Escuchar el 5 pa las 12 del colectivo MIH (Oblivion’s Mighty Trash, Adam Walsh e Isaac SA) es darse un paseo rápido por una nueva camada del rap de Medellín, que ya goza de un bello presente, pero que promete gloria como futuro.Así son todas las buenas vísperas de año nuevo.Esos últimos 300 segundos de cada calendario tienen su particularidad. Los presentes sirven un trago, agarran sus uvas, se meten lentejas en los bolsillos, salen a dar vueltas a la manzana con maleta a cuestas y ponen a sonar duro la primera estación de radio que encuentren.Todo esto tiene una razón de ser: sembrar las semillas de una buena fortuna para el futuro.Desde el nombre de la agrupación, Make it Happen (MIH) muestra estar decidida a no quedarse en la manifestación.¿Qué es Make it Happen?La primera aparición de Make It Happen fue en el tema Combo (MIH), de No me acuerdo, el disco de Oblivion’s Mighty Trash que estuvo entre los mejores del 2023 para Shock.Isaac SA nació el 12 de octubre de 1999, creció en Sabaneta y lleva desde 2016 publicando música en solitario o con su colectivo, La Sucia Alianza, que está situado salvo por Isaac en Envigado.La geografía explica su cercanía y colaboración constante con La Ciudad Maldita, colectivo encabezado por el productor y rapero Zábaz. Dentro del trabajo de Isaac destaca el EP Esquirlas, con Inko Beats.“A mí lo que me gustan son los skills, las métricas, el wordplay”. En 5 pa las 12 es quizás el de las barras más ingeniosas: cuando Isaac rapea “¿Qué será de mí mañana / es lo que pienso desde ayer” replantea las únicas dos preguntas centrales a toda la vida, y recuerda la música decembrina: “¿Cómo me compongo yo en el día de hoy? / ¿Cómo me compongo yo el día de mañana?”.Salomé Ochoa (Adam Walsh) nació el 2 de marzo del 2000 en el municipio de Guarne, a 25 minutos de la capital de Antioquia.Allí creció y estudió música y producción musical, en el Tecnológico de Artes Débora Arango, en el corazón de Envigado.Aunque lleva desde 2019 rapeando, de entrada dice: En el Débora Arango estudian también Oblivion’s Mighty Trash y muchos de sus amigos más cercanos, que conforman su equipo de trabajo.Juan Sebastián Álvarez (Oblivion´s Mighty Trash) nació el 27 de enero de 2003 en Bello, y ya hace un año, en nuestra sección de Apuestas Shock, exploramos su perfil.Es poco lo nuevo que puede decirse de él: es a la vez joven promesa y presente brillante del hip-hop colombiano.“El Obli tiene una habilidad narrativa muy propia. Él sabe cómo botar las cosas de manera que la gente lo digiera muy chimba y eso es muy duro”, dice Isaac. “Que usted pueda transmitir las vueltas así de efectivamente y que tenga tantas barras y skills es brutal”.Hablando de este disco, le reconocen a Barbatos beats (Sebastián Montoya) el mérito de meterlos de lleno en este proyecto común. El hoy productor acompaña a Oblivion en vivo como DJ y ha sido productor de varios de sus temas. Antes, hizo parte del grupo Underhood como rapero.Diavlitx (Mateo Mateus) fue igualmente crucial para que todo cuajara.En un primer momento, porque puso techo pa las polas, pues hace poco más de un año se mudó al lado del parque de Envigado y eso permitió que empezara a parchar más con Barbatos. “Nosotros no empezamos diciendo hagamos un disco”, dice Isaac. “Hay algo muy chimba de todo esto y es que nos hicimos amigos por la música misma y ya más adelante, de tanto estar en el estudio parchando, nos montamos en hacer algo con ellos dos como productores”.En 2021, Diavlitx se conoció con Adam Walsh, Atenea y Blacksad, y juntos formaron el colectivo No Fun, que de entrada contrasta con el panorama nacional entero por contar con dos raperas al frente.“Diavlitx es mi parcerito con el que empecé a hacer música con horizontes y sueños en común”, cuenta Adam Walsh. El día que se conocieron hicieron Ticket dorado y, eventualmente, el EP En el abismo están las golosinas.La tradición reciente del álbum de colectivo en ColombiaEs difícil acercarse a discos colaborativos como 5 pa las 12 sin pensar en Sagrado (2020) o El Vuelo (2023) de los santandereanos de El Nido, o sin pensar en la profunda influencia reciente de Moebius, el grupo que cobijó a Doble Porción, Zof Ziro (hoy ZetaZeta), Granuja, Crudo Means Raw y, en distintos momentos, a Noiseferatu, No Rules Clan, Al Baro, El Jose o Sr. Pablo.Entre lanzamientos de algunos de los mejores discos de hip-hop nacional, Moebius dio al menos dos grandes vueltas celebratorias al apostar a formatos similares con icónicos proyectos como Rap y Hierbas (2017) y La Gra$a (2018): discos en los que uno o más productores daban base a uno o más raperos exclusivamente dedicados a exhibir sus destrezas.La referencia no es solo un tema de formatos. Es bien sabido que Oblivion se dedicó de lleno al rap principalmente por el impacto de Todos tienen que comer (2016) y Manzanas a la vuelta (2016).Isaac SA, el más canchero del parche MIH, lleva dándole al rap desde 2016, cuando MBZ estaba en auge.“Ellos abrieron el rap a otro público, perro. Antes de estas cortes o del auge de Alcolirykoz, el rap era mucho más valija, ¿sí me entiende? Nea, se hablaba mucho de la vida de la calle, de bala, de las fronteras invisibles, de que mataron al parcero. Aún se hace y no es que hablaran solo de eso, pero sin duda MBZ permitió que el público en general se tomara más en serio el rap como industria. Hubo muchos grandes raperos que yo crecí escuchando que no cobraban nada de su música, no vendían merch ni tenían tanta fanaticada. Luego de lo que pasó en 2016 a la gente ya no le da vaina comprar una boleta ni una merch”.5 pa’ las 12“Casi todos los temas salieron en el momento. En equipo todo es mejor, huevón, si nos juntamos somos más. Se demuestra que uno puede camellar sin egos, unir fuerzas, porque a la hora de la verdad eso es lo que nos impulsa”, dice Isaac.El disco demuestra esa intención de experimentar con las distintas combinaciones de sus integrantes. Tiene ocho temas: tres en los que Oblivion, Adam Walsh e Isaac demuestran sus skills juntos, tres en los que lo hacen en solitario sobre los beats de Diavlitx y Barbatos, y dos en los que Isaac se junta con Oblivion y con Adam por aparte.Estilísticamente, son todos muy similares, y quizás ahí reside una debilidad para quienes no son fans fervorosos del hip hop. Pero la estética que logran tiene cohesión.Make It Happen abre la lista con un golpe de la mesa de Isaac que busca presentar el disco a la audiencia como una alternativa o escape a la cotidianidad:Adam profundiza sobre ese agobio tan colombiano que convierte el ocio en necesidad de buscar pequeñas muertes:Oblivion sintetiza presentando el rap como punto medio que se puede conseguir con esfuerzo y honestidad.Jabulani es el momento en el que Oblivion canaliza su fifas interior para hablar de los skills en el rap como medio para distorsionar la realidad.Ratas de Andén, quizás el mejor tema del álbum, encuentra a Isaac y Adam Walsh repartiendo barras sobre la apuesta por ser raperos.Ella explica el ethos de su nombre con el inicio de su verso:“Adam Walsh es el código que botan en los aeropuertos cuando se pierde un niño. Lo encontramos con Diavlitx diggeando palabras y vainas y se volvió el nombre de una canción. Ya luego vine a enterarme del porqué, y me hizo pensar en esta idea de los niños que no quieren ser encontrados, de la parte que tenemos que es un niño rebelde que quiere vivir del arte y no quiere la “salvación” del mundo del camello normal”.En Raperitos de Domingo ella dobla su apuesta, y su voz de ronquido áspero, nos adentra en la noche.Luego viene Gitanos. Oblivion abre marcándose a él y a los suyos más del lado de Voldemort que de Harry Potter:La referencia a la editorial no es gratuita en el proceso.“Uno estando con ellos aprende muchas cosas que quizás cuestan”, me dijo Isaac. “Yo por ejemplo vengo de un mundo rapero más tradicional, donde no sabía mucho de los splits ni de la industria. Ya con ellos me enteré más de la vuelta”.Y en Qué se hace, profundiza sobre el ejercicio de profesionalizar su rap de manera que no sea ni estrella ni fugaz.Fuera del planeta junta a Adam Walsh y Oblivion en un corte rápido que reflexiona sobre los sueños de lo que una buena carrera puede traer a sus vidas, y cierra con la repetida afirmación de que saben que el trecho para lograrlo es largo y depende de que mantengan la marcha.La primera vez que hablé con Oblivion, fue muy enfático en decirme que creía que, en el sur del Valle de Aburrá, nadie lo hacía como Adam Walsh. En Envigado 1.0, las barras de los tres se intercambian al interior de un mismo verso, adornado por samples de guitarras límpias. Los punch lines se encadenan a pesar del contraste de las voces y desembocan en un coro que nos despide de la noche “No hay más / perfiles bajos, los rapeos high class / Dicen que vivo rápido / No hay más / Make it Happen se filtró en tu radar”.“Yo no soy de allá, pero la verdad mantengo allá”, me dijo Isaac. “En Envigado hay mucha historia. Algunos de los primeros grupos de rap de acá de Medallo son de Envigado, como fue el caso de la Sur Side Clicka. Ahí viene un legado pasado generacionalmente. Doble Porción también es de allá. Luego uno ve y no solo es en el rap sino en todo: desde Fernando González hasta Reykon”.5 pa las 12 abre entonces un nuevo capítulo en esa larga historia de escritura disruptiva que tiene uno de los epicentros culturales del Valle de Aburrá. Uno que actualiza la jerga y se acerca al hablado de la juventud actual, como hicieron esos antecesores antes.***Si quieren saber más de rap paisa, les recomendamos leer El milagro de Luis7Lunes y Sison Beats
Black Pumas surgió de la unión de dos músicos que no solo se llevan 13 años de diferencia de edad, sino que además provienen de tradiciones musicales distintas: Adrian Quesada (guitarra) y Eric Burton (cantante y compositor).El primero, Adrian, pasó cerca de 15 años tocando con el Grupo Fantasma, una banda de funk latino que en el 2010 ganó un Grammy al mejor álbum de rock alternativo y urbano con el disco El existencial.Por otro lado, Eric Burton creció en Los Ángeles cantando en iglesias y tocando en los muelles de Santa Mónica antes de trasladarse a Austin, Texas, donde se conectaría con Quesada.Black Pumas regresa a Colombia en mayo de 2024 y aquí les contamos todo sobre el eventoLa música de la banda es una estudiada mirada al ayer desde un lugar que solo puede ofrecer el ahora.Sin embargo, no se puede llamar a Black Pumas una “banda de culto retro” ni tampoco una fuerza creciente de “soul psicodélico revivalista”: su sonido es demasiado atmosférico y sustancialmente impreciso para atribuirle este tipo de etiquetas.Es un sonido que nos recuerda cierta época, pero que bajo ninguna circunstancia intenta recrear o conmemorar el pasado.Si bien retoman algunos significantes de décadas anteriores—como la herencia musical de Hi-Records, Stax Records o la presencia vocal de Otis Readding y Curtis Mayfield— los conjura (es decir, los aleja y nos obliga a fijarnos en el ahora), precisamente, para no sucumbir a la pura complacencia nostálgica de lo retro o a la locura explotadora que produce lo vintange en nuestros días.Lo interesante de Black Pumas es que su música no proviene de cajas recopilatorias de soul y rock psicodélico de los 60 y 70, sino que emerge también de la fuerza de Ghostface Killah, RZA, Wu-Tang Clan, A Tribe Called Quest y Lil Wayne. Su sonido se enmarca en la negación de la progresión lineal de la historia musical para embarcarse en una interacción de constelaciones musicales tanto del pasado como del “ahora”.El presente es ese punto de contacto con el pasado y el futuro.La música de la banda es puro devenir; no es, sino que deviene; el pasado musical (lo retro, lo vintange) ya no actúa, pero tampoco ha dejado de ser. En otras palabras, el proyecto musical de Black Pumas expone un sonido de época refractado a través de una lente contemporánea.Black Pumas (2019)En su primer álbum homónimo, lanzado en el 2019 (Black Pumas), la banda clama por la necesidad de construir un nuevo tipo de humanidad y promueve un deseo de cambio del mundo que puede desorientar y desintegrar la vida misma, pero que podría ser mucho más reconfortante.El álbum es un tipo de conjura a la experiencia del mundo moderno, que promete aventuras, poder, felicidad, crecimiento (personal y profesional), y, al mismo tiempo, amenaza con destruir todo lo que tenemos, todo lo que sabemos y todo lo que somos.La canción Colors, por ejemplo, invita a apreciar los placeres simples y cotidianos que ofrece la vida para no sucumbir a la incesante ola de estímulos que recibimos.Cada alteración a la rutina tiene un precio que permite escapar de la monotonía.Pero aquí la monotonía es el alivio sin precio y el refugio del brillo particulado que se expande desde diferentes ámbitos y frentes (el trabajo, el consumo, las promesas de felicidad, etc.).La canción Black Moon Rising es otro golpe emocional.Es una balada soul suplicante con un tono meloso que expresa el rechazo a acomodarse en los horizontes cerrados del mundo moderno y la negación a abandonar el deseo de múltiples futuros posibles. Ese "no hay nada nuevo" delata la unidad y expone el desgaste (y el desespero) de formar parte de un mismo universo sólido y rígido.Chronicles of a Diamond del 2023La conjura para recuperar el aire, encontrar el alivio y aniquilar el fantasma que no le permite a la humanidad acomodarse más allá de las mediocres satisfacciones que ofrece el mundo se hace más radical en el segundo álbum de la banda, Chronicles of a Diamond (2023).El disco juega un rol central en la preparación de diferentes poblaciones (trabajadores, negros, mujeres, pobres) para gozar e imaginar futuros que trasciendan el mundo blanco, cristiano, masculino y heterosexual y, de esta forma, construir nuevas ficciones.En la canción More than a Love Song, Burton despliega florituras carismáticas para mostrar que la vida es mucho más compleja que las fantasías que se dibujan en la cultura contemporánea, cuyos mitos hablan de “libertad”, “democracia”, “igualdad de oportunidades”, “inclusión” o “representación”.No obstante, la voz de Burton conoce el dolor, el miedo y la precariedad, para, posteriormente, transformar esas heridas profundas en flujos de energía y proyectar mensajes de tranquilidad y refugio en esos momentos donde acecha la dificultad.Mrs. Postman es otro grito en el que la banda rinde tributo a las trabajadoras y los trabajadores del servicio postal.La canción no es una simple entonación rítmica que muestra el sufrimiento y la “resiliencia” de estos trabajadores que hacen todo lo posible por ganarse la vida de manera honesta. Lo que explora Mrs. Postman es que esas personas de “cuello azul” que mantienen el mundo en movimiento y alimentan su actividad con la pasividad de los más ricos representan la interpasividad del mundo: la actividad “frenética” de los trabajadores es generada por la pasividad de las clases altas.¿Qué pasaría si estos trabajadores, como todos los trabajadores esenciales, dejarán de actuar?La música de Black Pumas es en estos tiempos lo que el blues fue en las décadas de los 30, 40 y 50, un sonido que ofrece algo de calma y refugio en una era donde reina la ansiedad, la marginalidad y la depresión.También es un aterrizaje forzoso en la bruma monocromática que se erige en esta época para sacudirnos e invitarnos a escapar de esa pasividad fundamental de nuestro ser.Aquí reside el encanto de la banda, en la invocación de los poderes de todos los que han sido condenados para replantear las condiciones mediante una política de un modelo de no identidad (abierta a todos) en lugar de una política ligada a la tradición (los mismos de siempre).Con Black Pumas no hay forma de quedarse anclado en la solipsista inmersión del “yo” y en la absoluta ignorancia de que todo camina bien en el mundo.***En 2022, después de su paso por el Festival Estéreo Picnic, hablamos con Adrián Quesada. Esto fue lo que nos contó:
Falta poco para la nueva edición del Latin Alternative Music Conference. El LAMC se llevará a cabo de manera virtual del 24 al 26 de abril del 2024 y presencialmente entre julio 9 y 13 en la ciudad de Nueva York. Los tres días virtuales tendrán aproximadamente cinco horas de contenido entre charlas sobre la industria musical, talleres, entrevistas y showcases. Esta edición, particularmente, hablará de asuntos como el A&R, el streaming, la gestión de artistas, las giras, las relaciones públicas y el publishing. Más abajo les mostramos la programación de paneles y showcases. "Un año más, nos emociona presentar a una amplia variedad de artistas de todo el mundo que están ayudando a continuar el crecimiento de la música latina a nivel global", escribe LAMC en su invitación. Las inscripciones para estos días de evento virtual son completamente gratuitas. Les dejamos acá la programación de los paneles y los showcases Latin Alternative Music Conference 2024 para que se animen a inscribirse. Para más información vayan a latinalternative.comPaneles de Latin Alternative Music Conference 2024Este año, LAMC presentará 8 paneles: A&R: It All Starts with a SongDe GiraYour Music on Digital PlatformsEl Rol de Publicistas en tu CarreraManagers: Career ArchitectsPRIDE: Orgullosxs de nuestra industriaHablamos de PublishingWonder Woman of Latin Music. Los Showcases de Latin Alternative Music Conference 2024En los showcases de esta edición participarán Bacilos, Cheo, Nella, Carmen Boza, Cosmic Wacho, Kora, La Helen, Midas Alonso, MYRANDAS, Paz Carrera, rigoykarina, Rumbo Tumba, Twanguero y Wonderfox.¡Pueden inscribirse completamente gratis aquí!
El beat se transforma como Rosalía, una y otra vez. 'oHio', el centro del nuevo álbum de ScHoolboy Q, Blue Lips, salta de la paz del soul a sintetizadores que rebotan al jazz melancólico. Mientras tanto, él roza la muerte y recibe mamadas en París, se burla de que tu perra tiene culo negativo y, finalmente, pondera cuánto más tiene que probar, cuánto tiene que perder.Las transiciones son rápidas; los sonidos y las viñetas, opuestas entre sí. Todo el álbum experimenta con formas y estructuras, es una montaña rusa. Ninguna canción de Blue Lips es lo que parece a primera oída, todas guardan tres o cuatro posibilidades en su interior, como una muñeca rusa. Cuando crees que comprendes de qué va, ScHoolboy Q te elude: se esfuma.Blue Lips es su sexto álbum. Todos han sido lanzados bajo el amparo de TDE, el sello californiano que dominó la década pasada gracias a sus estrellas: Kendrick Lamar, SZA, Jay Rock, Ab Soul y él mismo, gracias a discos como Oxymoron (2014)—que referencia la oxicodona que distribuía en su juventud y retrata una época borrosa marcada por abusos en la automedicación— y el genial Blank Face (2016).Pero desde su último disco, CrasH Talk (2019), atravesamos una pandemia, Kendrick se bajó del barco y otros colectivos se robaron la atención de los focos.Nada de nervios: Q está de vuelta para equilibrar el lujo, el dolor, la violencia y la reflexión sin que ninguna bola caiga al piso. Disfruta la vista desde su mansión en lo alto de una colina, hasta que destellos y consecuencias de su pasado como un Hoover Criminal destruyen su calma. Esa tensión entre sus triunfos y sus cicatrices, escenificada en lo instrumental, hacen de Blue Lips el mejor disco de su carrera.El voltaje estalla con 'Pop', que cuenta con una colaboración estelar de Rico Nasty, y se mantiene con 'THank god 4 me', producida por Kal Banx, J.LBS y Fu, en la que Q presume de su Ferrari y denigra a los sapos. La potencia de sus gruñidos, que suenan aún más amenazantes sobre pistas que parecen la banda sonora de un motín carcelario, o de un pogo el hijueputa, aumentan el caos.Él pisa el pedal a fondo y avanza a toda velocidad, con una escritura aerodinámica y fragmentada.“I ain't never met God, but I bet he know me”, presume en 'Yeern 101', uno de los puntos más destacados del disco, y uno le cree. Producida por Cardo, cualquier carro en el que suene corre el riesgo de descarrilarse.Hasta el golf, una de sus grandes pasiones —supongo que si uno quiere demostrar que de verdad es rico tiene que jugar golf—, suena arriesgado desde su perspectiva, a milímetros del punto de ebullición.La angustia Temas como estos, tan rimbombantes en su jactancia como amenazantes en sus detalles, son pruebas contundentes de su habilidad para rapear y lo hacen una súper estrella, apto para grandes festivales y la cima de las ventas. Pero lo que diferencia Blue Lips de CrasH Talk, también abundante en cortes explosivos, es su angustia subyacente.Aparte de Freddie Gibbs, que cierra 'oHio' con precisión de relojero suizo, ¿cuántos otros raperos pueden hacer un disco como este? En esta época de gustos y estilos segmentados en nichos, ya sea lo más callejero o lo más fiestero o lo más profundo o lo más romántico, Blue Slides encuentra volumen y textura en su complejidad.El contraste entre voltaje e introspección es tangible en 'Gemany ‘86': sus amigos se desangran o enfrentan condenas perpetuas y Q relaciona su entrada a la vida callejera con regresar junto con su madre a Alemania, donde nació, mientras ella, madre soltera, era militar del ejército estadounidense.Su ansiedad aumenta cuando el punto de partida es su propio éxito: “Half of my purchases full of my tears”, admite en 'First', que empieza como una lista de logros y luego se invierte para revelar la inseguridad que acecha.“I know the feeling of being trapped from all the things that you built”, añade en 'Cooties', una canción teñida por el miedo de que sus hijas caigan en un tiroteo escolar, es decir, de haber escapado al campo minado que era South Central Los Ángeles a finales del siglo XX y que quizás no sea suficiente.El pasado no perdona, y él no se cura. En 'Lost Times', sobre un beat de Alchemist que suena como un bareto al atardecer, recuerda viejas batallas en la calle Figueroa. Acá la muerte y la belleza no se contraponen, argumenta Q, sino que son sinónimos.'Foux', otro tema de energía intensa, en colaboración con su compañero de TDE Ab-Soul, es reminiscente de 'Druggys Wit Hoes Again' —no necesita explicación—, de Habits & Contradictions (2012).El inicio de su carrera es una vorágine borrosa para Q, una fiesta salvaje de la que no recuerda mucho. Y así como en HERBERT (2022) Ab-Soul rompió más de un lustro de silencio con un trabajo maduro en el que expone su depresión y sus consecuencias casi fatales, Blue Lips también funciona como ejemplo del crecimiento artístico y personal de Q.Todavía puede firmar bangers heterodoxos llenos de confianza y destreza, pero, cerca de cumplir 40, los disparos dados y recibidos, los robos y los arrestos domiciliarios aparecen diminutos en el retrovisor.Tras los asesinatos en el último lustro de estandartes del rap de Los Ángeles como Drakeo the Ruler y Nipsey Hussle, es digno de celebrar que ScHoolboy Q entre a la mediana edad con sus habilidades intactas y una vida mejor para él y los suyos.¿Cómo ScHoolboy Q logró escapar de la calle Figueroa? Él mismo se lo pregunta en 'Blueslides', la luz que entra por la ventana cuando despertamos un domingo hecha sonido y, para su criterio, según dijo en Twitter, una de las canciones mejor escritas en la historia.La única respuesta posible que él propone, en tercera persona, como si lo mirara desde lejos, parece ser algún tipo de magia. Pero en 'Blueslides' Q también está a punto de quedarse sin oxígeno al huir de toda la carga que lo acecha, incluída la muerte de Mac Miller.Exhausto como Sísifo, no sabe si pueda seguir corriendo. Eleva una plegaria final: Es desgarrador que por más que corre no logre escapar del todo, o que el escape sea solo aparente. Lo que vemos en el retrovisor puede estar más cerca de lo que parece.***Si quieren seguir leyendo análisis o historias sobre raperos, les recomendamos leer: Solok.Os: la mentalidad criminal en un rap que arde con dolor y verdad
Con algo de retraso, recuperamos el primer Panorama del año tras haber dedicado un extenso artículo a las 24 apuestas emergentes en Iberoamérica para este 2024. Como todos los meses, los diferentes medios que conformamos la alianza FARO, hemos elegido el proyecto artístico que nos ha parecido más interesante, en este caso surgido a lo largo del mes de febrero. Solo nos queda prometer que la próxima entrega llegará más pronto, y que esperamos disfrutéis de la playlist que hemos confeccionado, con hasta cinco canciones destacadas de cada uno de los países de la alianza.ArgentinaIsla Mujeres | Por IndieHoyEn una discografía plagada de giros, el cuarto álbum de Isla Mujeres no es la excepción. Barato ideal se despega de la electrónica intimista de su excelente trabajo anterior, Correr adentro (2022), para acercarse a la versión más cruda y visceral de la banda platense. Estas nuevas canciones nos invitan a romper las cadenas, a liberarnos de las máscaras y a celebrar la belleza de la imperfección.El proceso creativo detrás del álbum se caracterizó por la convivencia y la improvisación. El trío y su productor Aziz Assé montaron un estudio dentro de su sala de ensayo, donde durante meses exploraron ideas, seleccionaron bocetos y grabaron en un ambiente colaborativo. A lo largo de las ocho canciones que lo integran, el disco propone una odisea desde la decadencia y la violencia hasta la amistad y la búsqueda de la fuerza interior. Sus guitarras cargadas de distorsión cortan el aire de una producción expansiva y de contrastes, creando una experiencia que anima a sentir, pensar y bailar. - Juampa Barbero de Indie HoyBrasilAmaro Freitas | Por Scream & YellCuarto álbum en la carrera del pianista y compositor Amaro Freitas, "Y'Y" (pronunciado "eey-eh, eey-eh" y que significa, en dialecto indígena, agua o río) es el más experimental de sus trabajos. Es un disco que nació después de que Amaro se sumergiera en la comunidad indígena Sateré Mawé de Manaos. La forma que tuvo el pianista de devolver el intercambio de conocimientos fue componer un homenaje a la selva amazónica y a los ríos que cruzan el norte de Brasil, una pieza sonora que combina los ritos indígenas con John Cage a través de la técnica del piano preparado, utilizando fichas de dominó, cinta adhesiva, pinzas de la ropa y semillas, entre otros objetos. Según el propio Amaro, "Y'Y" es "una llamada a vivir, sentir, respetar y cuidar la naturaleza, reconociéndola como nuestro ancestro". Concebido como un disco de vinilo, la cara A de "Y'Y" sirve como expresión de la conexión con la tierra y los ancestros, y la cara B sirve como prueba de las conexiones entre la comunidad global del jazz negro de vanguardia con la presencia de Shabaka Hutchings (Londres), la arpista Brandee Younger (Nueva York), el bajista Aniel Someillan (de ascendencia cubana), el guitarrista Jeff Parker y el batería Hamid Drake (ambos de Chicago). Un disco para escuchar y escuchar y escuchar y escuchar… Marcelo CostaChileCami | Por el equipo de POTQ MagazineEn la nueva era de CAMI la electrónica es la protagonista. Así lo vimos con ANNA Vol1. LOS AMANTES, su EP lanzado a fines del 2023 y también lo escuchamos fuerte y claro en ‘Qué bueno que llegaste’, un hit en toda regla, lanzado durante febrero junto al rapero Bronko Yotte. En diferentes ocasiones, la artista ha comentado sobre su paso de sonidos más folk asociados siempre al pop, a la electrónica y explica que para ella tienen todo que ver, que hay un punto de unión, mencionando el concepto de ritual como algo que les une. Queremos ver qué le depara el 2024 a CAMI, probablemente, nos sorprenda.CubaDaymé Arocena | Por Magazine AM:PMFinalmente salió a la luz Alkemi, el nuevo álbum de Daymé Arocena que cristaliza su esperada colaboración con Eduardo Cabra. Aunque el resultado nos ha dejado con algunas preguntas, no cabe dudas de que se trata de una producción llamada a expandir los límites creativos y de audiencia de la artista. Bajo el sello Brownswood Records, Arocena entrega a través de la decena de temas que componen el disco una amalgama sonora con un fuerte acento afrocaribeño que se resalta con la presencia de invitados como Rafa Pabön y Vicente García. La alquimia de esta Daymé deshinibida nos toma un poco por sorpresa, pero confiamos que su intuición la lleve por buen camino.EspañaCarmen Boza - Encore | Por Mondo SonoroLa linense Carmen Boza es de esas cantautoras que no toma el camino fácil. Ese que se adapta mejor al gusto del oyente, con el subsiguiente riesgo de caer en el denostado mainstream. No. Carmen Boza toma derroteros que precisan escuchas, para solo así empezar a paladear los detalles de su música, pero también de unas letras que pueden ir de lo explícito a lo etéreo, de lo profundo a lo mundano, del cariz confesional a un desgarrador tono vitalista. Todo cabe en el basto imaginario de la artista. “Encore” es el regreso a la palestra de la actualidad de Carmen Boza. Un Ep de seis temas de distinto pelaje, que marcan un nuevo camino para la cantautora tras una sequía creativa de dos años que uno imagina de búsqueda, sanación y de intentar no perder el rumbo en el marasmo de este siglo. Y es fácil adivinar que así ha sido, gracias al diario vital en el que Carmen Boza ha convertido este disco que no esconde trampa ni cartón. No en vano, a lo largo de estas canciones nuestra protagonista va mostrando su desazón social (‘Lambo’), sus luchas internas (“El Altar” o “Anestesiada”), sus dudas (“Libertad o seguridad) y sus rupturas (“Remolino”). Sin olvidar tampoco ese halo de esperanza necesario para seguir en la brecha (“San Juan”). Y lo hace con un flow vocal marca de la casa, que va adaptando a las diferentes temáticas para darle a cada canción aquello que en realidad necesita, dotándolas de múltiples personalidades que son las suyas propias. Sergi MarquésUruguayLos Hermanos Láser | Por Kristel Latecki de PiiilaDesde su fundación en 2011 –directamente de las cenizas de otra gran banda de los 2000, Vieja Historia– Los Hermanos Láser han sido fundamentales en la creación de un sonido indie montevideano que fusionó una sensibilidad y gancho pop con elementos clásicos del folk, más una saludable dosis de furia rockera en el vivo, y una cuidada atención a la artesanía de las canciones. Y es así que son precisamente las canciones su gran fuerte. Las que hicieron de su disco debut (homónimo, 2013) un trabajo intachable, que los llevó a tocar junto a innumerables bandas, ganar varios premios e influenciar a una generación.Once años después vuelven con un tercer disco donde demuestran –con total humildad– su envidiable facilidad para crear melodías, frases y observaciones memorables. Este Paisaje Fósil es una apuesta a la familiaridad pero que deja entrever una madurez inevitable. Los rasguidos folk y las infecciosas armónicas ahora dan lugar a capas de sintetizadores. Se canta sobre errores, sobre culpas; sobre volver a casa y al mismo tiempo, no extrañar lo que uno fue. Es un disco que –haciendo juego con su nombre– se va revelando a medida que la escucha profundiza, encontrando facetadas, sutiles y preciadas canciones.Colombia Maikcel | Por Fabián Páez López de ShockA Miguel Ángel Rojas le dicen Maikcel y su voz es bien conocida en el under colombiano porque ha estado al frente de grupos como Zalama Crew o el colectivo La Pacifican Power. Tiene más de 10 años de experiencia haciendo rap o música del Pacífico colombiano o las dos al mismo tiempo. Su voz siempre sobresalió por su versatilidad y su flow. Y con Maikcel, su proyecto solista que recién empezó hace un par de años, está estirando su potencial. ‘Ambrustic Boy’ es su primer álbum y tiene 13 cortes en los que se mueve con soltura por los afrobeats, el trap, el R&B y el rap; casi siempre guiado por la cadencia de la marimba de chonta, instrumento insigne del Pacífico colombiano. El título de este primer álbum está inspirado en una de las canciones del primer grupo de rap colombiano en publicar un álbum, Los generales R&R. Y también es una declaración de la personalidad y la forma de hacer música de Maikcel, desde la alegría ambrústico, dice, significa estar bien.
A la mitad de la entrevista, El Kalvo detiene por un momento sus reflexiones sobre la xenofobia que persiste al interior del hip-hop colombiano y el valor de hablarle a los trabajadores para buscar alitas de pollo a domicilio. Los ensayos para su presentación en el Festival Estéreo Picnic copan su tiempo, por eso llega tarde la entrevista, anda de afán y el tiempo para almorzar se escapa. Pero si hablamos del Kalvo no solo hablamos de un man que lleva veinte años en el rap, un joven veterano que a codazos y paciencia se ha abierto un espacio como un MC único en el país; hablamos también de alguien conocido por su apetito generoso, capaz de hazañas culinarias y connoisseur de la gastronomía callejera bogotana.Así que cuando es hora de comer, todo puede esperar.Después de Algarabías (2022), El Kalvo se dedicó a encontrar territorios comunes con otros artistas. De esta búsqueda colaborativa resultaron temas como “Agencia de viajes”, con La Radio Bembé Orquesta, y la enternecedora “Lero lero”, con La Muchacha. Cuando empezó el 2023, El Kalvo entró en modo álbum y tomó esas canciones para agruparlas y darles un sentido. Así nació Los tres golpes, el disco con mayor número de colaboraciones en su carrera: Kiño, Penyair, Jam Block Jr, Turek Hem y Horus conforman la polifonía. Un secuaz de confianza como Hi-Kymon se encarga de casi toda la producción, que desde el boom bap se extiende en todas las direcciones.Al principio, El Kalvo pensaba llamar a este nuevo trabajo Kalvokalez, para marcarlo como un proyecto más personal, que reflejaba quién era. Sin embargo, Saga Uno —su aliado para crear el extravagante kit de ocio para el trabajador contemporáneo que acompaña al disco e incluye un recipiente para la comida, un cancionero al estilo de los almanaques Bristol, un rascador, un parqués y una riñonera— lo convenció de que Los tres golpes, el nombre de un tema en el que describe al detalle y con apetito jugoso qué se puede degustar en la capital en distintos momentos del día, era un título mucho mejor. Luego de debatirlo, El Kalvo le dio la razón. En todas las canciones del disco hablaba, aunque fuera por un momento, de comida: “Ordinaria elegancia” no solo define bien su encanto, sino que muestra su ojo meticuloso para describir un buen guiso que, a la vez, es una buena letra de rap.A pesar de que no le puso su nombre, El Kalvo sí vuelca en este disco las distintas inquietudes que caracterizan su rap. Ahí están su pasión por contar historias (“Jesucristo de Maracay” o “Radio Casa Grande”), su perspectiva heterodoxa del rap (“Marquillas”) y su gusto por la bareta (“Préndalo). Están las preguntas incómodas y punzantes que suele hacer, como la que le plantea a los raperos colombiano sobre el trato que le dan a los migrantes venezolanos. Y, finalmente, canciones como “Elías”, un homenaje a su abuelo que puede ser la mejor canción del disco; “He sido”, en la que traza sus memorias a través de todos los trabajos en los que se ha rebuscado el salario; o “El rapado”, como pararse frente al espejo y rapear lo que se ve, profundizan en su biografía.Sobre esto y más hablamos con El Kalvo.***¿Cómo llegó al concepto de Los tres golpes?Yo lo quería llamar Kalvokalez, así como los artistas les ponen sus nombres a sus discos más personales, los que los definen. Pero a Saga le pareció que ese título era muy suave, que Los tres golpes tenía una carga conceptual mucho mayor. Luego de reuniones y llamadas que duraban horas y horas, me convenció, porque además de lo del desayuno, almuerzo y comida, en todas las canciones hablo de comida en algún punto, más inconsciente que conscientemente, güevón. Pero al final es más amplio que eso, tiene muchas historias. Ya he hablado mucho de lo social, de lo político, ese tema me había saturado, entonces me pregunté de qué quería hablar. Los tres golpes es mi manera de definirme como MC, cuál es mi tipo de rap. Y es el comienzo de una búsqueda, de otras temáticas a las que me quise como acercar, otras maneras de decir las cosas. Pero no sé si logré definirme completamente, creo que no, todavía le falta. Menos mal no le puse Kalvokalez.Usted ha explorado llevar los álbumes más allá de las plataformas digitales y más allá del CD, ¿cómo ha sido ese aprendizaje? A mí me gusta insistir en formatos físicos porque me permite innovar, entregar la música de manera distinta. Hoy es más fácil escuchar un vinilo que un CD, güevón. Mucha gente compra un CD para tenerlo, pero no lo puede escuchar. Entonces qué lindo tener otra cosa que sí sirva pa’ algo: qué güevonada comprar algo que uno no va a usar. Tenía que ser algo útil. Ya había hecho un libro, que es útil, pero si lo leíste ya queda ahí, ya fue. Pero al final nos dimos garra con Saga, fue un proceso pesado con muchos problemas técnicos. Le dimos rienda suelta a la imaginación y nos montamos en la película de hacer algo absolutamente novedoso. Y Saga sí me dijo que él lo diseñaba, pero yo me ocupaba de hacerlo. Hágale, le dije. ¿Un cancionero? ¡Hágale! ¿Un diorama? ¡Hágale! ¿Un parqués? ¡Hágale! Fue demasiado.Ahora me decía que está un poco cansado de hablar de temáticas sociales, ¿cómo ha sido para usted existir como rapero en el gobierno de Petro?Cuando quedó Petro yo sí sentí alivio: habíamos ganado algo. Por eso me relajé y dije como bueno, ya, me voy a dedicar a hablar de otras cosas y voy a darle la oportunidad a este man para que haga lo suyo, ¿sí me entiende? La inflación va bajando, el desempleo va bajando, el dólar se mantiene bajito. Esas cosas demuestran que se está haciendo bien la vuelta, mejor de lo que estaríamos con Rodolfo Hernández o Federico Gutiérrez, presunto paramilitar. Pero los medios han vendido la idea de que el cambio no es el cambio porque las transformaciones no han sido instantáneas. Y los de siempre, con mucho cinismo, han dicho que todo sigue igual, pero ellos son los responsables de que las cosas estuvieran así. Igual hay muchas cosas que están mal. Hay mucha gente que se coló, como Agmeth Escaf, Benedetti o la vieja esa que tienen paseando por todos los cargos importantes, quién sabe qué sabe de Petro, güevón. La esposa del man tiene una actitud como toda corrupta y se ha gastado un poco de plata viajando y tiene gente ahí enchufada. Feo, feo, güevón. Son cosas que no deberían pasar.Igual ahora que acabé este proyecto sí estoy sintiendo que otra vez necesito hablar de esos temas. Hace falta análisis. No quiero decir que yo soy el único que pueda analizar la mierda, pero sí siento que como hip-hoppers tomamos la misma actitud al tiempo, como listo, ganó Petro, chao, hablemos de otra mierda, a mí no me jodan. Incluso hay unos que se desconectaron tanto que están diciendo que la mala pa’ Petro, repiten el discurso que les dan las noticias. Es el juego de manipulación. Por eso otra vez siento un impulso muy fuerte por analizar y comentar.Vamos ahora sí con los temas más serios: una encuesta rápida sobre comida colombiana. ¿Mejor frito?Yo diría que la arepaehuevo con carne mechada. Es una obra maestra de la comida sumergida en aceite.¿Postre favorito?Quizás el de tres leches o el de natas. O, no sé si es tan colombiano, pero las islas flotantes de Endulza tu Paseo, gonorrea: esa es la misión.¿Sopa favorita?El ajiaco.¿Algo que le guste que nadie espere que le guste?La comida vegana.¿Cómo surgió la idea de “Jesucristo de Maracay”? ¿Tiene que ver con plantear una postura clara frente a la migración desde la comunidad del rap?Hay mucha xenofobia en el rap. He tenido que ver a parceros raperos que hablan despectivamente de los venezolanos como ratas o chirosos. La mala pa’ las ratas, sí, que nadie robe, pero la estigmatización que vive la población migrante venezolana es muy injusta, porque los que hacen cosas malas es una fracción muy pequeña. Es más fácil ver la paja en el ojo ajeno, pero el problema no son los migrantes, sino la pobreza, la falta de oportunidades, la ignorancia, la mala educación, la corrupción que se roba la plata que debería ser para el bienestar de la gente. Por eso cuando canto “Bacatá” el mensaje es que Bogotá es para el que esté en Bogotá, esta ciudad es pa’ muchos tipos de gentes y hay espacio pa’ todo el mundo. Entonces construí esta historia para cagarme en la xenofobia, pero también en la moral católica de los que son xenófobos y aporofóbicos. ¡Mientras tanto en Palestina están bombardeando el pueblo de Cristo! La gente que está sufriendo en todos lados representa eso. Cristo era un desplazado de la violencia. Y pues es de Maracay y no de Barquisimeto porque me rimaba, y me quedaba re bien para homenajear a los raperos de allá, que son de los más ásperos del hip-hop venezolano. De hecho las historias que me inspiraron fueron las del Topo y Vampi, de Piso Ocho, que nos contaron lo duro que les tocó, pero ellos son de Puerto La Cruz, y así quedaba raro.¿Por qué le dedica este kit de ocio al trabajador contemporáneo? A veces me parece que el rap está montado en una burbuja rara, no se tiene en cuenta el diario vivir, como si todos viviéramos en un videoclip de rap, güevón, y solo hubiera ocio y placer. Quería que el álbum fuera para el descanso, está pensado para disfrutarse después de una larga jornada de trabajo. Para una persona normal la música es un escape de la realidad, una anestesia que escucha en el Transmilenio, caminando, lavando loza o haciendo ejercicio. Por eso tampoco quería hablar de temas pesados, sino más bien como toma, disfrútate esta historia de cosas asquerosas que nos inventamos con Penyair, o esta otra de Jesucristo como un migrante venezolano. Pensaba que qué chimba que el rap que yo haga sea óptimo para el que está saliendo de su camello y se quiera relajar. El disco es para dignificar el esfuerzo, como dice el intro, un tributo al esfuerzo.A propósito de “Protagonista estelar”, ¿cómo ha sido para usted rapear sobre el amor? ¿Y cómo ha cambiado con los años?No es mi temática fuerte, pero en cada trabajo discográfico trato de incluir al menos una canción que hable del tema. Siempre es difícil hacer algo tan personal, ¿no? No puedo hablar del amor como hablo de otras cosas, con esa forma arquetípica de tomar los temas, porque el amor es el amor, ¿sí me entiendes? Yo a mi novia no le puedo cantar cualquier cosa, es cuando más real tengo que ser. Me siento vulnerable. Hay gente que puede estar re parchada y escribe una canción re tusa cortavenas, y la novia está al lado, cagada de la risa. Para mí debe ser algo muy personal, y como con mi novia compartimos las artes audiovisuales, “Protagonista estelar” fue una oda a lo que hacemos juntos. Ella me ayuda a hacer los videos, yo edito cosas para ella. Disfrutamos y creamos juntos. De ahí salió lo de “Hagamos ficción y documental”, porque de verdad lo hemos hecho. Es chimba. Cuando más sincero he sido es en las canciones de amorcito.¿Cuál es su tema favorito de rap romántico?“Querer querernos” de Canserbero. La escuché antes de que saliera, porque el man la tocó una vez que vino a Bogotá como en 2011, re caleto. A toda la banda de pirobos se le salió el aire con el último ponche. Fue como mucho malparido, qué gonorrea.***Hace un tiempo invitamos al Kalvo a parodiar una elección rapeando junto a Neck Talese y El mismoperro, este fue el resultado:
Si hablamos de Fruko y sus Tesos hay que hablar de salsa.La salsa, según el New Grove Dictionary of Music and Musicians, es la combinación de géneros musicales de origen híbrido que van desde el son cubano, la guaracha, el mambo, el chachachá, los sonidos antillanos hasta pasar por el bossanova, el reggae, el jazz y el rock and roll.El diccionario de la RAE, por otro lado, se refiere a la “salsa” como: 1) “una composición o una mezcla de varias sustancias comestibles que se hace para aderezar o condimentar la comida”; y 2) “esa cosa que anima o alegra”.¡Sí!La salsa no solo abarca una variedad de sonidos y ritmos, sino que expresa un atractivo contagioso: el fervor y la manifestación gozosa que invita a las personas a bailar para sacarse los problemas y recuperar algo de alegría.La salsa, por lo tanto, y como bien recuerda Andrés Caicedo en ¡Que viva la música!, no se trata de “sufrir me tocó a mí en esta vida”, sino de “agúzate que te están velando”.Esta forma radical de expresión, en la que el sufrimiento, el descontento, el dolor y el desamor se bailan, la encarna perfectamente una de las agrupaciones más emblemáticas del sonido salsero de Colombia, Fruko y sus Tesos.La historia de Fruko y sus TesosFruko y sus Tesos fue el humilde peón que emergió de los barrios bajos, la “negramenta” y el populacho (Julio Estrada, conocido como Fruko, por ejemplo, era el “todero” de Discos Fuentes de Medellín en los 60; el Joe Arroyo venía del barrio Nariño, uno de los lugares más marginales de Cartagena; y Wilson Manyoma, Saoko, provenía del barrio popular de la Alameda en Cali).Pero la agrupación de repente pasó del inframundo al firmamento por la sola virtud de una estética destructora del “bien” y un sonido cósmico; un sonido bravo, picante y energizante que despertó del letargo a diferentes generaciones de jóvenes pobres, bohemios y desclasados en las décadas del 70 y 80.El sabor y el tumbao del sonido de Fruko fue, al mismo tiempo, la cumbre de la indulgencia, el hedonismo y la resistencia que le permitió a esos espíritus jóvenes desesperados escapar del laberinto de la monotonía cultural y el existencialismo que les ofrecía la música en ese momento.Hablando de la vida de barrio en los años 50 de su Medellín natal, Julio Ernesto Estrada, Fruko, dice que los tangos eran “canciones de maleantes y camorristas”, y que la música mexicana que se escuchaba en la época como los corridos “también tenían ese mensaje, música de despecho, música para pelear, música triste”.El escozor que le producía el tango y la carrilera al joven Fruko era producto de la asociación directa de estos dos géneros con emociones que generalmente llevaban al desprecio y al “pesar”.Y, en ocasiones, despertaban cierto sentimiento de rabia y desesperación por los golpes del destino, especialmente por el amor no correspondido, la muerte, la pobreza y la tragedia.Pero Fruko y sus Tesos no estaba dispuesto a reproducir en su música la insulsa introspección y la aparente preocupación por un país que está más acostumbrado a acumular tragedias, a reciclar violencias y a apilar muertes.Por el contrario, el sonido de Fruko era la contraparte y la respuesta al existencialismo hipócrita de otros géneros musicales que tenían como sustento creativo una sociedad que ha vivido “pensando” y “reflexionando” acerca de la “libertad”, la “igualdad”, la “reconciliación”, la “responsabilidad”, el trabajo, la “condición humana”, las mujeres y la sexualidad.Nada de boleros, nada de tangos.La banda surgió después del periodo de la Violencia y durante el Frente Nacional, una etapa de reconciliación política y paz doméstica que le permitió a liberales y conservadores repartirse el poder cada cuatro años.Mientras se ponía en práctica una singular forma de democracia constitucional en Colombia y se implantaban programas sociales y económicos diseñados para rehabilitar zonas del país golpeadas por la Violencia, los músicos de Fruko y sus Tesos producían un mar de fondo de actividad creativa que se proponía reclamar y celebrar este nuevo momento histórico.Por lo tanto, si el ritmo de la economía “crecía” gracias a las exportaciones de café y la manufactura de bienes de consumo durables, también crecía la caja de ritmos de la agrupación con el lanzamiento de su primer álbum en 1970, Tesura.TesuraEl disco es un embate de timbales, ráfagas de trompetas, aluviones de bajo y torbellinos de piano, acompañados de la gran voz de Humberto Muriel y, que, puestos en un mismo plano permitían ir a la búsqueda de nuevas formas de éxtasis capaces de maravillar y enlazar los sentidos.Esta primera visión de la banda ya exponía su extremo más furioso, el lado vistoso y reconfortante de un mundo que comenzaba a despertarse gracias a las descargas de energía producidas por cada nota.Los jóvenes reunidos en las esquinas, en los parques, en las verbenas al aire libre de ciudades como Medellín, Barranquilla, Bogotá y Cali encontrarían su propio nirvana y nuevas formas de placer en los compases de la música de Fruko y sus Tesos.La entrega a la exaltación de los condenados —mientras se bailaba al ritmo de un nuevo estilo de música sincrética que se estaba confeccionando— se dio con el lanzamiento del segundo LP, A la memoria del muerto de 1972.A la memoria del muertoDespojando a la música hasta su desnudez más esencial de mera actitud, ritmo y tumbao, el disco presenta un mensaje claro: ¡No más lamentos!En la canción que da nombre al álbum, A la memoria del muerto, Edulfamid Molina Díaz, más conocido como Piper Pimienta canta:Como si se tratará de una especie de oda a los años de guerra y violencia bipartidista, la muerte recobraba no el tradicional sentido de dolor y tristeza, sino de alegría, seducción y comedia.La salsa brava, la salsa picante que emanaba de la banda no hizo más que derretir las jerarquías que la tradición musical colombiana había impuesto, pero, sobre todo, produjo un tipo de cinismo crítico que se burlaba de la figura épica del héroe positivo cuyo único objetivo era la búsqueda obstinada de una vida libre mediante el trabajo duro y el sufrimiento.Fruko el buenoLa materialización de esta idea se dio en el quinto LP de la agrupación, Fruko el Bueno, “Ayunando” de 1973.En este álbum la banda ya contaba con la participación vocal del enorme Joe Arroyo —quién previamente había grabado los discos Fruko “El Bueno” (1972) y La Fruta Bomba (1972)— y el magnífico Wilson Manyoma, dos de las voces más polirrítmicas del país y capaces de desatar un nuevo ciclón de adrenalina mutante.Así canta el Joe en la canción El Ausente, para recordarle a Adela que su tristeza y desesperación no es más que el producto de su quietismo contemplativo del pasado.Este álbum comenzaría a consolidar el sonido de Fruko y sus Tesos, estableciendo una serie de elementos sonoros y rítmicos que, posteriormente, serían una marca registrada y característica de la agrupación.Por ejemplo, el coro de percusión menor y la fuerza de gravedad del sonido repetitivo de la batería le permitieron a la banda evolucionar en un plano vertical donde la energía asciende y desciende de forma continua y abrupta.Los estratos percusivos y los propulsores polirrítmicos se combinaron con el lado sórdido y viscoso de la alegría luminosa que proyectaban las letras de muchas de las canciones que la banda interpretaba —aunque, al menos, en sus primeros álbumes no fueran creación propias, sino prestamos de otras bandas.La resistencia política de FrukoMás que ganar amigos e influenciar gente, la música de Fruko y sus Tesos fue particularmente emblemática de un nuevo tipo de resistencia política centrada en las expresiones individuales del deseo.Su foco en la “positividad” de la vida y la alegría no consistía en una simple negación de la situación de precariedad de las personas en el país, sino que iban encaminadas a promover la emancipación de las fuerzas sociales, económicas y políticas que atan e inmovilizan a las personas.La música de la banda tenía como intención liberar el deseo para que las personas a través de la música se conviertan en “máquinas deseantes”, relacionándose y conectándose en la pista de baile con las otras “máquinas” sin complejos, ni represiones, ni restricciones.En el disco Fruko el bueno la banda produjo una serie de canciones que invitaban tanto a subir más el volumen como a poner “alguito” más pesado para vivir un momento realmente erótico.Canciones como Rumbero soy, Cantando mi son me muero, Tania, Vamos a gozá y Rumbita Loca liberaban a las personas de la frustración de sus situaciones económicas, sociales y personales para catapultarlos al Olimpo de la gloria y el júbilo que solo el baile permite.Fruko y sus Tesos fue para muchos como “vivir un verano mágico”. Sus texturas musicales no fueron solo producto de la ilusión del supuesto “buen momento” que vivió el país en la década de los 70, ni tampoco la negación de la desigualdad y la precariedad que desde hace mucho tiempo hacen parte esencial de un país como Colombia.Por el contrario, la música de Fruko y sus Tesos se constituyó en un conjunto de visiones sónicas sobre cómo asomar la cabeza para escapar de la violencia, la miseria y la desigualdad tan solo por un momento.La “magia” se hacía realidad cuando sonaba esa maravilla de sabor, esa maravilla de tumbao.Las personas solo necesitaban abrir sus sentidos y respirar el aire que el sonido de Fruko y sus Tesos generaba para terminar envueltos en sus perfumes y contemplar la dicha y el placer que producía la travesía por el paraíso perverso de la pista de baile.***Recomendamos leer: Discos Fuentes: así es su proceso para rescatar joyas inéditas de la músicaUna charla con Fruko y Mariano Sepúlveda, los arquitectos de AfrosoundAdemás, aquí abajo el maestro Fruko habla de música y salud mental para Shock
El Festival Estéreo Picnic 2024 promete ser una edición particular del festival privado más importante del país.La razón más obvia es que habrá un cambio de escenario que la gente clamaba: el Parque Simón Bolívar será sede por primera vez este año. Pero hay más razones para emocionarnos.Un contraste respecto a otros años que es igual de interesante celebrar y analizar es el cambio de foco curatorial.Existe una crisis mundial de los festivales: está siendo jodidísimo fichar headliners, en parte, porque muchos artistas ven más viable económicamente presentarse en solitario y girar por el mundo.La respuesta necesaria es diseñar carteles más robustos en cuanto a artistas medianos y emergentes, esperando que el público confíe, copie y pueda pagar la boleta.Por eso este año Estéreo Picnic apuesta por la electrónica en su cartel, al cual hay que sumarle la curaduría por revelar de los escenarios adicionales como el ya establecido Templo y el novedoso Club Aora.En cuanto a lo de afuera, el nivel se mantiene. Artistas como James Blake, Floating Points, Four Tet, Overmono, Black Coffee, Kittin, Zhu, The Blaze, The Blessed Madonna o Poolside son algunos de los máximos exponentes actuales de sus géneros en el mundo anglo. No solo en términos de popularidad, sino en términos de influencia y aclamo crítico —sobre todo en cuanto a los primeros cinco.Lo que realmente no tiene precedentes es la apuesta por los productores locales y latinoamericanos: Tainy*, Arca, Verraco, OKRAA, The Virginia Valley, Nuclear Digital Transistor y Swing de Sasha.(*Antes de que objete que el reguetón no es música electrónica, le dejo esta pieza de opinión a favor del punto de que sí lo es y en crítica al purismo.)Incluso podríamos contar ahí al trapero argentino YSY A, que el año pasado publicó EL AFTER DEL AFTER, un disco que lo llevó a explorar ritmos como el jersey club, la guaracha y otros instrumentales electrónicos de la mano del productor antioqueño Oniria.Esa selección hace del cartel de este año del FEP uno de los más enchufados con el presente del continente en la historia del festival.El boom que vive la electrónica latinoamericanaGrandes referentes del continente —como Toy Selectah, Mexican Institute of Sound, Nicola Cruz, NAAFI, Ela Minus, Mitú, Fumaratto o Dengue Dengue Dengue— ya han pasado por las tarimas del Picnic en otras ediciones.Pero la de este año es histórica porque lee el contexto del boom mundial de la electrónica latina mejor que cualquier otro festival no-especializado de la región.Por si no lo saben: las fusiones entre las fiestas de reguetón y los raves de techno o de guaracha han posicionado a colectivos y sellos como TraTraTrax o los mencionados NAAFI en el epicentro de la fiesta mundial, al menos desde 2021.En Europa y parte de Estados Unidos lo llaman latin club. Acá sabemos que esas ínfulas de conquistador que “descubre” no van, que el auge es muy diverso como para ese término reductivo y en inglés, y que la historia del chispún de este lado del charco es larga y fascinante, como muestra la exhibición virtual LatAmTronica, publicada el año pasado.El creciente interés en este tipo de fiestas ha sido tal que artistas emergentes como el venezolano Wost —residente en Colombia—, o algunos colectivos nuevos, como los bogotanos de Muakk (2AT, CRRDR y Aleroj), han entrado rápidamente en el circuito internacional.De hecho, el último de ellos estuvo hace unas semanas en el estudio con una tal Nina Kraviz, que lleva meses poniendo la “uwuaracha” por todo el mundo.Por todo eso, juntar a Tainy, Arca y Verraco en un mismo festival en 2024 es como tomar una foto panorámica desde Colombia hacia al paisaje que se forma en los clubes de Europa ante el actual boom de electrónica latinoamericana que se vive de ese lado del charco.Sus historias en la música sirven como una ventana para aprender de nuestra propia historia y para expandir nuestro apetito por el talento local.Es posible que esta apuesta sea semilla para que los carteles de los grandes festivales, como el Estéreo Picnic, se llenen en futuras ediciones de la música de Putivuelta, Paria Records o los muchos sellos de guaracha y otros géneros que han sido faros de la electrónica que suenan a Colombia desde hace mucho.Pero, por ahora, hablemos del paso en el que vamos.La trinidad que bendijo el matrimonio entre perreo y electrónicaSi usted no los conoce ya, es probable que se los haya escuchado a algún amigo cansón y engomado con la música: créale, que le conviene. Estas son sus historias:VerracoJP López nació y creció en Medellín. Conocí su nombre como periodista. Quienes lo leíamos entonces sabemos que el hombre es una biblia del “chispun”.En paralelo, iba metiendo sus primeros goles como DJ y productor.A propósito, recomendamos leer: Llegó la hora del tecno bastardo y el perreo futurista. Verraco se lo explicaEl primero de ellos fue un cabezazo: el sello Insurgentes, que iluminó en 2017 un nuevo camino para la escena paisa. Gracias a ellos hubo mucho avance en cuanto a la ambición de la música electrónica local, pues estimuló las apuestas por la sofisticación del sonido y el acercamiento al ambient.Por ese sello saldría Grial (2020), el disco debut de Verraco.Si la música electrónica es como el fútbol, TraTraTrax —el segundo sello que Verraco co-fundó— lo ha llevado a ganar Copa, Liga, Libertadores y Mundial de Clubes. Llegó el 2020 y el hastío frente al purismo que forzaba a que las fiestas de perreo y de techno fueran mutuamente excluyentes le rebozó la copa.Juan Pablo se juntó ese año en una pizzeria del centro de Bogotá con DJ Lomalinda y Nyksan, Allí se creó TraTraTrax, un sello decidido a difuminar el límite entre ambos géneros hasta poder hablar en todo el mundo de fiestas de techno bastardo y perreo futurista.Los múltiples lanzamientos mundialmente aclamados de artistas de la región y de todo el Sur Global, así como el voz a voz por la contundencia de los sets de artistas del sello, le ha permitido a TraTraTrax convocar hinchada en todos los clubes y festivales clave del mundo.Uno de los hitos más notables de esa historia fue “Xtasis”, un track de julio de 2022 publicado por TraTraTrax. El junte de Nick León y Dj Babatr se tomó por asalto los raves y la cima de los rankings de fin de año de todos los medios especializados.Antes de que el mundo pudiera reaccionar, el sello paisa remató al ángulo con no pare, sigue sigue, un compilado de 16 cañonazos: un tiro al ángulo de cada uno de sus artistas. Su secuela llegó a plataformas el pasado 9 de febrero.En el Estéreo Picnic de 2023, el equipo TraTraTrax fue encargado de convocar a la carpa Budweiser, a nombre de la discoteca VideoClub, a una selección de artistas que, según nos contó DJ Lomalinda, resumía el espectro de su sonido como sello: desde John Talabot hasta Fumaratto.La mezcla particular de techno, UK garage, IDM y reguetón que logra Verraco en sus sets siempre ha tenido un particular cuidado por el diseño sonoro, y se nota tanto en los temas lanzados a través de TraTraTrax como en hitos clave como Escándaloo, el EP que publicó Verraco en 2023 a traves del legendario sello VOAM.El cuidado y la garra por los que ha brillado su trabajo le han valido la convocatoria a publicar a través de algunos de los sellos más importantes del mundo de la electrónica, y a reventar algunas discotecas icónicas. De hecho, cinco días antes de tocar en el FEP, Verraco estará rompiendo el mítico Berghain por segunda vez en dos años.Entenderán la emoción de jóvenes y hasta adultos mayores colombianos o extranjeros cuando lo vean en vivo y montado tras la consola, con su característica pose que bien podría ser la de un jinete sobre un caballo salvaje. Mientras les llega ese día, pueden ir curioseándolo sus sets para Boiler Room o Hör.ArcaAlejandra Ghersi Rodríguez es LA artista venezolana de los últimos diez años.En la producción experimental lleva siendo estandarte continental desde que publicó su EP Barón Libre. En ese lanzamiento, sus habilidades como experimentadora sobre tracks que coqueteaban con el hip hop la llevaron a ser una de las productoras de yeezus (2013). Musicalmente, ese álbum partió la carrera de Kanye West en dos, por no decir el sonido del hip-hop mainstream de este siglo.Luego, Arca se hizo mano derecha de la islandesa Björk durante un periodo de fertilidad creativa para ambas, en el que participaron en composición y producción de varias canciones de la otra. La textura sonora y visual del Motomami de Rosalía también está nutrida por la influencia de Arca, Beyoncé la tuvo como DJ abriendo toda su gira Renaissance y Skrillex la reconoce como una de las más importantes del juego hoy en día.Mientras sucedían esos hitos, Arca ha continuado con la publicación de sus ya aclamados discos de electrónica experimental, en los que exhibía su rareza y su magistral control vocal y producción. Su disco homónimo es el culmen de esa primera etapa en la que se presentó como letrista y vocalista cruda pero elegante, pero, sobre todo, como productora.A nadie le tiembla menos la mano a la hora de hacer bulla y experimentación sónica.En 2020, Arca lanzó la serie de discos titulada KiCk: 5 discos largos de todo desde ambient hasta neoperreo pasando por baladas experimentales, techno y electrónica industrial. A menudo, todo esto va envenenado por letras sobre el poshumanismo, sexo, mutantes, desamor o cyborgs, cantadas por vocales suyas, de Björk, Rosalía, Oliver Coates, el legendario Ryuichi Sakamoto y más —hay hasta un cover de “Quiero una chica”, de Latin Dreams.Una parte clave de su apuesta es que es muy parada con sus activismos.No solo es muy vocal sobre su experiencia como persona trans, sino también con insistir en su identidad latina a pesar de vivir lejos, apoyando y reconociendo a los artistas de la escena electrónica venezolana que vinieron antes que ella, como DJ Babatr, y colaborando con los que le siguen, como Safety Trance —también conocido como Cardopusher, quien ha publicado música en el sello TraTraTrax, del cual hablaremos a continuación.De hecho, nos cae a debutar acá justo después de tocar por primera vez en Caracas.TainyNo es mucho lo novedoso que se pueda decir sobre Tainy. Sencillo: el que en pleno 2024 diga que no es uno de los productores más importantes de la historia de Latinoamérica, es negacionista de la realidad.Tainy lleva ahí en el sonido desde que éramos niños de primaria que “bailaba reguetón” con primitos en las novenas familiares. Parcialmente por él es que los primos roqueros y mayores nos miraban con desdén.El puertorriqueño Marcos Efraín Masís Fernández solo tiene 35 y ha estado desde sus 16 poniendo al mundo a bajar hasta el piso. El icónico dueto Luny Tunes lo apadrinó sin saber todo lo que su voto de confianza traería a la música. De hecho le llamaba “Tiny Tunes”, como las caricaturas que, en un programa animado noventero, eran “alumnos” de Bugs Bunny o el Pato Lucas. De ahí vino el nombre Tainy.Recomendamos ver: Referencias musicales en 'Data', el primer álbum del productor puertorriqueño TainyEl man ha estado detrás de las pistas de icónicos temas de cada generación del perreo desde principios de siglo: desde “El Teléfono” de Wisin y Yandel feat. Héctor el Father o “Ella Me Levantó” de Daddy Yankee hasta el disco Vibras de J Balvin, discos o sencillos como “Yonaguni” y “Callaita” de Bad Bunny, o varios de los hits recientes de Rosalía.DATA, su aclamadísimo disco del año pasado, cuenta con la colaboración de pesos pesados del reguetón actual e incluso a otros dos productores del cartel: Arca y Four Tet.Junto a ellos, Skrillex y E.VAX —de Ratatat— aportan a la producción del disco que reafirma la intención de siempre de Tainy: estirar los límites del sonido del reguetón meticulosamente, sin quitarle el perrenque. De hecho, él mismo cita a estos colaboradores como algunos de sus máximos referentes sonoros desde antes del disco.Esa esencia es añadida al disco por medio de puros pesos pesados: desde Daddy Yankee, Arcángel, Wisin & Yandel o Zion hasta Feid, J Balvin, Rauw Alejandro, Young Miko o Myke Towers. En ocasión aparecen las voces de Julieta Venegas, The Marías o Kany García, que evidencian atención a otros sonidos hechos por latinoamericanos, como en sus trabajos previos con Bomba Estéreo o Kali Uchis.La DATA ha sido cargada a la nube, y regará el Simón Bolívar a finales de este mes.
El público de la música pop siempre ha exigido héroes e íconos. Quizá más que en cualquier otro género. Sin embargo, Solána Imani Rowe, conocida como SZA, es de un tipo diferente de estrella e ícono pop.Su música se trata de algo mucho más intenso que las simples y fácilmente digeribles canciones de ruptura al estilo Miley Cyrus o Taylor Swift.Su sonido rescata el fatalismo, el exceso, la rabia y el odio del hip-hop de los 80 y 90, así como recupera la idea del amor hacia sí mismo del movimiento “Black is Beautiful” de los 60 en una versión que expresa la importancia de la apreciación tanto de la cultura como de la propia identidad.La historia de SZASolána Imani Rowe creció en un hogar musulmán ortodoxo de clase media-alta en los suburbios de New Jersey.Su infancia no solo fue diversa por este tipo de conformaciones sociales y culturales —podía seguir a líderes religiosos como Elijah Muhammad, pensar al estilo de Malcolm X, soñar con Martin Luther King Jr. e impacientarse por ver mayor estabilidad en la economía—, sino que además fue compleja.A Solána le resultaba difícil encajar y seguir los flujos sociales que el sistema diseña para que las personas (y las mujeres en particular) circulen con una sonrisa mientras la precariedad se expande en todo el planeta.En la época de colegio, por ejemplo, fue acosada después del 11 de septiembre por llevar su hiyab.Eso le mostró, por primera vez, que las diferencias culturales y raciales son consideradas una amenaza y un delito en la Norteamérica democrática.Situaciones como esta le permitieron crear sus propias ideas sobre cómo (sobre)vivir en un país como Estados Unidos.¿Por qué se hace llamar SZA? Un primer acto de afirmación de su identidad como mujer negra y musulmana fue la construcción de su nombre artístico, SZA, el cual tomó del Alfabeto Supremo de la Nación del Islam: “Sovereign Zig-Zag Allah” o “Savior Zig-Zag Allah”.Lo que siguió a este proceso de identificación con el mundo musulmán fue la autoedición y el lanzamiento de los EP SEE·SZA·RUN (2012); S (2013); y Z (2014), material que llamó la atención de la prensa especializada y de un grupo de nuevos seguidores, y que le permitió unirse a la compañía discográfica independiente Top Dawg Entertainment (TDE), sello que contaba dentro de sus filas con artistas como Kendrick Lamar y Jay Rock.CtrlSu álbum debut, Ctrl, lanzado en junio del 2017, la situó a la vanguardia del R&B contemporáneo.El disco combina la expresividad del soul clásico con una atmósfera cargada de sintetizadores sombríos, una voz ronca pero dulce, ráfagas radiantes de percusión y energizantes dosis de guitarra que se acompañan con poderosas líneas de bajo.Ctrl refleja dos cosas.Primero, la idea de que el control es una ilusión, pero como sugiere el eco de la voz de la madre de SZA al principio de Supermodel (“Ese es mi mayor miedo / Si perdiera el control / O no tuviera el control / Las cosas simplemente, ya sabes / Yo sería fatal”) y al final de la canción Something (“Y si es una ilusión no quiero despertar / voy a aferrarme a ello / Porque la alternativa es un abismo, es sólo un agujero, una oscuridad, una nada / ¿Quién quiere eso?”), existe cierto poder y tranquilidad al aferrarse a la ilusión, incluso, cuando la reconocemos como tal.Lo que sale a relucir en este álbum es la contradicción que existe entre ser la “dueña” de la narrativa de la propia vida (“eres libre”, “todo lo que quieras lo puedes lograr”) y la recuperación del control de la vida cuando se está dispuesta a renunciar a esas tristes y banales ideas de que somos dueños de nuestro propio destino (solo hay ciertas cosas que controlamos).El mensaje es claro: debemos jugar con lo que existe para poder interpretar el papel que nos permite competir en el show de talentos.Pero, por supuesto, esto no implica que se piense que las cosas están bien tal como están, sino que la oportunidad de transformar las cosas solo existe dentro de lo que brinda el sistema.El segundo punto que expone SZA en el disco es el viaje que realiza hacia la búsqueda del amor propio y la aceptación. En la canción Supermodel, por ejemplo, muestra por medio de una carta la ira que siente hacia su novio luego de enterarse que ha sido engañada, para, posteriormente, confesarle su propia traición y, finalmente, exponer su estado de vulnerabilidad y dependencia en la relación.SOSEste vínculo entre el (des)amor, el sexo, la autoprotección, las fantasías de venganza, la lucha contra la inseguridad, la aceptación y el empoderamiento de la belleza negra tienen un aspecto curiosamente existencial que se hace más visible en su segundo álbum, SOS.El disco sostiene un sonido emocionalmente intenso y escabroso, una combinación rítmica que va desde el trap-soul, el lo-fi hasta pasar por el Neo-soul, el grunge y el punk.En la conmovedora y descarnada canción que tiene por nombre el mismo título del álbum, SOS, SZA se propone abandonar una relación conflictiva y dejar atrás los enredos de un supuesto amor seguro; pero primero debe dejar claro lo que piensa y reclamar por todo lo que dio en una transacción amorosa de la cual recibió muy poco.El álbum, en general, esboza los flujos de las emociones, los contrastes que existen en esos momentos de fuerza, determinación, ánimo y que, prontamente, se transforman en tristeza, soledad e inseguridad.Kill Bill, por ejemplo, la tarjeta de presentación del disco, es una balada en la que la artista fantasea con el asesinato de su exnovio para que ninguna otra mujer pueda tenerlo y, aunque, reconoce que es un sueño siniestro no puede dejar de imaginarlo.No obstante, la fantasía de venganza de Kill Bill no proporciona una recompensa emocional real; su narrativa es un grito de puro de dolor y fatalismo que representa la otra cara de la imagen de la mujer que “no siente el engaño”, la que se “recompone rápidamente”, la que se “alegra” con su grupo de amigas simplemente yendo de compras y comiendo enormes cantidades de helado o la que compensa la situación con otro tipo de placeres apósitos.En canciones como Smoking on My Ex Pack, Far, Conceited” y Forgiveless, al igual que en todo el álbum, SZA se enfrenta tanto a sí misma como a sus parejas, evidenciando el cansancio y el desgaste que le producen las relaciones.En ocasiones los sonidos reflejan momentos de paz que se encuentran incrustados en un mundo caótico y vislumbran la inercia en el aparente cambio en la vida de las personas.Sin embargo, no todas las canciones del disco tratan de seguir adelante y dejar atrás sus relaciones pasadas; SZA sigue teniendo la tendencia a tomar decisiones “equivocadas” que pueden no acabar bien para ella (Too Late y F2F) y se cuestiona su valía en algunos casos (Special).La honestidad que evoca el proyecto musical de SZA y la fe depositada en exponer su vulnerabilidad y sus inseguridades como terapia permiten iluminar los rincones más siniestros del yo.Es ahí, en su interior, el lugar oscuro de la ira, donde su auténtico espíritu oculto crece y se alza de forma sólida y hermosa para hacerle frente a sus pesadillas, debilidades e impotenciasPero no para salir a la conquista del “hombre elegido” o para culminar en una especie de trascendencia de todo su destino romántico, sino, justamente, para exponer que no es una mujer unidimensional; una mujer “bendecida” por la seguridad del modelo de empoderamiento que niega la rabia y el sufrimiento femenino y lo sustituye por el júbilo, el entusiasmo y el optimismo emancipador.La música de Solána Imani Rowede no aspira a conquistar al mercado feminista joven (y negro) con emocionantes intentos de construcción de confianza al mejor estilo de los libros de autoayuda. Su propuesta pretende aprender a convivir con esa intimidad siniestra y el escrutinio de sí misma para fortalecer su existencia, los miedos que rigen su vida y, primordialmente, hacerle frente a los silencios que dominan los cuerpos de las mujeres negras.***SZA comparte tarima de Festival Estéreo Picnic con artistas como Phoenix o Hozier. A propósito, les recomendamos leer: Phoenix: ¿qué nos dice la banda sobre el amor, la libertad y la nostalgia?Hozier y las cosas hermosas que nos dejan ver el cielo
Esto ocurrió en el camerino de una fiesta guiada por Ill Pekeño y Ergo Pro en la sala de conciertos Razzmatazz, en Barcelona. Un grupo de alrededor de 20 personas comparten bebidas bajo el humo espeso; hay risas, preguntas y una clase sobre la nueva escuela del rap español. IEn agosto del 94, The Notorious B.I.G. presentó “Juicy”, el primer sencillo de su debut Ready to die, un arquetipo rapero que relata el viaje de un héroe.De cenar sardinas a beber champaña para calmar la sed, “Juicy” describe el ascenso de Biggie, con las calles de Bedford-Stuyvesant, Brooklyn, como trasfondo.Tal vez sea más preciso decir que lo imagina, o que lo proyecta. Después de todo, el disco ni siquiera había salido; además, su mamá advirtió años después que su hijo se había tomado varias licencias poéticas.Pero cuando Biggie contempla a través del retrovisor esos tiempos en los que estaba quebrado su confesión se siente cándida: nunca imaginó que el hip-hop lo pudiera llevar tan lejos.Casi treinta años después, el rapero madrileño Ergo Pro presenta su propia crónica del ascenso en “Royal Flush”:Cero chito para hoteles ni diamantes / Éramos pequeños, éramos guisantes / Si me pillas en alguna refe, no es por ti / El Peke y yo abriendo a M.O.P. ya éramos G's antes.Estos versos destacan por su precisión técnica, y también porque habla del concierto de 2017 en el que Ergo se presentó como telonero de M.O.P. —de Brooklyn, al igual que Biggie. Es una pieza fundamental de su mitología junto con Ill Pekeño, su compañero en MG Knowledge.Solo hasta hace algunos años lograron hacer del rap su profesión, pero incluso antes ya habían demostrado su valor.“Royal Flush” hace parte de Anbu (2023), el EP de Ergo y Peke junto con el rapero menorquín Saske (Space Hammurabi).Es la madrugada de un sábado de diciembre, la fiesta se llama Fuego. En la tarima de Razzmatazz, Barcelona, más de un millar de personas celebran esos versos, esa historia que acaba de salir hace menos de una semana.Repito: es una fiesta. Antes y después de MG Knowledge hay otras presentaciones, quizás más adecuadas para una discoteca que este torrente de memorias sin filtro de las calles del sur de Madrid, esas que rompen con la visión turística de la ciudad.Aún así, durante media hora, Peke y Ergo, respaldados por Tensei One, rapean doce canciones que incluyen techno (“Eso es G”, con Héctor Oaks), balaceras originadas en Lefrak (“Riquelme y Okocha”), canciones propias (“War’z On) y sus estrofas de colaboraciones (“Desamparados”, de Hoke).El Peke merodea por la tarima sin prisa, mientras que Ergo, feroz, salta de un lado a otro como un doberman hambriento.Detrás del telón los esperaba Dano, que aparece cuando llega el turno de “El manual” y “Picapollo”:Pillo picapollo en San Cris y maafe en Lavapi / Huyendo de tragedias como KhadafiIIEsta es la primera vez que MG Knowledge da un showcase en una discoteca, y su última presentación del 2023. A un verano lleno de festivales le siguió un otoño en el que recorrieron las salas de toda España, casi todas repletas.El ritmo frenético fue el mismo que el de 2022, luego del impacto sísmico que representó Av. Rafaela Ybarra (2021), el segundo EP de Ill Pekeño, con Ergo como invitado en casi todas las canciones, al estilo de Raekwon y Ghostface Killah.Con este lanzamiento vino su ascenso como uno de los actos imprescindibles del rap español contemporáneo: así como te degollan barra tras barra con imágenes descarnadas de Orcasitas y San Cristobal de los Ángeles también pueden ambientar una alborada de pastillas y sudor, en Razzmatazz o en un antro sin nombre.Afuera la fiesta sigue.Seguirá hasta las seis, cuando los asistentes se arrastren hasta afuera bajo un cielo todavía oscuro. En el camerino, me siento en el sofá con el Peke y hablamos de estos últimos años de concierto tras concierto tras concierto, de si ha sido difícil de creer.—Desde el momento en que dejamos el curro y empezamos a currar con las presentaciones de Rafaela no hemos parado, tío. Empezó con Donostia, y me impactó subir y que todo el público estuviera coreando la canción, pero desde el primer momento lo normalicé como si fuese un curro. Hay puntos claves en los que dices qué guapo: en el festival de Grimey eran quince mil personas, increíble; fuimos al Sonar; y en el Monegros también estuvo Wu-Tang Clan. Pero el Ergo y yo lo hemos normalizado, no sé por qué. Lo vemos como un curro: en el circuito de salas, al tercer concierto estábamos adaptados. Fue rápido. Desde Rafaela ha sido casi todos los fines de semana, hemos descansado poco. Ya habíamos cantado en las fiestas de Getafe y en distintos barrios, casas okupas; habíamos teloneado a M.O.P., teníamos tablas ya.Ergo Pro, aka Bobby Nigeria, se pasea por el camerino con el torso desnudo. Salta entre conversaciones. Bebe ron de su vaso. Fuma, fuma y arma otro. Habla alto, habla rápido. Bebe más. Ya puede hacerlo.El congelador que hace unas horas rebosaba de cerveza ya está casi vacío; la botella de ron, por acabarse. Todos los demás —amigos, colegas, periodistas preguntones— ya disfrutamos de la noche. Es su turno de pasarla bien. Es entonces cuando se acerca para participar en la entrevista y también menciona el concierto de M.O.P. como un punto de inflexión. Pero antes de que coja impulso, Dano ofrece una cláusula, como un abogado que cuida a su cliente.—Todo lo que diga Bobby ahora mismo es mentira —advierte.Aún así, él entra al ruedo.—Fue sorpresa pegarnos así con Rafaela Ybarra. Pero yo, desde luego, pensé que se estaba tardando mucho la movida.—¿Pero entonces esta explosión después de Rafaela la vieron como una consecuencia lógica de lo que venían haciendo antes o sí los sorprendió? —pregunto yo.—Ha sido una consecuencia lógica del curro, pero también ha sido de suerte. Porque Rafaela Ybarra lo hicimos rápidamente. El juego cambió con el trap, entró más gente. Y con esas condiciones de juego la gente volvió a pillar este rollo.Si hace una década el paradigma del rap de España cambió con la explosión del trap, que trajo desparpajo, frescura y humor contra el canon caduco de inicios del siglo XXI, hacia finales de la década pasada el péndulo, siempre oscilante, se arrimó de nuevo a un rap que bebía directamente de los códigos clásicos, pero desde un ángulo contemporáneo.Dicho de otra forma, se pusieron de moda las barras; tan de moda que el término, abusado, quedó casi vaciado de sentido. En todo caso, distintas opiniones coinciden en plantear a Istmo (2019), de Dano, como uno de los hitos centrales de ese renacimiento de las barras en España. Con Rafaela Ybarra, y sobre todo con el impacto que tuvo, Peke y Ergo confirmaron que ellos también surfeaban la cresta de esa ola.Ergo pausa durante unos segundos para considerar lo que viene a continuación, y luego lo escupe sin matices.—La gente se había olvidado del rap. Todo el mundo iba al Inferno, era todo lo del trap, el autotune, la guerra entre autotune y no autotune. Luego tenías a este señor — señala a Dano— haciéndolo todo bien. Muchos otros estaban ahí haciendo sus proyectos, pero con Istmo y Space Hammurabi el juego cambió.III —Snoop cuenta que cuando estaba en Death Row, Dionne Warwick, legendaria del soul, los citó en su mansión. Les puso café, pastas, les trató bien. Y cuando ya estaban chill les dijo, de la nada: Llámame zorra. Y ellos ¿Qué? Y ella Sí. Y ellos ¿Qué? Y ella Sí, call me a bitch. Y ellos No, señora, a usted máximo respeto. Y dice ella: Si a mí no me llamas “bitch”, ¿por qué a las demás sí? En el salón de su casa, lleno de bloods. ¿A que no me llamas zorra en mi casa?La historia la cuenta Dano, sentado en un sofá junto con Alexia G. Ferrer, editora de música de Acero Magazine. Esto ya no es una entrevista, más bien imaginen una sesión de Drink Champs, en la que él es el OG que guarda el registro histórico en su cabeza.Dano cuenta lo de Dionne Warwick porque Ergo mencionó a Pati Lavelle. Y Ergo habló de Pati Lavelle porque yo puse sobre la mesa “Just playing (Dreams)”, ese tema en el que Biggie sueña con poner en práctica todo el kamasutra con todas las divas del R&B, como Chanté Moore y Raven-Symoné (sí, la de Es tan Raven), que entonces tenía nueve años.Pero rebobinemos aún más.En la tarima de Razzmatazz, el Peke rapea sobre hacer cucharitas y comer punanis en “Anbu”. Y si apostaron a que el Peke mencionaba más de una vez la palabra “punani” durante Anbu, acertaron.El beat de “Royal Flush”, manufacturado por Gese da O, J.Moods y Kas Rules, pone a todos a rebotar como un low rider mientras él recuerda esa noche en Vallecas que acabó con sexo a oscuras, y lo rico que estaba ese punani. Son versos coherentes con el beat sudoroso, y también con una pareja en la primera fila que aprovecha para perrear el tema como si fuera el último tema de Feid. Lo de la mano arriba no es para todos.En general, si comparamos las letras de Anbu con las de Rafaela Ybarra, nos encontramos a un Ill Pekeño más juguetón.Lo de la papada es porque estáis debajo, presume en “B2B FREESTYLE”, y me hace pensar que no podría rapear igual cuando todavía tenía un jefe y un horario que cuando, a punta de rap, hace lo que le da la gana.El hambre no se ha ido —sigue siendo el Alex, el de la Susana, nos recuerda en “ENTER TO THE ANBU”—, pero se manifiesta de formas distintas. Me fascina reflexionar sobre cómo su escritura refleja una vida rápida. Podría plantear el tema de muchas formas distintas, y elijo una.—Bueno, Peke, te tengo que preguntar esto. Últimamente hablas más de sexo que en tus temas anteriores. ¿Cómo ha llegado esto? ¿Estás muy arrecho? ¿Tienes más sexo que antes?Primero se ríe, y luego responde.—Me lo han pedido los ritmos. En “Royal flush”, como es un beat super 2000, me recuerda a Britney Spears, no sé, me pide esa movida de ser explícito y sacar el lado guarro, más sexo. A lo mejor estaré follando más. Pero bueno, siempre hemos follado bien.—Yo siempre he hablado de eso: Aunque me folle a otras, te amo, te lo juro —intercede Ergo y muestra sus dientes dorados—. Para mí el sexo es parte del rap, porque el juego para llegar hasta él es un hustle. Es parte fundamental de la vida y de las relaciones humanas. Hay que hablar de eso, si no, no estarías siendo fiel… A lo mejor, como somos rappers callejeros somos más explícitos, pero hay gente que habla de ello. Y al principio no quieres hablar de eso, pero cuando eres mayor y entiendes cómo funcionan las dinámicas de poder, ahí sí que puedes hablar de ello. Hay que hacerlo bien, elegante. Hacer un juego.—We be fuckin’, ya está, tío —plantea Dano.—La movida para los hombres es hablar de sexo sin ser misógino. Tienes que hacer que la piba se ría. Tiene que ser inclusivo —acota Ergo.—¿Saben cuál caso me parece demente? El de “Just playing”, de Biggie. Estoy seguro de que muchas de las que nombra se tienen que haber ofendido —digo.IVEn diciembre de 2023 llegó Anbu y en enero de 2024, Galerías Deva, un EP de Ill Pekeño, Ergo Pro e Israel B, producido por LOWLIGHT. Al igual que Anbu, Galerías Deva es un lienzo interesante para ponderar qué se mantiene y qué cambia para MG Knowledge a medida que las casas okupas le dan paso a las salas, a los festivales y a los estadios: hace unos días iniciaron su año en el WiZink Center, en Madrid.Por un lado, se mantienen constantes las referencias de fútbol y los códigos barriales que se hacen universales para cualquiera que los sienta, así como pasiones humanas de ambición y nostalgia.Por otro lado, los cambios van más allá de los beats —tanto Anbu como Galerías Deva amplían su paleta— y, por tanto, los flows. “Young Boys (N.B.A.)” celebra su coronación. Incluso las viñetas más duras se contrastan con las mieles que ahora saborean. Eso sí, confía en Ergo para que encuentre nuevos caminos para describir la economía del asfalto, donde se mueve lo que haya que mover; cada vez lo hace más, un etnógrafo del hustle que hace rato dejó atrás las inclinaciones del rap conciencia que aparecían en Bone Fortuna (2018) para privilegiar los detalles de las misiones clandestinas. Antes tuiteaba “Apuesta por Bobby Nigeria”, ahora anuncia cada lugar al que llega con una solicitud icónica de dry o extracción. Hasta lo que fuma es de calidad, como te lo hace saber en cada track.Volvamos a “Young Boys”.Peke rapea sobre las Air Max 87 que calza y el aroma de su colonia. Luego rapea: Ese fan se volvió hater, quiere verte perder / No quiere verte en el WiZink, quiere verte moviendo palets.Las señas del éxito aparecen de la mano con efectos inesperados de un perfil en ascenso. Quizás al fan que le encantó lo de antes no le interesa lo nuevo y les reclama por las redes. Quizás más dinero es equivalente a más problemas, como decía Biggie, y como lo citó Ñejo.Esto no lo sabía entonces, pero en el camerino sí les pregunté por los cambios en sus vidas, y por qué se había cumplido y qué era distinto de lo que esperaban. Ergo respondió primero:—He confirmado el gusto que compartimos todos los que estamos en esta cultura por this thing of ours, como dicen los mafiosos. Ver a gente que disfruta como yo por lo mismo. Eso es de las cosas que al principio veía en el rap, o en las clikas, las gangs, todos esos grupos, y decía Madre, cuánta amistad, todo por el hip-hop. Todos los que estamos en este juego estamos unidos. Podemos odiarnos o amarnos, pero eso se mantiene. Y luego todo lo demás que creía ha muerto. Hay una envidia, una toxicidad. Si te pueden ver más abajo lo van a hacer porque creen que vas a comerte su pan. Mucha envidia, no sabía que la gente fuese tan envidiosa. Hay mucha enfermedad mental en el rap, mucha depresión.—Por eso intentamos tener rutinas del barrio, para tener los pies en la tierra. Si no te vuelves loco —tercia el Peke.—Si pasas del estudio a fiestas de raperos… joder, hay miles de casos, cuántos locos hay. Todo surge de las comparaciones, de lo que no tienes. Por eso hay que tener la mente sana y los valores rectos. El hip-hop es de la calle, y hay que saber cómo moverse en la calle —añade Ergo.—A mí se me han caído mitos y luego hay personas que he conocido mejor —sentencia Peke.V—¿Te lo tomas así? ¿Sin nada?Ill Pekeño me mira como si estuviera tomando gasolina. Me sirvo ron en un vaso y me lo tomo así, sin Coca-Cola, ni nada. ¿Estamos muy locos en Colombia que tomamos shots toda la noche o el problema está en España?En fin, en el camerino continúa la fiesta. Somos como veinte, el humo es espeso. Todas las conversaciones se mezclan y las risas se contagian de un grupo a otro. Este episodio de Drink Champs ya va a acabar, pero antes de dejar de grabar recuerdo mi última entrevista con Ergo Pro.—Bobby, tú hace un año me dijiste que querías demostrar tu poder como escritor. ¿Cómo va eso?—Sí, la lyrical mission. Bien, bien. Ahora me siento guay en ese ámbito. Considero que estoy en un nivel guapo. ¿Pero sabes qué pasa, hermano? Te dije eso y tardé un año en empezar porque se murió mi padre y he estado con el drama mental, todo rayado. Pero ya han pasado ocho meses, he podido ver la luz. Ya no hay medias tintas, se vienen un montón de movidas liricales. Dano me dice Estás escribiendo que flipas. Quiero demostrar. Nunca se para.—Peke, ¿recuerdas las primeras letras que te hicieron sentir como Yo quiero escribir así?—Con trece años, o menos, me molaba Swan Fyahbwoy, pero el hermano de Álvaro, mi amigo de toda la vida, iba a clase con alguno de Corredores de Bloque, que eran de Orcasitas. Yo los escuché y flipé. Me parecía una movida ultra seria. Ya con los años, cuando lo entendí, fue el primer grupo que me hizo sentir eso. Luego me pasó con Nethone. Hubo dos momentos que me hicieron cambiar mi forma de escribir. Uno fue un día en casa de un amigo en San Cristóbal: Ergo se puso no sé qué tema del gordo, de Biggie, con las sílabas en colores; eso me hizo cambiar y pensar en estructuras. Y luego un par de días en casa del Santi, del Nethone, que vivía en el Alto de Extremadura, que me dijo que las sílabas y las rimas asonantes eran muy importantes, que los versos tuvieran la misma cantidad de sílabas y las mismas vocales. Es algo básico, pero cambió mi forma de escribir. A los días escribí “Mafia profunda”.Ergo habla de que en UK están haciendo Detroit, pero con barras. Habla de Nines y de Potter Payper, raperos ingleses que lo inspiran para rapear. Y vocaliza una sentencia para el 2024.—La lyrical mission continúa. Este año vamos a dar caña.
El maestro del vallenato Iván Villazón presentó Apagando focos, en la que critica a las distribuidoras de energía eléctrica que operan en la región Caribe colombiana, Air-e y Afinia. Como veremos, es una de las canciones que muestra su inconformismo con los cobros de enería. “Ni siquiera puedo disfrutar de una bebida, y esto es una carga para mí ya que todo lo que gano se destina a pagar la factura de la luz. Vivo apagando luces y la factura sigue aumentando”, canta Villazón en el sencillo. Canciones sobre la electricidad en el Caribe colombianoLa canción de Villazón no es la única que muestra el sentir generalizado de los costeños con los altos precios de la electricidad. El compositor y escritor Julio Oñate Martínez compuso el tema El apagón, que se hace viral cada cierto tiempo en redes, “Qué servicio tan malo/ eso es cosa terrible/ Qué servicio tan malo y caro el de Electricaribe”, resalta en el coro de la canción que cierra con: “El guayabo de aguardiente me da dolor de cabeza, pero una fresca cerveza siempre me aclara la mente/ por tomámela caliente se me subió la presión/ porque un maldito apagón nos dejó sin energía y no había cerveza fría del Valle pa' Fundación”.¿Qué pasa con las facturas de electricidad en la costa Caribe colombiana?La región del Caribe enfrenta las tarifas eléctricas más altas del país y sufre las interrupciones del servicio más frecuentes. Las facturas de electricidad pueden consumir una cuarta parte de los ingresos de las familias más pobres, afectando a los hogares de ingresos medios y disminuyendo la calidad de vida de los residentes de la región.La tarifa de energía incluye diversos costos como la compra de energía, el uso del sistema de transmisión nacional, el uso del sistema de distribución local, los costos de comercialización, los costos de compra, el transporte, la reducción de pérdidas y el costo de las restricciones.El gobierno está considerando ajustes temporales al modelo de reconocimiento de pérdidas en la región del Caribe para reducir este componente de la fórmula tarifaria, de acuerdo con Forbes. Además, se propone separar los cargos de alumbrado público y seguridad ciudadana, ya que estos impactan significativamente en el costo total de la factura eléctrica.
Los X-Men están de regreso en X-Men '97, la serie de Marvel estrenada el pasado 20 de mazo en Disney +. El icónico grupo de mutantes de serie animada de 1992 continúa su historia en X-Men ’97, una producción con todos los guiños, la nostalgia y la impronta inconfundible de la saga original de los 90. ¿Cómo se relaciona X-Men '97 con la serie animada original?El productor ejecutivo Brad Winderbaum, aclara que los nuevos episodios no retocan la historia original, sino que toman el final y siguen adelante en el camino. “Verán que es más que una serie, es una máquina del tiempo. No transcurre simplemente en los años noventa, respira los años noventa". Aunque es una serie que lo millennials recuerdan de su infancia, perosnas de todas las edades van a disfrutarla. “Si viviste en esa época y viste los dibujos animados de los sábados a la mañana como yo, te produce una nostalgia increíble. Si eres un fan joven que está descubriendo este mundo por primera vez, te sientes transportado a una época y a un lugar que es totalmente único y diferente a cualquier historia de Súper Héroes que se esté contando en la actualidad”, concluye Winderbaum en un comunicado de prensa. El espíritu de los episodios originales no solo recorre la nueva serie en cuanto a las temáticas y el estilo visual (está animada en 2D para rendir homenaje al estilo de la serie original). Los creadores lograron, además, convocar a la mayoría de las voces originales en inglés para el reparto, enriqueciendo la serie gracias al conocimiento profundo que estos talentos tienen de los personajes. En combinación con algunas voces nuevas, regresan a sus roles Alison Sealy-Smith como Tormenta, George Buza como Bestia, Lenore Zann como Rogue y Cal Dodd como Wolverine. ¿Un dato extra? Los diálogos se grabaron en el mismo estudio de la serie original.A lo largo del proceso de producción, el equipo creativo también contó a su vez con el valioso asesoramiento de Eric Lewald, Julia Lewald y Larry Houston, los productores de la serie original que se desempeñaron como consultores en el nuevo proyecto. ALERTA SPOILERS En los siguientes párrafos hay detalles de la trama de X-Men '97, si no quieren enterarse les recomendamos no seguir leyendo¿De qué trata X-Men ‘97?Los nuevos episodios encuentran a los X-Men en un período de transición, lidiando con la pérdida del Profesor X. Y aunque su mundo está en un tenso estado de calma en cuanto a las relaciones entre mutantes y humanos, todos saben que lo más probable es que sea algo temporario. En las entregas estrenadas hasta ahora, la audiencia ya siguió a Cíclope en la búsqueda de una tecnología anti-mutante amenazadora, a Jean en el nacimiento de su hijo y a Jubilee en una aventura a través del tiempo dentro de un videojuego.En cada subtrama, X-Men ‘97 combina los elementos de acción y aventura que los fans buscan en las historias de Marvel, y a su vez incorpora otro ingrediente que es un sello de la saga: el abordaje de temas serios. “La serie original tenía acción, telenovela y temas serios en igual medida, y nosotros también. Es todo eso todo el tiempo. Esa es la magia que hace que la serie sea tan entretenida”, sostiene Vásquez-Eberhardt.
Taylor Swift es la reina por excelencia en agitar las redes sociales con cada movimiento que hace. Todo lo relacionado a The Eras Tour y las Taylor's Versions se fueron virales en twitter y pusieron a más de uno (incluyéndonos) a analizar sus canciones en TikTok e Instagram, su último álbum no es la excepción.Swift anunció el 4 de febrero de 2024, en la ceremonia de los Grammy, que su onceavo álbum llegaría a todas las plataformas el 19 de abril. 'The Tortured Poets Departments' fue producido por ella junto a Jack Antonoff y Aaron Dessner y fue escrito al poco tiempo de haber terminado de trabajar en su álbum 'Midnights'."Nunca he tenido un álbum en el que haya necesitado la composición de canciones más que en Tortured Poets", afirmó la artista. Así mismo, lo describió como "una antología de nuevos trabajos que reflejan eventos, opiniones y sentimientos de un momento fugaz y fatalista en el tiempo, uno que fue sensacional y doloroso a partes iguales".El estreno es un álbum doble con 31 canciones en total. En un inicio fueron lanzadas las primeras dieciséis canciones y dos horas después fue liberado un álbum adicional llamado 'TTPD: The Anthology'. Analizamos las referencias dentro de su nuevo disco.Referencias en 'The Tortured Poets Department' de Taylor SwiftTaylor Swift vuelve a hacer referencia a Peter Pan pero con una frase distinta. En 'cardigan' la artista dice "Traté de cambiar el final. Peter perdiendo a Wendy, yo te conocía". Ahora, en 'Peter' dice: "Dijiste que ibas a crecer y ahí vendrías a buscarme".Aunque hay muchas especulaciones (como siempre) sobre quién inspiró el disco, esta es una de las veces que más certeza se tiene. Su relación con Joe Alwyn y su ruptura, enumerar todas las indirectas para él sería eterno pero 'So Long, London' lo explica más claro.Aunque poco específicos (pero muy personales) Swift explica a lo largo del disco que su relación terminó porque ella quería casarse y tener una familia, pero -él- no.En 'The Tortured Poets Department', la canción homónima, menciona a la madrina del punk Patti Smith y a Dylan Thomas, un poeta británico de los años 30 conocido por tratar la muerte de forma recurrente en sus obras.Quizá una de las referencias que más sorprendió a sus fans, por lo directa, fue la de Kim Kardashian con una canción que lo dice todo con las mayúsculas en su nombre: 'thanK you aIMee'. Pero, como si no fuera poco, lo remata con la frase "y un día, tu hija llegará a casa cantando una canción que sólo nosotras dos sabremos que es sobre ti.North West, hija de Kim y Kanye, ha salido en varios videos cantando distintas canciones de Taylor.'The Alchemy' es una declaración de amor a su novio Travis Kalce, en la que le agradece por hacerla volver a creer en el romance.Durante todo el disco la cantante se autoreferencia con letras de sus discos pasados en canciones como 'loml' vs. 'invisible string' y 'The Black Dog' vs. 'Daylight', entre otros.Finalmente, en su canción 'Clara Bow', hace referencia a la actriz estadounidense de cine mudo, muy famosa en los años 20, y que tuvo que lidiar con la presión de la fama (dejó su carrera diez años después) y una serie de relaciones conflictivas con los hombres. Incluyendo su padre, quien abusó sexualmente de ella cuando era niña.En palabras de una de mis mejores amigas: este disco es, seguramamente, el más unhinged y delusional de la carrera de Taylor Swift. En mis palabras, el más personal de una mujer entusada que se permite la rabia.**Lean acá: No es sólo Taylor Swift: 5 artistas que tienen sus propias clases universitarias
Colombian Power es la playlist perfecta para poner en una buena noche de rumba y baile. No solo tiene canciones de varios géneros musicales, como salsa, vallenato, folclórica e instrumental, sino que varios de estos sencillos seguro los reconocerán porque aparecen en algunas de las novelas icónicas de Caracol Televisión. Por ejemplo, Colombian Power comienza con Colombia Caribe canción que hizo parte de La Selección, el juego de la vida en la que actuaron Omar Murillo, Édgar Vittorino, Antonio Jiménez y John Alex Castillo. Una canción que nos recuerda al homenaje que le rindió la serie a estos futbolistas. De la clásica telenovela Pedro el escamoso, está los vallenatos El Zarandeao y Pedro el Escamoso y dos canciones de salsa: La viuda y Con Sentimiento. Rodrigo Candamil, Flora Martínez y Margarita Muñoz protagonizaron Entre sombras, una historia que sigue a Julia y a Magdalena resolviendo crímenes mientras lidian con sus vidas personales. De esta producción de Caracol Televisión están las canciones: 23 de Abril, El Gran Salón, La Salsa y Me Hipnotizaron. La playlist no podría dejar de lado la ranchera Se Fue Mi Ángel de la novela Arelys Henao, Dale Cepillo, la salsa lenta de la telenovela protagonizada por Enrique Carriazo y Verónica Orozco y la icónica canción La Última Bala de Pablo Escobar el patrón del mal en donde cantan: "mi patria no cae, tropieza o resbala, se pone de pie, se limpia la cara...". Las canciones en Colombian Power "Déjate llevar por la energía de la música colombiana mientras exploras las diversas culturas y tradiciones que la hacen tan especial. ¡Prepárate para bailar, cantar y disfrutar de lo mejor de Colombia en cada melodía". Les dejamos acá la lista de las 37 canciones para que vayan reconociendo sus favoritas:Colombia CaribeEl Fuego e Mi Tambor23 de Abril El Zarandeao Dale CepilloBoquita de CarameloTinoMujeres BonitasLa ViudaVecinosTan Bella y Tan PresumidaHiguita Mango Pedro el EscamosoQuien es el Patron?No Perdonamos el TiempoTino Circunstancial Suplicar un BesoCon SentimientoEl Gran Salón RumberaHiguita Nueva MelodíaEres la LuzDécimas del Viejo MiguelLa SalsaCosa Pa´ PeligrosaLa TierraLeonardoSe Fue Mi Ángel Me HipnotizaronEl Amor de Mi TierraAmar y Vivir La Última BalaAFROTURRO KOORA #ROMINAPOWERFolclorQué Manera de QuererteInfiel