendieran la autonomía de las mujeres. La ganadora, MC Saya, grabó el video de su canción que ha servido como herramienta para hablar de aborto, menos como una discusión jurídica y más como una experiencia de vida. La campaña también incluyó una convocatoria para ilustradores que quisieran diseñar imágenes en defensa del aborto. De 27 propuestas recibidas fueron seleccionadas cinco para pegar en diferentes regiones del país como parte de una “cartelatón” a cargo de Las Parceras pero en la que cualquier persona puede participar escribiendo a lasparceras@riseup.net y convocatorialasparceras@gmail.com para coordinar el envío o entrega de los carteles. “Esta campaña busca hacer visible el derecho al aborto como una decisión propia de las mujeres, dónde la iglesia no tiene por qué estar haciendo injerencia ni obstaculizando este derecho. Esta campaña nace en respuesta a las vigilias de los 40 días por la muerte de las mujeres que celebran distintos grupos religiosos en las instalaciones de Oriéntate, Profamilia y demás instituciones donde prestan el servicio de aborto/IVE, donde persiguen, hostigan y desinforman a las mujeres, propiciando así riesgos inminentes nombre de la autonomía de las mujeres!” afirman Las Parceras. ¿CÓMO TRABAJAN LAS PARCERAS? Antes de hacer pública la línea de acompañamiento, Las Parceras tuvieron varios meses de preparación: construyeron protocolos jurídicos, de atención médica, de acompañamiento psicosocial y de autocuidado, no solo para garantizar la seguridad de todas, sino para asegurarse de saber cómo responder a los momentos específicos: “nosotras nos preocupamos por la vida social que tiene la mujer, por la tranquilidad y por su sentir, por lo que piensa, por lo que siente, por lo que atraviesa. Eso no suelen hacerlo las clínicas o IPS. El aborto de todas las mujeres es completamente distinto; no todas lo viven de manera dolorosa, no todas lo viven de manera alegre. Muchas mujeres abortan solas, no tienen una red que las acompañe y aunque no somos la única opción, para algunas somos la opción que prefieren y se acerca a su deseo y necesidad. Nosotras acompañamos con amor, con cuidado y sin prejuicios” La Organización Mundial de la Salud- OMS ha hecho públicos los protocolos y recomendaciones para garantizar un aborto seguro, en uno de ellos Aborto sin riesgos: Guía Técnica y de Política para Sistemas de Salud afirman que “El asesoramiento y la información pueden ser muy importantes para ayudar a la mujer a considerar sus opciones y asegurar que puede tomar una decisión sin ningún tipo de presión” Las Parceras brindan asesoran a cualquier mujer que se comunique a su línea. No dan información por redes sociales, ni a hombres, pues asegurarse de que quienes se acercan a ellas están libres de presión es el primer paso. Verificar que las condiciones médicas y sociales de cada mujer no impliquen riesgo a la hora de hacer el procedimiento es también algo de lo que se encargan las parceras “Nuestra apuesta es por salvaguardar la vida de las mujeres y para que las mujeres puedan tomar una decisión de manera tranquila” afirma Eliana. Cada mujer decide qué tanto quiere ser acompañada por Las Parceras. En ocasiones, un primer encuentro en el que se brinda información basta, en otros casos, las mujeres buscan que una Parcera les informe y acompañe de cerca durante su proceso y en su contexto, otras prefieren estar rodeadas por sus amigas o sus parejas, manteniendo conversación telefónica con una Parcera. Cada caso es diferente y en cada situación se busca lo mejor para cada mujer. Los encuentros se hacen en lugares públicos, no solo por la seguridad de todas sino porque es una manera de defender el derecho a informarse, a decidir, a hacer uso del espacio público y sacar de la clandestinidad algo propio de la experiencia vital femenina; en los encuentros se brinda toda la información sobre síntomas, riesgos y cuidados a seguir. En muchos casos las mujeres ya han conseguido las pastillas antes de encontrarse con Las Parceras y en esos casos se verifica que se trate de la dosis y el medicamento adecuado según el caso. “El riesgo en un aborto existe porque no tenemos la información completa y veraz. Hay toda una industria detrás del aborto que comercializa con el cuerpo y la salud de la mujer: se amparan en mitos e imaginarios para limitar nuestros derechos, venden medicamento que no es, formulan dosis equivocadas porque no les importa la salud de las mujeres, la vida misma” Las Parceras hacen uso de la sentencia pues saben que el Estado tiene una responsabilidad con la salud de las mujeres. Por eso el acompañamiento también se hace con las EPS e instituciones con experiencia en aborto, para garantizar que las mujeres puedan acceder al procedimiento en los tiempos establecidos para tal, sin retrasos o impedimentos por parte de las instituciones. “ENTRE NOSOTRAS NOS CUIDAMOS” Las Parceras han priorizado llevar la discusión y reflexión acerca del aborto a las calles, los barrios y las periferias pues la ubicación territorial puede ser la diferencia entre un procedimiento seguro y un aborto clandestino y riesgoso. Antes de lanzar la línea, Las Parceras repartieron volantes en algunas zonas en Teusaquillo, conocidas por tener abortaderos clandestinos e inseguros; las mujeres no tardaron en llamarlas. También visitaron la Universidad Nacional y múltiples espacios en los que pudieran hacer visible su mensaje, incluyendo los barrios populares de Bogotá. Hoy cuentan con más de 30 personas en Bogotá y Cali, pero los primeros días de junio realizaron la “Escuela Feminista para Acompañantes de Aborto” que busca ampliar la red en esa ciudad y, dentro de las proyecciones de este año, está el consolidar redes de acompañamiento en Tunja y Medellín. Sin importar la raza o la clase, las mujeres abortan y lo han hecho desde siempre. Sin embargo, esos factores sí definen la dignidad con la que se realice el procedimiento: “Ese llamado síndrome posterior al aborto, relacionado a la depresión y la culpa, no existe por el procedimiento como tal sino por las condiciones en las que abortan las mujeres. Si lo haces en condiciones inseguras, presionada o con el estigma que pone la sociedad en ti, puede ser difícil. Si lo haces acompañada, con toda la información y segura de lo que estás haciendo, es un ejercicio de amor propio” afirma Eliana. Hay Parceras ateas y católicas, mujeres creyentes que saben que su Dios no existe para culpar, que no condena sus cuerpos y para las que, además de despenalizar el aborto, es importante descriminalizar las conciencias. Mujeres de todo tipo abortan y acompañan y ese es uno de los mensajes que buscan transmitir Las Parceras: Nos toca a todas, nos acompañamos todas y nos cuidamos entre todas, porque nadie más va a hacerlo por nosotras. ¿Y qué es lo más difícil de ser una Parcera? Tener que decirle a una mujer que no es apta para un aborto con medicamento, ya sea por condiciones médicas o psicosociales y es difícil porque, por lo general, cuando una mujer busca a Las Parceras ya ha tomado la decisión de interrumpir su embarazo y, con acompañamiento o sin él, está dispuesta a hacerlo de cualquier forma. Por situaciones como esas, en las que pareciera que no se puede hacer nada, Las Parceras afirman que “sí se puede y depende de la voluntad política y de la acción de médicas, médicos, clínicas que se atrevan a defender la vida de las mujeres, sin prejuicios, sin asteriscos y sin obstáculos.”
No hay duda de que Baby Reindeer o Bebé Reno es una de las mejores miniseries de Netflix en los últimos años. Richard Gadd, un comediante escocés, creó, escribió y protagonizó la serie basándose en dos experiencias de abuso y acoso que vivió en sus veinte. Es una historia emocionalmente desgarradora e importante porque retrata fielmente lo que muchas personas pueden sentir cuando atraviesan este tipo de situaciones. No he leído ni una sola crítica negativa de la serie (más que un comentario en TikTok que dice que está "sobrevalorada") y por el contrario, sé que tiene un 7,9 y un 98% en IMDb y en Rotten Tomatoes, respectivamente. ¿Por qué Baby Reindeer es un caso particular? Baby Reindeer es un caso particular porque, a pesar de que se estrenó a principios de abril, sigue siendo noticia y tendencia. Esto debido a que las personas en internet se dedicaron a buscar las identidades reales de las personajes que salen en la serie, como Martha, Darrien e incluso Teri. Asimismo, un medio de comunicación llegó a entrevistar a la real acosadora de Richard Gadd en televisión. Posiblemente, las ganas de descubrir quiénes son realmente estos personajes tienen mucho que ver con el morbo que causó la serie. Sin embargo, las cosas se estaban poniendo intensas y Richard Gadd tuvo que intervenir pidiendo que dejaran de suponer quiénes eran esas personas. Acá les cuento lo que ha causado este "fenómeno". ¿Quién es Darrien en la vida real? Poco tiempo después de que se estrenó la serie, TikTok se llenó con videos en los que explicaban por qué Sean Foley, escritor, director y comediante británico, era el verdadero Darren. Argumentaban que tanto el actor, Tom Goodman-Hill, y el comediante Sean Foley se parecían mucho y los hechos en la serie cuadraban en sus suposiciones. Debido a las acusaciones, Sean Foley no tardó en manifestarse en su cuenta personal de X (antes Twitter). "La policía ha sido informada y están investigando todos los post difamatorios, abusivos y amenazantes hacia mí", escribió. Por su lado, Richard Gadd publicó una historia en su Instagram defendiendo a Foley. A pesar de esto, muchas personas siguen pensando que Sean Foley es el verdadero Darren. “Estoy convencido de que fue Sean Foley, hay muchos rumores desagradables sobre él en escena”. ¿Quién es Martha en la vida real?Posiblemente antes de que la misma Fiona Harvey se manifestara sobre la serie, TikTok y X ya estaban anunciando que ella era Martha en la vida real. Incluso, el Daily Mail escribió y publicó la identidad de este personaje. Además de publicar sus fotos, encontraron su cuenta personal de Facebook en donde empezó a comentar la serie. En efecto, la mujer sí tiene muchas similitudes con el personaje de la serie: no solo por su aspecto, sino la forma en la que escribe. Así como en la serie, Fiona Harvey es una abogada de 58 años. Harvey aseguró que sí conocía a Richard Gadd y sí habían compartido un poco de tiempo juntos pero que "su historia es una burda intromisión en mi intimidad. No le he visto en 12 años". Además, aseguró que lo iba a denunciar por difamación. “Llamaré a la Policía si alguna vez te acercas a mí. Te voy a demandar a vos, a ese diario y a la tonta que escribió el artículo con vos. Espero que eso te quede claro, incluso para un imbécil como vos. Exigiré que el diario te despida. No me gustas ni nunca me gustaste”.Después de sus declaraciones, Fiona Harvey fue entrevistada por Piers Morgan, el editor, periodista y presentador de televisión británico. Durante el programa, Harvey aseguró que lo que Gadd contaba en la serie de Netflix era una mentira. ¿Quién era Teri en la vida real?Según las búsquedas de las personas en Internet y sus suposiciones, Teri, quien interpreta a la novia trans de Donny, es en realidad Anna de Simone. Esto debido a su parecido físico y porque ambas comparten la misma profesión, psicología. Quienes aseguran que esta es la verdadera identidad de Teri incluso compararon contextos y ubicaciones de la vida del personaje con Anna de Simone para demostrar que sí es cierto. ***Si les gustó la serie, les recomendamos ver: Baby Reindeer: análisis psicológico del 4cos0 en la serie con María Elisa Dávila #35mm | Shock
Después de que Yorgos Lanthimos lograra un fenómeno con Poor Things, una película aclamada por los críticos y muy premiada en los Oscar 2024, llega su nueva producción Kinds of Kidness. El largometraje tuvo la premier mundial en el Festival de Cannes. Emma Stone y Willem Dafoe, protagonistas de Poor Things, también hacen parte del elenco de esta nueva película del director griego. Asimismo, actores como Joe Alwyn (La favorita), Margaret Qualley (Había una vez en Hollywood), Hunter Schafer (Euphoria) y Jesse Plemons (Amor y Muerte), entre otros, componen esta historia contemporánea. Yorgos Lanthimos trabajó con el guionista Tony McNamara en Poor Things y La favorita, pero para Kind of Kidness dirigió el guión de Efthimis Filippou, conocido por escribir Lobster y El sacrificio de un ciervo sagrado. Teaser oficial de 'Kinds of Kidness'¿De qué trata 'Kinds of Kidness'?Aunque no se ha publicado el trailer oficial de la película, Yorgos Lanthimos afirmó que: “Es una película contemporánea, ambientada en Estados Unidos: tres historias diferentes, con cuatro o cinco actores que interpretan un papel en cada historia, por lo que todos interpretan tres papeles diferentes. En realidad, fue casi como hacer tres películas”.Después de su estreno en el Festival de Cannes, se ha calificado como una historia de "canibalismo, cultos sexuales y libertinaje". Además, la desnudez es una parte clave de la trama. Las primeras críticas de 'Kinds of Kidness'A pesar de que en el Festival de Cannes la película tuvo una ovación de cuatro minutos, varios medios ya han publicado críticas en las que se demuestran su decepción frente al largometraje. El periodista especializado en cine, Javier Zurro, escribió una reseña en elDiario.es donde afirma que Kinds of Kindness es un elogio a la crueldad. "No lo es [una comedia graciosa] porque Lanthimos está constantemente preocupado por provocar y epatar. Por ser incómodo y retorcido. Tanto que se pasa de vueltas todo el rato. Disfruta torturando a sus personajes hasta los límites más insospechados. Nunca les da una salida ni una oportunidad". Por otro lado, Nicholas Barber escribe en la BBC: "Por más oscura que siempre haya sido la comedia de Lanthimos, hay momentos en que la crueldad se vuelve casi insoportable". Además, afirma: "Ciertamente, aquellos de nosotros que argumentamos que el sexo y la desnudez en Poor Things eran importantes para la historia de liberación y confianza en sí misma de Bella puede resultarnos más difícil defender Kinds of Kindness". Sin embargo, y dejando de lado estas críticas negativas, las primeras votaciones en Rotten Tomatoes le han dado a la película una puntuación del 95%. Tendremos que esperar a que la película se estrene, el 21 de julio del 2024, para tomar una decisión sobre lo que pensamos sobre Kinds of Kindness, la nueva película del director griego. ***Si les gustó Poor Things, les recomendamos leer: Poor Things: el fastidio que nos genera la libertad - Análisis y significado de la película
Nick y Aaron Carter: ídolos caídos es una docuserie en dos partes de Investigation Discovery que explora las vidas de los hermanos Nick y Aaron Carter, el primero conocido por su participación en lso Backstreet Boys. La serie se estrenará en Max con su primera parte el 27 de mayo y la segunda el 28 de mayo. Además, estará disponible en Discovery a partir del 7 de junio a las 22:00 hs (Colombia) en un formato de cuatro episodios de una hora, con el estreno de un capítulo cada semana.¿De qué trata Nick y Aaron Carter: ídolos caídos?Desde su meteórica fama a finales de los años 90 y principios de los 2000 hasta los conflictos que los llevaron a los titulares en años recientes, la docuserie revela la tensa dinámica familiar de los Carter y un lado no tan conocido de su ascenso a la fama. Nick y Aaron Carter: ídolos caídos examina las acusaciones de abuso sexual contra Nick Carter, realizadas por tres mujeres, mientras aborda las luchas de Aaron Carter con la salud mental, el abuso de sustancias y la ruptura entre los hermanos tras el apoyo de Aaron a las denunciantes de Nick.En 2017, Nick Carter fue acusado de abuso sexual por Melissa Schuman, ex miembro del grupo musical femenino DREAM, mientras él y los Backstreet Boys estaban en la cúspide de su fama. En los años siguientes, otras mujeres, Ashley Repp y Shay Ruth, presentaron acusaciones similares. Durante este tiempo, Aaron Carter apoyó a quienes denunicaron a Nick, mientras lidiaba con sus propios problemas de adicción y salud mental, lo que llevó a una disputa pública entre los hermanos antes de la trágica muerte de Aaron en 2022. La serie profundiza en las acusaciones contra Nick y cómo se entrelazaron con la volátil relación entre los hermanos.La serie cuenta con entrevistas exclusivas a Melissa Schuman, Ashley Repp y Shay Ruth, quienes ofrecen perspectivas emotivas e impactantes sobre sus acusaciones contra Nick. Nick y Aaron Carter: ídolos caídos busca ofrecer una comprensión más profunda de las denuncias, y narrar la intensa reacción que las denunciantes han enfrentado desde que decidieron hablar públicamente, y el impacto duradero en sus vidas. La docuserie también incluye testimonios de un miembro de la familia Carter y amigos cercanos, como la ex novia de Nick, Kaya Jones, y la ex prometida de Aaron, Melanie Martin, brindando una mirada íntima a cómo la intensa fama y los conflictos provocaron una ruptura entre los hermanos.
Desde hace años en algunos conciertos en Colombia se vienen implementando los palcos, es decir, espacios delimitados frente al escenario destinados a grupos más grandes, normalmente de 10 personas . Es una modalidad usada principalmente en conciertos de reggaetón o música popular. Recientemente, Nicky Jam se pronunció al respecto. Nicky Jam dio una entrevista al canal de video 'Mario VI TV' y habló sobre la organización de conciertos en el país. Según el puertorriqueño, la forma en que se organiza al público en los escenarios en Colombia. a menudo dificulta la conexión con los artistas. Por eso dijo que "los conciertos de Colombia son los más difíciles", en un fragmento de la entrevista que se viralizó en X (Twitter). "El promotor pone palcos donde están los ricos, mientras que la masa que realmente canta las canciones está en las zonas generales. No sientes al público, porque los que están al frente no gritan ni hacen nada", comentó el cantante.Los palcos suelen tener costos más elevados que la taquilla general: recientemente para el concierto de Karol G, los costos del palco superaban los 24 millones de pesos. Además, Nicky Jam señaló que en algunos conciertos combinan artistas urbanos con intérpretes de vallenato y música popular, lo cual provoca que los fans del reguetón terminen en las zonas generales, mientras que aquellos que prefieren otros géneros ocupan los palcos. El cantante no está de acuerdo con esta forma de organización, ya que considera que el espectáculo debería ser para todos."Yo soy de energía. Si estoy en el escenario y no siento a la gente gritando, me desanimo inmediatamente", complementó el artista. Nicky Jam destacó al estadio Atanasio Girardot en Medellín como un buen escenario: "Me gusta cómo prepararon el Atanasio. Es sin palcos, por eso se siente como un verdadero concierto con el pueblo. Me encanta cantar y estar cerca de la gente, sentir que puedo chocar los cinco con alguien. Pero eso es lo que hacen los promotores de allá, y mis respetos para ellos por seguir contratándome", concluyó.Nicki Jam forma parte del cartel de La Eterna, evento que se celebrará el próximo 3 de agosto, precisamente en el Estadio Atanasio Girardot.
Pimpinela, el dúo argentino compuesto por los hermanos Lucía y Joaquín Galán, fue un éxito a finales de los 80 y principios de los 90, gracias a asus cancioens dramáticas con diálogos cantados. Canciones como A esa, Olvídame y pega la vuelta, Ahora decide y Ese estúpido que llama. En uno de los videos de Pimpinela hay un cameo que aún hoy, más de 30 años después de su estreno, sigue llamado la atención: eld el actor Christopher Reeve, conocido por interpretar a Superman. El video musical de Heroína Solitaria"debutó en 1993 como parte del álbum Pimpinela 92. El vídeo retrataba una fantasía romántica que involucraba a una joven secretaria que trabajaba para un poderoso hombre de negocios. A lo largo del vídeo, la trama se desarrolla con deseos reprimidos entre la "heroína solitaria" y su misterioso jefe, que inteligentemente nunca aparece del cuello para arriba, manteniendo un aire de misterio como el objeto secreto de su afecto.La interacción entre Lucía y Joaquín en la canción refleja una lucha constante entre mantener la profesionalidad y ceder ante los sentimientos. El título se refiere a su gran esfuerzo para mantenerse profesional en una situación que claramente la afecta emocionalmente. Mientras el dúo argentino interpreta su sentida canción ante un público cautivado, la trama se complica cuando el jefe olvida sus billetes de avión para un viaje crucial. En una carrera desesperada por entregarlos, la secretaria lo alcanza y le revela que no es otro que el propio Superman, interpretado por el querido actor Christopher Reeve. Reeve reconoce gentilmente su esfuerzo y queda cautivado por la joven.El video fue filmado justo antes del trágico accidente de Christopher Reeve en 1995, que resultó en una lesión en la médula espinal que lo dejó paralizado. A pesar de sus desafíos posteriores, Reeve, quien inmortalizó al superhéroe Superman, continuó inspirando a muchos hasta su fallecimiento, el 10 de octubre de 2004.