El fútbol está de moda. La realeza pop (Selena Gómez y Leo Dicaprio) y la realeza real (el príncipe Harry) han pasado por las tribunas del estadio de Los Angeles FC, atentas a las hazañas de Messi en el Inter de Miami. Rosalía, por su parte, después del acuerdo entre Spotify y el Barça, puso su sello Motomami sobre la camiseta del equipo catalán y agotó las dos docenas de unidades limitadas a un precio de 2,000 euros.Es oficial: el fútbol está permeando los pocos espacios de la cultura popular que aún no había logrado colonizar.Los datos son contundentes y están al alcance del buen observador: el catálogo de Adidas está plagado de prendas alusivas al tradicional uniforme de fútbol, adaptadas a un estilo más urbano y casual que deportivo. Los Samba, un modelo de tenis inspirado en el fútbol, han hecho un regreso oficial y son objeto de deseo tanto de hombres como mujeres.En una escena menos comercial y más privada, los amantes del fútbol están observando silenciosamente cómo sus amigos antes anti-fútbol posan ahora de conocedores de la materia, opinando sobre los resultados de las ligas europeas y llorando en la final del fútbol colombiano. Los históricos suscriptores de Win están viendo, además, cómo sus novias les piden prestada sus camisetas de “Jeep” (Juventus) para completar su outfit de fiesta.De las canchas al corazónAl tiempo que el fútbol sale de las canchas y se introduce en espacios de consumo personal y privado, una tendencia paralela ha emergido: el ascenso Fifas en el campo sexoafectivo.En este caso, los datos son más anecdóticos y empíricos pero, para quienes el chisme es una ciencia, es más que evidente que el prototipo de masculinidad Fifas está pegando duro en el mercado del amor. El nuevo objeto de deseo romántico en es un improbable en un contexto en el que la ética “woke” castiga la masculinidad hegemónica y las costumbres demasiado “hetero”.¿Qué explica entonces la súbita demanda de esta masculinidad encapsulada en la despectiva categoría “Fifas”?¿Qué pasó? No hace mucho, un man chévere (al menos en los confines de Chapinero) era aquel que, con su ropa, su discurso y sus hábitos rechazaba todo lo que pudiera oler a macho. Bajo esa norma, vimos emerger una nueva estética masculina que tomaba elementos tradicionalmente asociados a la moda femenina: aretes, anillos, camisas de croché y de encaje, collares de perlas, etc. (Ver Harry Styles).Además, ese estilo se volvió una especie de proxy (peligroso y engañoso) de la personalidad del hombre en cuestión: un tipo despreocupado, liberado de las cadenas de la masculinidad hegemónica, lo suficientemente deconstruido para dejar fluir su expresión de género, familiarizado con la teoría de los apegos y vehemente detractor de la monogamia. Para quienes están gritando que esto es una caricatura reduccionista: lo es. Pero, a veces, el cerebro toma atajos para llegar a las conclusiones que quiere llegar, y a much@s nos pasó que vimos a un hombre que se pintaba las uñas y que hablaba de responsabilidad afectiva y quisimos creer que era nada más y nada menos que un “aliade”. Y no solo eso: un “aliade” digno de nuestros afectos.Del aliade al FifasLo que pasó, según yo y mis fuentes (mi experiencia y la de mis amigues), es muy sencillo: los aliades nos traicionaron. Estos paquetes chilenos de hombres agarraron su collar de perlas y su discurso psicoafectivo pseudofeminista y nos azotaron con él. Nos dijeron que “fluyéramos” para no comprometerse a nada; nos dijeron que no creían en las jerarquías para ponernos los cachos, e invalidaron nuestros deseos de un amor seguro y firme.Entonces esa estética antimacho pasó de ser una bandera verde a una alerta roja inminente, que anticipa más una apropiación e instrumentalización de las nuevas teorías relacionales y feministas que una verdadera conciencia sobre la toxicidad de la masculinidad tradicional.Así las cosas, lo que pasó fue que nos dejamos de “vincular” con los aliades. De repente, el olor a deconstruide apestaba más que el olor a macho. Sin que nos dieramos cuenta, el Fifas, ese viejo macho confiable, conocedor de la tabla de la B, se erigió como la antítesis del aliade que nos traicionó. Además, llegó el mundial, y el conocimiento futbolístico se cotizó al alza.Entonces, ¿está bien ser Fifas?Ser Fifas no está bien ni mal. Primero, aclaremos que el gusto por el fútbol está tan bien como el gusto por el ajedrez o por el baile. Segundo, ser Fifas no describe solamente un gusto por el fútbol: como tipo social o arquetipo, el Fifas es una sobresimplificación de una categoría de hombres a los que no solo les gusta el fútbol, sino que tienen (o padecen) otros marcadores de masculinidad tradicional, como la tendencia a ignorar sus emociones, a hablar sobre cosas que estén lejos de ese campo (de sexo, de plata), y a hacer actividades que los distraigan aún más de sus sentimientos (tomar, ver Win).Ahora bien, que los Fifas estén de moda no quiere decir que tragarse (o beberse) los sentimientos y no saber gestionar las emociones esté de moda. Lo que está en demanda es un tipo de hombre que no performe una personalidad deconstruida y un compromiso con el feminismo para hacernos bajar nuestras defensas y sacar el mejor provecho de esa cercanía.Lo que tienen de bueno los Fifas (los reales, los de siempre) es que lo que ves es lo que hay, sin sorpresas: hombres que no tienen ni idea de lo que es ser una mujer y que no van a fingir que lo saben.Nace el FifesLos hombres, siempre atentos a las tendencias del consumo cultural y sexual de las mujeres, han tomado nota ante este extraño comportamiento de la demanda. Algunos han desempolvado las viejas camisetas de equipos locales que alguna vez les regalaron sus papás, hoy “clásicas”. Otros, fifas enclosetados que vivían su pasión en secreto, descubren con alegría que, por fin, su afición es sexy. Y surge también un híbrido, producto de esta colisión cultural entre aliades y micreros: el Fife. El fifas feminista. Aún no conozco suficientes representantes de esta última variante, así que, por ahora, me abstengo de comentarios. (Pero puedo decir que Héctor Bellerín es uno y que Dios lo bendiga).
Luego de la tormenta mediática por el fin del compromiso entre Rauw Alejandro y Rosalía, el cantante puertorriqueño decidió desahogarse sobre la ruptura en una canción titulada Hayami Hana. Rauw menciona a la 'Motomami', habla sobre la presión que tuvo la relación por parte de terceros, reitera que no fue infiel y que no tenía en mentes finalizar su relación con la cantante catalana.LETRA DE HAYAMI HANA DE RAUW ALEJANDRO PARA ROSALÍACompuesta por Raúl Alejandro Ocasio, producida por El Zorro x Mr. NaisgaiPor si acaso nunca volvemos hablar,Y mis ojos favoritos no me vuelven a mirar,Esta la hago pa’ cuando te quieras recordardel loquito tuyo que te quería de verdad.Y no voa' hacerme el fuerteYo no voy frontearAquí to el mundo sabe que te voy a llorar, te voa’ extrañarSi, aqui no hay no hay nada que ocultarPero hay un pal de cosas que del pecho me quiero sacarTodos sabenTodos sabenTodos sabenTodos sabenTodos sabenSaben un carajo…Hemos discutimos,Me cuesta expresarme,Todas mis carencias ya tu te los sabes,Yo también tus cosas tengo que aguantarmePero nunca por mi mente paso la opción de quitarme.y que pena las parejas ya no duran,duran poquito, quedan pocos viejitosque nos digan sus truquitos,De que manera puedo verToda la vida contigo el amanecer.Y mami yo no tengo la respuesta para estoPero quise por igual tu cualidades y defectos.Todo se vuelve mas difícil con el tiempoPero no to’ las personas están preparada pa’ esto.Y no te culpo, la vida que llevamos no pa’ todo el mundo, la prensa, las redes, presiones de grupo, estando lejos es más difícil, mas fácil junto,Trabajamos sin parar pero hasta que punto…Estar en nuestro campito,vale mas que to’ el dinero y la fama,Despertar y verte a mi lado,no dan ganas de salir de la cama.Ey, todas mis canciones son pa’ ti desde afrodisíaco,to’ el mundo sabe eso, eso no viene al caso,es que no dejo extrañarla durmiendo en mis brazo,no se como parar de pensar en ese ultimo abrazo,Y si supiera que iba hacer el ultimo no la hubiera soltao’tal vez ahora estuviera a mi lao’viendo pelis en la camita arropao’,pero este verano me toco estar como el sol, soliao’…Yo sere muchas cosas, pero nunca infielElla siempre tuvo la clave de mi celEsto fue algo mas que no esta en mi poder,Mi niña de cristal, mi barquito de papelTe desarmaste y arreglarte intente,Aunque lejos te me fuiste, me quedeAhora no estoy pero quiero que sepas queTu eres mas fuerte de lo que te crees,Y espero que algún podamos reírnos del pasadoAquí no hay rencores, esto no es un reclamoSi los mejores días tu me ha regalao’Por eso en mi barriga tu nombre llevo tatuao’ ma’…Todo de ti y lo volvería hacerTerminare nuestra casita por si te da con volverHoy te dejo de escribir,No de querer,Como olvidar tus besos después del Nap Aquel…Pa terminar!Se que vas hacer la mejor artista,Es otra como tu en verdad no creo q existaEres la portada mas bella de todas las revistaYo si lo sabría aunque no tenga vista..Sin con tan solo escuchar tu vozEl mar se calma de cualquier tormentoMiles de personas piensan lo mismoNo lo digo yo por culpa de este sentimientoY, desde “Los Angeles” lo supeElla es mi “Motomami”Que vendrá después nosePero sé que pa’ ti serán to los Grammys, ey!Estudiaran tu arte con el pasar del tiempoCuando planean se que siempre te cogen de ejemploY aunque te copien fallaran en el intentoPorque solo Dios escoge a pocos con ese talento.Eres genuina, eres increíble, eres pura alegría,eres medicina,Tu me curas el corazónTodas esas noches en casa bailando nuestra canciónY si la vida me junta contigo en otra ocasiónYo no le discuto al destino la razón…Otra vez me vuelvo a quedar aquí sin tiDiablo! nena te voy a extrañarNo vi venir que esto se fuera acabarOtra vez me vuelvo a quedar aquí sin tiEsta vez no te voy a pararte digo adiós que te vaya genialAy ya ya yay! como duelete digo adiós que te vaya genialAy ya ya yay! como duelete digo adiós que te vaya genialAy ya ya yay! como duelete digo adiós que te vaya genialAy ya ya yay! como dueleHayami Hana!Hayami Hana!¡La música nos une!
“What am I doing? What am I doing?”, se preguntó Drake en “Over”, de su primer álbum Thank Me Later, publicado en 2010, el mismo año que debutó el Festival Estéreo Picnic en Colombia. Hace trece años, el rapero y el festival soñaban con llegar a donde están hoy. Y cuando el canadiense cantó estas líneas al inicio de su presentación como el acto principal del segundo día del Picnic en Briceño, se sintió como la satisfacción de una promesa cumplida. Sin embargo, esa misma pregunta fue la que me hice durante toda su presentación, que incluyó ese y otros momentos que definieron el rap y el pop de los tiempos recientes: ¿Qué estaba haciendo Drake?A Estéreo Picnic no le han faltado estrellas de todos los géneros y todas las generaciones durante sus trece ediciones. Pero, si le hacemos caso a Billboard, Drake fue EL artista de la década pasada, una máquina bien aceitada de himnos, lamentos y captions de Instagram que todavía surfea una de las olas de éxito más largas de la historia del rap. Por eso su presentación ante miles de personas que lo recibieron con pequeños saltos y tarareos al ritmo de “SICKO MODE” tuvo ese peso simbólico, el de ser la estrella pop definitiva de la misma época en la que el festival nació, creció y se consolidó como uno de los más importantes de América Latina. Aun así, ni en los rapeos —por momentos ahogados, luego incompletos— ni en el espectáculo —el fuego no bastó para suplir su media marcha— demostró su poder total.Desde la tarima, Drake hiló un popurrí de sus principales canciones. La energía triunfal de “Started From The Bottom” y “Energy” le dio paso a “God’s Plan”, con esas línea/meme sobre su amor por su cama que el público cantó de vuelta, e “In My Feelings”. “Hold On, We’re Going Home” demostró su talento en el R&B y con “MIA”, “Controlla” y “One Dance” amplió su rango hacia el reggaetón y otros ritmos caribeños. Iba rápido, como si desde Bogotá le hubiera llegado el espíritu de afán: cortaba las canciones a la mitad y pasaba a la siguiente, sin dejarnos conectar con ninguna imagen. La mejor fue “Knife Talk”, su despliegue de talento más claro de la noche, que no alcanzó a compensar un concierto lánguido, más parecido a un entrenamiento que a un partido oficial. Supongo que por más que sea una estrella global y hecha a partir de lo global, sigue viendo a América Latina como una segunda división del circuito musical, como lo supieron días antes en Chile y Argentina. Ni la bandera, ni su brindis pudieron compensarlo.Con discos como Views (2016), More Life (2017) y Honestly, Nevermind (2022), Drake ha redefinido el diálogo entre el rap y el pop a partir de préstamos —sus detractores tal vez lo acusarían de apropiación cultural— de otras culturas, reflejando así el crisol de Toronto, su ciudad, la raíz que representó la noche del viernes. En distintas ocasiones ha mirado hacia Atlanta y Londres, por ejemplo, para adaptar esas tendencias (¡y hasta los acentos!) a su mundo; así se ha mantenido en la cima, siempre capaz de tirarte un trap, un dembow, un afrobeats o lo que necesites sin sudar mucho. Si le preguntáramos a Rosalía, que antecedió su concierto y que también ha sido acusada de apropiación cultural, intuyo que admitiría a Drake como una de sus influencias a la hora de navegar estilos y colores para edificar un universo propio. Lo llamó su hermano y su amigo, y recomendó que fuéramos a verlo, su único descache en toda la noche. De resto, el de ella fue un concierto perfecto, una amalgama que demostró lo infinito de la música.La cantante catalana, en el día que lanzó RR con su amor Raw Alejandro, dio el disparo de salida con las texturas metálicas de MOTOMAMI a través de cortes de reggaetón de vanguardia como “SAOKO” y “BIZCOCHITO” y la bachata de “LA FAMA”, para luego abrirle espacio a El Mal Querer, su ópera flamenca de 2018, con “DE AQUÍ NO SALES”. Desde ahí exhibió los golpes más contundentes de una carrera profunda, aunque corta: creó un ambiente íntimo con “HENTAI” al piano, sembró nostalgia en Briceño con “PIENSO EN TU MIRÁ” y rememoró sus primeros pasos en el perreo con “Con Altura”. El aura cyberpunk de MOTOMAMI determinó la estética del espectáculo: las cámaras se desplazaban vertiginosamente y lo virtual se fundió con lo real. Tan real como que estábamos todos ahí, algo mojados y con los pies embarrados, apreciando a una gran artista y disfrutando de cómo ella, con su concentración y dedicación, nos apreciaba de vuelta.El final de “CUUUUuuuuuute” fue contundente en todo su caos y fulgor, en su concepto y ejecución. Este fue un concierto lleno de ideas, con una línea editorial definida. La presentación de Rosalía, con su experimentación policromática que funde la tradición, el presente y el porvenir, me recordó a la de C Tangana, la mejor del año pasado por su visión. Casualmente, el de Drake me pareció un calco del de J Balvin. Qué importantes estas cuatro exhibiciones para recordarnos todo lo que cabe en la idea de un concierto, para subir la vara de lo que las principales estrellas de la música presentan en vivo, así como para desnudar la pereza de algunas de esas estrellas a la hora de encabezar un festival.Finalmente, pienso en Rosalía, en la misma línea que propuso C Tangana el año pasado, una reimaginación de qué es ser una estrella pop con música en español. El idioma nos acerca y su conversación con lo latino, curiosa y atrevida, nos acerca aún más. Y si esta música, de contrabando de influencias y culturas, se corresponde con una puesta en escena diez de diez, solo queda aplaudir y observar con atención. Los tiempos están cambiando y, en dos ediciones consecutivas de Estéreo Picnic, lo tuvimos al frente.Lean también | Estéreo Picnic 2023 Día 1: lecciones para sobrellevar la ausencia
Continúa el Festival Estéreo Picnic 2023 y este año, en su décima segunda edición hay un día más para disfrutar presentaciones de artistas y bandas de todos los géneros y de todas las partes del mundo.Contenido recomendado | Estéreo Picnic 2023: ¿Qué hacen los artistas internacionales al llegar a Bogotá?Desde las cuatro de la tarde empezará a sonar la música en las seis distintas tarimas ubicadas alrededor del Campo de golf de Briceño el día viernes 24 de marzo. Ahora, ¿Quiénes estarán allí? Artistas nacionales, bandas de indie rock, DJs y mucho más.Las tarimas las abrirán: Nidia Góngora, Neck Talese, Clandes y Amantina. Los actos que cerrarán tarimas son: Drake en el principal, Fred Again en el Adidas, Mora en el escenario del Banco y Jerry Rivera en el Flamin' Hot. ESCENARIO PRINCIPAL 3:00PM: NIDIA GÓNGORA 4:30PM MABILAND 6:15PM TOVE LO 8:15PM BLONDIE 11:15PM DRAKEESCENARIO ADIDAS 2:15PM NECK TALESE 3:45PM ANA MARÍA VAHOS 5:15PM DEVENDRA BANHART 7:15PM AURORA 9:15PM ROSALÍA 01:00AM FRED AGAIN ESCENARIO DEL BANCO 2:15PM CLANDES 3:45PM TROPICANA CLUB 5:45PM SALT CATHEDRAL 7:15PM SEN SENRA 9:45PM THE ROSE 02:15AM MORA ESCENARIO FLAMIN' HOT 3:00PM AMANTINA 4:30PM EV 6:15PM LOUTA 20:45 MITÚ 01:00 JERRY RIVERARecuerden que hay dos lugares de música más: el Club donde hay pura música electrónica, el Templo con reggaetón al piso y el show especial de Fuerza Bruta que se presenta cuatro veces al día.Preparen sus rutas de baile, guarden esta información y lleguen temprano para vivir algo imposible de olvidar.Toda la información de horarios, tarimas y ubicación la pueden encontrar en Shock.co o en los canales oficiales de Estéreo Picnic. Lee también Festival Estéreo Picnic 2023: tarimas y horarios por díasEstéreo Picnic 2023: hablemos sobre los actos colombianos del festivalVideo | The 1975 en Colombia: besos, lamidas y 'cariñitos' con Matthew Healy | Shock- Shock¡La música en vivo nos une!
Rosalía es cabeza de cartel en los grandes festivales de la región: Lollapalooza Argentina, Brasil y Chile, más el Estéreo Picnic en Colombia. Su show tiene una duración de una hora y quince minutos, una versión reducida de lo que presentó en el Motomami World Tour de 2022.Contenido recomendado | C de carisma: el memorable debut de Rosalía en Colombia con el 'Motomami Tour'Los shows se 2023 de Rosalía incluirá presentaciones en Asunción, Paraguay, Ciudad de México, Coachela en Indio, Primavera Sound en Barcelona, Lollapalooza Francia y conciertos especiales en Portugar, Italia, Dinamarca, España y Grecia.En total interpreta veinte canciones de su repertorio e incluye un cover, también canta algunas de sus colaboraciones más populares que la han llevado a ser la artista española más relevante de los últimos años.SETLIST ROSALÍA, GIRA DE FESTIVALES 2023SAOKO BIZCOCHITO LA FAMA DE AQUÍ NO SALES / BULERÍAS LA NOCHE DE ANOCHE LINDA DIABLO DESPECHÁ BLINDING LIGHTS REMIX HENTAI CANDY REMIX MOTOMAMI PIENSO EN TU MIRÁ LA COMBI VERSACE CON ALTURA HÉROE (ORIGINAL DE ENRIQUE IGLESIAS) | G3N16 MALAMENTE CHICKEN TERIYAKI CUUUUUuuuuuuteLa asistencia a los festivales oscilan entre 30.000 y 70.000 personas por shows. La gira Motomami estaba diseñada para recibir a Rosalía en arenas de aproximadamente 20.000 personas. El día del concierto de Rosalía en Colombia se estrenará el EP RR de la catalana con su pareja Rauw Alejandro, el proyecto incluirá tres canciones que fueron descartadas de los álbumes Motomami y Saturno.En video | ROSALÍA: Motomamis, mujeres y feminismo¿Qué significa ser una Motomami? ¿Empoderamiento? ¿Andar en moto? ¿Ser como se te venga en gana?Mariangela Urbina le da una mirada más profunda al concepto de la Motomami, nos cuenta de su origen y habla con fans de la Rosalía para que nos cuenten qué significa ser Motomami para ellas.¡La música en vivo nos une!
Todo está listo para una nueva edición del Festival Estéreo Picnic que en 2023 se realizará, por primera vez, en cuatro jornadas: del jueves 23 de marzo al domingo 26 de marzo. Este año dos mujeres son actos principales en dos días diferentes: Rosalía el viernes y Billie Eilish el domingo. Y si bien hay nombres femeninos en los primeros renglones de los carteles, queremos hacer zoom en el afiche y hacer cuentas de la participación de proyectos musicales con mujeres que se pararán en las tarimas del festival.Para los tres días de festival de 2022 se anunciaron 66 artistas, de los cuales un 38% corresponde a solistas o proyectos con al menos una mujer en su alineación, esto corresponde a un aumento del 5% en la presencia femenina anunciada en el cartel de 2020 y del 19% frente al 2019. Algunas de las mujeres protagonistas en el cartel de 2022 fueron Doja Cat, LP, Nina Kraviz o Javiera Mena. Entre las propuestas nacionales con mujeres aparecían Briela Ojeda, Ela Minus y Lucille Dupin. En 2023 habrá en total 110 actos en los cuatro días de FEP, de los cuales 39 tienen a una mujer en su alineación; es decir que este año hay 35,5% de actos mixtos y/o femeninos en el cartel. Si bien hay más mujeres como acto central, esto representa una lastimosa disminución en la presencia femenina en tarima.Ahora veámoslo por días. El jueves hay 24 actos y, de ellos, 9 son femeninos. Aparecen Melanie Martínez, SOFI TUKKER, Juliana, The Change, Mr Bleat, Paula Vélez, María José y Ana Sanz. Este día el porcentaje de presencia femenina es del 37%.El viernes habrá 29 shows y entre las mujeres están Rosalía, Tove Lo, Williw, Aurora, Mabiland, Nidia Góngora, Ana María Vahos, Salt Cathedral y Sonido Tupinamba. Acá el porcentaje femenino decrece, es del 35%.El sábado sí que es una jornada en la que hay más hombres que mujeres. De 29 actos anunciados, solamente el 17,24% es femenino: ninguna mujer aparece en los primeros 5 renglones del cartel de ese día. Participarán Flor de Jamaica, Sophyaa, La Perla, Bitter Babe y Semblanzas del Río Guapi.Finalmente el domingo es el día en que, por primera vez, hay más presencia femenina que masculina: de los 29 actos que se presentarán; 15 cuentan con mujeres en tarima. Lo que representa un gran 51%.Si bien este año la participación porcentual de mujeres bajó, hay que recalcar que es la primera vez en que hay tantos actos femeninos principales: la contratación de Kali Uchis, Melanie Martínez, SOFI TUKKER, Aurora, Willow, Blondie, Tokischa, Billie Eilish y Rosalía es el fruto de que en años anteriores el público y los medios hablaran sobre la necesaria presencia femenina en las tarimas de los festivales del mundo. La inequidad en los espacios de representación es un mal transversal a las industrias y a las diferentes áreas que componen la industria de la música, pero ver más mujeres en tarima, sin duda, ayudará a equilibrar la balanza. ¡La música nos une!
Blackpink, Calvin Haris, Frank Ocean y Bad Bunny lideran el cartel del Festival Coachella 2023 que se realizará en dos semanas: del viernes 14 al domingo 16 de abril y del 21 al 23 de abril. El cartel tiene músicos de todas partes del mundo y tiene en su nómina a Gorillaz, Rosalía, Kali Uchis y Björk.Contenido recomendado | Un fenómeno llamado Bizarrap: presente y futuro del mainstream argentinoEl Festival de Música y Artes de Coachella Valley se realizará, una vez más, en el Valle de Coachella en el desierto de Colorado ubicado en Indio, California.El viernes tendrá como artistas principales al puertorriqueño Bad Bunny y a la agrupación Gorillaz. También estarán en la tarima principal el nigeriano Burna Boy, The Chemical Brothers, Kaytranada, Blondie, Becky G y Metro Boomin. Otros proyectos del viernes son Ashnikko, Pusha T, ¿Téo?, Idris Elba, Two Friends, entre otros.El sábado habrá fuerza femenina con la banda Blackpink, primer grupo de mujeres en ser acto principal del festival, y la cantante catalana Rosalía. También estarán en el escenario principal Erick Prydz, Boygenius, $uicideboy$, The Kid Laroi, Charlie XCX, Labritnth y Underworld. Ese día también estarán en otros escenario Eladio Carrión, Sofi Tukker, Los Fabulosos Cadillacs, Drama, Chloé Cailler, entre otros.Para leer | Ese extraño momento de Rosalía llamado MotomamiEn el tercer día del evento los shows principales serán Frank Ocean y Björk más conciertos de Kali Uchis, Dominic Fike, Jai Paul, Fisher y Porter Robinson. También habrá grandes shows de Willow, Latto, Christine and the queen, Rae Sremmurd, entre otros.Se estima que al Coachella de 2022 en el que estuvieron Harry Styles, The Weeknd, entre otros, asistieron más de 200.000 personas y se recaudaron 67,2 millones de dólares en ventas de entradas.En video | J Balvin en el Festival Coachella 2019, All Access Shock¡La música nos une!
Rosalía es ahora la única mujer en la historia del Grammy Latino en ganar dos veces el gramófono por el álbum del año, un honor que las otras dos mujeres ganadoras de Mejor Álbum, Shakira y Natalia Lafourcade, no han podido obtener a pesar de su extensa carrera. Esto despierta la conversación de siempre, ¿están los españoles quitándole espacio a los latinos en el Grammy? Vamos por partes.Hispano vs. LatinoUno de los errores comúnes en esta discusión es confundir la hispanidad con la latinidad. Un discurso prevalente es el del tecnicismo linguistico, que todas las lenguas derivadas del latín son latinas, por lo tanto los españoles son latinos. Ahí hay que dividir el gentilicio de la familia lingüística: si las canciones de lenguas derivadas del latín fuesen latinas, la canción en rumano Dragostea din tei (que la mayoría conoce como Numa Numa Iei) habría sido nominada al Grammy latino.Hay que separar hispano de latino: Latino como gentilicio hace referencia a una persona de Latinoamérica, mientras hispano hace referencia a una persona de un país hispanohablante. Por ejemplo, los brasileños son latinos, no hispanos, porque están en Latinoamérica. Los Ecuatoguineanos son hispanos, no latinos, porque están en África.¿Quién puede ser nominado al Grammy latino?El Grammy Latino, aunque originalmente estaba pensado sólo para ciudadanos latinos, pasó a tener un sistema de nominaciones por lengua: la música nominada al grammy latino debe estar en un 51% al menos compuesta en español o portugués, sin importar el orígen de la persona que hizo la canción. Si bien la limitación está pensada para que sean sólo lenguas latinoamericanas, peca de colonizadora desde el inicio: esta restricción limita a todos los artistas latinos que hablen lenguas originarias y da la oportunidad a los europeos de competir. El mensaje es muy "si queréis participar, hablad nuestro idioma". Y seamos sinceros, a los artistas de Guinea Ecuatorial, por ejemplo, rara vez los voltean a ver a menos de que tengan pasaporte español.¿Entonces siempre ganan los europeos?Esto nos arroja a otro extremo y es decir que "los europeos dominan el Grammy Latino". Eso no podría alejarse más de la realidad. Aunque sí hay artistas españoles arrasando en latinoamérica, los pasan los latinoamericanos, y por mucho. Este año los españoles nominados eran Rosalía, Pablo Alborán, C. Tangana, Vetusta Morla, Kiki Morente, Bumbury, Carmen Doorá, Las Migues, Estrella Morente, Alejandro Sanz, Nathy Peluso (que la ponemos en la lista así como ponemos a Cristina Aguilera en la de las estadounidenses) y Pol Granch. El resto eran todos latinos.El problema es mirar a los dos gigantes que más gramófonos han ganado y asumir que ese es el caso para todos: Alejandro Sanz tiene 24 Grammys latinos, Rosalía tiene 12, pero si miramos otros artistas españoles, Enrique Iglesias tiene 5, y entre David Bisbal, Plácido Domingo y C Tangana no llegan a 10. La verdad es que decir que los españoles dominan los premios y que están sacando a los latinos es una exageración, una vez se miran de verdad los números.El top lo siguen dominando Eduardo Cabra, Juan Luis Guerra, Residente, Juanes, Natalia Lafourcade y Shakira.¿Está colonizándonos los premios la Rosalía?Sí y no. Sí, el presupuesto y oportunidades que le dio nacer en el privilegio y ser europea le dan una ventaja enorme sobre las artistas latinoamericanas. Sí, su apuesta por representar la latinidad y "repensar" ritmos latinos como el Saoko cae en la apropiación. Sí, definitivamente como latinos es un poco incómodo saber que Rosalía tiene casi la misma cantidad de Grammys Latinos que Shakira. Pero el problema no es Rosalía, no es su culpa que la nominen y que gane. El problema es que el criterio de nominaciones del Latin Grammy es eurocéntrico. El récord de la Rosalía podría haber ido a una artista latina, y no fue, pero bajo el criterio de los grammys podría haber ido también a otra española, una portuguesa, una ecuatoguineana, podría haber ido a cualquiera que cante en español o portugués. El Grammy Latino está desde su creación construido en el eurocentrismo, asociando la latinidad con las lenguas de los colonizadores, descartando a los artistas indígenas y negros que hacen música en sus propias lenguas, y premiando los ritmos africanos e indígenas sólo cuando una persona de fuera los usa como su composición experimental y bohemia.Podemos sentarnos todo el día a discutir quién merece o no estar en los Grammys, pero hasta que no se decolonicen los criterios de participación, vamos a tener esta conversación una vez al año, para siempre.
Durante la era El Mal Querer, la Rosalía presentó una gira internacional de conciertos que iba a tener una parada en el Parque Simón Bolívar de Bogotá, pero que se canceló por las fuertes protestas que hubo durante la época al Gobierno de turno. Casi tres años después la catalana pisó suelo colombiano, pero esta vez lo hizo sobre una moto que aún tiene mucha gasolina y que está conquistando América. Para leer | Ese extraño momento de Rosalía llamado MotomamiEl show de Rosalía en Bogotá es el número 21 de la gira mundial MOTOMAMI, mismo nombre de su más reciente disco en el que plasma un collage de influencias y referencias a la cultura pop. Antes de entrar al Movistar Arena, escenario de la capital colombiana, la Rosalía estuvo en Monserrate y turisteando por La Candelaria. Su paso por Colombia fue fugaz, pero memorable y culminó con la histeria colectiva de su concierto. No es un secreto que Colombia, a pesar de todas sus problemáticas, es uno de los países más populares de América Latina. La Rosalía no es ajena al impacto internacional de nuestra República y lo hizo saber en cada una de las intervenciones que tuvo durante su concierto en Bogotá: habló de que su primer amor fue un hombre colombiano, de que su mejor amiga es colombiana, del respeto y la admiración que siente por Shakira, de cómo le afecta la altura de la ciudad y de su interés por visitar Cali, Medellín o Barranquilla.En tarima la gira Motomami muestra influencias asiáticas, flamencas y futuristas. Cada uno de los temas tiene performance en el que la interacción de Rosalía con el público es vital. El carisma de la catalana durante las casi dos horas que está en tarima hace que todo el desarrollo artístico del Motomami Tour sea memorable. Si bien no tiene una banda en vivo que la acompañe, queda claro el nivel musical de Rosalía por la forma en que su voz suena en vivo; a veces dulce, a veces fuerte, a veces salvaje y otras veces indescifrable. Y es que el hecho de que sea una artista tan enigmática hace que Rosalía sea un proyecto (y una persona) que genera interés y curiosidad.14.000 personas aplaudieron a 'Rosi', se dejaron contagiar por su energía y bebieron un poco de la gasolina que la MOTOMAMI ha dejado en todos los países que ha visitado con esta gira que la consolida como una de las divas pop más interesantes de los últimos 10 años. ¡La música nos une!
Luego de tres meses de preparación, la cantante catalana Rosalía inicia en España su gira mundial de conciertos MOTOMAMI TOUR 2022 que incluye temas de todos sus proyectos discográficos. Para esta gira la cantante está acompañada por un cuerpo de baile que la respaldan en cada movimiento en tarima. Contenido recomendado | Rosalía, pieza clave para que Rauw Alejandro cantara 'Te felicito' con ShakiraAntes del inicio oficial del tour en Almería, España, la Rosalía ofreció un ensayo exclusivo para fans donde dejó ver los detalles de la producción de la gira, el vestuario que usará, algunos avances del montaje, el número de bailarines que la acompaña y, finalmente, las canciones que cantará a lo largo de casi dos horas de show. En total son 33 canciones, algunas completas y otras reducidas. A pesar de que es un listado de canciones robusto, muchos fans coinciden en que quedaron por fuera temas icónicos y representativos de Rosalía como Aute Cuture, A Palé, Di mi nombre y Bagdad. El listado incluye canciones nuevas que fueron descartadas del álbum MOTOMAMI.SETLIST OFICIAL MOTOMAMI TOUR DE ROSALÍA SAOKOCANDYBIZCOCHITOLA FAMADOLERMEBULERIAS / DE AQUÍ NO SALESMOTOMAMIG3 N15LINDALA NOCHE DE ANOCHEDIABLOHENTAIPIENSO EN TU MIRÁPERDÓNAME, COVER DE LA FACTORÍADE PLATAABCDEFGLA COMBI VERSACELA RELACIÓN REMIXGASOLINA / TKN / PAPI CHULO / YO X TI, TU X MIDESPECHÁAISLAMIENTOBLINDING LIGHTS (REMIX)DINERO Y LIBERTADCOMO UN GMALAMENTEDELIRIO DE GRANDEZACON ALTURACHICKEN TERIYAKISAKURACUUUUUUTERosalía es la productora y directora creativa de MOTOMAMI, su nuevo proyecto discográfico que se perfilaba como uno de los álbumes más esperados del 2022. En este disco se deja evidenciada la evolución en la forma en que la catalana quiere proyectarse frente a los consumidores de su música.El proyecto tiene dos colaboraciones: la primera es La Fama con el canadiense The Weeknd y la segunda es La Combi Versace con la dominicana Tokischa. La ganadora de un Grammy Award y ocho premios Latin Grammy lleva trabajando en las pistas de MOTOMAMI desde 2019.ROSALÍA - MOTOMAMI WORLD TOUR 2022 FECHASMiércoles 06 de julio - Almería, España - Recinto Ferial de AlmeríaSábado 9 de julio - Sevilla, España - Estadio La CartujaMar Jul 12 - Granada, España - Plaza de TorosJue Jul 14 - Málaga, España - MarenostrumSáb 16 Jul - Valencia, España - Auditorio Marina SurMar Jul 19 - Madrid, España - WiZink CenterMiércoles 20 de Julio - Madrid, España - WiZink CenterSábado 23 de julio - Barcelona, España - Palau Sant JordiDomingo 24 de Julio - Barcelona, España - Palau Sant JordiMiércoles 27 de julio - Bilbao, España - Bilbao Exhibition Centre BECViernes 29 de julio - A Coruña, España - El ColiseoLun 1 agosto - Palma, España - Son FusteretDom 14 agosto. - Ciudad de México, México - Auditorio NacionalMiércoles 17 de agosto - Guadalajara, México - Auditorio TelemexViernes 19 de agosto - Monterrey, México - Auditorio CitiBanamexLun 22 de agosto - Sao Paulo, Brasil - Tom BrasilJue 25 de agosto. 25 - Buenos Aires, Argentina - Movistar ArenaDom 28 ago - Santiago, Chile - Movistar ArenaMié, 31 de agosto - Bogotá, Colombia - Movistar ArenaSábado 3 de septiembre - La Romana, República Dominicana - Anfiteatro Altos De ChavónViernes 9 de septiembre - San Juan, Puerto Rico - El ColiseoJueves 15 de septiembre - Boston, MA - MGM Music Hall at Fenway18 de septiembre - Nueva York, Nueva York - Radio City Music HallLunes 19 de septiembre - Nueva York, Nueva York - Radio City Music HallViernes 23 de septiembre - Toronto, Canadá - Budweiser StageLunes 26 de septiembre - Washington, D.C. - The AnthemMiércoles 28 de septiembre - Chicago, Illinois - Byline Bank Aragón BallroomDomingo 2 de octubre - San Diego, California - Cal Coast Credit Union Open Air Theatremar 4 de octubre - San Francisco, California - Bill Graham Civic AuditoriumViernes 7 de octubre - Inglewood, California - YouTube TheaterSábado 8 de octubre - Inglewood, California - YouTube TheaterMiércoles 12 de octubre - Houston, Texas - 713 Music HallViernes 14 de octubre - Irving, Texas - The Pavilion at Toyota Music FactoryLunes 17 de octubre - Atlanta, Georgia - Coca-Cola RoxySábado 22 de octubre - Miami, FL - iii Points FestivalViernes 25 de noviembre - Oporto, Portugal - Pavilhão Rosa MotaSábado 26 de noviembre. - Lisboa, Portugal - Campo PequenoJue Dic 1 - Milán, Italia - Mediolanum ForumDomingo 4 de diciembre - Berlín, Alemania - VelodromMiércoles 7 de diciembre - Dusseldorf, Alemania - Mitsubishi Electric HallSábado 10 de diciembre - Amsterdam, Países Bajos - AFAS LiveLun 12 de diciembre - Bruselas, Bélgica - Forest NationalJue 15 de diciembre - Londres, Reino Unido - The O2Dom 18 de diciembre - París, Francia - Accor Arena¡La música nos une!
Juancho López: no soy rockero, soy rocanrolero es el documental que narra la vida de esta figura emblemática del rock colombiano, conocido por ser “el rockero más viejo de Colombia”. (Documental compelto más abajo)El equipo de Radiónica Medellín hizo una investigación de las rutinas, conciertos y sueños de Juancho, así como en la historia de la emblemática banda Los Yetis, clave en los inicios del rock colombiano. Después de años de trabajo, han logrado concretar una visión clara para plasmar esta crónica visual.El documental ofrece una mirada íntima a la vida cotidiana, la soledad y la nostalgia que rodea la vida de Juancho López, reconocido como el "Abuelo del rock colombiano" por su contribución fundamental al inicio del género en el país.“Ningún rockero colombiano debería perderse este documental, básicamente porque es la semilla, nuestra raíz, el inicio de nuestro rock, la forma en la que nosotros nos concebimos como rockeros colombianos", opina Diego Londoño, director del documental. "Pero no solo los rockeros, ninguna persona debería perderse las experiencias, la visión y la vida de este hombre que por supuesto ha transversalizado la cultura musical rockera de Colombia”, agrega. Los Yetis: banda pionera del rock colombiano Los Yetis nacen como trío vocal en 1965, fundadores son: el cantante y guitarrista Juan Nicolas Estela y los hermanos Juancho e Iván Darío López. En febrero del 66, invitados por la compañía discográfica Discos Fuentes, Los Yetis participan en la grabación de un long play: 14 impactos juveniles!, que tuvo gran éxito. Por eso el sello les pide grabar su primer LP, simplemente llamado Los Yetis. Tras su disco debut, llegaron Los Yetis Vol. 2, en 1967 y Olvídate, de 1968. El grupo se disolvió a finales de los 60, y en 2003se reúne de nuevo hasta 2005 con la participación de Darío Marín, Pedro Pablo Arias,Victor Hugo Acevedo, Jhon Cano, Juan Nicolás Estela y Juancho López, estos últimos, miembros fundadores del grupo.
La pelea Kendrick Lamar vs. Drake empezó hace casi una década. Se dijeron muchas cosas el uno al otro, pero en esa correspondencia de canciones entre los dos raperos salieron dos “argumentos” acusatorios que me generaron más ruido que los demás. Drake dijo que Kendrick era un abusador físico con su esposa, Whitney, en la canción ‘Family Matters’:"When you put your hands on your girlIs it self-defense 'cause she bigger than you?"Kendrick acusó a Drake (una noticia ya vieja) por buscar, cortejar y “amigarse” con menores de edad."Say, Drake, I hear you like 'em youngYou better not ever go to cell block one"No vamos a discutir cuál acusación puede ser más cierta que la otra o cuál aproximación fue peor. Ambas fueron desastrosas.No he visto a la industria, ni a los manes de mis redes sociales, tan preocupados por la violencia de género tanto como cuando dos hombres decidieron usarla para punzarse el uno al otro.Tampoco conocía ese afán por castigar la paternidad ausente. En Colombia se estima que el 40% de hogares se sostienen solo por una mujer, según cifras del DANE del 2022. Y ese número no causa tanto revuelo en línea.Traigo a Colombia y a los hombres a mi alrededor a colación, porque fue ese cinismo el que inspiró y le dio forma a este texto.Santiago Cembrano lo dice muy bien en su artículo: “aunque el rap es el campo en el que el dolor se vuelve entretenimiento, no se trata de que esos versos sean parte de un coro pegadizo.”Y si bien fue el beef de Kendrick y Drake el que agitó esto lo suficiente para empezar a cuestionarnos las formas de algo tan “tradicional” del hip hop como las tiraderas, el cuento va mucho más allá.La deuda la tiene toda la industria. Me parece interesante, por mantenerlo en términos amables, que las personas que estamos en la industria, o los que consumimos música sistemáticamente, le asignemos una cualidad transformadora a la música. Algunos, dicen, que la música les cambia la vida o la forma de ver el mundo.Pero esa responsabilidad que ponemos en la música, y en quienes la hacen, es una camiseta que se puede quitar o poner a nuestro antojo.¿Cuáles son los límites de la corrección política en el arte? Quién sabe, quizá no existen o deberían existir. Entendemos a la música como algo que puede transformarnos y, por eso, a veces, se le pide corrección política.Pero esto va más allá de lo que se le puede pedir o lo que no.No hay que confundir este reclamo con una “necesidad” de corrección política en el arte. Eso es otra conversación mucho más grande.Pero a mí, como mujer y como víctima, me hace ruido la atención fervorosa que recibieron las palabras de Kendrick y Drake: más que mostrar indignación por la(s) posible(s) mujer(es) violentada(s), la audiencia sintió emoción por los egos masculinos que fueron lastimados en el proceso.A los hombres les parece más urgente prestar atención a la violencia cuando se entrega en una cajita de entretenimiento entre estrellas del pop, no cuando le pasa a las mujeres que tienen al lado. O cuando las víctimas son las mujeres cuya música consumen.Hay streamers que reaccionan a gritos porque le “sacaron los trapitos” al otro, no porque detrás de esas barras, que los hacen alucinar de la emoción, puedan haber mujeres abusadas o violentadas; hay medios investigando a fondo lo que puede ser uno de los mejores diss de la historia del hip hop, pero no las acusaciones que, de ser ciertas, deberían tener consecuencias legales.Y ahí está la deuda: acusaciones de pedofilia y violencia intrafamiliar que se quedan en versos de canciones de rap, artistas con denuncias que siguen llenando estadios y mientras tanto mujeres artistas, como Megan Thee Stallion, que tienen que convencer al mundo que lo que pasó fue verdad.La violencia contra las mujeres indigna, o llama la atención, siempre y cuando entretenga. La espectacularización, más que gestionar esa violencia de cara a la reparación, la instrumentaliza para la monetización.Entonces, mientras la mayoría de casos quedan archivados porque se vencen los términos, mientras a las mujeres se les pide ser “la víctima perfecta” y tener todo tipo de pruebas, Twitter se enciende por un par de barras y nos condiciona, nuevamente, a ser únicamente cifras en aumento.
Alicia en el País de las Pesadillas se estrena en los cines del país este 16 de mayo. Esta es una versión tenebrosa y retorcida de las aventuras de Alicia en el País de las Maravillas que lleva al público por un viaje inolvidable hacia lo más profundo de la oscuridad.Después de la trágica pérdida de sus padres, Alicia se ve obligada a mudarse con su tía Beth Crimisy a Wonderland, la imponente mansión familiar. Sin embargo, lo que comienza como una aparente escapatoria se convierte rápidamente en una pesadilla surrealista, cuando Alicia comienza a presenciar eventos cada vez más perturbadores y a encontrarse con figuras misteriosas que la arrastran hacia un mundo habitado por criaturas terroríficas y pesadillas insondables.Alicia en el País de las Pesadillas es una apuesta del director británico Richard John Taylor, conocido por trabajos previos que exploran los rincones más oscuros de la psique humana. En esta ocasión, Taylor se sumerge en el clásico de Lewis Carroll para ofrecer una experiencia que desafía los límites de la imaginación y sumerge al espectador en un mundo paralelo lleno de pesadillas y criaturas terroríficas.Esta adaptación cinematográfica no solo rinde homenaje al legado literario de Carroll, sino que también se une a una creciente tendencia de reinterpretaciones oscuras de cuentos clásicos.En un mundo donde las fronteras entre la realidad y la fantasía se desdibujan, Alicia en el País de las Pesadillas ofrece una visión perturbadora y visceral de un clásico atemporal.Alicia en el país de las maravillas: inspiración para terror Esta no es la primera adaptación de Alicia en tono de terror. En 2010 se estrenó Alice in Murderland. En esta historia, Alice Lewis, de veinte años, cumple 21 y está molesta por ello. Sus hermanas quieren animarla y deciden celebrar una fiesta de cumpleaños con temática de Alicia en el país de las maravillas en casa de Charlene Glass. Alice sabe que en el sótano de esa casa, su madre, Ann Lewis, fue brutalmente asesinada a machetazos por un asesino enmascarado 20 años antes. Las niñas establecieron la regla de que no se permitirán teléfonos celulares ni niños.Alice or the Last Escapade se estrenó en 1977 y está vagamente inspirada en la novela.
La 'Bichota' terminó su gira por Sudamérica con un último show en Brasil, sin embargo, la cantante paisa no llenó en São Paulo. Karol G estuvo en el país carioca el pasado diez de mayo y tras lo ocurrido compartió un mensaje en sus redes sociales.Aunque Karol G se ha convertido en una de las artistas más importantes a nivel mundial, y un referente en su género, no logró cerrar esta fase del tour con la asistencia que esperaba. Luego de su concierto en Brasil la artista detrás de canciones como 'Amargura' y 'TQG' hizo una reflexión en su cuenta de Instagram.“Es increíble como un día podemos tener un show de 60 mil personas y al otro uno de 13 mil y sentirse igual de lindo, igual de grande, igual de especial. La vida me sigue enseñando que nunca estamos en la cima de nada … por eso es mejor recordar de dónde vienes que creerte mucho en donde estas y así poder empezar de cero en cada lugar que sea necesario. Siempre hay un nuevo reto, nuevos desafíos, nuevos sueños por cumplir", se puede leer en su post.Así mismo habló del recorrido que ha hecho desde hace varios años para lograr que su música suene en otros países: "Hace 5 años estuve haciendo promoción de mi música en este pais y entendí que tenía que ir por partes , paso a paso, enfocarme primero en unos países, después en otros y así poder llevar mi mensaje a mi ritmo, sin afán, con mi música, en mi esencia y en los tiempos de Dios.", agregó.Finalmente, agradeció a las personas que fueron a verla en Sao Pablo y al país que, en sus palabras, la recibió y la hizo sentir especial. Este show fue el primer concierto oficial de Karol G en Brasil y el último de la gira por Latinoamérica de 'Mañana Será Bonito Tour'.La cantante regresará a tierras cariocas en septiembre para presentarse en Rock in Rio, un de los festivales más importantes del país.**Si son fanáticos de la bichoca les recomendamos leer: Karol G y las referencias en 'MAÑANA SERÁ BONITO' (Bichota Season), su último álbum.
Laüra Bonsai y Felinna Vallejo conforman Las Ninyas del Corro, una de las formaciones más interesantes de la nueva escuela del rap español. Nuestro colaborador Santiago Cembrano las visitó en su barrio para hablar con ellas y contarnos la historia de su álbum, Bitches in Business. ***—Es como ver follar a tus padres.El sol se derrama con placidez sobre la Plaça de la Vila, en Sant Adrià de Besòs: la periferia de Barcelona. Son las 7 de la tarde de un viernes de abril. En las terrazas no cabe nadie y el saltarín infantil está lleno: las risas y los gritos de júbilo llenan el aire. Una mujer antigua esquiva el partido de fútbol improvisado que atraviesa la plaza y se sienta con su esposo, que la espera en un banco, bajo la sombra de un árbol robusto. Él pone su mano sobre la rodilla de ella y observan a los vecinos que pasan.Laüra Bonsai es de aquí, de Sant Adrià. La rapera de 28 años está en casa, pero, entre sorbos de Cola-Cola, narra una experiencia extraña:—Es como ver follar a tus padres. Así es conocer la industria musical por dentro: "¡Buah! ¿Qué estoy viendo? ¿Cómo funciona esto?" Por eso queríamos explicarles a los demás que estar donde estamos no es lo que parece.Felinna Vallejo tiene 25 años y es de Bon Pastor, un barrio aledaño que se conecta con Sant Adrià a través de un puente, uno como el que está en el logo de Las Ninyas del Corro, el grupo que ambas conforman. Se presentaron como guerreras de ceño fruncido con Onna Bugeisha en 2021 y así construyeron una habitación propia con los códigos noventeros. Giraron por conciertos y festivales de toda España y así conocieron de contratos y adelantos, horarios y rutinas, el negocio que se escondía tras el sueño de la música. Bitches in Business de Las Ninyas del CorroDe esa experiencia, Las Ninyas del Corro hicieron su segundo álbum, Bitches in Business, publicado en marzo de 2024. Tres años después de su debut, agrietan la solemnidad con la que entraron a la cancha. Ahora se ríen más, y cuando escucha a su compañera, Felinna ríe de nuevo:—Cuando empezamos éramos dos chavalillas, había que imponer respeto. Ahora lo tomamos de otra forma, nos hemos dado cuenta de que podemos vacilar. Nos hemos atrevido, sin miedo de explorar. Me he sentido mucho más libre para decir lo que me de la gana sin censurar nada.Y tan libre. A las baterías violentas que Esse Delgado, productor del grupo y del disco, dispone en 'Las Meninas' Felinna les añade un guiño burlón que rompe el corset estricto. Luego de celebrar que ya no la agobian los kilos de más ni algunos rastros de acné, hace lo que en el debut habría sido inimaginable: "Me suda todo el coño, ni la acabo", rapea de salida, con la misma seguridad que la de Sabrina Ionescu cuando asiste sin mirar. Es un gesto de chulería que sintetiza el cambio de atmósfera entre ambos discos.—Antes estábamos más enfadadas. Pero no estábamos enfadadas, sino que entrabas así o no había manera de entrar —me explica Laüra—. Ahora hemos soltado, le hemos quitado importancia a muchas cosas. Nos hemos relajado.Los primeros temas que hicieron con la intención de crear un nuevo álbum rondaron el drumless, pero pensaron que podía aburrir al público de sus conciertos.—Nosotros hacemos todo el tiempo lo que queremos, pero también hay que pensar en lo que funciona. Vivimos esa dualidad todo el rato —explica Felinna, y yo pienso que esas consideraciones son las que hacen parte de un negocio.Un camp para hacer música en Vallirana, en el bajo Llobregat, las desconectó de las distracciones de la ciudad y puso los cimientos de lo que venía. Les gustó tanto el formato que lo repitieron en Tarragona y, luego, en Castellón, en el verano de 2023. Esse Delgado también ama el drumless; Sunday Truce, su colaboración con el madrileño Franco Carter, se sintoniza con texturas góspel y soul que se repiten sin prisa. Sin embargo, Bitches in Business, además del boom bap con el que empezaron, es hogar del repiqueteo de hi-hats y la energía ágil del trap, trap&B y sonidos que conversan con referentes contemporáneos como Kendrick Lamar, Tyler, The Creator, Pusha T, Travis Scott y Beyoncé. También caben el canto y los coros pegadizos, como en “Nasty Girl”, una canción que les enseñó que podían expresar su mensaje sin dejar de divertirse, sin quitarle naturalidad al proceso y el resultado.—Que tu madre te diga que le mola un tema tuyo, como 'Punto de partida', muestra que con los temas más melódicos Bitches in Busines ha podido llegar a más gente. Nuestros amigos lo están escuchando porque les gusta, y no porque somos sus amigas, como en Onna Bugeisha: eso mola —sentencia Laüra—. Incluso a nosotras un disco entero de boom bap nos aburre.***Bitches in Business de giraLas bocas se abren hacia lo alto en la primera fila de la Sala Apolo, y Felinna las bendice con un chorro de ron para que la fiesta siga. Es el 11 de mayo: inicio de la gira de Bitches in Business. Cientos de personas saltan y saltan y saltan y saltan con 'The Wave', un corte electrónico, impetuoso, y las sílabas se deslizan con habilidad de la boca de Laüra al micrófono. Quizás como resultado de conocer la industria por dentro, Laüra juega a la defensiva en varios momentos de Bitches in Business, como si se anticipara al rechazo de una escena que les recriminaría el nuevo estilo, que eran mejores antes.—Pensábamos que la gente del rap nos iba a odiar. Con el primero nadie te conoce, eres nueva. Toda la gente siempre nos ha dicho que el segundo disco es el más difícil. Era como Buah, este disco puede pasar desapercibido. Eso lo primero. Y lo segundo es que siempre te van a decir que molabas más antes: me pasó con Natos y Waor, los escuchaba antes. Pero es verdad que predijimos eso y no ha sido así. A la gente le ha gustado más de lo que pensábamos —me explica Laüra en Sant Adrià.Las Ninyas del Corro avanzan por caminos que C. Tangana, Recycled J y demás artistas que oxigenaron el rap español ayudaron a pavimentar. Del primero Laüra dice que es como un héroe, al infiltrar el pop para luego diversificarlo más allá de Alejandro Sanz y compañía. Desde Rosalía hasta Dellafuente, insiste, en el espectro de lo urbano están las claves de lo más interesante de la música en España. Por otro lado, Recycled era tildado de “maricón”, recuerda ella, por sus melodías y sus sentimientos: era un blandito, y por eso fue decisivo para que el paradigma cambiara y se abriera.De reivindicar lo más puro que salió de una Nueva York gélida a finales del siglo XX, Las Ninyas del Corro pasaron a celebrar a los que retaron, expandieron y reinterpretaron esa herencia en España. Bitches in Business es un álbum que dialoga con todas las posibilidades que han surgido en la última década, así como con sus artífices. Pero. Hay un gran pero.—Por suerte, tú preguntas por raperas de España y nuestro nombre se va a decir. Eso para nosotras es mucho, pero sigue faltando mucho, también. El caso de las mujeres siempre es más exigente y difícil —me dice Laüra, con voz cansada—. Todavía no es suficiente.—Solo hay pibes, yo estoy hasta el coño —la secunda Felinna, y lo repite, esta vez con mayor énfasis en cada palabra, masticando cada una, para que quede claro—. Solo. Hay. Pibes. Madre mía.Las Ninyas del Corro en la sala ApoloLa sala Apolo está llena, agitada. Laüra propone que, como no las invitan a nada, que las lleven a dirigir una sesión de cardio. Sigue cayendo ron como agua bendita, y ya no sé si es sudor esa humedad en la cara de una mujer que canta cada tema como si la hubiera escrito ella. Casi la mitad somos hombres, casi todos con la mano arriba con cada barra. Las Ninyas se refieren al público como “vosotras” y celebran lo guapas que están todas hoy. El punto de vista cambia y las mujeres, que suelen corear versos de manes para manes, quedan en el centro. La diferencia se nota. En el escenario, Laüra y Felinna no solo rapean con precisión y temple, sino que despliegan coreografías, codo a codo con dos bailarinas, que elevan cada tema. El punto de vista cambia, insisto, y yo lo agradezco tanto. Una bebé se eleva en los hombros de su padre y toda la sala le canta el feliz cumpleaños a la mamá de Felinna. Barbas salpimentadas conviven con la juventud. No cabe nadie más acá. Y cuando llega el momento de “Bagaje”, un break amenazante, Laüra cambia de óptica. Pasa a las barreras generacionales: "La vieja escuela desconsidera a la nueva, la nueva desprestigia a la nueva, qué pena".—Aprendimos mucho trabajando con LaBlackie. Ella vino, escribió y se tiró la letra de golpe. Envidio esa frescura —me había dicho Laüra esa vez en su barrio.Hay que ser exigente, pero también tener el coño de decir "Me gusta como queda y así lo tiro, porque me da igual". Eso es muy difícil que nos pase. Entonces sí, es una pena que los de antes no valoren a los nuevos, porque tienen mucho qué aprender de ellos.La canción se llama 'Deena, Snooki & Jwoww', un corrientazo que me estremece entero. Laüra y Felinna rapean juntas la estrofa de LaBlackie. El final, lo saben todas las presentes, va a estallar, y abren un círculo que se funde en una masa de carne y huesos: frenesí.—Rosalía no cantaría lo que canta si no hubiera estudiado el flamenco. Para transformarlo lo ha respetado. Se trata de respetar no solo a los que había antes que tú, sino a la música que estás haciendo —continúa el ensayo de Laüra—. Por eso también me apena que los nuevos no valoren a los que estaban. Estar informado es básico. No digo que el que está empezando tenga que saber todo, pero yo sí valoro que alguien investigue. Por eso me he sentido muy orgullosa y privilegiada cuando Elio Toffana nos invitó a su disco. La Laüra de hace diez años habría matado por una colabo con él, con Kase.O, con el Tote, con la Mala. Y ahora, cuando todo parece más fácil, sin importancia, agradezco que pase. Por respeto a mi historia y a mi trayectoria, ¿cómo no lo voy a hacer?—¡Y qué colabo! —tercia Felinna—. Yo lloré cuando el Elio nos la pasó, ya terminada. También es un tema de identidad, de sentirte dentro de la movida. Los que nos sentimos como parte del rap sentimos que es necesario entender de dónde viene.Otra forma de ver Bitches in Business: hay pesos muertos que no hay que cargar más en la mochila, y compromisos que estructuran lo que se ha hecho y lo que viene. El álbum se trata de identificar cuál es cuál.***Las Nunyas del Corro desde el barrio obreroLa pizzería, en una esquina de la Plaça de la Vila, se llama La Font. La mesera saluda a Laüra con confianza y la rapera le responde que quizás este verano deba pedir trabajo ahí, para ajustar las cuentas, llegar a fin de mes. La mesera, sonriente, le responde que qué va, que ella va a ser muy grande y me pregunta si estoy de acuerdo. Yo le digo que sí, que por eso estoy ahí. Laüra no está tan segura.—Joder, es que parece que es un momento guay para mí, pero a veces no me siento así —confiesa."Lo bueno de vivir en San Roque es que nadie roba en San Roque", rapea Laüra en 'Tridente dorado' sobre el barrio de Badalona en el que vive desde hace unos años, a un par de kilómetros de Sant Adría: uno de los más calientes de Cataluña, según titulares alarmistas de medios apocalípticos. Las Ninyas del Corro rapean desde el margen y muestran el revés de una Barcelona que opera como un parque temático de sí misma para los miles de turistas que llegan cada día. La conciencia de clase, una de las banderas que ondearon en Onna Bugeisha, sigue intacta. Se manifiesta, por ejemplo, cuando Laüra rapea, en 'Las Meninas', que en Barcelona o heredas o te las apañas. Ok, el turismo trae riqueza: ¿pero para quién?—No hemos crecido en Barcelona, sino en los barrios obreros que rodean a Barcelona —afirma Felinna.Este margen es tan geográfico como simbólico. En 'Las Meninas' Felinna se aleja tanto del lujo del barrio de Pedralbes como del centro de Barcelona donde solo hay guiris (turistas blancos) con axilas malolientes y pijos vestidos de Nude Project. Y una de las bombas llega cuando dice esto: La catalanidad de Las Ninyas del Corro es otro de los puntos de tensión: si a ella no la reconocen como catalana, me explica Felinna, pues que se jodan: ella tampoco lo llamará pan tumaca, sino pan con tomate. Laüra, por otra parte, reconoce reflejos de su caso en la historia reciente: cuando le dieron el premio Sant Jordi a Estopa, algunos catalanes protestaron porque cantaban en castellano.—Me da rabia ese elitismo, esa línea entre la burguesía y los catalanes de a pie —continúa Felinna—. Hacemos música en castellano, y por eso parece que no somos referentes en Cataluña. Pero somos raperas catalanas.—Se nota mucho el clasismo de la burguesía catalana —insiste Laüra—. Acá nosotras somos purria, escoria, como lo fueron hace tiempo los andaluces que venían aquí y supuestamente les quitaban el trabajo a los catalanes. Nuestras familias vienen de allí. Acá solo importa lo moderno, lo guay, lo fashion. Pero en este conflicto con la cultura, con la lengua, pueden existir distintas identidades además de la que se espera.El título de Bitches in Business salió en la recta final del proceso. Empezaron con una espíritu más tremendista, color azul oscuro, que plasmara su angustia. Al final eligieron un camino para sublimarla, hacerla divertida. El título es un guiño sarcástico a todo lo que han conseguido, a lo que aspiran, a todo lo que les falta y a cómo estas tres dimensiones se confunden. Un guiño que nos dice, ya lo decía Laüra, que las cosas no son lo que parecen.Felinna llegó a la entrevista luego de su primer día en un nuevo trabajo. Es temporal, me explica, para ajustar algunos números. Y Laüra, que rapea sobre cómo devuelve los trajes de diseñador que compra para un solo uso, me muestra sus manos. Sus dedos tienen marcas de pegante: esa mañana tuvo que pegar la etiqueta de un vestido para poder devolverlo.—Gitaneo, es lo que hay —admite.En ese banco de la otra esquina de la plaza todavía están él y ella, recostados en el amor silencioso y seguro que se sedimenta como la arena que cae al fondo del reloj de cristal. Antes de que nos levantemos y caminemos, yo hacia el metro —hacia el centro— y ellas hacia sus casas, acá cerca, Felinna reseña su propio álbum.—Eso es ser bitches in business —dice, entre risas—. Se trata de buscarse la vida.***¿Quieren leer más sobre rap en Español? En el camerino con Ill Pekeño y Ergo Pro