Am I OK?: ¿Cómo superar una crisis de identidad a los 30?

Antes de ver Am I OK? solo había visto dos películas de Dakota Johnson. Una, por supuesto, era 50 Sombras de Grey (un fenómeno cultural y una incomodidad para ver con los papás). La otra, era el desastre en taquilla más reciente de Marvel, Madame Web.

Mi conclusión, después de haber visto Am I OK?, disponible en Max, es que la industria ha desaprovechado el talento y el alcance de Dakota Johnson.

En Am I OK? la actriz interpreta a una mujer de 32 años que está afrontando una crisis con su identidad y su orientación sexual.

Es una comedia dramática dirigida por Tig Notaro y Stephanie Allynne. Originalmente se estrenó en el Festival de Cine de Sundance del 2022 y, por fin, llegó a Max el 6 de junio del 2024.

Esta es la primera película LGBTIQ+ que veo en la que una mujer adulta atraviesa por un momento difícil descifrando y aceptando su orientación sexual.

Este tema en específico, la salida del clóset, es muy usual (más de lo que debería si queremos abolir el hecho de que sí o sí hay que “salir del clóset”) en las películas que hablan de la comunidad LGBTIQA+.

Sin embargo, estas historias la mayoría de veces son abordadas con protagonistas adolescentes que, en mitad de su último año de colegio, se dan cuenta de que les gusta alguien de su mismo sexo y tiene que lidiar con la reacción de sus amigos y de sus papás.

Esto es, en gran parte, porque la mayoría de los y las que hemos salido del clóset y hemos lidiado con problemas de identidad tuvimos que hacerlo cuando estábamos, efectivamente, en el colegio.

Sin embargo, en Am I OK? Lauren Pomerantz y Tig Notario (a quién siempre recordaremos por hacer los papeles más graciosos) le dan una vuelta a esta historia cliché.

Nos presentan a Lucy, una mujer de 32 años, que desde la primera escena se nota que está inconforme con su vida. Es artista, pero trabaja de recepcionista en un lugar de masajes y sus interacciones sociales se reducen a su mejor amiga Jane y a su novio Danny.

Su vida simple y solitaria se desmorona cuando se entera que Jane va a ser transferida a Londrés. Esa noche, en la que le dan la noticia, se emborracha y le cuenta a su mejor amiga que cree que es lesbiana. 

Desde ese momento, la película deja claro el miedo que le tiene la protagonista al solo hecho de decir la palabra “lesbiana”. Durante toda su salida del clóset nunca utilizó esa palabra con su amiga. Prácticamente estaba jugando a “adivina la palabra mientras te confieso mi secreto más grande”.

Para quiénes no han tenido dudas sobre su orientación, esta parte va a sonar ridícula. Algo así como cuando en Harry Potter nadie decía “Voldemort” porque era el innombrable. Así.

Sin embargo, para quienes sí hemos pasado por ahí, tiene todo el sentido del mundo.

Hace un par de meses volví a salir del clóset, esta vez como lesbiana y, ahora que lo pienso, tal vez la primera vez no me definí de esa forma porque le tenía pavor a la palabra. ¿Qué implicaba decir que era lesbiana?

En una sociedad que todo el tiempo intenta callarnos e interponerse en nuestra libertad, nombrarnos y gritar muy fuerte quiénes somos es nuestra arma. También es nuestra condena.

// Am I OK? - Max

Nombrarnos nos permite unirnos y tener una lucha conjunta, en la que nos damos cuenta que otras miles de personas están pasando por lo mismo. Entonces, nombrarnos, además de darnos una identidad, nos ayuda a no sentirnos solos y solas porque encontramos lugares comunes.

Sin embargo, nombrarnos nos hace visibles. Visibles ante el odio, el rechazo, la discriminación y la estigmanización. ¿A cuántas personas no nos han dicho que es mejor que “disimulemos” lo que somos para vivir en paz?

Volviendo a la película. Jen quiere que Lucy salga, tenga citas con mujeres y vaya a bares lésbicos. Lucy tiene la cabeza hecha un ocho porque Brittany, la masajista del lugar donde trabaja, no deja de coquetearle y a ella le gusta. 

Aceptar que es lesbiana, salir bares y utilizar aplicaciones de citas harían que la protagonista tenga que salir de su zona de confort que, aunque no se siente para nada cómoda en esta, es un lugar que conoce muy bien.

Lucy necesita estabilidad. No porque la haga feliz, sino porque le tiene pavor al cambio. Lo sabemos porque prefiere tener cualquier otro trabajo a ser artista, o por el simple acto de pedir siempre lo mismo en un restaurante. Sabe lo que le le gusta y prefiere no embarrarla pidiendo algo más. O eso quiere hacerse creer.

Ahora, imagínense hacer las paces con la idea de que le gustan las mujeres a los 32 años y tener que salir a buscar pareja. No me malinterpreten, no hay edad para descubrir qué nos gusta, pero en la película es claro que para Lucy aceptar que es lesbiana a esa edad la hace sentir que no tiene ni idea de quién es y que nunca lo ha sabido.

// Am I OK? - Max

Sin embargo, esa “búsqueda” constante de la estabilidad la lleva a pelear con su mejor amiga, Jen. Esto hace que nos adentremos a la otra gran parte de la trama de Am I OK?: la amistad.

¿Qué voy a hacer sin la única persona que siempre ha estado ahí para mí justo en el momento que más la necesito?

Las relaciones importantes en la película, la de Lucy con Jan y la de Lucy con Brittany, están tan bien desarrolladas e interpretadas que cada segundo de la película acompañamos a Lucy a vivir y a sentir todo lo que está atravesando en su vida (y de manera verosímil, no como en Madame Web).

Por un lado, el deseo que siente por estar con Brittany y al mismo tiempo el miedo de que eso pase. Atravesamos con ella el primer corazón medio roto y la tristeza del primer encuentro desafortunado con una heterocuriosa.

Pero no todo es negativo, al contrario.

Al final de la película, vivimos con Lucy ese momento que todas las personas logramos tener cuando aceptamos lo que somos: un sentimiento de ligereza, de que las cosas por fin cuadran y de que todo va a estar bien. 

Por otro lado, vivimos la impotencia que se siente en las relaciones de amistad donde las dos personas son tan diferentes. Ese desasosiego al pensar que la otra persona no te entiende y quiere que hagas todo a su manera. Pero, al mismo tiempo, esa soledad que resulta de alejar a esas personas de tu vida. Personas que solo quieren lo mejor para ti (así no lo expresen de la manera correcta).

// Am I OK? - Max

Dakota Johnson protagoniza una película sobre la búsqueda y la aceptación de la identidad justo en la etapa de la vida en la que supuestamente tienes que tener todo ya resuelto. Una historia sobre la amistad y la importancia de estas relaciones.

Tig Notaro y Stephanie Allynne, las directoras, nos traen una película LGBTQA+ desde otra perspectiva que permite plantearnos lo importante que es para nosotros y nosotras mismas aceptarnos como somos y lo que deseamos (más allá de sí homosexuales o heterosexuales), en un mundo que se mueve tan rápido y nos intenta arrebatar y hacernos sentir mal por todas nuestras decisiones.

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