Space Jam: una nueva era se estrena este viernes 20 de agosto en HBO Max 35 días después de su estreno en las salas de cine en América Latina, sin costo adicional. Esta producción llega llena de acción, nuevas aventuras y una renovada alineación del Tune Squad, 25 años después del lanzamiento de la primera versión Space Jam: el juego del siglo que en esa oportunidad protagonizó Michael Jordan. LeBron y su hijo Dom quedan atrapados en un espacio digital creado por una inteligencia artificial; LeBron debe llevarlos de regreso a casa -sanos y a salvos- guiando a la vez a Bugs,Lola Bunny y toda la banda de los Looney Tunes para lograr la victoria sobre los campeones digitalizados de la inteligencia artificial, en la cancha. Este terreno de juego contará con laparticipación de una poderosa lista de estrellas del básquetbol profesional, como nunca antes se había visto.Los Tunes se enfrentan a los Goons en el desafío más importante de sus vidas, que redefinirá el vínculo de LeBron con su hijo y le mostrará el poder de ser uno mismo. Los Tunes, listos para la acción, destruyen las convenciones, potencian sus talentos únicos y sorprenden incluso al"Rey" James jugando el partido a su manera.Space Jam: una nueva era fue dirigida por Malcolm Lee y es protagonizada por LeBron James, Don Cheadle, Khris Davis, Sonequa Martin-Green y Cedric Joe. Una comparación entre las dos versiones de Space Jam ¿Qué podemos decir de Space Jam: Una nueva era? ¿Cómo se compara con la original? Podríamos fijarnos en cómo Jordan va hacia adentro y se concentra en su pasión por el basket (y va literalmente hacia adentro, pues los Looney Tunes lo absorben hacia su mundo por un hoyo de golf), mientras que LeBron explora hacia afuera: lo más importante es su familia, y ganar en el basket no lo es todo si no sigues tu corazón y lo que te apasiona (y va literalmente hacia afuera, o hacia un lado, o donde sea que quede el universo interplanetario de Warner).Mientras que Jordan construyó su aspecto público como uno hermético, en el que primaba la pelota naranja, LeBron lo ha hecho como mucho más que un atleta. Ha sido elocuente en temas políticos y ha abierto una ventana para que el mundo lo vea también como un padre de familia, dimensión que acentúa esta película.
Sin ser de los cazafantasmas, LeBron James estaba persiguiendo a uno cuando el 2016 llegaba a su fin. Esa era su motivación, admitió en entrevista con Sports Illustrated tras ganar su tercer título, ese fantasma que había jugado en Chicago: Michael Jordan. Si quería ser el mejor de la historia, debía superarlo. Por Santiago Cembrano | @scembranoCinco años después, LeBron ya tiene cuatro títulos, pero Jordan sigue en la cima del Olimpo basquetbolista. Aunque estos rankings son caprichosos, aparte de argumentos estadísticos parciales a la grandeza amplia de LeBron —capaz de anotar, pasar, rebotear, robar y tapar, como si la navaja suiza fuera una bazuca de Akron, Ohio—, Jordan todavía se encumbra por encima de él gracias a sus seis anillos y, sobre todo, la leyenda que construyó.Michael Jordan es aceptado como el más grande de la historia por la certeza de victoria inmanente a él y porque fue la primera súper estrella moderna de la NBA: una máquina de ganar, de anotar con contundencia y estética y de vender zapatillas (vamos, quizás Nike, la marca que le paga millones a LeBron cada año, ni existiría hoy si no fuera por Jordan). Desde que se retiró en 2003 se ha buscado quién rete su lugar. Además de Kobe Bryant, sucesor espiritual de Jordan, el único contendor ha sido LeBron, que entró a la NBA en 2003. El problema de LeBron es que el impacto de Jordan fue tan profundo que él es el estándar de la grandeza: por eso es casi invencible. Para superarlo, LeBron tendría que hacerlo a su manera, redefinir ese estándar.Parte del impacto de Jordan es Space Jam (1996), la película en la que rescata a los Looney Tunes y derrota a un equipo de extraterrestres. Producida por Warner Bros., es un clásico de la cultura noventera y del matrimonio entre el basket y la cultura pop. De hecho, con 250 millones de dólares de recaudo, es la película de basket más exitosa de la historia. Hoy es una pieza de nostalgia (y de moda cuando los tipos en el centro de Bogotá combinan la NBA noventera con los Looney Tunes en sus atuendos) que alimenta el mito del 23 de Chicago. Y como en este mundo, y en esta época, la nostalgia es capitalizable, y si algo dio réditos una vez se le explota hasta que se agote, Warner Bros. lanzó la secuela el 16 de julio de 2021: Space Jam: una nueva era, dirigida por Malcolm D. Lee, con LeBron James como protagonista. Desde que fue anunciada hace algunos años había una pregunta que se elevaba por encima del resto: ¿Qué podía darle LeBron James a Space Jam que superara la huella de Jordan? Las comparaciones son inevitables, pues son el 1 y el 2 de la historia. ¿Acaso LeBron busca ganarle a Jordan en su propio terreno?Repasemos rápidamente el argumento de Una nueva era. LeBron James, atrapado en el multiverso virtual de Warner, se enfrenta en un partido de basket al equipo de Al G. Rhythm (Don Cheadle), el algoritmo hecho persona, para lograr la libertad de su hijo Dom (Cedric Joe), secuestrado y manipulado por este villano digital. LeBron se encuentra con Bugs Bunny y juntos recuperan a la vieja escuadra, como Silvestre y Piolín, el Pato Lucas, el Correcaminos, Porky, el Demonio de Tasmania, Speedy González y Lola Bunny. Sus contrincantes son las versiones hiperbólicas y robóticas de Anthony Davis, Klay Thompson, Damian Lillard, Diana Taurasi y Nneka Ogwumike. [Alerta spoiler]Aunque el equipo de LeBron empieza perdiendo, remonta en la segunda mitad al utilizar toda la creatividad de los Looney Tunes. Miles de humanos que habían sido abducidos al multiverso por Al son salvados con esta victoria. LeBron se reconcilia con Dom, luego de empezar la película en orillas distintas respecto a cómo acercarse al basket y a la vida. En conclusión: sé tú mismo, cuida a tu familia por encima de todo y ten cuidado con los algoritmos y todo lo que pasa en tu celular.Bueno, ¿qué podemos decir de Space Jam: Una nueva era? ¿Cómo se compara con la original? Podríamos fijarnos en cómo Jordan va hacia adentro y se concentra en su pasión por el basket (y va literalmente hacia adentro, pues los Looney Tunes lo absorben hacia su mundo por un hoyo de golf), mientras que LeBron explora hacia afuera: lo más importante es su familia, y ganar en el basket no lo es todo si no sigues tu corazón y lo que te apasiona (y va literalmente hacia afuera, o hacia un lado, o donde sea que quede el universo interplanetario de Warner). Mientras que Jordan construyó su aspecto público como uno hermético, en el que primaba la pelota naranja, LeBron lo ha hecho como mucho más que un atleta. Ha sido elocuente en temas políticos y ha abierto una ventana para que el mundo lo vea también como un padre de familia, dimensión que acentúa esta película. Todo esto se magnifica porque LeBron ha jugado en la NBA durante la explosión de las redes sociales y el internet, lo que incrementa nuestro acceso a su vida, en comparación con Jordan. Podríamos decir esto y más.Pero cualquier análisis es secundario ante la principal característica de Una nueva era: es, sobre todo, una gran pieza de publicidad de Warner. LeBron va a los estudios de Warner y discute con ejecutivos de Warner la posibilidad de hacer parte del universo de Warner. Y cuando se niega es que Al G. Rhythm lo absorbe y lo lleva al multiverso Warner 3000. Y ahí te repasan todo el catálogo: Casablanca, El Mago de Oz, Harry Potter, Austin Powers, Mad Max, King Kong, La Mujer Maravilla, Game of Thrones y un larguísimo etcétera están en la vitrina. Aunque ver a LeBron vestido todo de negro en el mundo de Matrix es divertido, y seguro los más cinéfilos encontrarán aún más referencias estimulantes, en general todo se siente demasiado exagerado. Las segundas partes rara vez salen bien, y en este caso no se disimula la intención de generar ganancias a través de la nostalgia. Pero la ejecución es burda, y las referencias culturales se vuelven memes. La Space Jam original también quería venderte algo, tanto tenis Air Jordan como el mundo de los Looney Tunes, y aun así parece sutil y comedida frente a esta. Para ver todo el catálogo de HBO Max (donde también se estrenó esta película) ya tengo la hora que me paso decidiendo qué voy a ver cuando prendo el televisor. Y, por esa línea, ya existe un parque de Warner en la vida real que seguro mitologiza mejor la magia de esta productora.Es irónico que el villano de la película sea un algoritmo, porque el principal problema de Una nueva era es que se siente ideada por un algoritmo. No es un problema nuevo, sino endémico a la cultura y el entretenimiento en estos tiempos: hay tanta información disponible sobre nuestros gustos que las películas, discos y libros pueden ser optimizados para dar en el blanco de lo que la audiencia quiere. Así se optimizan ganancias y toda la operación es más efectiva. Repito: soy consciente de que Space Jam nació como un gran proyecto de marketing con potencias de ventas como Jordan y los Looney Tunes, pero esta versión de la publicidad se siente descarada. ¿Será que con la reflexión sobre los algoritmos de Una nueva era Warner quiso criticar la industria cultural de la actualidad? ¿Será que LeBron lee a los filósofos Adorno y Horkheimer en su tiempo libre? Más probable es que esta tierra que habitamos sea tan retorcida que Warner identificó los algoritmos (que ya se vuelve un término manoseado) como un tema inquietante en nuestro día a día y por eso lo incluyó en la película, y a la vez que Una nueva era sea la prueba máxima e irrefutable de todo lo que está mal con esa forma de hacer cine. O sea, son lo que critican.La eficiencia de Una nueva era no se extiende a su duración: 115 minutos, frente a los 88 de Space Jam. Habría ayudado que Malcolm Lee decidiera si quería enfocarse en la forma correcta de jugar basket, en el equilibrio entre trabajo duro y diversión o en la importancia de la familia. O tal vez lo mejor habría sido que dirigiera la película de tal forma que todas estas tramas cupieran en ella. O tal vez que no la dirigiera. No ayuda que, a pesar de su entusiasmo, LeBron no es un actor que pueda elevar un guion mediocre, ni que muchos de los diálogos sean expositivos hasta el punto de que me hicieron exclamar en voz baja “Sí, ya entendí, me lo has dicho tres veces”, como si estuviera hablando con mi mamá. Hay tantos chistes y referencias culturales que un par funcionan, pero el porcentaje es pobre. Y ni entremos en la banda sonora: ahí están muchas estrellas del momento como Lil Baby, Chance The Rapper, YBN Cordae y Joyner Lucas, pero ninguna de las canciones con sabor a babas se acerca a temazos como Hit ‘Em High, hecho para la primera por B-Real, Busta Rhymes, Coolio, LL Cool J y Method Man.Sí, ya sé que son películas distintas, pero estas comparaciones son inevitables. Si el beneficio para LeBron era inmortalizar su nombre al participar de la secuela de una cinta legendaria, el peligro era que un tipo en Colombia que falla la mayoría de tiros que toma cuando juega basket por las mañanas hiciera un artículo que la hiciera trizas. Eso y que fuera evidente para todos los espectadores que LeBron, por más que lo intente, no es ni será Jordan. Quizás habría sido más sabio saciar sus ansias de llegar a la gran pantalla con una película aparte, sin pena ni gloria, como lo hicieron ya Kevin Durant, Shaquille O’Neal y tantos más. Pero bueno, en su defensa, LeBron es mejor actor que Jordan, y Don Cheadle, que actúa con más energía de la que esta película merece, le gana a Bill Murray, personaje secundario en la original.Pero, ¿saben qué? Quizás al final no importa nada de esto. Las animaciones son impresionantes, los efectos especiales son efectivos y los trucos —por baratos que sean— a veces funcionan y sacan risas. Me he quejado, pero no pasé un mal rato viendo Una nueva era. Es una película que no soporta una mirada profunda y atenta, pero tampoco está hecha para eso. Es una comedia deportiva para niños que aman la NBA, para que descubran todo el universo cinematográfico de Warner. Seguro esos niños recordarán esta película en 20 años con la misma nostalgia que hoy se recuerda a la primera Space Jam que, hay que decirlo, es un clásico a pesar de que no es una buena película. Y seguro si yo hubiera visto Space Jam a los 27 y no a los 7 habría adoptado una postura cínica frente a ese intento de crossover pop. Aún hoy sé que no es una buena película, sino que se beneficia del teflón de Jordan y de la idealización de todo lo que pasó en los 90.Entonces, todo bien. Seguro si ven Space Jam: Una nueva era la pasan bien. Tampoco hay que tomarse todo tan en serio, vale. Pero no puedo sacudirme la sensación de que aunque el equipo de LeBron derrotó al del algoritmo en la película, es el algoritmo el que se está llevando la victoria, y por paliza, en el 2021. Supongo que a eso se refiere el subtítulo con lo de “nueva era”.
Ya se estrenó la esperada Space Jam: A New Legacy, protagonizada por la leyenda del basket Lebron James. A propósito, han resurgido historias de la primera parte, estrenada originalmente en 1996, que fue un éxito mundial de taquilla y un icono generacional. En la primera Space Jam, el protagonista fue Michael Jordan, considerado uno de los mejores de su deporte en toda la historia. Con un presupuesto de 80 millones de dólares, recaudó 250 millones en taquilla y otros cientos de millones en merchandising. Jay-Z contribuyó en la banda sonora de la película junto a R. Kelly y el dúo femenino Changing Faces en una canción llamada All of my Days. Pero hay otra colaboración de Jay-Z que pasó inadvertida: se trata de Buggin, interpretada por Bugs Bunny con letra compuesta por el rapero, entonces emergente. Cuando Space Jam llegó a los cines, Jay-Z todavía estaba abriéndose camino hacia la cima. Su álbum debut, Reasonable Doubt, se lanzó ese mismo año, mucho antes de convertirse en uno de los raperos y productores más importantes de la música. "Era demasiado pronto", dijo Jay-Z en The Shop: Uninterrupted. “Ya sabes esos primeros días ... Todo es solo un borrón. Solo estás haciendo cosas, por lo que realmente no estás pensando en su legado. No es hasta que más tarde empiezas a entender realmente el significado de lo que significa. Para mí, fue simplemente, 'Escribe una canción para Bugs Bunny'". Jay -Z recordó el proceso de composición de Buggin': "estaba en los estudios de Sony actuando como conejo", según declaró en la entrevista. En la banda sonora de Space Jam también participaron otros nombres clave de la música como Seal, Coolio, Mónica, D'Angelo, entre otros. Además de escribir para Bugs Bunny, Jay-Z ha estado detrás de grandes hits del hip hop, como Still D.R.E, de Dr. Dre, un éxito rotundo.
Es un hecho que Space Jam (1996) fue un éxito rotundo. La cinta protagonizada por Michael Jordan y los Looney Tunes sorprendió por mezclar personajes animados con live-action, una fórmula que vimos en el clásico ¿Quién engañó a Roger Rabbit?Con un presupuesto de 80 millones de dólares, la película recaudó 230 millones en taquilla en todo el mundo, además de miles de millones en merchandising.Hubo varios intentos por emular ese éxito, pero nunca llegaron a concretarse. Incluso el reconocido skater Tony Hawk admitió que una vez fue abordado para hacer una versión de la película con skate, pero el proyecto nunca se hizo. Tras Space Jam y previamente ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, la siguiente película que mezclara personajes reales con animados pintaba a que sería un éxito, pero no fue así. Se llamó Looney Tunes: de nuevo en acción y se estrenó en 2003. Si nunca la habían escuchado es porque fue un fracaso en taquilla: con un presupuesto de 80 millones de dólares, recaudó 68.5 millones en el mundo. A pesar de que Space Jam fue un éxito de taquilla, no fue popular con muchos de los fans de las caricaturas originales. Por eso, cuando Joe Dante aceptó dirigir Looney Tunes: de nuevo en acción expresamente se propuso hacer "el anti-Space Jam". Esto hizo que hubiera muchos desacuerdos entre el estudio y los realizadores, lo que convirtió la producción en una verdadera pesadilla. La película nos muestra a Bugs Bunny, quien intenta hallar al Pato Lucas luego de perder su empleo y viaja a Las Vegas con un hombre, buscando suerte. En el elenco se encuentran Brendan Fraser, Jenna Elfman, Steve Martin y Joan Cusak. Aunque fracasó en taquilla, los críticos en general tuvieron buenos comentarios para la cinta y quienes la vieron la recuerdan positivamente. Si quieren darle una oportunidad, pueden verla en HBO Max.
Este 15 de julio se estrenará en cines y en HBO Max Space Jam: A New Legacy. La secuela tendrá como protagonista al icónico jugador de la NBA Lebron James.En esta nueva Space Jam veremos a James y a su hijo Dom, quienes quedan atrapados en un espacio digital creado por una malvada inteligencia artificial y deben escapar. Esta secuela llega 25 años después del estreno de la Space Jam original, que tenía como protagonista a Michael Jordan, considerado uno de los mejores basquetbolistas de la historia, y fue un éxito rotundo. Con un presupuesto de 80 millones de dólares, la película recaudó 230 millones en taquilla en todo el mundo, además de miles de millones en merchandising. Su mezcla de animación con live-action resultó sumamente llamativa y sigue siendo una cinta de culto. Ante ese éxito, tenía mucho sentido hacer una secuela. ¿Por qué esperaron tanto para una segunda parte? Según el portal Animatedviews.com, en 1997 hubo planes de Space Jam 2. Sin embargo, el estudio exigió que Michael Jordan repitiera como protagonista, pero el jugador no estaba interesado, por lo que el proyecto se canceló. Luego de la negativa de Jordan de protagonizar le secuela, se rumoró que había ideas de hacer versiones con otros deportes. En 2001, varios medios registraron que había planes de una secuela llamada Spy Jam, protagonizada por Jackie Chan, pero nunca se realizó. A comienzos de los 2000 se habló de Race Jam, una cinta similar a Space Jam en el mundo del automovilismo. Para el papel que haría Jordan sonó el piloto de Nascar Jeff Gordon. El proyecto nunca llegó a concretarse. En 2019, el legendario skater Tony Hawk reveló que en 2003 fue buscado para hacer Skate Jam, según recuerda Cheatsheet. Sin embargo, añadió que el proyecto fue archivado y nunca volvió a escuchar más al respecto. Tras 25 años y varios intentos, por fin podremos ver la esperada secuela de Space Jam, que fue icono para muchos y hoy lo será para nuevas generaciones.
Este 3 de abril Warner Bros. dio a conocer el tráiler de Space Jam 2: A New Legacy. Esta secuela de la icónica Space Jam de 1996 con Michael Jordan será protagonizada por Lebron James. La película se estrenará en salas de cine del mundo y en HBO Max el próximo 14 de julio.Para esta segunda parte de Space am, LeBron James y su joven hijo Bronny, quien sueña con ser un desarrollador de videojuegos, se encuentran atrapados en una realidad virtual por un algoritmo llamado Al-G Ritmo. Para salir de esta realidad a salvo deben ayudar a los personajes de los Looney Tunes Bugs Bunny, El Pato Lucas, Porky Pig y Lola Bunny, entre otros, a conseguir la victoria sobre los campeones digitalizados de Al-G en un juego de basket.En el tráiler vimos varias referencias divertidas. Aquí las repasamos.La celebración de Lola BunnyLola Bunny hizo su debut en la primera Space Jam y ahora podemos verla de nuevo. Su celebración es una referencia al icónico alley opp entre LeBron James y Dwyane Wade. La máscaraEn el público es posible ver a varios personajes, uno de los cuales es La máscara, personaje al que Jim Carrey dio vida en la recordada película de 1994.La naranja mecánicaEl grupo de la icónica cinta de Stanley Kubrick también tuvo una pequeña aparición.Game of ThronesEn una de las secuencias, es posible ver un anillo con Game of Thrones. También vemos a The Night King y los white walkers. Harry PotterEn la máquina que lleva a James al mundo de los Looney Tunes es posible ver el mensaje “Hogwarts”, de la escuela de magia y hechicería.Scooby DooLa mítica camioneta The Mistery Machine también hizo una corta aparición.AnimaniacsAunque no se notan mucho, en una fracción de segundo podemos ver a figuras que parecen a Dot y Yakko, 2 personajes de otra caricatura icónica.
Space Jam 2: A New Legacy, la esperada secuela de la película que el icónico jugador de basketball Michael Jordan protagonizó en 1996 junto a los Looney Tunes, ya tiene su primer tráiler. En esta oportunidad, la cinta será protagonizada por Lebron James y llegará a los cines y a la plataforma de streaming HBO Max el 16 de julio. El estreno de Space Jam 2: A New Legacy será pocas semanas después de la finalización de la temporada 2020-2021, donde LeBron buscará su quinto anillo de campeón en Los Angeles Lakers. Actualmente, Lebron es el mejor jugador de la NBA. James no será el único jugador de la NBA que participa en esta película. También han sido confirmados Anthony Davis o Damian Lillard además de Diana Taurasi y Nneka Ogwumike, de la WNBA. La primera Space Jam de 1996 fue un ´éxito rotundo de taquilla y un hito generacional al combinar acción real con dibujos animados. Con un presupuesto de 80 millones de dólares, recaudó más de 230 millones en todo el mundo. n esta primera parte fue la primera aparición de Lola Bunny, que regresó para esta segunda entrega. En la primera entrega de Space Jam, Michael Jordan entrena a Bugs Bunny y a sus amigos para un campeonato de baloncesto contra un equipo extraterrestre. Para esta segunda parte, LeBron James y su joven hijo Bronny, quien sueña con ser un desarrollador de videojuegos, se encuentran atrapados en una realidad virtual por un algoritmo llamado Al-G Ritmo. Para salir de esta realidad a salvo deben ayudar a los personajes de los Looney Tunes Bugs Bunny, El Pato Lucas, Porky Pig y Lola Bunny, entre otros, a conseguir la victoria sobre los campeones digitalizados de Al-G en un juego de basket. Pepe Le Pew, quien hizo una breve aparición en la primera película, no aparecerá en la segunda.
Este 12 de julio regresa al Estadio El Campin el Concierto de conciertos, un evento que se convirtió en emblema para Bogotá. En su edición 2024, el Concierto de conciertos contará con la participación de Elefante y Aleks Syntek de México, La Mosca y Enanitos Verdes de Argentina, Juan Fernando Velasco de Ecuador, GIPSY Kings, Rosario y Cómplices de España, Prisioneros de Chile, con Claudio Narea y Aterciopelados. Las entradas están disponibles en Tuticket.com. Los precios oscilan entre 125.000 y 16.700.000 en palco para 10 personas. En 2023, el concierto contó con la participación de Poligamia, Yordano, Comapñía ilimitada, Ekhymosis, Duncan Dhu, Toreros muertos, entre otros. La primera edición de este evento ocurrió en 1988 y marcó una era para la música en vivo en Bogotá. Alrededor de 70.000 personas estuvieron en el Estadio el Campín para ver a bandas como Los prisioneros, Miguel Mateos, Timbiriche, Toreros muertos, José Feliciano, Timbiriche, entre otros.¿Por qué fue tan importante el concierto de conciertos?Tras más de 3 décadas, el evento sigue celebrándose y llamando la atención de los fans. ¿Por qué fue tan importante? Para Elsa Riveros, de la banda Pasabordo, que estuvo en el concierto de 1988: "Nunca antes se había dado un concierto así. Se habían dado otras cosas, pero en Bogotá no pasaban muchas cosas de música.Había bandas que estaban haciendo música en sus casas y en los bares, pero cuando sucede esto fue como "wow en Colombia sí se puede hacer algo así. Hay bandas colombianas que pueden participar, no es solo para bandas internacionales".Eso inspiró a muchas personas a dedicarse a la musica y verla como una opción viable en sus vidas: "Alguna vez alguien me dijo: "yo le pude decir a mi mamá y a mi papá que me dejaran ser músico, gracias a ese concierto", agrega Elsa.El concierto de conciertos se ha convertido en una excusa para la nostalgia y para celebrar la música latinoamericana d elos 70 y 80.
El retrato es un tipo de fotografía en donde buscamos destacar un aspecto de alguien, ya sea algún rasg ode su rostro, su personalidad, sus intereses, entre mucho más. Para lograr una foto de esas "para poner hasta en la cédula", aquí les damos algunos consejos, con el celular. Lente Limpio Un detalle sencillo, pero que puede alterar el resultado de la foto. Varios intentos Tomen varias fotografías de la misma escena y luego elijan la mejor. El modo ráfaga del teléfono es muy bueno para eso. Para los retratos sirven muy bien, ya que cuando el sujeto no es consciente de que es fotografiado se obtiene un resultado más espontáneo. Elijan una buena fuente de luz Una fuente de luz desde arriba, abajo o detrás crea sombras que pueden resultar poco favorecedoras. Una fuente de luz difusa que utiliza luz reflejada en una superficie blanca o a través de una ventana con cortinas ligeras crea una luz sutil. Siempre aprovechen la luz natural. Eliminen las distracciones Tomen nota del entorno y de posibles distractores que puedan quitar atención del protagonista de la foto. Traten de que en la compisición no existan otros detalles que quiten protagonismo al fotografiado. Intenten capturar algo del personaje ¿El personaje es divertido, serio, tímido, extrovertido? No importa, busquemos destacar esos aspectos qur lo hacen único. Válido dirigirlo para que haga alguna pose representativa. Hay que tomarnos el tiempo para lograr una buena imagen ¿Cuál es un buen teléfono para esto?OPPO anunció que ya está globalmente disponible su nuevo smartphone: OPPO Reno11 5G. Este equipo tiene un sistema de cámara para retratos ultranítidos, con una cámara principal de 50 MP con estabilización óptica de imágenes (OIS). Este es un celular El Reno11 5G captura retratos de calidad de estudio con la cámara de retratos con teleobjetivo de 32 MP que posee un zoom 2X equivalente a 47 mm, para capturar retratos de forma parecida a la perspectiva del ojo humano. El sensor Sony IMX709 detrás de esta experiencia 2X no solo captura fotos nítidas y detalladas, también cuenta con una disposición de píxeles RGBW para una fotosensibilidad 60% mayor y ruido 35% menor que los sensores tradicionales.Con unacámara principal ultranítida de 50 MP con OIS, un rápido objetivo f/1.8 y el nuevo sensor LYT600 de Sony, la cámara es versátil. Y para paisajes amplios, la cámara ultra gran angular de 8 MP del Reno11 5G cubre un campo de visión de 112º.Este es un equipo perfecto para retratos, así que si eso es lo que buscan, el OPPO Reno11 5 G es una gran opción.
Nuestra reina del amor, del despecho y de las canciones que algún día soñamos con dedicar, saca álbum después de siete años. Shakira, la misma que escribió Día de Enero, Antología e Inevitable, tituló ese álbum ‘Las mujeres ya no lloran’.Aquí somos creyentes de que cada una vive la tusa como quiere, pero decir que las figuras pop no influyen en cómo musicalizamos al menos los días en los que tenemos el corazón roto sería mentirnos.Shakira le escribió este álbum a Piqué y cogió la fórmula que le funcionó en el BZRP Session y la convirtió en disco. Bien, si queremos escribirle 100 canciones a nuestros ex pues lo hacemos.¿Cuál es el problema entonces?Que la tristeza y la productividad se consideren excluyentes.Yo crecí como la adolescente que fingía que nada le importaba cuando en el bus lloraba escuchando ‘Pienso en ti’ recordando al peladito o peladita que no me paraba bolas. También crecí siendo la única mujer en una familia de hombres. Toda emoción era limitada por frases como “por eso no me caen bien las niñas, lloran mucho”.Recuerdo escuchar los primeros discos de Shakira y pensar “yo nunca podría ser así de vulnerable”, alimentando la idea de que la sensibilidad, la ternura, la emoción eran sinónimos de fragilidad.Las diferentes corrientes del feminismo llevan peleando por años por esclarecer que el movimiento no busca que las mujeres seamos iguales a los hombres, que no se trata de llegar a ser como ellos porque los hombres no son una meta que añoremos alcanzar.Durante años, la sociedad se ha esforzado en fiscalizar nuestros sentires y las formas de expresarlos. El patriarcado y el capitalismo, que al final tienen como consecuencia la alienación de nuestras emociones, han reproducido la idea de que la emoción nos hace débiles.Sarah Amed, teórica feminista australiana, explica en su texto ‘La política cultural de las emociones’ (2004) que estas se utilizan por diferentes estructuras dentro de la sociedad para regular los cuerpos y las relaciones sociales. Las emociones son a menudo usadas para legitimar o deslegitimar ciertas formas de comportamiento.El punto acá es que la forma en la que expresamos nuestras emociones no sólo influye sobre los estados internos.Las figuras pop marcan el ritmo de consumo, pero también van marcando el ritmo de cómo se gestan las emociones. Estemos de acuerdo o no, así parezca una afirmación exagerada, es un hecho.Actuamos por imitación y nuestras emociones no están exentas de eso. Uno de los ejemplos más claros de eso es el hippismo de la década de los 60 y 70: figuras como Jimi Hendrix, John Lennon y Joni Mitchell personificaron el deseo del amor libre, la revolución sexual y el rechazo al materialismo que se vivió en la época.Artistas como Taylor Swift y Olivia Rodrigo priorizan la tristeza y la rabia en sus canciones. Son emociones que, además de ser completamente naturales, han sido históricamente motores de creación de obras artísticas de todo tipo.Negarnos la capacidad de sentir tristeza bajo el discurso del empoderamiento, como el de Shakira, sólo sirve para meternos, nosotras mismas, nuevamente en esa cajita en la que nos metieron los hombres cuando intentaron convencernos que la emoción y la razón son conceptos excluyentes.La filósofa mexicana Rocío Castillo explica que la razón patriarcal ha construido una dicotomía que separa la razón de las emociones, asociando la primera a lo masculino y la segunda a lo femenino. Una dicotomía que ha sido utilizada para subordinar a las mujeres y negar su capacidad intelectual.Uno de los (muchos) problemas del “empoderamiento”, además de ser una palabra maluquísima, está en que lo que se considera empoderante es imitar el modelo masculino; es decir, desprendernos de lo que se ha considerado algo exclusivamente de mujeres: la sensibilidad y la emoción, entendida como algo irracional y carente de razón.Poner en extremos opuestos monetizar la tusa y llorar es caer en el modelo masculino que niega a la emoción por “absurda” e “improductiva”. Ganar plata cuando se tiene el corazón roto no le cae mal a nadie, pero la emoción (incluída la tristeza) hace parte de la experiencia de vivir.Como una mujer que intentó por años ocultar su sensibilidad por crecer bajo el ideal masculino, extraño las letras desgarradoras de Shakira, las que me hacen sentir entusada sin estarlo.A los hombres que llegaron hasta acá: a ustedes también les han negado por mucho tiempo la capacidad de abrazar su sensibilidad. Lloren con sus amigos, canten abrazados, que en este mundo, que cada vez pierde más el sentido, la ternura es lo único que nos queda.A Shak: ojalá vuelvas a escribir canciones con el corazón, o con el bolsillo, pero mientras te permites llorar.Igual te amo.
A la mitad de la entrevista, El Kalvo detiene por un momento sus reflexiones sobre la xenofobia que persiste al interior del hip-hop colombiano y el valor de hablarle a los trabajadores para buscar alitas de pollo a domicilio. Los ensayos para su presentación en el Festival Estéreo Picnic copan su tiempo, por eso llega tarde la entrevista, anda de afán y el tiempo para almorzar se escapa. Pero si hablamos del Kalvo no solo hablamos de un man que lleva veinte años en el rap, un joven veterano que a codazos y paciencia se ha abierto un espacio como un MC único en el país; hablamos también de alguien conocido por su apetito generoso, capaz de hazañas culinarias y connoisseur de la gastronomía callejera bogotana.Así que cuando es hora de comer, todo puede esperar.Después de Algarabías (2022), El Kalvo se dedicó a encontrar territorios comunes con otros artistas. De esta búsqueda colaborativa resultaron temas como “Agencia de viajes”, con La Radio Bembé Orquesta, y la enternecedora “Lero lero”, con La Muchacha. Cuando empezó el 2023, El Kalvo entró en modo álbum y tomó esas canciones para agruparlas y darles un sentido. Así nació Los tres golpes, el disco con mayor número de colaboraciones en su carrera: Kiño, Penyair, Jam Block Jr, Turek Hem y Horus conforman la polifonía. Un secuaz de confianza como Hi-Kymon se encarga de casi toda la producción, que desde el boom bap se extiende en todas las direcciones.Al principio, El Kalvo pensaba llamar a este nuevo trabajo Kalvokalez, para marcarlo como un proyecto más personal, que reflejaba quién era. Sin embargo, Saga Uno —su aliado para crear el extravagante kit de ocio para el trabajador contemporáneo que acompaña al disco e incluye un recipiente para la comida, un cancionero al estilo de los almanaques Bristol, un rascador, un parqués y una riñonera— lo convenció de que Los tres golpes, el nombre de un tema en el que describe al detalle y con apetito jugoso qué se puede degustar en la capital en distintos momentos del día, era un título mucho mejor. Luego de debatirlo, El Kalvo le dio la razón. En todas las canciones del disco hablaba, aunque fuera por un momento, de comida: “Ordinaria elegancia” no solo define bien su encanto, sino que muestra su ojo meticuloso para describir un buen guiso que, a la vez, es una buena letra de rap.A pesar de que no le puso su nombre, El Kalvo sí vuelca en este disco las distintas inquietudes que caracterizan su rap. Ahí están su pasión por contar historias (“Jesucristo de Maracay” o “Radio Casa Grande”), su perspectiva heterodoxa del rap (“Marquillas”) y su gusto por la bareta (“Préndalo). Están las preguntas incómodas y punzantes que suele hacer, como la que le plantea a los raperos colombiano sobre el trato que le dan a los migrantes venezolanos. Y, finalmente, canciones como “Elías”, un homenaje a su abuelo que puede ser la mejor canción del disco; “He sido”, en la que traza sus memorias a través de todos los trabajos en los que se ha rebuscado el salario; o “El rapado”, como pararse frente al espejo y rapear lo que se ve, profundizan en su biografía.Sobre esto y más hablamos con El Kalvo.***¿Cómo llegó al concepto de Los tres golpes?Yo lo quería llamar Kalvokalez, así como los artistas les ponen sus nombres a sus discos más personales, los que los definen. Pero a Saga le pareció que ese título era muy suave, que Los tres golpes tenía una carga conceptual mucho mayor. Luego de reuniones y llamadas que duraban horas y horas, me convenció, porque además de lo del desayuno, almuerzo y comida, en todas las canciones hablo de comida en algún punto, más inconsciente que conscientemente, güevón. Pero al final es más amplio que eso, tiene muchas historias. Ya he hablado mucho de lo social, de lo político, ese tema me había saturado, entonces me pregunté de qué quería hablar. Los tres golpes es mi manera de definirme como MC, cuál es mi tipo de rap. Y es el comienzo de una búsqueda, de otras temáticas a las que me quise como acercar, otras maneras de decir las cosas. Pero no sé si logré definirme completamente, creo que no, todavía le falta. Menos mal no le puse Kalvokalez.Usted ha explorado llevar los álbumes más allá de las plataformas digitales y más allá del CD, ¿cómo ha sido ese aprendizaje? A mí me gusta insistir en formatos físicos porque me permite innovar, entregar la música de manera distinta. Hoy es más fácil escuchar un vinilo que un CD, güevón. Mucha gente compra un CD para tenerlo, pero no lo puede escuchar. Entonces qué lindo tener otra cosa que sí sirva pa’ algo: qué güevonada comprar algo que uno no va a usar. Tenía que ser algo útil. Ya había hecho un libro, que es útil, pero si lo leíste ya queda ahí, ya fue. Pero al final nos dimos garra con Saga, fue un proceso pesado con muchos problemas técnicos. Le dimos rienda suelta a la imaginación y nos montamos en la película de hacer algo absolutamente novedoso. Y Saga sí me dijo que él lo diseñaba, pero yo me ocupaba de hacerlo. Hágale, le dije. ¿Un cancionero? ¡Hágale! ¿Un diorama? ¡Hágale! ¿Un parqués? ¡Hágale! Fue demasiado.Ahora me decía que está un poco cansado de hablar de temáticas sociales, ¿cómo ha sido para usted existir como rapero en el gobierno de Petro?Cuando quedó Petro yo sí sentí alivio: habíamos ganado algo. Por eso me relajé y dije como bueno, ya, me voy a dedicar a hablar de otras cosas y voy a darle la oportunidad a este man para que haga lo suyo, ¿sí me entiende? La inflación va bajando, el desempleo va bajando, el dólar se mantiene bajito. Esas cosas demuestran que se está haciendo bien la vuelta, mejor de lo que estaríamos con Rodolfo Hernández o Federico Gutiérrez, presunto paramilitar. Pero los medios han vendido la idea de que el cambio no es el cambio porque las transformaciones no han sido instantáneas. Y los de siempre, con mucho cinismo, han dicho que todo sigue igual, pero ellos son los responsables de que las cosas estuvieran así. Igual hay muchas cosas que están mal. Hay mucha gente que se coló, como Agmeth Escaf, Benedetti o la vieja esa que tienen paseando por todos los cargos importantes, quién sabe qué sabe de Petro, güevón. La esposa del man tiene una actitud como toda corrupta y se ha gastado un poco de plata viajando y tiene gente ahí enchufada. Feo, feo, güevón. Son cosas que no deberían pasar.Igual ahora que acabé este proyecto sí estoy sintiendo que otra vez necesito hablar de esos temas. Hace falta análisis. No quiero decir que yo soy el único que pueda analizar la mierda, pero sí siento que como hip-hoppers tomamos la misma actitud al tiempo, como listo, ganó Petro, chao, hablemos de otra mierda, a mí no me jodan. Incluso hay unos que se desconectaron tanto que están diciendo que la mala pa’ Petro, repiten el discurso que les dan las noticias. Es el juego de manipulación. Por eso otra vez siento un impulso muy fuerte por analizar y comentar.Vamos ahora sí con los temas más serios: una encuesta rápida sobre comida colombiana. ¿Mejor frito?Yo diría que la arepaehuevo con carne mechada. Es una obra maestra de la comida sumergida en aceite.¿Postre favorito?Quizás el de tres leches o el de natas. O, no sé si es tan colombiano, pero las islas flotantes de Endulza tu Paseo, gonorrea: esa es la misión.¿Sopa favorita?El ajiaco.¿Algo que le guste que nadie espere que le guste?La comida vegana.¿Cómo surgió la idea de “Jesucristo de Maracay”? ¿Tiene que ver con plantear una postura clara frente a la migración desde la comunidad del rap?Hay mucha xenofobia en el rap. He tenido que ver a parceros raperos que hablan despectivamente de los venezolanos como ratas o chirosos. La mala pa’ las ratas, sí, que nadie robe, pero la estigmatización que vive la población migrante venezolana es muy injusta, porque los que hacen cosas malas es una fracción muy pequeña. Es más fácil ver la paja en el ojo ajeno, pero el problema no son los migrantes, sino la pobreza, la falta de oportunidades, la ignorancia, la mala educación, la corrupción que se roba la plata que debería ser para el bienestar de la gente. Por eso cuando canto “Bacatá” el mensaje es que Bogotá es para el que esté en Bogotá, esta ciudad es pa’ muchos tipos de gentes y hay espacio pa’ todo el mundo. Entonces construí esta historia para cagarme en la xenofobia, pero también en la moral católica de los que son xenófobos y aporofóbicos. ¡Mientras tanto en Palestina están bombardeando el pueblo de Cristo! La gente que está sufriendo en todos lados representa eso. Cristo era un desplazado de la violencia. Y pues es de Maracay y no de Barquisimeto porque me rimaba, y me quedaba re bien para homenajear a los raperos de allá, que son de los más ásperos del hip-hop venezolano. De hecho las historias que me inspiraron fueron las del Topo y Vampi, de Piso Ocho, que nos contaron lo duro que les tocó, pero ellos son de Puerto La Cruz, y así quedaba raro.¿Por qué le dedica este kit de ocio al trabajador contemporáneo? A veces me parece que el rap está montado en una burbuja rara, no se tiene en cuenta el diario vivir, como si todos viviéramos en un videoclip de rap, güevón, y solo hubiera ocio y placer. Quería que el álbum fuera para el descanso, está pensado para disfrutarse después de una larga jornada de trabajo. Para una persona normal la música es un escape de la realidad, una anestesia que escucha en el Transmilenio, caminando, lavando loza o haciendo ejercicio. Por eso tampoco quería hablar de temas pesados, sino más bien como toma, disfrútate esta historia de cosas asquerosas que nos inventamos con Penyair, o esta otra de Jesucristo como un migrante venezolano. Pensaba que qué chimba que el rap que yo haga sea óptimo para el que está saliendo de su camello y se quiera relajar. El disco es para dignificar el esfuerzo, como dice el intro, un tributo al esfuerzo.A propósito de “Protagonista estelar”, ¿cómo ha sido para usted rapear sobre el amor? ¿Y cómo ha cambiado con los años?No es mi temática fuerte, pero en cada trabajo discográfico trato de incluir al menos una canción que hable del tema. Siempre es difícil hacer algo tan personal, ¿no? No puedo hablar del amor como hablo de otras cosas, con esa forma arquetípica de tomar los temas, porque el amor es el amor, ¿sí me entiendes? Yo a mi novia no le puedo cantar cualquier cosa, es cuando más real tengo que ser. Me siento vulnerable. Hay gente que puede estar re parchada y escribe una canción re tusa cortavenas, y la novia está al lado, cagada de la risa. Para mí debe ser algo muy personal, y como con mi novia compartimos las artes audiovisuales, “Protagonista estelar” fue una oda a lo que hacemos juntos. Ella me ayuda a hacer los videos, yo edito cosas para ella. Disfrutamos y creamos juntos. De ahí salió lo de “Hagamos ficción y documental”, porque de verdad lo hemos hecho. Es chimba. Cuando más sincero he sido es en las canciones de amorcito.¿Cuál es su tema favorito de rap romántico?“Querer querernos” de Canserbero. La escuché antes de que saliera, porque el man la tocó una vez que vino a Bogotá como en 2011, re caleto. A toda la banda de pirobos se le salió el aire con el último ponche. Fue como mucho malparido, qué gonorrea.***Hace un tiempo invitamos al Kalvo a parodiar una elección rapeando junto a Neck Talese y El mismoperro, este fue el resultado:
Uno de los headliners del Estéreo Picnic 2024 es una de las figuras más destacadas del reggaetón mundial: Feid. Pero no es la primera vez que hay un reggaetonero en el line-up. En 2022, J Balvin fue el primer artista de este género en el festival. Aunque su presentación fue sumamente comentada (por las razones equivocadas) sin duda hizo historia al abrir espacio a un género que durante mucho tiempo fue inesperado en el Picnic. Aunque hoy sean muy normales los actos de reggaetón en Estéreo Picnic, la cosa no siempre fue así. En sus inicios, el festival tenía la fama de ser un evento solo para "hipsters" y efectivamente, estaba dirigido a un público alternativo. El festival tuvo un arranque exitoso con Matisyahuy 2 Many DJS en 2010 y con Calle 13, Bag Raiders y The Presets en 2011, en 2012, con Caifantes, MGMT y TV on the Radio los resultados no fueron los esperados. Reggaetón: el último recurso para salvar en Estéreo Picnic "El tercer Estéreo Picnic, el del 2012, en el que tocaron Caifanes y MGMT. Esa mierda fue básicamente “apague y vámonos", dijo Sergio Pabón, empresario de Páramo Presenta (en ese entonces T310), en entrevista con Vice en 2024. Pabón continúa: "de verdad no habían señales que indicaran que esto podía llegar a funcionar. Todo era paupérrimo. El apoyo del sector privado era pésimo. El de la gente, peor, no vendíamos nada de boletas. En un punto hicimos una votación y se acordó unánimemente, aunque sin mí, porque yo era el único que estaba en contra de la decisión, de nunca volver a hacer Estéreo Picnic. Ya no resistíamos más. Pero lo volvimos a hacer al año siguiente con The Killers como headliner". "Fue justo en ese momento en el que no le encontrábamos la vuelta, incluso con Balvin se habló y teníamos hasta un negocio acordado. Ahí dijimos como “Armemos una tarima con Balvin, Fonseca, Carlos Vives y toda esa gente para ver si vendemos boletas”, porque es que no podíamos desaparecer por seguir obstinados en una movida musical que no nos estaba devolviendo. Pero al final nos echamos pa’ atrás y dijimos “No, seamos fieles a lo que hemos construido”.Al final Balvin sí llegaría a presentarse en el festival, aunque en circunstancias muy diferentes. En ese momento, era difícil predecir cómo el reggaetón iba a irrumpir en la industria musical mundial, al punto de convertirse en protagonista en los festivales de Colombia y todo el mundo.